Memnorics
Eliade nunca llegó a comprender del todo su obsesión con las flores. Incluso entonces, cuando respondió a su pedido, alimentándolas y regándolas cada día, sin falta. Hasta les había cantado para que crecieran en un abrir y cerrar de ojos, colectiva y jubilosamente, teñidas en un verde aún más vigoroso.
Él supo que de no haber destruido el castillo, incluso ahora seguirían creciendo a través del suelo, en una triste procesión de pétalos marchitos.
Crowly no tenía intención de volver por ellas, ni siquiera porque eran sus flores. Fueron abandonadas voluntariamente, puesto que irse significa irse.
En su mente contó sus pétalos mientras que ellas se reducían a polvo bajo las rocas de un castillo que ya no existía. Su memoria no era suficiente, pero sin lugar a dudas, era mucho mejor que nada.
Empatheia es la autora original de ésta pieza que me dejó sin aire. En verdad, amé leerla, a pesar de que no comprendía el significado del título. Le explicó luego a Cutie que era cuando el ver un objeto/persona determinado/a, te recuerda a otra cosa u a alguien más.
Saludos, fandom ;)