Primero aclarare unas cosas ¬_¬
1-Su nombre es Atem, no Yugi, ni Yami, ni faraón.
2-Sus ojos, sin importar si es blanco o moreno (en este caso moreno) son violeta oscuro, no rojos (no se de donde sacaran eso: /)
3-Nos ubicamos en un mundo hipotético, donde Atem obtuvo su propio cuerpo y disfruta de su vida en el mundo actual, reclamo su titulo como rey de los juegos y tiene otras ocupaciones, como estudiar y tener un trabajo como cualquier mortal.
4-Esto es un SetoxAtem, no me vengan con que "Seto de es Joey/Jonouichi" porque no verán nada de eso aquí ¬_¬, tampoco nada de "Atem es de Yugi" si no les gusta, no lean.
5-Se usaran los nombres japoneses, no los nombres de la versión de 4KIDS.
CAPITULO 1: EL CAMINO A CASA
Le gustaba tomar el camino largo a casa. Disfrutar del aire en su rostro, del sonido de sus pasos en esas horas solitarias, de los caminos que tomaban sus propios pensamientos en aquel largo trecho que había entre la escuela y su hogar.
Agradecía cada día en que podía tener su propio cuerpo y sus propias experiencias.
Pero había otras razones para querer tardar mas, últimamente su relación con Yugi se había vuelto un poco difícil.
"Debería conseguir un departamento" pensó, mirando arriba, al juego de luces que formaba el camino de arboles. El problema era que con su empleo actual no le alcanzaba para tal cosa, por supuesto que tenia ahorros de los torneos que había ganado, pero ese dinero era para otros fines.
-Quizá Kaiba me deje ser su secretario-bromeo para si mismo, aunque en voz alta. La sola idea de trabajar para su eterno rival le daba risa, ninguno de los dos aceptaría jamás semejante cosa.
-Ya tengo un secretario, pero puedes ser el chico de los mandados-dijo una voz a sus espaldas.
Atem dio un respingo y se giro-Kaiba- lo miro, sorprendido.
-Atem-le regreso una fría mirada.
-¿Qué haces aquí?-.
-También me gusta pasear-suspiro.
-No me refiero a eso, justo por aquí, siendo que ni siquiera vas a estudiar-.
-Tengo tutores, aunque no los necesito-contesto, orgulloso-Solía ir por este camino, antes-lo miro-Cuando tu aun estabas con Yugi-.
-Ya veo ¿Te dio nostalgia? Hablas como un anciano-.
-Lo dice el faraón de hace miles de años-le replico.
-Así que lo aceptas-se cruzo de brazos.
-¿Me queda de otra?-suspiro, si, había terminado por aceptar todas esas cosas, muy en contra de su propio ego-Como sea ¿Por qué dijiste eso?-.
-Quiero alquilar un departamento-siguió su camino.
-¿No has ganado suficiente con mis torneos?-lo siguió.
-Si, e ganado mucho pateándote el trasero-rió.
Kaiba lo miro asesinamente, pero prefirió no contestarle eso-¿Y entonces?-.
-Es para otra cosa-sonrió levemente.
-Ya veo-no tenia interés en preguntar-No me molestaría darte un trabajo-.
-¿De verdad?-alzo una ceja.
-No me mires así, no puedo dejar que mi único rival caiga en desgracia-.
-Uy, que noble-rodó los ojos-Conociéndote, será algo humillante-.
-Si me conocieras, sabrías que no-frunció el ceño-No eres Jonouichi como para hacerte eso-.
-¿Por qué te gusta molestarlo?-suspiro.
-Porque es imbécil e inmaduro y no soporto a ese tipo de gente-lo miraba caminar, ya había pasado todo un año, y aun no se acostumbraba a su presencia.
-Yo tampoco-suspiro con un dejo de cansancio.
-¿No que son amigos?-.
-Es amigo de Yugi, mas que nada-.
-Entiendo-ladeo la cabeza un poco, quizás otra persona habría hecho preguntas, pero siendo Seto Kaiba, eso jamás pasaría. Solo le interesaban los duelos, su empresa y su hermano menor, lo demás le causaba indiferencia.
