El Infierno de Rei
Prólogo
Tras el fracaso de la Segunda Cruzada, la dinastía Zengida controló una Siria unida y comprometida con los gobernantes de Egipto, que finalmente dio lugar a la unificación de las fuerzas egipcias y sirias bajo el mando de Jedite, que los empleó para reducir la presencia cristiana en Tierra Santa y tomar Jerusalén en 1187.
Estimulados por su celo religioso, los reyes de Inglaterra y Francia pusieron fin a su conflicto para llevar a cabo una nueva Cruzada, ante la muerte del rey de Inglaterra en 1189, Andrew Corazón de León asume el trono inglés y se dispone a dirigir la Cruzada.
La Tercera Cruzada, también conocida como la Cruzada de los Reyes, era un intento de los líderes europeos para reconquistar la Tierra Santa de Manos de Jedah ad-Din Yusuf, conocido como Jedite.
En el año 1191, los Caballeros europeos de la Tercera Cruzada tomaron la ciudad de Acre, a 45 kilómetros de Jerusalén.
Uno de esos Caballeros era una mujer italiana nacida en Florencia proveniente de una importante familia, su nombre era Rei Alhieri, poseedora de una extraordinaria belleza y muy aguerrida y diestra para el combate.
Rei había partido a luchar en la Cruzada, dejando a su prometido Endymion Portinari en su ciudad natal bajo la promesa de casarse y formar una familia cuando ella regresara de la guerra, él era un médico hijo de una familia rica e importante, de quien se había enamorado cuando era una adolescente.
Bajo las órdenes del Rey Andrew, aproximadamente 3000 prisioneros civiles fueron capturados y utilizados como rescate de una reliquia sagrada robada por Jedite.
A medida que transcurría el sofocante verano, Jedite se atrincheraba cada vez más y se negaba a negociar.
La frustración de Andrew era cada vez mayor y permanecía indeciso ante la idea de atacar Jerusalén.
El destino de los prisioneros inocentes pendía de un hilo…
