Notas de autor: Buenas! Llevo tiempo queriendo escribir una historia de tipo paranormal (o lo más cercano que pueda), y después de mucho idear y buscar a los personajes indicados, la historia ha encajado perfectamente con los personajes de Beyblade. Espero sea de su agrado!
Advertencia: Beyblade no me pertenece. Yo no obtengo ningún beneficio por escribir esta historia, salvo el de puro entretenimiento personal.
La historia tendrá contenido paranormal, aun así no entra en el genero de terror (yo? Escribiendo terror? Jaja x3), aunque, se podría decir que esta inspirada en cierta manera por Mikami la cazafantasmas. También habrá contenido shounen ai en un futuro, con la pareja YuriyxKai como la principal. Y quizás un poco de OOC, esto ultimo tratare de reducirlo lo más que pueda, pero es que si hago un fanfic de Kai y Yuriy conservando su personalidad original, sería un largo duelo de miradas xD.
Acepto críticas constructivas, y los flames serán ignorados debido a que soy pyrofobica =3 (desconozco si eso es una palabra, pero da igual)
=INTRODUCCIÓN=
Yuriy Ivanov estaba en problemas. Lo supo desde el momento en que vio la cara de su arrendador volverse tan roja como el propio cabello del ruso. Y lo confirmo en cuanto el viejo saco sin miramientos las pocas pertenencias del pelirrojo directamente en la calle, mientras le gritaba que regresará en cuanto tuviera dinero para pagar la renta.
Definitivamente eso no estaba en sus planes, y desgraciadamente no contaba con un plan B de apoyo, así que sin más, recogió sus cosas del mojado pavimento con la mayor dignidad posible que le permitía la situación y comenzó a caminar sin prestarle atención al camino por donde sus pies lo llevaban.
Se sentía frustrado y con su orgullo herido. Ya llevaba más de tres meses en el país de Japón, y hasta el momento había tenido sólo dos trabajos. Uno le permitió vivir decentemente por mes y medio, pero gracias a un recorte de personal inesperado, fue uno de los primero en salir por su poca antigüedad y experiencia. El siguiente empleo no fue mejor, renunciando a las dos semanas gracias al acoso recibido por su empleadora (lo cual lo había llevado a comprobar que existían mujeres realmente aterradoras y perversas).
Regresando por fin a su actual situación: con sólo 5 dólares en su bolsillo, una pequeña maleta y ningún lugar para pasar la noche.
Suspiro cansado, antes de prestar atención a sus alrededores. Sus pies lo habían llevado a un parque que se encontraba cerca de su ex apartamento. Desde que había llegado a Japón por primera vez, este lugar había llamado su atención, sobre todo por la belleza natural del lugar que le permitía escapar del estrés del mundo moderno.
Pronto encontró una banca, la cual sólo estaba ocupada por un anciano que se encontraba leyendo el periódico, así que tomo asiento justo en el extremo contrario, mientras dejaba que su mente divagara en una solución para su situación actual.
No se percato cuando el anciano se levanto, y sólo reparo en su ausencia al momento en que, gracias al viento, el periódico choco con su cuerpo.
Busco con la mirada al viejo para devolvérselo, siendo en vano su búsqueda. Nuevamente dirigió su vista a las hojas de papel.
"Bueno, que más da, no dejare que se desperdicie" Sin más, se dirigió directamente a la sección de empleos, buscando algo que por lo menos le permitiera llevar el alimento a su boca.
No le tomo mucho tiempo descartar la mayoría de los trabajos (al parecer urgían chicas de "alto criterio" y "mente abierta" para trabajar en centros de masaje*).
"¿Qué clase de periódico compro ese viejo?" Pensó mientras continuaba pasando hojas, hasta que un anuncio en grande llamo su atención.
¿Necesitas empleo y no le temes a nada? ¡Únete a nuestro equipo de trabajo!
Yūrei fairu
"Es cierto, necesito uno, pero esto no da confianza…" Susurro el pelirrojo, inseguro por la poca información que daba el anuncio. Aparte de la dirección de las oficinas y la enigmática propaganda, no había ni un solo indicio sobre que trataba el empleo.
Pero siendo sincero con él mismo, Yuriy necesitaba el trabajo…sobre todo el dinero.
"¡Que va! Si me sale algún loco sólo lo golpeo y ya" Y con aquel pensamiento, el chico tomo rumbo hacia su nuevo destino, dejando olvidado en la banca el periódico.
Al poco rato, una mujer que iba pasando, observo el periódico que estaba a punto de caer al piso. Sin pensarlo lo tomo, dispuesta a depositarlo en los cestos de basura.
