Hola!
Bienvenidos a mi nuevo bebe fic n_n bueno antes que nada les contare que este fic la pareja principal será Masaki Kunihiro (con mucho roce entre Souichi y Morinaga Xd) ESPERO QUE LES AGRADE la trama muchas gracias a mis amigas Hikaru, Vesania, Mari, Malkita y Carol que me ayudaron a aceptar que era una historia que valia la pena sacar a la luz espero que de verdad sea de su agrado aunque es una trama algo complicada y surrealista en fin sin más quiero darles las gracias por leer y por apoyarme besos!
Resumen:
En el futuro un asteroide impacto la tierra dejando en decadencia al mundo el cual intento defenderse con bombas nucleares pero no lograron más que solo esquivar un poco el desastre, el mundo sobrevivió o al menos unos cuantos, hasta que la radiación elimino y muto a las mujeres, ahora ya no existen y son cosa del pasado, los hombres conservaron antes que se extinguieran Óvulos para que no murieran sin embargo esto se estaba terminando y la vida misma también ..
Proyecto K.
By
Aurora la maga.
I: "Individuo"
Planeta tierra año X
"La noche parecía pacífica en el hemisferio norte del planeta, la mayoría de las personas no conocía el peligro que les acechaba, pero las potencias mundiales sí".
Nave K (En algún lugar del espacio abierto)
El sonido de las máquinas se escuchaba y una respiración forzada a través del casco, demostraba lo angustiado que se encontraba un ingeniero de la NASA el cual transmitía vía radio a la tierra:
El curso del asteroide no cambio… repito… El curso del asteroide no cambio… las detonaciones remotas no modificaron el curso… Oh Dios… -
En la tierra, rostros llenos de angustia se generaron; el presidente de la actual nación americana se encontraba en conferencia con las principales fuerzas del mundo los cuales no podían hacer nada contra el desastre que se avecinaba.
Señor presidente… ¿Qué hacemos?-
Aquel hombre tenía en mente aquella situación, la decisión era dura, debían bombardear con todo lo que tenían a la enorme roca, aunque el nivel de mortalidad aumentará en su nación…. Con ese sacrificio, se salvaría al resto de los países al otro lado del planeta.
Habiendo tomado una decisión, aquel mandatario se puso en pie y expuso serio:
Señores, ¿tiempo estimado de impacto? -
Señor … Entramos a nivel criticó, el asteroide está por pasar la barrera cero… el impacto será en 39 minutos y 12 segundos -
-Entonces…- Expuso observando la pantalla que mantenía a su frente con los principales líderes del otro continente - Amigos, no hay otra alternativa… atacaremos con todo lo que tengamos; aunque eso signifique la aniquilación de una parte del Globo … trataremos de salvar a los que podamos -
-Señor presidente.- exclamó uno de los hombres en la pantalla.
-…-
- El protocolo de evacuación de este lado del planeta logró su cometido, estamos listos para disparar -
Aquel hombre asintió y enseguida expuso acercándose a una cámara en la cual pidió amablemente iniciar la transmisión de cadena nacional y por lo pronto internacional.
Mientras eso sucedía, aquel enorme asteroide se dirigía con prisa a la tierra; en algunos lugares, la luz del sol fue obstaculizada por la roca, pero cuando ésta entró a la atmósfera, miles de luces se presentaron en ciertos lugares del planeta. Un inminente ataque había iniciado, pero no entre naciones… las guerras y las absurdas peleas por territorios se esfumaron y eran nada, ante la enorme amenaza que se aproximaba…
"Los misiles chocaron contra el objetivo, dejando a su paso una enorme estela de luces..."
-*000*-
En la actualidad, la ciudad de Tokio era una de las ciudades más subdesarrolladas del planeta.
Planeta que quedó en decadencia debido al choque de un asteroide; aquella enorme roca había exterminado la mitad de la población, destruyó edificios, ciudades y países enteras, debido al gigantesco impacto el cual se dio tierra firme.
Rusia y Estados Unidos, en tan desesperada situación, lanzaron misiles intentando desviar la órbita de aquel asteroide, lo cual se consiguió exitosamente. Sin embargo, los restos chocaron salvajemente contra un costado del planeta, había logrado atravesar la distancia límite en el espacio y estar lo suficientemente cerca para ocasionar daños. Sin embargo, con los años, los sobrevivientes entendieron que quizá ese hubiera sido el menor de los daños.
La radiación de las bombas nucleares empleadas, exterminó toda vida en un lado del planeta; la nube de polvo no se disipó hasta después de dos años y los últimos sobrevivientes, debían recuperarse y adaptarse rápidamente o morir en el intento.
Países que se prepararon para la destrucción no tuvieron problemas para regresar a la normalidad, los japoneses fueron los más apresurados en crear de nuevo todo desde cero, una vez más la humanidad estuvo luchando; de esta forma, fuertes edificaciones se construyeron a fin de resistir la precaria situación; ahora sus peores enemigos eran el polvo radiactivo y los constantes terremotos, muestra inequívoca del daño que había sufrido el planeta … fueron años en los que se levantaron desde abajo, y solo los más aptos sobrevivirían.
Ante ese panorama tan desolador, la humanidad parecía perdida, sin embargo…
Luego de muchos años, finalmente se levantaron de entre los escombros; pasaron 50 años y finalmente de aquel suceso sólo quedó eso un terrible recuerdo...
