Kingsman y todas las obras de su universo, no me pertenecen, solamente el argumento.
Gracias a Skandrosita, Beat, Ariakas y Gabby.
Kingsman: Proyecto Unity
Capítulo I
Harry Hart observaba a su discípulo mientras ingresaba a la catedral de San Nicolás en Estocolmo. Aún no terminaba de asimilar todo lo que había sucedido en el tiempo que estuvo ausente.
La traición de Arthur era algo que sabía había dejado a la organización vulnerable, al enfocarse en laa nuevas cabezas de Kingsman y la revisión de agentes. Habían perdido aliados en la última batalla contra Poppy Adams, finalizando con Merlín. Ahora, irónicamente con bajas y nuevos camaradas estaba presenciando la boda de Gary Unwin, mejor conocido como Eggsy.
Harry recordaba brevemente las palabras dirigidas a Eggsy antes de la boda. Y deseó no haberlas mencionado, recordó a cierta agente pelirroja de su pasado que dejó ir.
—Soy casada. —Se alejó del hombre retrocediendo dos pasos.
—Lo sé. —Harry estaba siendo muy paciente, pero esto no podía seguir así.
La mujer se dirigió al sillón del particular estudio del agente Galahad.—No es tu hijo por más que lo desees.
—También lo sé, Morgana… desde esa misión en Francia hace años, lo sabía.
Su compañera frunció el ceño ligeramente y tomó su abrigo.
—No estaré a salvo, ya saben que soy doble agente.
—Estarás a salvo. —exclamó con firmeza. —Te protegeremos de los rusos, yo te protegeré.
—¿Dejarías Kingsman por mi?
—No, y tú tampoco lo harás, tenemos un deber. Somos caballeros.
—Yo estoy fuera, si deseas estar conmigo, te esperaré en la habitación de siempre, iniciaremos desde cero.
Palabras que no pudo cumplir. La vio alejarse sin sospechar que ese mismo día, en el que sacrificó trabajo por lo que tal vez pudo ser amor, terminó con la muerte de la mujer que fue conocida como Morgana.
¡Qué extraño sabor amargo! No debería sentirlo en una boda. No se dedicaba a sentimentalismos, menos en misión; pero ese hombre que alguna vez sacó de la cárcel había logrado en ocasiones perder su característica racionalidad.
Tal vez sería lo más cercano a tener un hijo…
Conocería a los hijos de los príncipes y tal vez tendría la oportunidad de verlos, guiarlos un poco, como a la familia que nunca tuvo.
Cinco meses después.
Galahad terminó de pagar su café y salió de la cafetería a una mesa del exterior. No acostumbraba fumar pero con el clima particular del día, decidió salir un poco de lo rutinario.
Sería uno de sus últimos días libres, varias agencias hermanas de Stateman estaban trabajando por alianzas en diferentes países y los acuerdos, actos de buena voluntad y el intercambio de agentes ayudarían a mantener en control a posibles amenazas.
Abrió el diario que traía bajo un brazo y empezó a revisar los encabezados como era su buena costumbre, hábito automático adquirido desde que ingresó a la agencia.
Elton John había vuelto a retomar su gira del adiós después del secuestro. Una pena, se consideraba buen seguidor de algunos discos pero no al grado de fanático.
En asuntos del mundo no había mucho, solamente la euforia disminuida de los recién casados princesa y duque consorte.
Terminó su café y se dispuso a irse del lugar; la cafetería prácticamente se encontraba a un costado del Acuario Sea Life, frente al Támesis. Una zona bastante transitada y popular para el turismo.
De repente, algo cambió en breves segundos. Al estar por caminar en la acera, vio a una joven mujer caminando en dirección a él.
Delgada, de cabello rubio, de al menos 1.70 de estatura, facciones finas y juveniles, con unos encantadores ojos grandes marrones; se escuchaba bastante fuerte una canción que venía practicando, al parecer llevaba los audífonos en el volumen máximo. Llevaba un abrigo tipo cárdigan y un vestido de falda corta tableada. Unas mallas negras y unos botines con un ligero tacón grueso del mismo color.
Sostenía un engargolado entre los brazos. Y justo cuando aquella visión lo había dejado extrañamente de piedra, la mujer levantó la mirada mientras cantaba y también lo observó. Con una sonrisa leve y ligero rubor su camino le hizo acercarse cada vez más.
Debía tener por mucho 23 años, pero su rostro amable de momento fue de sorpresa y se terminó de transformar en uno de shock.
—¡Cuidado! —alcanzó a gritar mientras jalaba al hombre de los brazos y caían entre las mesas del recién abandonado café.