-Creo que no les agrado del todo-lo miro-Después de todo ahora puedo hablarles directamente, las cosas resultan diferentes-.
-¿Y que hay de Yugi?-pregunto, casi sin darse cuenta.
-Bueno…-se miro los zapatos-Él no es el problema, es Anzu-.
-La chica-ella hacia tan poco en ese grupo que a veces se olvidaba de su existencia.
-Si ¿Cuál mas?-suspiro-A Yugi le gusta, pero a ella le gusto yo-negó enérgicamente-Y hace que nos peleemos, a mi ni siquiera me interesa-.
-Por eso quieres vivir solo-lo miro-Dudo que solucione nada-.
-Lo se, pero, al menos será mas fácil-se notaba que le dolía todo el asunto, agradecía que Seto no hablara mucho, ni fuese el tipo de persona que fuese a contarle sus confesiones a otras personas. Aunque no se llevaran bien, Atem realmente creía que era alguien con quien podía conversar de todo.
-Quizás, si sales con alguien mas, ambos entiendan que no tiene caso que peleen por semejante cosa-.
-Suena a telenovela-rió-¿Ves telenovelas? Kaiba-.
-¡No!-se sonrojo-Pero me parece una solución lógica-.
-No existe nadie con quien quiera salir-.
-Pues busca-.
-No es tan sencillo-resoplo.
-¿Por qué no? Busca a alguien y ya-resoplo también.
-No saldré con alguien solo para aparentar-lo miro de reojo.
-No me mires como si hiciera algo así-le regreso la misma mirada.
-No, tu prefieres lucir como un solterón-bromeo.
-Calla-suspiro-Tampoco hay nadie que me interese, eso es todo-se le adelanto y se le puso enfrente, deteniendo su andar-¿Quieres el empleo?-.
-Depende-ladeo la cabeza-¿De que será?-.
-Publicidad-sonrió con ligera malicia, le gustaba la idea de tenerlo trabajando para si-Ya sabes, para Kaiba Corp.-.
-Ya veo…-lo medito unos momentos-No veo que podría tener de malo-asintió-Esta bien-.
-Perfecto-le ofreció su mano-Es un trato-.
-Es un trato-apretó la mano ajena con firmeza.
-Entonces, ven mañana, temprano-se aparto-Y no llegues tarde o te despediré antes de que empieces siquiera-se fue, tomando el camino contrario al de Atem.
Lo miro marcharse y sonrió, quería creer que en el fondo Kaiba intentaba ayudarle, y no solo aprovecharse de la situación para ganar dinero con su imagen.
A la mañana siguiente, Atem se levanto temprano, era sábado y todos dormían, así que nadie en la casa se entero cuando salió de allí, directo hacia Kaiba Corp.
-Buenos días-saludo a la recepcionista-Tengo cita con Kaiba-.
-Claro, espero un momento, para que lo verifique-le sonrió amablemente, mientras apretaba un botón e intercambiaba palabras con alguien, estaba usando un intercomunicador, así que Atem no podía oír que le decían-Ya vienen por usted, espero un momento por favor-.
-Bien-asintió levemente y se resigno a esperar.
Al poco rato, alguien apareció, un jovencito de no mas de 15 años, llevaba un atuendo chino de color negro, bastante llamativo entre tanta gente con traje de oficina.
-Atem-lo miro-¿Cierto?-.
-Si, soy yo-.
-Soy Shen, el secretario del jefe-sonrió apenas-Él lo espera en su oficina, sígame por favor-avanzo.
Atem iba tras él, observándolo con atención-¿Qué hace alguien tan joven como secretario de Kaiba?-.
-Él también es joven, y también usted-lo miro de arriba a abajo-El jefe sencillamente no quería estar rodeado siempre de hombres mayores, y le aseguro que estoy mas que capacitado para este trabajo-.
-Si Kaiba te contrato, no lo dudo-.
-Pase por favor-le abrió una puerta.
Entro, seguido inmediatamente por Shen-Oh, que elegante, era de esperarse-nunca había estado en la oficina de Seto.
-Atem-le sonrió-Muy puntual, te felicito-le dijo mientras Shen se colocaba a su lado-Ven, toma asiento-.