El futuro se levantó, gracias a sus avances tecnológicos se crearon nuevas fronteras y países; la moneda ahora, era universal... No había restricciones. Sólo leyes que protegían a la salud de la humanidad y de los seres vivos en la tierra.
Todo se había solucionado, o al menos eso pensaron los sobrevivientes al desastre... desgraciadamente, aquella oleada de devastación causó que la radiación afectará a millones y por lo tanto la natalidad disminuyó alarmantemente, el gen femenino estaba desapareciendo, ahora con tanta contaminación, las mujeres adquirían mutaciones que concluyeron en tornarse masculinas. El mundo se preparó, inició su camino para la revolución... grandes máquinas se construyeron, laboratorios se extendieron por toda la Tierra, con el único objetivo de que la vida regresará a la normalidad; sin embargo muy lejos estaban de que eso pasara...
Ante la mutación acelerada del gen femenino, los humanos ahora nacían de máquinas, de las pocas semillas que apenas pudieron extraer y preservar de las mujeres; los óvulos fueron resguardados por miedo a la extinción de estas… lo cual ocurrió. Ahora sólo eran simuladas por androides y máquinas pesadas, tener una mujer androide era ahora el lujo y pasatiempo y la burda sombra de ellas...
La vida dejó de ser como era, el planeta se convirtió en uno masculino y el cual con prisa moriría… los óvulos se les estaban terminando; de 200 nacimientos al día, se redujeron a 100 y luego a 50 hasta llegar a la cifra alarmante de 10 al día.
Poco a poco, el planeta se marchitaba; en cuestión humana, pues los científicos se encargaban de manipular los embriones, pero desafortunadamente no hubo respuesta positiva en cuestiones de cambiar el sexo de los hombres… por el contrario, hubieron buenos resultados a la hora de manipularlos para agregar algunos componentes, para hacer soldados fuertes capaces de reprimir el dolor y no sintieran miedo o deseo de aparearse.
Todo el esfuerzo parecía perdido, sin embargo hubo un único espécimen único vivo, que logró contener por mucho tiempo (hasta la edad de los 13 años) un útero sano en su interior; con pruebas y controles que al inicio fueron diarios y luego mensuales lograron mantenerlo… la fortuna estaba de su lado, era tiempo de comenzar la prueba principal.
No obstante, así como habían científicos y personas que aún creían reparar la tierra con sus actos, también había un grupo de liberales que creían en la redención, y estaban en contra de los procedimientos de los científicos; como oposición, iniciaron a atacar las bases de los laboratorios e incluso robaban los experimentos que con mucho recelo resguardaban, por esta razón decidieron que lo mejor era no mantener a los sujetos de estudio en las instalaciones, siendo así los dejaron ser humanos corrientes… los cuales iban a la escuela, trabajaban y vivían con "normalidad" sólo yendo al doctor de vez en cuando…
...*000°°°°000*...
Edificio de Mutatech...
El día había muerto, el sol ya no estaba a eso de las 8 de la noche; afuera los autos recorrían las calles y algunos más lujosos sobrevolaban, eran los primeros días de Julio; las oficinas aledañas ya habían cesado labores por ese día, pero a lo lejos, en un edificio con interiores blancos, y elegante, existía una única oficina de color gris. En la cual un hombre trabajaba en los últimos detalles de una firma tecnológica, patente que controlaba la empresa para la cual él trabajaba.
El sonido del teclado, sin pausa ni error, era lo único que se escuchaba en aquella silenciosa y aburrida oficina. El monitor plasma de cristal cromado mostraba textos en inglés, no tenía espacio para ninguna ventana más, el reflejo de aquel trabajador se colaba en aparato de última generación sin tomarle demasiada importancia; cada ventana de diálogo abierta en su pantalla explicaba y detallaba, con pulcra redacción, el esfuerzo de muchos meses de trabajo, no podía darse el lujo de cometer errores ni perder sus avances.
Sus gafas finas y de un cristal especial le permitían revisar la hora y alguno que otro mensaje enviado desde de su comunicador en el bolsillo de su saco, luces tenues brillaron en dichos cristales, susurró - Aún faltan unos minutos para que el último tren se presente en la estación -
Estaba terminando de hacer su informe cuando un aparato brilló en su lado derecho; un holograma se mostró y expuso la figura de una mujer de traje negro y cabellos del mismo color, un rostro suave y terso que parecía real, expresó:
-Morinaga, Kunihiro… -
El mencionado detuvo todo movimiento, apartó su mirada de la pantalla y observó con atención a aquella mujer holografíca, elevando su mano, eliminó los avisos de su lente, clasificando su visión.
-¿Dime? -
-Este es un recordatorio de su doctor, su consulta bimensual se llevará a cabo mañana por la mañana a las cero nueve horas de Tokio -
-Entendido, gracias -
-Si desea cancelar o cambiar la fecha de su revisión, por favor presione el 2 en su comunicador.-
-Asistiré, no te preocupes.-
-Muchas gracias, apreciamos su cooperación con el gobierno de E.L.E.- (N/A: Eternal Life for Everyone, siglas en inglés)
Aquella mujer, así como llegó desapareció... el silencio se presentó; Kunihiro aún observaba con sus orbes verdes el vacío en donde aquel holograma se presentó, con calma aquel hombre se dejó caer sobre el respaldo de su silla, apartó sus gafas y elevó sus manos a su rostro realizando un suave masaje a su rostro, mientras sometía sus dedos entre sus cabellos, odiaba a todo lo que tuviera que ver con el gobierno de E.L.E pues, su pasado no había sido nada agradable y cada vez que pensaba en ello recordaba con horror este...