"Esta gente, deberían tener más cuidado en donde dejan su basura" Murmuraba enojada la señora, hasta que algo llamo su atención. "¿Quién pagaría por poner un anuncio en blanco en el periódico? De verdad que hay cada persona…"
=.=
Los pasos del ruso resonaron por las estrechas callejuelas, mientras las nubes iban oscureciendo cada vez más el día, presagiando una tormenta. La amenaza provoco que las calles poco a poco quedaran casi vacías, transitada sólo por unos cuantos valientes.
Yuriy no llevaba prisa, además, no servía de nada internar alejarse de la próxima lluvia, ya que no contaba con un lugar en donde vivir por el momento.
"Realmente espero que esto valga la pena" Musito mientras buscaba entre los pequeños locales el no. 2733.
Después de caminar otro tanto, encontró el ansiado lugar, que dicho sea de paso no era la gran cosa. De arquitectura antigua japonesa, al pelirrojo le daba la impresión de que había entrado a un portal del tiempo, y sustituido los grandes edificios de concreto, por esa pequeña construcción hecha de madera, con techo caído, y pequeñas ventanas, adornado todo esto con un anuncio de madera que solo tenía dos palabras: Yūrei fairu.
Despacio tomo la manija de la puerta, un poco dudoso.
"Vamos Yuriy, no seas un cobarde, además ya llegaste muy lejos como para solo darte la media vuelta e irte como si nada" Sin pensarlo dos veces, abrió la puerta, provocando que una pequeña campana sonara.
El aroma a incienso le llego de golpe, mientras estudiaba el lugar. Logro apreciar cientos de objetos, que, a pesar de que no sabía que rayos eran, podía decir que servían para atraer la buena suerte y "ahuyentar la energía negativa"
"Si, sólo las cosas supersticiosas son así de feas" Pensó con ironía. Sin más se acerco a un escritorio que contaba con dos sillas (aparentemente para posibles clientes) y otra justo detrás del mueble.
No tardo en escuchar pasos apresurados, hasta que llego una joven castaña, un tanto agitada.
"¡Buenas tardes! Siento la demora, pero tome asiento por favor, soy Hiromi ¿en que le puedo ayudar?" hablo la joven con una sonrisa, a la par en que ella misma tomaba asiento y sacaba una libreta.
"Vengo por lo del anuncio en el periódico" Contesto algo seco el pelirrojo, mientras tomaba asiento. Realmente no esperaba que alguien más joven que él lo atendiera, así que supondría que ella lo podría llevar con el jefe…
"Ahh claro" Respondió un poco después la chica, mientras observaba fijamente al pelirrojo. "¿Cuál es tu nombre?"
"Yuriy Ivanov"
"¿Y tienes experiencia en el campo?"
Ok, eso si era raro. El anuncio no decía nada acerca de tener experiencia. ¡Para empezar el anuncio ni siquiera decía de qué iba el empleo!
Pero de verdad necesitaba empezar a trabajar.
"Bueno…no mucha"
No pasaría nada si decía una que otra mentira u omitía hechos.
"Oh, bueno, no te preocupes, de hecho, no hay tanto problema, la experiencia sólo te ayuda en reducir riesgos, pero sino, conforme hagas algunos trabajos iras aprendiendo a manejar el asunto"
…Eso definitivamente no había sonado nada bien para el ruso. Y el hecho de que Hiromi no dejará de sonreír no terminaba de alentarlo.
Mientras tanto, la castaña había empezado a buscar en los cajones del escritorio, hasta que por fin saco un pequeño bonche de hojas.
"Ahora vamos a llenar tu contrato"
Así pasaron casi media hora, mientras Hiromi continuaba haciéndole preguntas a Ivanov, para después llenar las hojas.
Pero cada pregunta hecha, constreñía más y más el corazón del ruso.
¿Por qué era importante saber su tipo de sangre? ¿Su signo zodiacal, y eso para qué? ¿Antecedentes psiquiátricos? ¿El numero de un familiar o amigo para informar? ¿Informar en caso de que? ¿Seguro de vida? No, Yuriy no conocía a ningún policía o autoridad judicial… ¿Qué faltaba, que firmara el contrato con su sangre?
"Bueno, ya casi acabamos, ahora sólo falta tu firma" Oh si, el ruso casi podía escuchar a la vida burlándose a carcajada suelta de su desgracia.
Por suerte, la chica le paso los papeles junto con una pluma. Eso fue lo único que evito que saliera como alma que lleva del diablo de aquel lugar.
