CAPITULO 1. LA COSECHA

No interesaba que fuera día de cosecha tenía que levantarme temprano para ayudar a mi padre en la panadería. Mientras muevo unos sacos de harina, no puedo evitar sentirlos mas pesados el día de hoy, tal vez sea el nudo en el estomago por los juegos. Es cierto, las probabilidades de que mi nombre o el de mis hermanos sean elegidos son minimas, nunca nos anotamos para las teselas, no las necesitamos. Sin embargo eso no hace que me sienta mejor por los niños de la veta que desde los doce años que duplican sus posibilidades de una muerte segura solo para conseguir un poco de alimento para sobrevivir.

El chirrido de la puerta trasera me trae de vuelta a la realidad. Abro solo unos centimetros la puerta de la oscura habitación donde guardamos los sacos de harina, tengo curiosidad por saber quien esta detrás de la puerta trasera de la panadería, pero no la suficiente curiosidad como para recibir golpes de mi madre por espiar y meterme en asuntos ajenos. Mi padre es quien respondió a la puerta trasera, un muchacho alto, fornido y de cabello oscuro parece estar ofreciendole algo a mi padre. Una ardilla por una hogaza de pan, un intercambio demasiado generoso para algunos, pero no para nosotros, por lo menos no para mi y mi padre ambos sabemos lo que sufren -lo que sufrimos-los habitantes del distrito 12. Antes de que cierre la puerta escucho a mi padre desearle buena suerte a Gale. Por supuesto que reconoci al muchacho de la ardilla ,no somos amigos y jamas hemos hablamos pero lo he visto en la escuela. Las muchachas estan locas por el, siempre puedes ver a algun grupo de niñas alborotadas acosandolo con miradas en los recesos. Dudo que alguna tenga posibilidad de conquistarlo, el esta con ella, no creo que alguien quiera conformarse con menos cuando esta tan cerca de tenerla a ella.

La mañana transcurre rápido hornee unas cuantas docenas de galletas y las envuelvo en papel blanco. Es difícil hornear a escondidas, las galletas son para la muchacha y el muchacho que serán elegidos como tributos mi madre mataría a mi padre si lo supiera. El hace esto desde que tengo memoria, no estoy seguro del porque, tal vez el no oponerse a los juegos le pesa en la conciencia y con unas galletas puede calmar momentáneamente la culpa. Supongo que todos los padres de Panem deben sentirse culpables por permitir que un gobierno extremista obligue a sus hijos a matarse los unos a los otros. Aun asi me siento orgulloso de el, se que no puede hacer nada. Oponerse a los juegos seria considerado traicion, lo ejecutarian y tal vez a toda nuestra familia tambien.

Ya es hora, toda la familia tiene que asistir aunque solo uno de mis hermanos y yo podemos ser elegidos. El proceso de seleccion es horriblemente triste y tedioso, ver a las familias al borde de las lagrimas pensando en la suerte que correran sus hijos. Escuchar a los sin vergüenzas q a pesar de que aun no se eligieron los tributos ya abrieron las apuestas. Los agentes de paz ,las tres sillas en el escenario construido frente al edificio de justicia. La primera ocupada por el alcalde Undersee, la segunda por Effie Trinket nuestro canal de comunicación con el capitolio, o por lo menos durante los juegos su trabajo es ayudar a los tributos del 12. No me gusta juzgarla se que solo cumple su trabajo, tal vez lo detesta, pero tambien existe la posibilidad de que sea como cualquier otro ciudadano del capitolio y este hambrienta de sangre. Siempre intentando pensar lo mejor de todos ¿eso me hace un estúpido? Cualquiera que viera a Effie Trinket no le daria el benefici de la duda, despues de todo es tan excéntrica como cualquier persona del capitolio: cabello rosaceo, traje verde primavera, excesivo maquillaje y esa manera de hablar. Todos los niños del distrito 12 deben de tener pesadillas con ella y su voz resonando "¡Felices juegos del hambre! Y que la suerte este siempre de su parte" Sin haberme percatado de que el tiempo transcurría mientras me encontraba sumergido en mis pensamientos la voz de la señorita Trinket anunciaba el comienzo de los juegos. Las urnas de cristal reflejaban la luz del sol, una para las mujeres y otra para los hombres. No me siento nervioso, ni preocupado, el estado de relajación que adormece mi cuerpo es casi inquietante. A pesar de que el capitolio nos arrojaría al borde del salvajismo para que muéranos a manos de nuestros pares o por causas naturales -deshidratación, infecciones o tal vez congelarnos hasta morir-no podiamos olvidar nuestros buenos modales, Las damas primero. Effie Trinket ya tiene un papel en su mano, abre el papel cuidadosamente y lee con voz clara y fuerte "Primrose Everdeen" El nudo en el estomago que tenia desde temprano en la mañana se ciñó mucho mas fuerte. No es solo el hecho de que es solo una niña de 12 años, sino tambien que es SU hermana menor. La pequeña hermana de Katniss fue elegida como tributo, no puedo creer lo que esta pasando, Katniss no permitira que se la lleven, lo que significa que ella tomara su lugar. Katniss es una muchacha de la veta, nunca intercambie una palabra con ella porque al igual que mi padre me falta valentia para algunas cosas.

