Hola , está es una historia adaptada de un libro llamado "Greek Gril " de Cindy C. Bennett, naturalmente yo he adaptado la historia a Seddie.
La apuesta
-¿Crees que puedo hacer que él se convierta en un chico malo?
Mi amiga Hannah sigue mi mirada y se ríe. Estamos sentadas en las afueras de la cafetería.
-¿Freddie Benson?-se burla-De ninguna manera, Sam.
-Apuesto a que sí puedo- digo, mordiéndome el labio mientras miro a mi objetivo
-De ninguna manera.
Miro a Freddie Benson y mi sonrisa se amplia. Es tan nerd, con su aspecto de niño bueno. Algo lindo en realidad. Pero siempre tiene su camisa abotonada hasta arriba y es estudiante que solo obtiene "A" a quién todos los maestros adoran. Es algo de la clase Junior… no el presidente sino alguno de los otros cargos que lo acompañan. Es algo distinto a los otro greeks ya que él es… un greek genial, supongo. No usa gafas, ni tiene asma, o pantalones demasiados cortos para él. Pero está firmemente arraigado al escuadrón nerd, siendo un nerd hasta la médula.
-Apuesto que podría- digo, encogiéndome de hombros-. Podría ser divertido
Diversión es algo que necesito desesperadamente. No puedo decírselo a Hannah, pero mi vida se ha convertido en un aburrido círculo de tediosa monotonía. Me levanto, voy a la escuela –abecés- , voy a casa, evito a las personas con las que vivo tanto como es posible, y salgo a hurtadillas los fines de semana para ir de fiesta con mis amigas. A hora tengo que tomarlo con calma ya que el nuevo novio de mi madre es un agente de la anti diversión, quién parece que es capaz de observar todo lo que ocurre a kilómetros de distancia. Aunque me siento incomoda con él, es raro el nuevo novio de mi madre, bueno a comparación con los otros, lo millones y millones que ha tenido antes.
La primera vez que llegue a casa de una fiesta , fui sometida a horas de sermón sensiblero acerca de los peligros de las drogas y el alcohol, es increíble como puede considerarse mi padre. Me castigo, hubiera preferido que me gritara o me golpeara, puedo lidiar con esas cosas, no es nada que no hayan echo los otros novios de mi madre.
-¿Por qué él?-pregunta Hannah-¿Por qué no uno de los otros nerds que están sentados con él?
-Porque-digo lentamente, como si debiera ser obvio para ella-, él no es el típico nerd del montón. Cualquiera de esos otros idiotas alucinaría inmediatamente si otra chica se atreviera a hacer tanto como tocarlo. Pero Freddie Benson es distinto. Es un nerd, ¿verdad? Quiero decir, ninguna de las porristas saldría con él porque no es un deportista , pero todas lo conocen , hablan con él, usan su ayuda para las tareas, lo que sea. Y él es el… tesorero… o algo así de la clase Junior. Él sería un poco más difícil de derribar, un reto mayor y más satisfactorio, ¿sabes?.
Se ríe otra vez. Me mira a los ojos, silenciosamente accediendo al plan.
-Si es que puedes- dice Hannah pensativa -, yo pagare para que te puedas perforar tu labio.
Eso sí que valdría la pena. Actualmente no dispongo que digamos el suficiente dinero para poder hacerme piercing , mi madre nunca me dará dinero y pedírselo a su nuevo novio , sería como condenarme a otro sermón.
-Es un trato-le digo, enganchando los meñiques con Hannah
-¿Cómo vas a explicárselo a tu nuevo padre?- pregunta Hannah.
-Primero Hannah , él no es mi "nuevo padre" , y segundo, cuando me vaya a hacer el piercing abra otro novio de mi madre.
-Pero no vas a ganar usando a este como apuesta- dice, indicando a Freddie con un movimiento de cabeza. Como si confirmara sus palabras, Freddie pone una cara tonta al resto de sus igualmente tontos amigos quienes estallan en tontas risas. Y luego dirige sus ojos hacia Carly Shey, una chica completamente dulce e inocente que se sienta en la mesa de enfrente. Según se, el amor platónico de Freddie es esa chica.