Harry escuchó a sus espaldas el rechinar de las llantas al frenar de golpe. Algo no estaba bien, no creía que dolor fuese un accidente en el que casi es arrollado.
Se percató de la mujer abajo de él y de la incómoda situación.
—Disculpa.
La chica estaba por responder cuando unos gritos en chino la detuvieron a la par que el ruido de escopetas cortando cartucho.
"Nunca voy a poder tener un día tranquilo" pensó el agente mientras apretaba ligeramente el armazón de sus lentes y abría comunicación con la central.
—Galahad, ¿No se supone es tu día de descanso? —interrogó la recién nombrada Whiskey.
—Problemas en el Támesis. —respondió en voz baja mientras se levantaba y ayudaba a la chica a esconderse detrás de una mesa.
—¿Estás en el restaurante del Hotel Marriott? Muy discreto…
—Dame la ubicación de los agresores. —escribió en la pantalla ocular de sus lentes y después giró para que su colega viera a la chica civil.
—Entiendo, siete sujetos frente a ti, dos se acercan directamente de frente. Tres pistolas, cuatro escopetas. Ten cuidado, detrás de ustedes hay cinco civiles.
—Espera aquí linda. —le dió su sombrilla. —Si llegas a ver disparos, no dudes en abrirlo, confía en mí.
La mujer asintió en silencio mientras observó cómo el hombre salía de un salto de su refugio temporal e iba a atacar a los agresores.
Harry corrió antes de deslizarse por el suelo contra los dos primeros hombres y usando las navajas de las puntas de sus zapatos le dió una patada en la barbilla a uno y al otro en automático lo usó de escudo humano. Con intención de alejarlos de los civiles, siguió usando el cadáver del hombre de escudo hasta acercarse a tres hombres del lado derecho. Los que podía apreciar de inmediato en su único ojo. No supo identificar en que momento los vio desplomarse, giró para buscar al autor y encontró a la misma chica usando el mecanismo de la sombrilla como arma.
La veía con rostro neutro pero no del todo calmada.
"No es una chica común".
Un hombre intentó agarrarla por la espalda, y la mujer levantó en automático los brazos para quitarse las manos del agresor de encima, le dió un caderazo de vuelta, y lo jaló del brazo hasta tirarlo usando su mismo peso. El hombre al caer reaccionó rápido y la tomó de la pierna para tirarla también, pero después de eso obtuvo dos disparos. Harry había detenido al agresor.
Galahad se acercó para tenderle una mano y ayudarle a ponerse de pie.
—¿Quién eres?
—Mejor tú dime quién eres, ¿eres un Kingsman? —señaló el mango del escudo.
—Si la piensas interrogar, que sea después, tienen que salir pitando de ahí, se acercan tres vehículos a toda velocidad. —La dulce voz de Whiskey lo hizo tomar a la chica del brazo y correr a un auto.
—Sería mejor que yo maneje. —señaló la chica el ojo izquierdo faltante del agente. —No serás bueno en una persecución.
Levantó los brazos en signo de derrota y se fue del lado izquierdo del vehículo. Estaba realmente intrigado, ¿quién era esa mujer?
—Debería saber el nombre de mi salvador. —habló la mujer mientras sacaba los cables del interruptor.
—Ya sabes suficiente de mi, en cuanto tenga respuestas, diré más.
—De acuerdo, debería haberte conocido hasta mañana, soy de inteligencia francesa, Dumas. ¿Nos conoces agente Galahad?
—Sastres, licores y ahora libros… algo oí.
El auto dió marcha y la mujer empezó a moverse del lugar a todo lo que daba. —Vas a tener que guíarme.
—Al parque Clapham Commom. —Respondió después de una pausa.
—La estoy buscando. —Señaló Whiskey. —Agente de la agencia Dumas pero en activo en Conan Doyle, nombre clave Cosette, no hay más información, el resto está bloqueado.
—Supongo que no mientes al menos en tu trabajo, Cosette.
—No me sorprende, son rápidos los agentes ingleses. —a pesar de estar en un coche muy pequeño, la chica parecía sentirse conductora de NASCAR.
Harry volvió a darle instrucciones para meterse entre callejones ayudado por la agente Whiskey.
—Tu ya sabías de mi, ¿te enviaron a protegerme?
—No, llevo una semana en el país en otra misión. Este encuentro fue una casualidad. —un disparo rompió el cristal trasero. —Mierda agáchate.
Otros tres disparos se escucharon dentro del vehículo, Harry aprovechó el momento para abrir la puerta del copiloto y lanzar un pequeño obsequio.