Casi puedo escuchar la copiosa lluvia golpeando la ventana de la panaderia ,y escucho a mi madre gritando a alguien en los cubos de basura, seguramente alguien que busca algo de pan para saciar el hambre-lo que la gente del distrito 12 desconoce es que nunca tiramos el pan malo, de hecho lo comemos-. Mi curiosidad me vence, siempre lo hace, y me obliga a mirar a traves de la ventana y a pesar de que la lluvia es tan pesada puedo distinguir su silueta, Katniss. Acababa de caer cerca del tronco de un árbol, se veía enfermiza. Lo difícil de la situacion era que a pesar de verla en la escuela nunca note que el hambre la estaba consumiendo a ella y su hermana, de haberlo sabido hubiera hecho algo. Aun no se si lo hice a proposito o si de verdad los panes que en ese momento horneaba cayeron al fuego. En cuestión de segundos la corteza del pan se ennegreció por el fuego, los saque tan pronto pude pero ya no servían para la venta. Solte un debil aullido de dolor acababa de quemarme tres dedos por sacar el pan de la manera mas estupida posible. Lo siguiente que sucedió fue escuchar unos cuantos pasos apresurados hacia mi y un fuerte ardor en mi mejilla, mi madre tiene muy poca paciencia y no es del tipo maternal el bofetazo con el que arremetio contra mi es parte de su naturaleza. Escucho como sigue golpeándome, pero esta vez con palabras y me obliga a alimentar al cerdo con el pan quemado. Empiezo a arrojar uno de los panes al cerdo hasta que mi madre desapareció de la vista, no sabia que estaba a punto de cometer una de las peores acciones de mi vida. Sin pensarlo y sin saber porque,arroje el pan restante a los pies de Katniss. ¿Que clase de Imbecil hace algo asi? Solo tenia que caminar unos cuantos pasos hacia ella y entregarselo en las manos. Pero no lo hice, me odio a mi mismo cada vez que pienso en eso. Al dia siguiente, la vi en clases estaba al otro lado del patio con Prim su pequeña y adorable hermana. La observe fijamente, no podía creer que no me hubiera dado cuenta antes de lo delgadas que ambas estaban. Mi cara empezó a arder acalorada pero no era a causa de el bofetazo de mi madre- que por cierto provoco un enorme hematoma en mi mejilla-fueron sus ojos que me descubrieron espiándola. Di vuelta la cabeza lo mas rápido que pude pero en ese mismo instante pense que podría hablar con ella, cuando volví la mirada ella estaba agachada recogiendo un diente de leon. Katniss era una aparición, etérea ese diente de leon que recogía parecia haberla renovado completamente y pude ver como una fugaz sonrisa se dibujaba en su rostro. Ese momento confirmo lo perdido que estaba por ella Escucho su voz gritando, primero envuelta en desesperación y segundos después escucho la misma voz pero con una sorprendente compostura, casi indiferencia Katniss Everdeen se ofrece como voluntaria. Eso es todo, jamas lo sabra, jamas tendré la oportunidad. Tal vez nunca la tuve. Y asi ese sentimiento de evitar juzgar a Effie Trinket desaparece, escucho a ese espécimen del capitolio celebrar la sentencia de muerte de una pobre joven,la sentencia de Katniss, hablar sobre gloria,como si esta tarea fuera honorable.

Mis entrañas arden de odio a pesar de que Effie no es la culpable de que los juegos existan. Prefiero que el odio nuble ese sentimiento de tristeza y vacio. Solo me toma unos minutos pensar que cuidare a su familia mientras ella no este, se que es una cazadora y es fuerte tal vez tenga oportunidad de volver. Es impresionante cuanto tiempo consumen mis pensamientos, veo como Effie Trinket se acerca a la urna de los hombres ojala no sea el. Aunque tal vez sea mejor que Gale este junto a ella, el la cuidara y se que se sacrificara para salvarla. La mujer de cabello rosáceo recoge la primera papeleta que encuentra y lee mi nombre: ¡Peeta Mellark!

Espero que encuentren este fic precioso como lo hice yo, mi intencion es compartirlo para todas aquellas enamorada de peeta ya que es una version muy fiel .