-No seas tan formal, Kaiba-se sentó y lo miro fijamente-Nos conocemos desde hace tiempo, demasiado-recalco.
-Lo se-suspiro-Tienes razón, como sea, hoy será tu primer trabajo, filmaremos un comercial-miro a su secretario-Si necesitas algo, puedes pedírselo a Shen, es sumamente eficiente y de confianza-.
-Esta bien-era raro oír al castaño alagar a alguien mas.
-Pues vayan-Kaiba dirigió su vista a un montón de papeles y se enfrasco de inmediato en ellos.
-Vamos-Shen avanzo hacia la puerta y Atem lo siguió.
-Y ¿De que será el comercial?-lo miro.
-Promocionaremos nuestro nuevo disco de duelo-revisaba unas notas-Así que de hecho es bastante adecuado que el campeón actual lo haga-.
-Ya veo, Kaiba lo tenia todo planeado ¿No es así?-suspiro.
-Ciertamente-asintió.
-Hn-al parecer Seto se estaba dedicando más a su empresa y menos a su orgullo-¿Y Mokuba? Normalmente siempre esta alrededor de Kaiba-.
-Se fue a estudiar al extranjero el mes pasado-.
-Oh, no lo sabia-.
-No le diga que yo se lo dije, pero debería hablar mas con el jefe-sonrió-Usted es de las pocas personas a las que respeta, y ya ve que no tiene muchas amistades-hizo una pausa-Ninguna amistad-.
-Eso lo se-rio-Somos rivales, pero no lo considero mi enemigo ni nada, no me molestaría intentar que nos llevemos mejor-.
-Eso seria genial-abrió una puerta nuevamente-Ya llegamos, este es nuestro estudio, aquí grabamos nuestros comerciales-.
Atem miro todo y suspiro, no estaba seguro de poder con eso de la actuación.
Habían sido horas tortuosas, la cámara lo intimidaba un poco, sin mencionar los cambios de vestuario, la repetición de escenas y el maquillaje. Quizás eso ultimo no tanto, Atem usaba maquillaje alrededor de los ojos.
-Perfecto, es increíble que lográramos filmarlo en un solo día- Shen sonreía, satisfecho.
-Muero de cansancio-se lamento el moreno.
-Puede usar las duchas y refrescarse-lo miro-Le conseguiré ropa si lo desea-.
-Por favor-asintió-Este edificio tiene de todo ¿No?-.
-Muchos de nuestros empleados apenas van a casa cuando hay mucho trabajo, eso incluye al jefe, así que si, tenemos todo lo necesario para cubrir las necesidades básicas, cocina, baños con regadera, enfermería, habitaciones-.
-Es como un hotel-rio.
-Mas o menos, como sea, el baño esta por allá-le señalo-Tómese el tiempo que quiera-.
-Gracias-se fue, le vendría bien relajarse.
Shen lo miro marcharse, le encargo a alguien más que le diera una muda de ropa y regreso con Seto. No lo había visto en todo el día.
-Jefe-entro en la oficina.
-Shen-no lo miro, seguía tan enfrascado en su trabajo como siempre-¿Cómo resulto todo?-.
-Bien, ya filmamos lo necesario, ahora solo queda la edición y eso-suspiro.
-Ya veo ¿Qué tal trabaja Atem?-.
-Tiene presencia, al igual que usted-sonrió-Deberían hacer unos comerciales juntos-.
-Ya veremos como le va al de Atem, si resulta bien lo considerare-asintió.
-Perfecto-.
-¿Y donde esta ahora?-lo miro por fin.
-Tomando una ducha, lucia agotado-lo miro igual-¿Quiere que lo traiga aquí luego?-.
-Por favor, quiero hablar con él-.
-Eso supuse-le hizo una reverencia-Con permiso-salió de ahí.
Seto suspiro en cuanto estuvo solo, Shen lo conocía demasiado bien y eso le molestaba ¿O quizás estaba siendo demasiado obvio? No, no podía ser eso, Seto Kaiba era experto en ocultar sus intenciones. Sonrió para si y siguió con su trabajo, era imposible que Shen y especialmente Atem, supiera que se proponía.