RECUERDO
Era apenas un niño, recorría las calles más rústicas y entrañables de su ciudad de nacimiento Fukuoka... él estaba acompañado de su querido hermano, ambos habían nacido de la misma máquina con diferente bolsa, un caso impresionante que sólo sucedía una vez en cada 100 nacimientos, gracias a que los nutrientes y tratos genéticos fueron más exhaustivos en Kunihiro su hermano era más pequeño y tardó más en nacer... ambos ese día, llegaban de la escuela, el preescolar se había vuelto divertido. Con su hermano en la misma escuela.
-¡Tetsuhiro! -Nombró el castaño a un niño que lucía como de unos 7 años y el cual, se había quedado agachado cerca de un pequeño río que pasaba atravesando la ciudad, el de mirada verde y cabellos azules oscuros observaba con atención una rana, ésta había saltado entres las plantas y se trataba de camuflar, pues el clima estaba lluvioso ese día y las calles estaban mojadas al igual que las plantas y árboles.
El mencionado, no dejaba de ver aquellos ojos de color rojo de aquel animal el cual hinchó sus glándulas para inflamar las bolsas que contenía alrededor de su ancha boca e inició a croar.
-...- Tetsuhiro observaba con mucha más atención, estiró su mano para intentar tocar aquel anfibio sin embargo, su hermano llegó a su lado y susurró:
-Tetsuhiro vamos, no toques eso hay que ir a casa, ¡esta lloviendo mucho! -
-Pero tengo mi capa y mis botas Kuni-ham -
Kunihiro dedicó una mirada tierna a su hermano y acariciando su mejilla expuso: -Vamos a casa, enfermaras -
Mientras reanudaron el paso el castaño noto que el silencio se hizo más presente, tanto que Kunihiro podía escuchar el caer de las gotas sobre el paraguas y sobre la capa de plástico de su hermano, extrañamente ningún auto paso por la calzada o sobrevoló. En instantes aquel momento se tornó extraño, los ojos verdes de Kunihiro observaban a todas las direcciones en aquella calle, tal parecía que las casas y la gente había desaparecido y se resguardaban dentro de sus casas, en su inocencia él se dijo que a lo mejor sería cosa de la lluvia, sin embargo...
Una camioneta negra se estaciono al final de la calle, el sonido de los frenos rechinar causó en el mayor de los hermanos nerviosismo.- Tetsuhiro vamos!-
Dijo tomando su mano pero el joven niño no le seguía puesto que su mirada estaba perdida al frente en donde, Tetsuhiro había visto a un hombre que salía de entre los arbustos, Kunihiro observó con miedo a aquel hombre a quien susurró.
-¿Qué es lo que quiere? -
- El individuo, ha sido localizado, pero... tengo dos chicos no se quien es quien - hablaba con un comunicador en su oído.
-Traelos a ambos - se escuchó como respuesta en aquel aparato, perteneciente a un hombre de traje negro y gafas.
- Niños vendrán conmigo -
-¿Qué?… ¿Por qué? … ¿A dónde? … -
-Nii-san … ¿qué sucede?
-Quédate tras de mi Tetsuhiro -
-Es una orden del gobierno de E.L.E - Dijo para tomar el brazo de Kunihiro y otro agente tomaba el pequeño cuerpo de su hermano, el cual fue apartado de su lado sin ningún remordimiento… los gritos de ambos eran estridentes no querían separarse, las personas dentro de sus casas sólo cerraban las cortinas y se escondían, mientras ambos chicos entre llantos y súplicas, eran horriblemente separados...
FIN DEL RECUERDO
-¡Kunihiro!-
Aquel llamado lo sacó de sus pensamientos, aquellas orbes verdes, se encontraron con unas de color café, las cuales le observaban detenidamente, mientras el castaño regresaba a la realidad y retornaba a su trabajo, se preguntó:
-Soujiro… ¿Aún no te vas? -
- Lo mismo te pregunto yo a ti… ¿porqué no te has ido? Ya todos se fueron, al parecer sólo quedamos tú y yo - Morinaga percibió el tono de aquel comentario como una invitación indiscreta.
- Pierdes tu tiempo conmigo Soujiro, ya te lo he dicho… -
-Ehhh… no lo entiendo, eres el único sujeto que no cae en mis redes ¿acaso no te atraigo? -
-En este momento no tengo tiempo, para tus pobres intentos de seducción…- expresó mientras continuaba tecleando, sin darle mayor atención.
Soujiro enseguida coloco sus manos en sus bolsillos y exclamó con maldad - Te estas perdiendo de algo impresionante, adquirí un androide que es de última generación, deberías venir y sentir sus hermosos pechos son tan suaves como los pétalos de una rosa -
-No estoy interesado -
-Bueno, lo intente… no te quedes hasta tarde Kunihiro -Expuso acercándose e intentando tocar su hombro pero el castaño se apartó, tensándose y susurrando:
- E-en un momento terminaré... sólo necesito enviar el informe -
Un incómodo silencio se presentó en ese instante, Soujiro sin decir nada se alejó y se marchó, mientras Morinaga temblaba. Odiaba que le tocarán, y es que tanto tiempo yendo y viniendo a diferentes laboratorios médicos causó una cierta aversión al contacto con otros.