"Muy bien, dentro de poco te daré tu licencia, eso es sobre todo para darle más confianza a los clientes"
Yuriy la observo con los ojos en blanco. De verdad no entendía nada…
"¡Ah cierto! Se me olvidaba explicarte algunos detalles" Dijo apenada la muchacha, mientras guardaba los papeles en algún cajón. "Veras, los clientes contactaran conmigo, y dependiendo del trabajo que deseen, yo lo derivo con la persona que creo más calificada. Cuando te toque un caso, te mandare un aviso, dándote los datos del cliente, la situación y el tipo de servicio deseado. Tú vas y haces lo que debas hacer. Cuanto el trabajo este concluido, el cliente terminará de pagar el costo, ya que casi siempre da 50% y después el otro 50%. A ti se te dará un 30% de tu parte, y el otro 70% al terminar el trabajo ¿Alguna duda?"
"…." El chico no pudo evitar ponerse azul con cada palabra que abandonaban tan tranquilamente la boca de la castaña.
¡¿En que rayos se había metido?
"¡Si lo se! Parece algo complicado, pero créeme que así nos evitamos muchos problemas, sobre todo porque luego hay clientes que ya no quieren pagar, y ya sabes, eso no es bueno para el negocio" Comento la chica, ajena a la angustia que rodeaba al pelirrojo.
Yuriy estaba a punto de gritar a todo pulmón, exigiendo una muy buena explicación, pero fue interrumpido, por el tintinear de la campana, anunciando la llegada de una nueva persona.
"Buenas tardes Kai, veo que ya terminaste el trabajo. ¿Qué tal te fue?" Saludo la muchacha al recién llegado, al cual Yuriy detallo de pies a cabeza.
Alto, aunque no tanto como él, cabello bicolor, ojos…de un muy extraño color, y complexión casi felina. El chico con cada paso que daba liberaba sensualidad…Y eso no le gusto nada al pelirrojo.
"¿Un nuevo caso?" Pregunto el bicolor, mientras señalaba al otro joven con un gesto de la cabeza (lo que provoco que un escalofrío invadiera al ruso, de verdad que la situación a cada momento se tornaba más rara).
"No, mira, te presento a Yuriy Ivanov, desde hoy trabajara con nosotros" Contesto, mientras señalaba al mencionado, para después centrar su atención en el pelirrojo. "Y él es Kai Hiwatari, nuestro mejor agente"
"Ya veo" Respondió el chico sin prestar más atención. "El cliente vendrá dentro de poco a saldar la cuenta"
"Bien, en cuanto llegue te aviso para darte el resto de tu paga"
"¡Momento!" Grito Ivanov, interrumpiendo la plática de los otros dos. "¡Necesito que alguien me explique que sucede aquí! ¡¿Qué acaso esto es un centro de corrupción de menores?" Porque podía jurar que tanto Kai como Hirmo no pasaban de los 17 años.
"¿De que hablas?" Pregunto desconcertada la chica, mientras veía al ruso como si se tratara de algún bicho raro.
"Te seré sincero. El anuncio no daba ninguna especificación sobre el empleo. Me atreví a venir porque de verdad que necesito conseguir dinero, pero si se trata sobre…sobre tener que complacer a alguien, ¡estoy fuera, no cuenten conmigo!" Termino casi gritando el ruso ante la atónita mirada de la castaña y la infinita seriedad del bicolor.
El ambiente quedo algo tenso después de esa declaración.
"Hn" Pero el silencio fue roto por la aparente expresión de burla de Kai.
"Jajajajajajajajaja" Seguido de la risa de Hiromi.
Y ahí si, definitivamente el ruso creyó que la vida le estaba viendo la cara.
"Estas equivocado, esto no es prostíbulo" Comento la chica. "Creo que fue mi error, debí preguntarte si sabías en lo que te estabas metiendo, pero supuse que si, porque lograste ver el anuncio…"
¿Ver el anuncio?
"Veras, el anuncio tiene un hechizo el cual sólo se activa ante personas que tengan cierto control de su poder espiritual, para que ellas lo puedan leer. Una persona normal sólo vería un anuncio en blanco, por eso supuse que sabías…"
¿Poder espiritual? Ok, ya no sabía que sonaba peor, sí lo del prostíbulo o eso.
"Bueno, que más da" Dijo la chica, quitándole importancia al asunto. "Bienvenido a la Agencia Yurei Fairu: los expertos en controlar sus problemas del más allá".
Notas finales:
Si faltan signos de exlamación, no es mi culpa, es culpa de editor de ff.
*Los anuncios del periódico de chicas con alto criterio y eso, no los puse con el afán de ofender, sino que es más que la verdad. Cada vez que compro el periódico (más o menos cada año) y checo la sección de empleos, esos son los anuncios que más abundan.
Según Google translate Yurei Fairu vendría siendo algo así como archivo fantasma o archivo espiritual…Sip, no soy muy original para los nombres, por eso no invento OC's
El próximo capitulo es el inicio del Primer Arco: Entrenamiento
Espero les haya gustado.