Este es mi primer fic. Es un crossover y una vez que lo termine ira a donde debe.

Los personajes de Ranma 1/2 e Inuyasha NO me pertenecen, son propiedad de Rumiko Takahashi.

La historia contiene Ooc y AU.

Lemon explicito.

Y escenas gore, por lo que si eres sensible abstenerse de leer.

Pido que si no les gusta la pareja principal y/o la historia NO DEJEN COMENTARIOS OFENSIVOS.

RESPETO ANTE TODO, NO PIDO MÁS.

-"Los personajes piensan."-

-Los personajes hablan.-

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CAPITULO 1: Los intrusos.

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— Después de un año, regreso a casa — dijo una joven de cabello color azul oscuro. Vestía una remera negra suelta, jeans mismo color ajustado en sus torneadas piernas y tenis morados oscuros... Suspiró con nostalgia al volver a leer el cartel que decía: "Escuela de artes marciales, dojo Tendo". — Hogar, dulce hogar — dijo mirando la puerta de la entrada del dojo con una hermosa sonrisa que adornaba su delicado rostro mientras que sus marrones ojos brillaban de felicidad contenida.

— Akane… no te olvides que estamos de paso... recuerda que tenemos una misión — le dijo su amigo con voz afeminado, tocándole el hombro para sacar a su amiga de su nostalgia. El joven de cabello castaño oscuro largo, pero que lo mantenía sujeto en un rodete, de ojos color marrón oscuro, casi negros, luciendo ropa deportiva, pantalón azul marino y una remera blanca, tenis blanco, el joven de apariencia femenina pero en realidad era un chico de tez casi bronceada, trato de llamar la atención de su amiga para que no se olvidara de sus obligaciones.

—Si lo sé Jakotsu... es solo que nunca he estado tanto tiempo lejos de casa y menos de mi familia — hablaba mirando el suelo con rastros de tristeza en sus ojos, los cuales, volvieron a alzarse hacia aquella casa que la vio crecer, mirada que eran reflejados por la luna que brillaba como nunca esa noche.

— ¿Pero no me dijiste que ellos estaban de vacaciones? — pregunto el afeminado siguiendo a la joven que se aventuraba hacia la gran morada de diseño clásico. — ¿Sabes a qué venimos a tu casa?

— Si, ellos están de vacaciones… venimos a buscar una cosa y... — dándole una mirada cómplice con una sonrisa picarona —… saber si Ranma me envió alguna carta — dijo algo colorada recordando a su prometido, dueño de su corazón, de sus sueños y pensamientos.

—Ahí bueno... todo sea por el amor... — dijo Jakotsu con sus manos unidas y llevándoselas a un lado de su rostro, con cara de ilusión y amor.

—Ya basta Jak... vamos adentro — se detuvieron en la puerta, Akane se palpaba la ropa buscando algo — rayos... recuerdo que antes de salir del hotel, tenía las llaves.

—De seguro que te lo olvidaste o se te habrán caído — le dijo su amigo — ¿y ahora qué?

—Entraremos por la ventana de mi cuarto… Sígueme. — dijo para luego comenzar a rodear el patio de la casa Tendo.

Cuando se situaron donde estaba la ventana de la habitación, Akane con la agilidad y facilidad como lo hace un gato saltó los 4 metros que había desde el suelo hasta la ventana de un solo salto seguida por su amigo que también lo hizo con la misma simplicidad que ella.

El cuarto estaba conformado por una cama de 1 plaza que era cubierta por un acolchado con flores lilas y rosas rojas con un fondo blanco; un escritorio de roble oscuro con algunos libros y una lámpara, que se situaba debajo de la ventana, el cual tenía una cortina verde manzana. La silla de escritorio, un ropero amplio de 2 puertas, un cesto para ropa sucia y otro para papeles y en el centro de la habitación una gran alfombra afelpada rosa claro conformaban la decoración de la habitación de la joven.