Una detonación se escuchó detrás y solo vieron unas llamas a lo lejos; Cosette giró a la derecha, para la entrada principal del parque, entraron con todo y vehículo hacía un apartado de la caseta de mantenimiento, Harry seguía se aseguró de que no eran perseguidos antes de descender por la plataforma.
—Eso estuvo cerca. —Habló Harry por primera vez y giró al escuchar como se quejaba ligeramente la mujer.
Cosette sangraba del hombro izquierdo, solamente se recargó contra su asiento y se cubrió los ojos con el brazo.
—¿Por qué no dijiste nada?
—Entró y salió. —señaló la perforación del cristal frente al volante. —No creo que sea grave.
—No puedes asegurar eso sin que te revise un doctor. —el agente deshizo su corbata y empezó a hacer presión en la herida.
La mujer solo sonrió de lado pese al dolor.
En el descenso, vieron a la agente Whiskey seguida por Champagne.
—Bonito lío hiciste afuera, hijo. —señaló el hombre mientras hacía la seña a dos agentes que se acercaran a ayudar a la recién descubierta colega.
—Se supone era mi día libre. —le contestó con tranquilidad.
—Y que tenemos aquí, a ti te conozco. —señaló Champagne dirigiéndose a la chica. —No va a estar contento de verte…
—Me tiene sin cuidado tu agente. —el tono de fastidio ahora era evidente. —Ya pasaron seis años, que lo supere.
Whiskey y Galahad seguían la conversación como si fuese un partido de Ping Pong.
—Que no los engañe su apariencia juvenil, Cosette no es la niña inocente que creen.
—Tengo un buen currículum. —el equipo médico le colocó una banda parecida a las de gel e inyectaron el material que se encargaba de reparar el tejido dañado. —Un poco rudimentario, voy a necesitar puntadas igual.
—Como parte de la alianza de agencias, Cosette viene con un prototipo de nanotecnología médica, puede ser útil tanto para agencias y en el ramo de los trasplantes.
—Un proyecto caro, si lo quieres llamar así, Champs. —soltó la mujer antes de respingar por la primera puntada.
Unos pasos se escucharon acercarse a las puertas dobles, mostrando a un molesto Tequila.
—¿Qué haces aquí?
—También me alegra verte, Donald.
Los presentes miraron al mencionado.
—¿Te llamas Donald? —Whiskey no pudo contener la risa.
Tequila no hizo ni un movimiento, seguía viendo a la chica siendo curada. La cara de pocos amigos era cada vez más notoria.
—No es muy educado de tu parte, te ves como todo un morboso. —el particular carácter y personalidad de Cosette estaba saliendo a flote. La mujer se quitó la blusa rota para sorpresa de algunos de los presentes que giraron en el acto, mientras Champs y Tequila seguían observándola.
—Te dije que no le iba a dar gusto verte.
—Le haré un resumen al Kingsman y a la chica. —tomó una playera que le otorgaron y se la puso. —Tequila fue el gran perdedor en una misión, pensó que éramos más que amigos.
—¡Me engañaste y robaste toda la información!
—Tienes que ser más precavido, yo iba encubierta y tu ego no es el mejor en tus intentos de conseguir pareja.
El joven solo resopló antes de irse furioso.
—En esa época éramos agencias rivales. —Cosette se puso de pie. —Me voy, nos vemos mañana. Buenas tardes, caballeros, Galahad.
La mujer salió.
—Interesante incorporación. —habló por fin Galahad.
El líder de Stateman despidió al equipo médico.
—No la subestimes, esa mujer es una cerebrito… por eso fue un dolor de cabeza para Tequila. —Champagne se acercó a una computadora, ingresó una contraseña y llave especial. —Ese es su informe parcial, Arthur me va a matar si sabe que les dejé por accidente el expediente abierto para poder descargarlo.
Whiskey de inmediato se acercó y mandó todo por correo.
Harry se dejó caer en la cama, tentado entre el televisor o la tablet, optó por la segunda y abrió el informe de la mujer.
Folio: 344421
ID: 90190318
Afiliación: Dumas.
Alias: Cosette.
Afiliación: Conan Doyle.
Alias: Adler.
Doctora con especialidad en genética.
Especialización en biotecnología y experimentación.
Agente en la Dirección General de la Seguridad Exterior francesa.
Experta en jeet kune do, jiu-jitsu y krav magá.
Conocimiento general en las artes.
Políglota.
Lo interesante eran los períodos, ¿a qué edad ingresó esta chica a ese mundo? Para lograr ser alumna del general Philippe Rondot, mejor conocido como el maestro de los espías, debió entrar a las fuerzas armadas siendo una niña.
Y una niña muy peculiar...
