Bella POV
Miré alrededor, muchos cojines, mantas, almohadas y, delante de mí, a un lateral del gran televisor, una gran torre de películas pastel. Todo listo para una gran fiesta de pijamas. Sonreí era la primera vez que hacía una fiesta de pijamas y, la verdad, estaba bastante satisfecha conmigo misma.
Me giré hacia el sofá con intención de acomodar los cojines sobre este y, de pronto, algo llamo mi atención. Por debajo del sofá sobresalía algo parecido a un trozo de papel. Me agaché y con cuidado tomé el pequeño objeto entre mis manos. Al verlo me quedé sin voz. Era una foto y no cualquier foto. Era una foto de cuando yo estaba en 3º de primaria.
FLASHBACK
Era mi primer día en el colegio de primaria de Forks y estaba muy nerviosa. Acababa de mudarme allí desde Phoenix y no conocía a nadie. Y para colmo René me había dejado sola ante el peligro, como tenía que trabajar solo me dio la dirección de la clase y me dio suerte. Y allí estaba yo: con mi vestidito naranja mis dos coletas castañas hasta la cintura y mi mochila de Barney. Sola ante la puerta de 3º A. Sola, como ya he dicho antes, ante el peligro. Aún no se de donde saqué el valor suficiente para abrir aquella puerta pero lo hice. Sinceramente, tenía bastante miedo de que en cuanto cruzara aquella puerta todos se giraran a mirarme y empezaran a comentar sobre la "niña nueva". Una vez dentro me di cuenta de 2 cosas:
-La primera: todos los grupos de clase estaban ya hechos y, por lo tanto, otro año mas me quedaba sola.
-La segunda: todos estaban tan absortos en su grupo de amistades que nadie noto mi presencia. Eso era bueno, creo.
Ponto llegó el profesor y todos corrieron atropelladamente a sentarse en sus asientos; yo como no sabía donde sentarme me senté en el primer sitio que pillé. Las mesas estaban dispuestas en forma de cuadrado, cuatro mesas formaban un pequeño cuadrado.
-Hola, ¿tu eres nueva, verdad? ¿Cómo te llamas?
Levanté la vista hacia mi interlocutor. Era un niño, pero no parecía que tuviera 8 años. Tenía el pelo castaño y rizado, era alto y fuerte y me sacaba, por lo menos, una cabeza. También note que, a pesar de todo lo anterior, poseía una alegre sonrisa y unos ojitos azules encantadores que le quitaban todo lo amenazador.
-Soy Isabella Swan, pero llamadme Bella, por favor.- Pedí cordial y alegremente, con la mejor de mis sonrisas. Aquel muchacho estaba empezando a caerme muy bien.
-Bien Bella, yo soy Emmett este, es Jasper… -Dijo señalando a un niño alto, rubio de ojos azules con una preciosa sonrisa.
-Encantado.-Dijo Jasper alegremente.
-…Y este es Edward.-Continuo Emmett señalando a un muchacho de pelo broncíneo precioso y ojos verdes de ensueño.
-Hola.-Saludo fríamente Edward.
-Hola.-Respondí yo y, aunque traté de sonar lo mas amble posible, mi voz no fue de un tono muy amable que digamos. Aquel chico todo lo de guapo lo tenía de idiota.
Lo que yo no sabía ere que aquel iba a ser el comienzo de una gran amistad.
FIN DEL FLASHBACK
Gruesas lágrimas empezaron a rodar por mis mejillas y se deslizaron por ellas hasta caer de mi rostro y estamparse contra la foto en la que Edward y yo éramos dos niños pequeños mirando a la cámara, abrazados y sonriendo como si no hubiera mañana.
-¿Por qué Edward… Por que me odias tanto…?