Sorpresivamente para algunos, ciertos hombres habían logrado ocupar el puesto que las mujeres dejaron, algunos servían como amantes y otros ofrecían sus servicios como tal; para el castaño no era común ser acosado por otros hombres, que en su frustración, trataban de tomar a los más frágiles y guapos, como lo era el castaño. Era deseado por muchos de sus compañeros, había algo en él que los volvía locos, además de esa fina forma de ser y vestir con ropa elegante e impecable, esa peculiaridad le hacía más codiciado.
Su vestimenta comprendía una corbata, sacó y una camisa blanca y sus cabellos que estaban pulcramente peinados hacia atrás... todo él era muy apetecible, y estaba más que seguro que tenía un atractivo demasiado irresistible, sumado a eso, el secreto a voces que un día surgió en su oficina, todavía era totalmente virgen, eso hacia que Kunihiro Morinaga, fuera el hombre más anhelado en el edificio. Al no tener más mujeres, los hombres buscaban, necesitaban relacionarse entre ellos, y cuando el momento llegará, se unirían y se someterian a una orden del gobierno, para poder tener su propio hijo, de la enorme máquina llamada ARCA.
Rápidamente terminó su reporte, lo guardo, lo envió y se fue; había corrido con suerte, pues se rumoreaba que aquel sujeto al cual se había negado rotundamente tenía fama de tomar lo que quería, como fuera. Kunihiro tenía algo claro y eso era que por ningún motivo, deseaba formar parte de ese tipo de cosas... aunque estuviera en un mundo apocalíptico, solo y sin familia, él seguiría así siempre...
...*000°°°°000*...
El transporte era antiguo, el sonido de los vagones azotarse en cada vuelta cerrada era tétrico, para alguien cuyos trajes están impecables y que era el subjefe de la división en su compañía era raro y molesto viajar de esa manera, pero encontraba más paz y tranquilidad en esos transportes que en los autos lujosos de gobierno en donde siempre era acosado por los diferentes ocupantes... Él podía viajar en esos, pero no lo deseaba puesto que sólo quería tranquilidad y de cierta forma le hacían rememorar tristes recuerdos de su niñez.
No obstante aunque aparentaba estar solo, siempre había alguien vigilando y siguiendo sus pasos, era igual que aquellos años que pasó en las instalaciones gubernamentales de E.L.E.; fue también ese lugar el último en que vio a su hermano. Observaba el piso sucio y notaba que las luces se apagaban por segundos su vida había sido solitaria, no había ninguna duda que extrañaba al pequeño y lo único que le quedaba era su recuerdo… los hombres del gobierno borraron todo rastro de su existencia, no había fotografía, ficha o nombre ni tampoco registró de su nacimiento Kunihiro ni siquiera sabía si él aún vivía.
Tremendamente deprimido pues apenas hace unos días había cumplido años se levantó al notar que el tren se detenía y volvía a la marcha.
Finalmente, una estación más adelante, él descendió; camino algunas cuadras observando el cielo, el cual estaba despejado y lleno de estrellas por doquier, llegó a su edificio departamental y se introdujo a las oscuras instalaciones, ya eran las 11 de la noche y Kunihiro por fin entraba a su pequeño y solitario apartamento.
Tomó su chaqueta y la deslizó por sus brazos colocándolo en el perchero, luego de dejar ahí aquella prenda se giró mientras elevaba sus manos y desataba su corbata mientras al mismo tiempo caminaba e iba directo al cuarto de baño, en donde prendió la luz y se retiró las gafas. Su rostro tenía la vista al frente observándose al espejo, analizándose admirando sus cabellos firmemente peinados hacia atrás, con un fleco travieso en su frente y aquellas cejas expresivas y llenas de tensión.
Sujeto su corbata y la deslizó por el cuello de aquella camisa, la dejó caer al piso de baldosas blancas con cuadros verdes; hecho esto, fue quitándose la camisa, estaba listo para entrar a la ducha y darse un baño.
Sin embargo, al mirar su cuerpo en el espejo se detuvo, observando el tatuaje que había en su abdomen, este era un código de barras que estaba bajo su ombligo, llevo con calma su mano derecha a ese lugar al hacerlo inició a recordar lo doloroso que fue cuando lo hicieron, Morinaga se tenso, suspiró hondamente y dejando eso a un lado terminó de desnudarse.
Prendió la regadera manualmente y se sometió al agua, sintiendo como esta recorría su cabellos desordenandolo y recorriendo cada rincón de su cuerpo, el cual estaba terriblemente lleno de cicatrices con forma circular, concentrados en su espalda y sus caderas.
Percibiendo el correr del agua recibió esa sensación sedante que aquel vital líquido obsequiaba a su cuerpo, cerraba los ojos y trataba de olvidar lo que mañana sucedería, pero era imposible... nuevamente sería objeto de estudios para ese gobierno.
Devastado y resignado decidió continuar con su baño deseaba que el día de mañana llegará pronto para acabar con esa absurda revisión que cada dos meses realizaban...
...*000°°°°000*...
"Caminaba sólo por un bosque…. Los países que fueron destruidos, sólo los había visto por televisión, Kunihiro jamás pensó estar en aquel paraje desolado. En el cual aún habían rastros de la humanidad, edificios que estaban cubiertos por hojas, ramas secas o quemadas y autos en el mismo estado… aquel desértico sitio parecía extraño.
Caminaba solo y desnudo, sus pies estaban descalzos y se dispuso a caminar entre los restos de aquella civilización destruida; de pronto se vio a sí mismo cayendo en una laguna, en la cual su cuerpo se sintió liviano, se escucharon brazadas y chapoteo a su alrededor, significaba que alguien se acercaba, con prisa se alertó notando como cientos de manos lo sujetaba bajo el agua y como un hombre, cubierto del rostro se acercaba.