—Siéntete como en tu casa — le dijo a su amigo extendiendo sus brazos con una gran sonrisa señalando su cuarto.

— ¡Gracias! ...y dime ¿esté es el nidito de amor de tu prometido y tú? — le dijo con una mirada y sonrisa pícara, haciendo sonrojar a su amiga mientras tomaba asiento en la cama de la chica.

—¡Jakotsu! Co... ¿Cómo crees? Ranma es un caballero — dijo segura —...él jamás hizo nada indebido... lamentablemente — dijo en susurro y volteando a otro lado, para que su amigo no la escuchara.

—¡Aja! — Apuntando con su dedo índice a la peli azul — ¡Te escuche picarona! — Se acercó a la chica que estaba como tomate y le dio un leve pellizco en una de sus mejillas —...Tú si le querías y le quieres dar mesita noche y día sin parar — más colorada no se podía poner Akane porque su piel no podía más de lo que ya estaba — jajajaja...que no te de pena tontita. No te culpo...si yo estuviera en tu lugar y tuviese a ese bombonazo como prometido...le arranco la ropa, lo lanzó a la cama y... — lo relataba con señas y con mucho entusiasmo en sus palabras.

—¡Stop! …Ok, ok. Ya entendí... y te recuerdo que estás hablando de Mí Ranma, así que fantasea con otro, ¿quieres? — lo dijo con mirada fulminante.

—Tranquila, tranquila... — hacía señas con sus manos al ver la cara de asesina de su amiga —Me... ¿Me puedes decir que vinimos a buscar? — dijo cambiando de tema.

—Algo que mi abuela me pidió... dijo que es una caja que perteneció a mi madre... está en el cu... — Cuando se disponía a salir del cuarto, unos ruidos que provenían de la planta baja los alertó. Entre abrió la puerta un poco y ambos se asomaron para ver y oír mejor.

— ¿No será tu familia que ya regresó? — pregunto Jakotsu en susurro.

—No son ellos. Si escuchas bien se oyen 2 voces. — contesto en tono bajo y segura de lo que decía, mientras se disponía a averiguar quiénes irrumpían su morada.

Mientras tanto los intrusos subieron al 1er piso de la casa, mientras lo hacían sus pasos y conversaciones se hacían más sonoras para los que se encontraban escondidos.

—Mejor divertirnos un rato— dijo con vos melosa la voluptuosa mujer con los brazos rodeando el cuello de su acompañante, mientras se estiraba para unir sus labios.

— Y que tienes en mente, amor — dijo el joven dándole un apasionado beso. Caminaban abrazados por el pasillo de la casa sin percatarse que estaban siendo observados.

—No... No puede... ser… — dijo en un susurro quebrado la peli azul para convencerse a sí misma que lo que le mostraba sus ojos se tratara de un espejismo. Apretaba sus puños con fuerza y sus ojos comenzaban a cristalizarse a cada segundo que observaba aquella escena que le hacía oprimir su corazón, formando un nudo en su garganta que de apoco lograba cerrar el paso de oxigeno.

— ¿Qué sucede Akane? ¿Los conoces? — pregunto Jakotsu mirándole el rostro pálido de la joven, notando que su amiga tenía un gesto de dolor en su bello rostro, las lagrimas que amenazaban con salir en cualquier momento… ella solo tenía puesto sus marrones orbes en los intrusos y entonces al ver que su amiga no respondía, volteó a ver a la parejita; primero vio a la chica de pelo morado largo hasta la cintura, con un cuerpo muy voluptuoso que llevaba puesto un vestido rojo corto ajustado de estilo chino pero al desviar la mirada al chico que la acompañaba, el cual, era más alto que ella, de cabello negro con una trenza que le llegaba hasta por los hombros, con camisa china roja y un pantalón negro suelto ajustado en los tobillos... fue ahí que entendió todo.

CONTINUARA…

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Gracias por leer y comenten!