1991.
- ¡Mamá! -El grito retumbó por todo el pasillo de la pequeña casa. La pequeña castaña, de unos once años se encontraba sosteniendo el picaporte de la puerta principal- Te busca la señora...
-McGonagall, Minerva McGonagall -La bruja de cabello negro y túnica verde esmeralda la miraba desde su gran altura.
La niña asintió.
-Seguro -Giró levemente su cabeza para gritar sin dejar de ver a esa señora, ya pasada en años- ¡Te busca la Sra. McGonagall!
-¿Quién, querida? -Una señora, casi idéntica a la pequeña niña, se encontraba caminando hacia la puerta de entrada. Se limpió las manos en su delantal rojo de cocina.
-Minerva McGonagall -Interrumpió la bruja a la pequeña niña- Si me disculpa, hay algo importante que debo contarle, Sra. Granger.