-¡Ahg!-
Se quejaba, intentando soltarse de los agarres que poco a poco lo estaban hundiendo, el agua le llegaba al cuello, su corazón palpitaba acelerado y sus ojos reflejan pánico, aquel otro personaje se acercaba con rapidez. Mientras que Kunihiro intento gritarle para que le salvara; no obstante aquellas manos lo hundieron por completo obstaculizando su respiración, él observaba todo a su alrededor mientras se sentía ahogar.
Las manos desaparecieron y él decidió nadar hacia la superficie; sin embargo, un sinfín de rostros se presentaron sacándole un susto de muerte.
El agua se tornó negra y el brillo que se reflejaba de la superficie también desapareció.
-Voy a morir.- pensó mientras buscaba una salida la cual no supo por dónde buscar, todo estaba oscuro y la superficie parecía no estar en ningún lugar, el aire comenzó a faltarle; desesperado elevaba sus brazos pero la conciencia se le estaba yendo de su cuerpo, dejó de luchar y cuando estaba cayendo al fondo, agachó su mirada y lo que vio le dio esperanzas…
De su bajo vientre una luz inicio a iluminar todo y un brazo que brillaba lo tomó de su mano, llevándolo lejos del fondo y sacándolo de la oscuridad de esa laguna.
Kunihiro inicio a tocer, el cuerpo le temblaba, aquella luz había iluminado todo y él lo noto, posó su mirada al frente y ahí estaba su salvador.
Tenía los ojos azules como el cielo, el cabello rubio un tanto largo hasta los hombros y su mirada era penetrante… estaba embelesado, intentó acercarse a él sin embargo este le habló.
-¡Kunihiro….! - le dijo mientras una alarma sonaba con fuerza…
Sus párpados se abrieron y asustado apago la molesta alarma, eran las 8:10 de la mañana, se había quedado dormido y era la décima vez que aquel reloj hacia el intento de despertarlo. Frotó sus ojos y destapó su cuerpo, para apresurarse, se cambió de prisa y sólo tomó una tostada y café para desayunar.
Salió rápidamente disparado de su apartamento, odiaba llegar tarde…
...*000°°°°000*...
CLÍNICA DE GOBIERNO E.L.E...
El consultorio parecía ser una de esas antiguas clínicas mentales en las que el blanco predominaba, sin duda ese color lo hastiaba, estaba en todos lados a donde él iba.
Kunihiro llegó como siempre puntual, se acercaba a la ventanilla mientras el androide femenino al otro lado se hacía presente y expresaba con esa voz robótica y sin gracia.
-Morinaga Kunihiro, el doctor Tatsumi lo espera -
Kunihiro se movilizó hacia la puerta automática que permitió su entrada, mientras caminaba escuchaba de la androide.
- El sujeto siete mil setecientos nueve está en camino - (7709)*
Morinaga suspiro, no había marcha atrás u oportunidad de escapar, debía obedecer a ese mandato puesto que era en pro de la humanidad, aunque fuese un ser humano, no tenía derecho a decidir por su cuenta o a oponerse a las órdenes de aquel régimen.
Mientras él se dirigía al cubículo indicado dentro de esa clínica, un hombre de cabellos largos y grises, por no decir rubios casi platinados, se comunicaba por reflecto llamada a su superior el cual cuestionó:
-Doctor Tatsumi, ¿Quiere decir que este sujeto es un candidato apto? -
-Completamente… mis investigaciones y registros han dado un resultado positivo... El sujeto en cuestión, tiene un gen recesivo... ha sido el único que aceptó en su cavidad la membrana extra desde que nació y los tratamientos para evitar el periodo que sufrían nuestras fallecidas mujeres surgió efecto, aunque desde hace dos meses se le dio otro tipo de medicamentos para que genere lo que buscamos y si mis cálculos no me fallan, tendremos un conteo enorme de óvulos este día -
-Es increíble -
-Solo necesito hacer una última prueba y tres meses más, es lo que necesito para terminar el proyecto; todo está listo para ingresarlo en las instalaciones y que sea el primer sujeto de estudio que llevará en su cuerpo un ser humano -
-Doctor Tatsumi, si usted logra esto… ¡Podríamos hacer más como él! -
-¡Claro! Aunque… esto solo será posible si logramos ocultarlo de los radicales… -
-Podremos no te preocupes, el sujeto de estudio tiene un escolta a toda hora, es un soldado que ha sido manipulado genéticamente y que le ha protegido de varios intentos de secuestro y él ni se a enterado -
- Eso me alegra...- Inquirió el pelilargo, girándose y dejando ver su rostro severo mientras aquellas orbes color miel observaban con emoción al holograma -Los estúpidos radicales piensan que nuestros estudios son asuntos que no están avalados por el creador... pero no entienden que sin estas investigaciones la humanidad misma desaparecerá -
Al terminar de argumentar, el sonido de la puerta abriéndose silencio al científico el cual escuchó:
- El sujeto está aquí -
-Ya llego - Dijo moviéndose por la habitación mientras se acercaba al comunicador y expresaba - Si me disculpa director, nuestro experimento acaba de llegar -
- De acuerdo -La comunicación se terminó; Tatsumi estaba simplemente emocionado.
Kunihiro entró al consultorio, observaba al médico, aquel hombre era delgado de apariencia muy misteriosa ojos color miel y cabellos largos y plateados...
