EL COLOR DE TÚ VIDA

Los personajes le pertenecen a kishimoto-sama y yo solo los uso para fines yaoistas, este fic fue anteriormente publicado en mi cuenta ahora desaparecida "L marionette-kurobutterfly" de "AY" no piensen que es lucro.

Capitulo 1: El desconocido Doctor

Había sangre por todos lados manchando las paredes y el suelo, la luz se había ido de sus ojos y todo lo que podía ver era oscuridad.

No sabia en que momento había sucedido pero pudo ver como aquella persona se acercaba con furia.

– ¡es tu culpa maldito monstro, si tu no existieras el seguiría con vida!

Un dolor insoportable apareció en su cuerpo y lo siguiente que supo es que se veía cayendo irremediablemente al suelo.

– ¿pero que hiciste?

Era de mañana podía sentir el sol en sus mejillas, no podía ver al sol pero sabia que estaba ahí. Llevaba ya varias semanas en el hospital, el ataque que sufrió ahora era cosa del pasado, el diagnostico que el doctor le dio no era bueno el no podría volver a ver. Su abuelo no podía creer lo que escuchaba y no lo aceptaría contradiciendo a la doctora le dijo que lo llevaría a los mejores hospitales para recuperar su vista, que no se darían por vencidos, pero él sabia que ya nada se podía hacer a si que con la mejor sonrisa que tuvo….

–no te preocupes por mi abuelo jiraiya yo estaré bien, ya veras.

¿Como podía sonreír así después de lo que le paso? todos en la habitación no podían creerlo los doctores, las enfermeras, todos quedaron sorprendidos por tan reluciente sonrisa y resignación, pero había un doctor en especial que quedo impactado ante tal sonrisa estando alejado de los demás oculto en la sombra de la puerta observando todo.

–no puedes decir eso naruto kun tu abuelo tiene razón si buscan otras opciones tal vez…

–gracias hinata san por tus palabras pero es mejor dejarlo así, nee?

Aquella chica de pelo negro con destellos color violeta lloraba ¿como podía permitir que su mejor amigo el chico que admiraba y amaba en secreto se diera por vencido de esa manera? Estando a su lado desde que eran niños y ahora que estaban en la secundaria no había podido hacer nada, nunca podía hacer nada por su amigo era demasiado débil e ingenua.

–pero naruto…

Seguía sonriendo, él sabia perfectamente que su abuelo no viviría mucho tiempo estaba demasiado enfermo ya su cuerpo no daba para mas, aunque el abuelo era una persona fuerte una enfermedad terrible le había invadido y ahora sus días estaban contados no quería preocuparlo mas, al morir sus padres en un horrible accidente el era la única familia que le quedaba y aunque sus padres le habían asegurado para que pudiera seguir estudiando hasta la universidad él no quería ser una carga, así que…

–vamos no estén tristes– sujeto con fuerza las sabanas –ya verán que todo estará bien– ¿de donde salían esas palabras de animo? él no se encontraba bien, su corazón se estrujaba con cada palabra que decía, pero parecía que todos le creían ya que nadie se atrevió a contradecirlo ¿acaso nadie se daba cuenta que se estaba rompiendo?

–entonces tsunade-obachan ¿cuando me puedo ir a casa? –

Una venita se asomo de la frente de la corpulenta mujer

–No, todavía no puedes tus heridas de los ojos no han sanado todavía.

–QUEEE! ¡Pero si ya llevo mucho tiempo aquí!

–Tus heridas fueron muy profundas espero entiendas y te quedes aquí un poco mas.

–Humm– formo un puchero –esta bien pero espero y no creas que me voy a quedar quieto– amenazo

–si no lo haces te amarrare a la cama.

– ¡QUEE! ¿Acaso pueden hacer eso en un hospital? – pregunto sorprendido, claramente no se lo esperaba

–Claro ya que yo soy la jefe de oftalmología – [N/A: ¿si es así?]

Claro era de esperarse la relación que tenia naruto con su doctora, él ya llevaba varias semanas en el hospital prácticamente se había hecho amigo de todos los doctores del lugar excepto de uno que aun no conocía.

–bueno me marcho tengo otros pacientes que atender pero antes– se dirigió al rubio y lo sujeto fuertemente de los cachetes – si me vuelves a decir abuela te abriré y te esparciré por todos lados ¿entendiste?

–hai, hai.

–parece que te llevas cada vez mejor con la doctora verdad naruto kun? – le regalo una sonrisa hinata

–claro que no, aunque no puedo verla se que es una anciana, ha ha ha.

Tsunade se dirigió a la puerta y se detuvo para poner una de sus manos en el hombro de la persona que yacía escondida en la puerta.

– ¿por que nunca te acercas sasuke? – susurro

–Por que no es mí paciente es el tuyo– contesto el contrario notablemente molesto por la pregunta

–oh vaya ¿entonces por que vienes? – Tsunade sonreía divertida por la expresión que tenía en su rostro

–tsk ¿acaso esto es un interrogatorio? – comenzaba a fastidiarle bastante

–ha ha no tienes por que ponerte así, que mal carácter tienes pero sabes… si tanto te gusta ¿Por qué no le hablas? – diciendo lo ultimo salió del cuarto.

La noche inundaba todos los alrededores, las calles se iluminaban por los faros y las personas en ellas dejaban de pasar, todas se dirigían a sus casas con sus familias. En su cuarto y con los ojos vendados el chico rubio parecía mirar por la ventana abierta hacia afuera.

