Dedicado a Dulce.
Disclaimers: Kishimoto Masashi© Naruto™. Historia aquí escrita es de mi total autoría.
La vida les había unido, separado en sus senderos, colmado de dolor, esperanza, temor y poder; sin embargo, al final sólo ellos tomaron la última decisión, sí, unirse, plenamente como las luces de la noche se reúnen en el cielo formando estrellas.
Ciertamente Sasuke no era lo que aquella mujer merecía, pero sí lo que necesitaba para ser feliz; él había sido el villano, el egocéntrico, un egoísta, orgulloso, majadero, también el niño y joven de ojos tristes, de corazón roto, el vengador con sentimientos, solitario, aquel que golpes comprendió y descubrió que era posible amar, que enamorado se encontraba ya, el de sonrisa ladina y mirada tierna para ella, sólo para ella.
Uchiha Sasuke, a sus 19 años se había casado; la fiesta de su boda había sido espectacular, bebieron charlaron, bailaron todo era perfecto hasta que... la luna de miel, en los terrenos que pertenecieron en un pasado a su familia, por supuesto; el asunto era que:
— Yo—. Aclaró su garganta —. Hm, nunca he; bueno, ya sabes.
— ¿Eh?
— No besé a nadie nunca—. Él le miró advirtiéndole que no se le ocurriera mencionar a Naruto.
— Sasuke-Kun—. Sakura le besó la frente—. Eres vir...
— ¡Shh!— Le calló—. N-no lo digas—. Desvió la mirada enfurruñado.
— Tocame, y dejate llevar—. Inigualable, eso era la sonrisa de la pelirosa, su bondad, y el amor que le entregaba. Colocó ambas manos del pelinegro en su pecho, sobre la piel que ocultaba el corazón; aún con la prótesis del brazo su palma era cálida.
Sasuke besó el deseado cuello de su esposa, mordió dejando diminutas marcas rojizas, la amaba, y nadie lo impedía más; con sus labios succionó el lóbulo de la oreja de la Haruno, mientras ella le sacaba la camisa negra; aquellos pantalones comenzaban a molestar sobre su erección.
"Y es que te amo con locura, te deseo con fervor..."
Sí, era la primera vez de ambos, llena de reciprocidad.
"Hoy me he dado cuenta de quien soy, que vivo para ti, gracias a ti."
— Sakura... más—. Gimió mientras le frotaba contra su miembro.
Quizá no era tan inocente
— Sasuke-Kun—. El Uchiha bajó sus calzoncillos...
— ¿Dónde?—. Ella le dirigió riendo para sí.
Tal vez sí.
Sintío las paredes vaginales rodearle, y a la pelirosa quejarse un poco, lo entendió, y procuró ir con cuidado, se adentró, bombeando con un ritmo lento, después rápido, suave, duro. Su cuerpo, su alma, se sentían pleno, nuevo, y feliz.
No, no era inocente.
Ambos gemían, tan sonoramente que Konoha entera se hallaba enterada de la pasión y amor desbordante que ese acto conllevaba.
El pelinegro gruñó y se liberó en el mismo instante que la Haruno.
"Sí, todo es una locura, la nieve que ama la primavera."
Le abrazó, aferrándose cual si la vida se le fuese en ello.
— Sakura, hmp... te amo.
— También te amo Sasuke-Kun.
Luego silencio.
— Sakura.
— ¿Sí?
— ¿Cómo se hacen los bebés?— En esos momentos ella abrió los ojos como platos.
Sí, definitivamente él era el inocente Sasuke-Kun.
"Y tú, llegaste para llenar esa vacía existencia."
¿Review?