¡Hola a todos! Es bueno estar de vuelta. Vengo con 5 viñetas simples, parte de las celebraciones del primer aniversario del foro I´m Sherlocked. Espero les guste.

Ningún personaje es mío, todos son creación de Sir Arthur Conan Doyle.


1. Demonio alado.

Rara era la ocasión en la que Sherlock aceptaba a salir con John, aun más raro era que Sherlock propusiera salir algún lugar. Así que cuando propuso a John salieran a dar una vuelta al parque el doctor se quedó atónito y después de preguntarle unas quince veces si estaba drogado o si se trataba de un caso y que Sherlock negara a ambos casos rotundamente, John creyó que auténticamente estaba ante un caso insólito que rara vez se repetiría y en cuanto el detective consultor le reiteró que tan sólo quería tomar un poco de aire, el doctor tomó su chamarra negra y salió tras Sherlock, quien caminaba animadamente como si se tratara de resolver un caso.

- Sherlock ¿estas seguro que no vamos a resolver un caso? En otras ocasiones haz experimentado a costa mía para resolver algún caso tuyo – Le preguntó John al momento de que Holmes detenía a un taxi y se subían.

- John ¿qué no es normal que quiera tomar un poco de aire? – Ante ese comentario John frunció el ceño totalmente extrañado – Al parque más cercano por favor.

Bueno era un hecho, si al menos no iban a un lugar en específico por nombre quería decir que tal vez era una simple salida. Una de las pocas que habían llegado a tener desde que estaban juntos.

- John ¿alguna vez jugaste en algún parque? – Le preguntó Sherlock de la nada, ya a punto de llegar a su destino, John volteó hacia Sherlock. El detective estaba con la mirada perdida hacia la ventana.

- Claro, cientos de veces, creo que es normal que todos de niños juguemos en el parque ¿tú no lo hiciste?

- Por supuesto que lo hice, siempre ha habido cosas interesantes en los parques, solamente ya no me he tomado el tiempo para hacerlo.

- ¿Y ahora si hay tiempo?¿Ahora no deseas gastar mis balas contra la pared?¿o sacar sonidos lastimeros de tu violín?

- John, quería pasar tiempo contigo, no es necesario que hagas un escándalo de esto, hemos llegado así que ya bájate.

Ya en el parque, por unos momentos Sherlock casi se arrepiente de haber estado ahí, pero sabía que algunas veces tenía que complacer a John para las cosas entre ellos fueran exitosas. El doctor caminaba a su lado tranquilamente, observando a los niños que jugaban, las familias pasando el rato, los perros y sus dueños paseando, John mirando tranquila y felizmente a todas esas personas. Y Sherlock aburrido, aburrido y aterrado ante tanta normalidad que se extendía por el terreno que pisaba, robándole aire valioso que sus neuronas igualmente valiosas necesitaban para poder estar al en caso de necesidad.

- John – Dijo un poco dubitativo, quería irse de ese lugar en ese instante, pero una vez más se antepuso su pensamiento de la necesidad de John de hacer algo diferente con él - ¿Esto está bien para ti? – Le preguntó cambiando totalmente la pregunta a realizar. John se detuvo y lo volteó a ver.

- Es realmente extraño viniendo de tu parte, pero está bastante bien. No es necesario que hicieras esto, pero lo agradezco.

Ante el éxito obtenido el detective esbozó una sonrisa e invitó al doctor a seguir caminando.

- ¿Algo que quieras hacer? – John alzó la vista mientras pensaba, frunció el ceño y después dijo con una sonrisa.

- Bueno, vamos a sentar detrás de esos arbustos – Sherlock se vio sorprendido cuando John lo tomó por la muñeca y lo llevó dando trompicones hacia los arbustos que le había señalado.

Estando ahí, John se recostó plácidamente. Sherlock se quedó parado a su lado mirándolo seriamente.

- Si íbamos a venir a acostarnos mejor nos quedábamos en casa – John lo miró mientras decía eso, y cuando terminó se comenzó a reír. Sherlock simplemente no comprendía, eso era nuevo para él.

- Bueno al menos siéntate y observa algo interesante para ti – John ya sabía que respuestas darle, ya lo conocía lo suficiente como para poder convencerlo de alguna manera. Sherlock soltó un bufido de resignación y se sentó a una lado de John, quien tenía los brazos cruzados detrás de su nuca observando al cielo.

Todo estuvo en tranquilidad por unos minutos. Sherlock observando las conductas de los perros bien entrenados y el contraste de fidelidad con los perros rebeldes, mientras John tenía los ojos cerrados y pensaba que esos momentos eran maravillosos… hasta que el demonio alado voló cerca de Sherlock. Cuando John escuchó como el detective se levantaba precipitadamente ya era demasiado tarde, el detective había caído de bruces sobre John, sacándole todo el aire.

- ¿Qué se supone que fue eso Sherlock? – Dijo John intentando sacarse a un Sherlock Holmes que estaba aferrado a John.

- ¿Alguna vez haz visto una mariposa de cerca mientras se te acerca? Mycroft tuvo el grave error de traumarme con una en mi infancia. Esa fue la última vez que pise un parque John y es la última vez que lo vuelvo a hacer.

En un principio el doctor no comprendió del todo, pero al ver al insecto alado, de coloridas flores no evito soltar una carcajada. Sherlock Holmes, al gran detective le aterraban las mariposas… aquello era casi un chiste.

- Entonces te dan miedo – Dijo John en forma de burla.

- ¿Qué no es obvio dado el hecho que lo dije? Por Dios John, eres un idiota – Sherlock se levantaba limpiándose el traje, aquello que le había pasado era una mínima pérdida de control. No le volvería a pasar. Pero no notó que mientras se levantaba cinco mariposas de varios colores se paraban en su ropa. John se atacó una vez más de la risa. Se levantó y después de darle un tímido beso a Sherlock comenzó a caminar hacia la avenida, pues sabía que el momento en el parque había termiando.

- Y eres un imán de mariposas – Dicho y hecho, Sherlock se sacudió extrañamente y echó a correr tomando a John de la mano.


Bueno, con esto termino la primer viñeta, simplemente no puedo evitar hacer mis finales con algo de humor. Mañana vengo con la siguiente, espero les guste :D no olviden dejar un review antes de irse :3

Saludos y besos.