Sus cabellos se movían con el viento y unas lágrimas comenzaron a mojar las vendas en sus ojos escapándose de ellas para llegar a las mejillas.

Afuera un doctor caminaba por los pasillos del hospital haciendo guardia pasando por la puerta abierta del cuarto del rubio, quedándose quieto se recargo en la puerta y miro con insistencia al chico parado enfrente de el.

– ¿Quién esta ahí? – naruto pregunto al sentir que alguien le observaba

–vaya ¿pudiste sentirme?

– ¿como no podría? tienes una presencia impresionante.

–Dime una cosa ¿Por qué mirabas con impaciencia hacia afuera si no puedes ver?

–no miraba.

– ¿entonces?

–sentía el viento en mi rostro y tu… ¿quien eres?

–Soy un doctor de este hospital– sonríe

– ¿doctor?

–estaba haciendo la guardia así que ahora me marcho.

– ¡NO! espera– trata de detenerlo

Camino hacia donde escucho aquella voz la cual le había cautivado al escucharla no quería que se marchara por alguna razón que desconocía era cálida y gentil no como aquellas horribles palabras que siempre lo perseguían. Estiro su brazo lo más que pudo, corría a donde provenía la cálida voz.

– ¡ESPERA! – gritaba desesperado

– ¿Qué?

Naruto había tropezado y caído encima del doctor, su corazón comenzaba a latir con fuerza, prácticamente podía sentir que se le saldría del pecho pero ¿Por qué? No conocía a esta persona, no podía verla además era hombre.

– ¿estas bien? – escuchaba a la voz preguntarle

–ah ha, si perdón– reaccionó

– ¿entonces?

No comprendía.

– ¿ah?

– ¿no vas ah quitarte de encima?

No se había dado cuenta sino hasta ahora que el extraño se lo decía ¿pero que estaba haciendo? Realmente no tenía ganas de moverse ni un solo milímetro de aquel cálido cuerpo pero…

–lo sien… lo siento tanto – se levanto sonrojado, en definitiva la vergüenza había podido mas

–me tengo que ir ya es muy tarde ¿te ayudo a regresar a tu cama?

¿Se marchaba? No, él quería permanecer un poco mas, sólo un…

–ah no te preocupes yo puedo solo.

–bueno adiós.

Se quedo parado solo en aquel lugar, había dirigido una de sus manos en la pared para tocar y saber cuál era el camino a su habitación, había permanecido ya mucho tiempo en aquellos pasillos para saber en donde se encontraba pero… se sonrojo de sobremanera, era la primera vez que tenía esa clase de sentimientos, era la primera vez que su corazón latía así solo por una voz, por la voz de aquel doctor desconocido.

–se me olvido preguntarle su nombre.

No entendía, no entendía nada como era posible que su corazón reaccionara de esa manera ante tal desconocido? bueno era un doctor pero no lo conocía el tiempo que llevaba en el hospital nunca se lo había encontrado entonces por que al escuchar su voz se había sentido por primera vez ¿feliz? Con esfuerzo logro llegar a la cama tropezándose y cayéndose pero no era por que no supiera como regresar si no por que por lo feliz que estaba había olvidado como hacerlo.

A la mañana siguiente no había recibido visita alguna de su abuelo, no podía ir todos los días y hinata su única amiga se encontraba en la escuela.

–La escuela– dijo con pesadez

Solo pensar en eso hizo que comenzara a temblar, ese lugar no era nada agradable no le gustaba estar ahí, solo cosas malas pasaban cuando él iba, cosas muy malas.

–ah ¿ya estas despierto, naruto?

Escucho una voz femenina proveniente de la puerta.

– ¿sakura?

–Si soy yo, ¡vayas pudiste reconocerme! – la chica sonaba sorprendida

–Claro, no podría olvidar la voz de la enfermera que tanto me cuida– ensancho su sonrisa

–vamos es mi trabajo, vine a ver como amaneciste.

Sakura es la enfermera que estaba a su cuidado ella era la encargada de limpiarle las heridas, y por lo general se la pasaba un rato con el rubio a su lado platicando para que no se sintiera tan mal.

–oye sakura chan ¿puedo hacerte una pregunta? – estaba nervioso, no sabia como preguntárselo

–claro, dime.

–Hay un doctor… –se detuvo ¿como le explicaría que quería saber de un doctor que ni siquiera conocía? y mas ¿Qué no sabia su nombre? pero quería escuchar su voz una vez mas pero… se guardo las ganas y decidió no preguntar nada.

–No olvídalo – sonríe

–si tu lo dices.

Se marcho y la soledad volvía a reinar en la habitación, estando el solo con el silencio.

NOTAS FINALES

¡Hola a todos mina-san! ¿Cómo ha estado hoy su día? Espero que muy bien como para que me dejen un pequeño Review.

Este es uno de los primeros Fanfic que hice, vaya hace como (1…2…3…4) la verdad no me acuerdo pero fue bastante (ha ha ha ^_^) y como lo escribí al principio lo publique en otra pagina (AY) así que ¡NO ES LUCRO! la idea me pertenece como cada renglón escrito salido de mi linda i-ma-gi-na-si-ón (formando un arcoíris al decir imaginación) le he hecho unos pequeños arreglos (le cambie los guiones y le agregue algunos signos de expresión y/o interrogación) así que no problem.

Espero les guste tanto como a mi y los espero en el capitulo 2

¡Nos leeremos pronto mina-san!