-Gracias por venir sujeto siete mil...-
El castaño arrugó las cejas, ¿acaso no podían ser amables y tratarlo como un ser humano? molesto murmuró - Kunihiro, mi nombre es Kunihiro.-
- Sin nombres aquí - Dijo con molestia el platinado, ofreciendo que el castaño fuera a cambiarse, este así lo hizo sin replicar; se desvistió y se colocó la condenada bata para luego ir a la fría camilla, en donde el doctor Tatsumi, elevó su bata y escanear el código de barras tatuado en su abdomen; luego de eso, depósito con rapidez y sin ningún aviso, gel para escanear de manera apresurada el interior de el castaño.
Sus ojos miel analizaba las imágenes de su computadora mientras que Kunihiro observaba el cielo falso de aquella habitación recordando con pesar la primera vez que estuvo en aquel lugar...
RECUERDO
ELE... era un gobierno que estaba decidido a rejuvenecer la tierra, y para hacerlo decidió experimentar con algunos de los bebés que nacieron del arca; sólo hicieron ocho mil sujetos de estudio y Kunihiro era uno de ellos. Él había sido, desde que fue un embrión, tratado con cromosomas XY y su incubación había sido cuidadosamente controlada y cuando cumplió los 10 años fue sacado de la pequeña población en conjunto de su hermano...
Kunihiro estaba asustado, sólo tenía 10 años cuando lo capturaron y separaron de su hermano, había ido a parar al ala de experimentación de ELE, él observaba con atención los barrotes que lo tenían cautivo, lo colocaron ahí para tranquilizarlo puesto que había golpeado a varios de los agentes intentando escapar e ir por su hermano.
Sus lágrimas se deslizaban por sus mejillas pero, cuando ya todo estuvo tranquilo, un científico y un pequeño a su lado llegaron para llevarlo a la clínica en donde le explicaron la razón y el porqué estaba ahí...
-Morinaga Kunihiro... eres el sujeto de estudio siete mil setecientos nueve, tu existencia es muy importante para la humanidad, ya que eres uno de los experimentos más codiciosos del gobierno -
-¿En dónde está mi hermano? -
- Él está bien.. debido a su genética él ha sido enviado a otra división de ELE, en la que será mucho más útil.-
- Nooo… Tetsuhiro... ¡Quiero verlo! -
-Lo verás, todo a su tiempo por ahora debemos comenzar con tus examenes... vivirás en las instalaciones por 5 años y luego serás liberado...-
Su sentencia había sido pronunciada... ese día, lo trasladaron a una habitación en la cual le ataron de manos y piernas sobre una camilla, enseguida una máquina se presentó a su lado y ese fue el momento en que fue marcado con su tatuaje; el dolor de las agujas en su piel tierna y frágil fue horrible. Pero ese sólo sería el inicio de su calvario; desde ese momento, los experimentos fueron sumamente dolorosos y terribles, hacían con él lo que necesitaban y no había nada que Kunihiro hiciera o dijera para evitarlo.
FIN DE RECUERDO
.
Kunihiro observaba al científico, lo recordaba bien pues él era el mismo niño que estaba en esa ocasión, ya ahora un hombre joven, que por años trabajó al lado de su padre y al morir continuó examinando al que conocía como individuo 7709 y a otros miles de sujetos más, el doctor Tatsumi continuó el legado de su padre y juró que concluiría el experimento con el mejor resultados.
-Todo parece estar bien... no hay cambios significativos...¿has estado tomando tu medicamento?-
-Sí, como usted lo recetó Doctor Tatsumi -
-Bien... entonces llegó el momento de iniciar la prueba más importante -
-¿Prueba? -
-Si...-
Respondió el peli largo, apartándose de la cama y moviéndose a un costado para tomar unos guantes y cubrir su rostro con un tapa boca, mientras que Kunihiro, notaba como de la nada dos androides aparecieron llevando consigo algunos instrumentos, eran punzantes y largos, objetos que se utilizaban en situaciones que ameritaban cirugía. El castaño se puso nervioso estaba sudando, pues uno de los androides se acercó a los pies de la cama y mostró como dos estribos se extendían de la base de aquella camilla y con ayuda de las mujeres robóticas colocaron sus piernas sobre estos. Trago grueso mientras seguía cada orden prontamente el cuestionó:
-¿Qué está… qué está pasando? -
-Déjame explicarte algo Kunihiro...- Habló con calma el médico mientras se acercaba de nueva cuenta y posaba su mano enguantada sobre su pecho. - De ocho mil individuos experimentales, has sido el único sujeto que ha desarrollado una matriz interna y teóricamente funcional, tus ovarios, tu útero todo, está perfectamente desarrollado y encajado, eres perfecto… un milagro de la genética avanzada... El milagro que estábamos buscando por mucho tiempo.-
-¿De qué habla?-
-Ahora mismo te estoy inseminando, con suerte lograrás llevar más de un mes al feto … la meta es llegar a los tres meses y sacarlo para examinar si sus órganos se desarrollaron bien -
-¿Qué... qué está diciendo?- Sus cejas se juntaron en enfado y luego su rostro siempre neutral, se transformó en uno lleno de desesperación. - ¿producto, feto… abrirlo de qué estás hablando? -
-¿No lo recuerdas?-
-...-
-Hace unos meses llegaste a emergencias con un dolor agudo en tu bajo vientre... Eso fue porque el medicamento que te di causó un aborto, estabas en estado como nuestras fallecidas mujeres... El orden y el equilibrio regresará contigo, al traer al mundo a nuestros próximos bebes.- inquirió bajando la mano a su vientre -Esta vez no habrá errores, lo prometo -
-¡Ah!-
Sintió como un instrumento rústico, un espéculo se colocó en su esfínter lugar por donde el médico podría tener libre acceso a su canal vaginal, introdujo una sonda y acto seguido ordenó a las mujeres traer la muestra de semen para insertarla en el interior del castaño quien temblaba y susurraba.
