Hola gente. Hoy vengo con un fic diferente a los que normalmente hago. ¡Si quedo muy Ooc no fue apropósito!
Bueno, primero les aclaró dos cosas:
1. Los personajes no son míos, InuYasha y compañía pertenecen a Rumiko Takahashi.
2. Este fic (junto con otros dos) son parte de la actividad "Tras el corazón de Midoriko. Mes de la felicidad en ¡Siéntate!" (Link en mi perfil)
Prompt: Felicidad a través de algo simple.
Friendship
I. Sonrisas.
—Shippō-Chan, cuéntanos la historia otra vez. —suplicaba la pequeña niña delante de él juntando sus manos y haciendo su mejor carita de niña buena.
—Megumi, ya se las he contado muchas veces, Mei ya no quiere escucharla ¿verdad?—Al ver que la niña movía la cabeza negando, no tuvo otra opción más que suspirar y mirar al par que tenía a su lado. —Está bien, ¿Por donde debería comenzar?—Después de meditarlo un rato empezó con su relato.
—Bueno niñas, hubo una vez un demonio muy feo, era grande y horripilante; El solo verlo te causaba escalofríos. Durante uno de nuestros viajes nos encontramos con él, todos estaban muy asustados. Él gran demonio había derrotado a InuYasha y Miroku se encontraba muy enfermó… Entonces el gran Shippō se armó de valor y derrotó al demonio él solito. Fin.
Las niñas aplaudían entusiasmadas y el sonreía, quizás había cambiado un poco la historia, pero valía la pena si con eso conseguía ver felices a las hijas de Sango y Miroku. Eran como sus hermanitas, así que su felicidad era la suya…
Y eso fue todo...
Gracias por leer.
Adiós.