-Imposible -
-Ahora todo es posible - Dijo para disponerse a inyectar la semilla en donde corresponde; sin embargo, un estruendo seguido de una explosión en el edificio le hizo detenerse , rápidamente el doctor apartó su careta y gritó
- ¡¿Qué demonios sucede?!-
La alarma se inició en todo el edificio, Kunihiro fue liberado y el médico ordenó:
-¡Androides llévense al sujeto a un lugar seguro! -
Aquellas pesadas máquinas comenzaron a moverse, mientras que el castaño era llevado por un pasaje secreto. Tatsumi por otro lado, recibía a los radicales los cuales gritaron:
-¿En dónde está?-
-¿A quién buscan?-
- El sujeto de investigación.-
-Aquí no hay nadie - Dijo severo.
Aquel encapuchado bajo su pañuelo y de un sólo golpe en la cabeza noqueo al doctor a quien los demás hombres tomaron y escucharon.
-Llévenselo … lo torturaremos para sacarle la verdad -
-Si señor -
Rápidamente la horda de hombres con ropas de militares y pañuelos en sus rostros revisaban el lugar, el atacante de Tatsumi analizaba las máquinas cuando escucho.
-¡Masaki!-
-¿Dime?-
-Hay un fondo falso en la pared… El escáner muestra pasillos y túneles -
-¿Así que por ahí lo sacaron?-
Otra bomba ajena a la de su repertorio se hizo estallar.
Masaki al sentir el estremecimiento en el edificio, corrió a la ventana en donde con prisa noto los enormes camiones negros con el logo de E.L.E.
-Maldición llegaron los elite -
Y así era, en las afueras del edificio el grupo de élite se bajaba de los transportes militares, eran jóvenes modificados genéticamente que sólo tenían un objetivo: proteger los intereses del gobierno, rápidamente entraron a las instalaciones apuntando con sus armas, tenían órdenes de asesinar a los rebeldes, el personal fue evacuado, pasando de largo al grupo que se dirigió a los elevadores todos menos uno en especial el cual se separó del grupo.
Escucho.-"Equipo 7710 el individuo esta siendo apartado… sígalo, estas son las coordenadas"-
Aquel soldado, con trajes negros, cascos, guantes negros y armamento pesado recibió la coordenadas mientras exponía de manera seria y grave - Recibiendo coordenadas, procedo -
Con prisa aquel militar cubierto por un casco y por trajes negros se apresuró a entrar al edificio de manera que esquivó el fuego y los escombros; fácilmente y con prisa llegaba al piso indicado en donde enfocó con sus ojos tras ese vidrio negro de su casco a los rebeldes.
Tomó su arma para elevar su metralleta y expuso.- Tengo en la mira a los rebeldes… -
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Lejos de aquel lugar, en el transporte, el líder de aquellos militares observó las escenas gracias a la cámara incorporada en el casco y reconoció al medico capturado.
-Procedo a la limpieza -
- No espera... tienen al doctor, esta es su fotografía trae a ese médico y busca al sujeto de pruebas –
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Ante su mirada se presentó la fotografía de Tatsumi, rápidamente el aceptó diciendo. - Entendido -
Con las órdenes establecidas aquel militar se apresuró a acercarse a aquel grupo que había quedado atrás, Masaki y los otros en cambio habían ido tras la persecución del sujeto de estudio, el soldado rápidamente fue atacado con ráfagas de disparos, él esquivaba y pensaba con rapidez una forma de acercarse sin ser lastimado, con prisa y agilidad logró su cometido sin errores. Tomó una de sus bombas de humo y corrió acercándose a los radicales a los cuales asesinó con su cuchillo militar.
Cortó sus gargantas, el último sujeto que tenía de rehén al doctor le dio guerra, pero logró erradicarlo. Con prisa el médico cayó al piso mientras que el uniformado exponía.
-Procediendo a despertar al médico -
- Con cuidado es valioso.-
-Si...- Su mano se movió con agilidad en su cuello haciéndolo tronar de manera que automáticamente el médico despertó y al ver a aquel casco soltó un golpe que hizo romper el vidrio de este mostrando claramente unos ojos verdes que lo observaban neutrales.
-¡Suéltame bastardo!-
-Soy el soldado número siete mil setecientos diez... ya está en buenas manos y en custodia de ELE -
-Ah...- se quejo, tomando su cuello con una mano y encorvándose.
-Por favor vaya afuera, debo ir por mi otro objetivo -
-E-Esta bien - El pelilargo se apartó notando como el militar se largaba corriendo con suma prisa.-
-¡Doctor Tatsumi! - Gritaron los miembros del hospital, llegando a él aprisa y llevándolo a un lugar seguro, sin embargo no paraba de recordar aquel rostro de ese soldado.
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Por otro lado… entre los túneles y pasajes del enorme edificio, Morinaga era guiado por uno de los androides el cual fue atacado con disparos. Kunihiro se apartó e intentó escapar por la próxima puerta sin embargo, esta no se abrió, golpeaba la puerta mientras escuchaba como el último androide caía al piso completamente destruido, Kunihiro notó, como alrededor de cinco hombres lo rodeaban, él solo pudo aferrarse a la pared de metal a sus espaldas y sudar mientras tragaba grueso; estaba siendo acorralado, observaba con susto a aquellos hombres los cuales lo miraban con atención y asombro.
- Así que ¿él es el sujeto?-
- No está nada mal.-
- No te distraigas, debemos matarlo - Dijo el rubio encargado de la misión suicida, analizando a su objetivo quien sólo llevaba puesta una bata y respiraba acelerado, mientras sus orbes verdes los observaban con miedo y susurraba:
-¿Matarme? -
-Si...- Respondió - veras... somos radicales seguimos las órdenes de la vida... este mundo debió terminarse con el choque de aquel asteroide pero desafortunadamente no fue así... y ahora mi Dios eliminó a las mujeres para que todos nos extingamos y tengamos un buen renacimiento - explico el rubio acercándose poco a poco a su presa.
-¿de qué demonios hablas? -
En esta época grupos radicales como este, estaban tan cegados por sus creencias, basadas en miedos infundados y retrógrados, que no aceptaban nada más.
-Eres un error de la naturaleza, te crearon a base de experimentos y no eres natural... debes morir -
Kunihiro observó con terror, como aquel hombre elevó su arma, una 9 mm, al frente de su rostro; posaba la mira de su arma a su frente, cerró con fuerza sus ojos, no tenía la culpa de nada, pensó . Rápidamente y antes de sentir la ráfaga de disparos, otra se escuchó a su costado, abrió los ojos y observó en la fría oscuridad la chispa de las balas saliendo de un cañón delgado, y como los que acompañaban al rubio caían , mientras, Masaki se movía rápido y sujetaba a Kunihiro para resguardarse tras su cuerpo gritando.
-Detente máquina asesina o mataré a tu objetivo -
Las manos de aquel militar se elevaron lanzando el arma al piso y exponiendo.
-No cometas una locura.-
-Locura es la que te hicieron a ti y a este sujeto.-
-¡Suéltame!- exclamó intentando infructuosamente liberarse.
-No... vendrás conmigo -
-¡Señor, si da un paso más no me voy a contener!-
-vas a amenazar la seguridad de tu protegido -Expuso Masaki, sacando un cuchillo y colocándolo en la mejilla del castaño para acto seguido rasguñar el rostro de Kunihiro con su cuchillo.
- No hay objetivo si mueres – Dijo el 7710 accionando una bomba de luz, que causó que Masaki y Kunihiro quedarán cegados por unos segundos, en ese momento el soldado, aprovechó para, acercarse y golpear a Masaki en la cara y arrebatar a su víctima no obstante el castaño no pudo alejarse ya que unas esposas estaban ajustadas en la muñeca del rubio y de su objetivo.
Confundido el militar cuestionó - ¿En qué momento él?-
El radical aprovechó el momento, recuperó su lucidez y golpeó al soldado arrancándole el casco, enseguida se dejaron ver sus cabellos negros azulados y sus ojos verdes.
Para Kunihiro el horrible dolor en sus ojos se había disipado y en cuanto los abrió logro ver a su salvador, a quien observó de forma impactada pues... El dulce rostro de su hermano regresó a sus recuerdos, rápidamente el expuso:
-Tetsuhiro.-
Aquella voz causó en el militar quedarse en shock, su sistema y terminales nerviosos hicieron corto al escuchar aquella voz y de manera caótica, recordar su infancia y la separación... ese insólito momento lo aprovechó Masaki para colocar a su presa en su hombro y mientras se lo llevaba la mirada verdosa del castaño observaba como aquel uniformado caía al piso completamente desactivado.
-Suéltame.-
-¿Como supiste su nombre?-
-Bájame, debo ir con él.-
- Él ya no es humano, es una máquina que obedece órdenes y que se desactiva al momento en que lo llamas por su verdadero nombre.-
-¿De qué hablas?-
- ¿Has vivido en una roca?..-
-Ni siquiera sabes de esos militares.-
Kunihiro perdió de vista a su hermano siendo llevado por aquel radical el cual lo sacó de las instalaciones y fue deprisa a una camioneta en la cual el grupo de radicales gritaba.
-¡date prisa Masaki!-
Los demás soldados los perseguían y pisaban sus talones, sin embargo una de las bombas que ellos activaron al estar en su transporte, causó que no pudieran seguirles, escaparon triunfantes con el sujeto de estudios en sus manos.
Los gritos de euforia se podían escuchar en la camioneta mientras, que un chico joven gritaba.-¡Por fin uno vivo!-
-Tranquilo Tomoe.-
- Que mal que no pudimos secuestrar al doctor.-
-Lo sé... fue porque él soldado que protegía a este sujeto apareció.-
-Ni hablar, será para la próxima - Gritó el chofer perdiéndose por la carretera y sometiéndose a un camino rural, para perderse de vista, mientras que Kunihiro escuchaba todo aquello él observaba hacia atrás, miraba el edificio del cual había sido sacado, aún estaba en llamas, observaba con pesar a la lejanía recordando la voz del rubio.
-"El ya no es humano..." -
Atosigado, mareado, agitado, lleno de sudor y de sensaciones sumamente asfixiantes, causaron que hiperventilara y su respiración fuera errática, provocando que perdiera el conocimiento…
Hola si llegaste hasta aca es por que te intereso MUCHAS GRACIAS! NOS VEMOS DESPUÉS.