Competencia , ¿eh? Medito.
La observo durante un minuto. Es completamente inconsciente de que la actuación de Freddie fue para ella. Ella está sentada hablando con sus amigas, mientras come su almuerzo. Tiene el cabello largo, liso, negro, lleva un vestido color rosado que se ajusta a su cuerpo. Va con mi hermana Melanie, son idénticas, según sé , Melanie y ella son mejores amigas, las dos tratan bien a la gente.
Es perfecta para Freddie.
Sonrió. Soy su opuesto en todo sentido, pero cuando haya acabado con él, reconocerá a Carly Shey por la fresita que es.
Me pongo de pie y me giro hacía el lugar donde Hannah se sienta aún. Un volante colgado sobre su cabeza llama mi atención. Lo saco con una sonrisa y se lo entrego.
-¿Un baile escolar?- dice, horrorizada.
-Un baile-digo con firmeza- Está noche. Vamos a ir.
Vuelvo a mirar hacia el lugar donde Freddie está sentado, erguido y alto, como corresponde a un nerd de categoría.
-Está noche, comienzo- le digo, alejándome mientras estalla en carcajadas detrás de mi.
Nos presentamos en el baile. Me había vestido con un vestido color negro que tenía, no era nada del otro mundo pero me servía, mi cabello rubio caía en bucles por mi espalda. Hannah por el contrario lleva un vestido color crema ajustado en su cuerpo, se había presentado con su novio Trevor.
Nos dirigimos hacía la esquina donde algunos de nuestro "grupo" permanecen de pie, supongo que planeado como llenar el ponche de alcohol o algo parecido. Cuando llegamos Mario , un amigo , nos saludo
-¿Qué haces aquí Sam? , pensé que no te gustaba este tipo de cosas.- dice.
-Y no me gustan , pero tengo algo entre manos.- digo, mientras observo como Trevor amenaza a Max , supongo que por cualquier tontería.
Mientras esperaba que apareciera Freddie, nos reunimos todos mientras decidíamos a la casa de quién podíamos ir de fiesta está noche. Y está noche tiene que ver un poco con el echo de que conocen mi plan y están aquí para observarme comenzar mi juego.
Las puertas se oyen abrirse y busco a Freddie casi de inmediato.
-Ahí está tu novio- dice Hannah con sarcasmo, siguiendo mi mirada
-Observa- digo, dirigiéndome hacía él. El baile está en pleno desarrollo, adolescentes sudorosos rebotan con el ritmo.
-¡Oye!- grito. Él no mira. Toco su brazo, y se gira, sorprendido cuando me ve a mí frente a él. Probablemente hubiera esperado más una cebra parlante-. ¿Quieres bailar?-pregunto con lo que espero que sea una mirada seductora. Ahora, pienso, es cuando su expresión se llenara de miedo y temerá que le vaya a golpear.
Pero no lo hace.
-Seguro-accede, ignorando a sus amigos que sí tiene miradas de miedo. Estoy sorprendida de que él accediera, pero logro ocultarlo detrás de una sonrisa destinada a hacerlo gelatina. No se vuelve gelatina, aunque si tiene una mirada de miedo y algo de perplejidad en sus ojos, me sigue a la pista de baile y comenzamos a movernos. ¿Se pensara que soy Melanie?
No es un mal bailarín.
Decido dejarlo ir luego del primer baile, la antigua estrategia de "ataque y retirada", doy un paso atrás, dejando claras mis intenciones. Él se sonroja, inseguro de qué hacer.
-Gracias, Samantha- dice
-Sam-corrijo, mientras comienzo a alejarme
El acaba de agradecerme, pienso mordazmente.
Idiota.
Pero me abstengo de poner los ojos en blanco y sonrío otra vez, extendiendo mi mano para darle un apretón a su brazo. Todavía no se vuelve gelatina, pero definitivamente algo cambia en sus ojos.
Mantengo un ojo en él por un largo rato, asegurándome de qué este consciente de ello. Estoy siempre en medio de su línea de visión, siempre observándolo, asegurándome de que esté al tanto de mi atención. Él se vuelve primero en cada ocasión , confundido, y tal vez un poquito nervioso por mi atención inesperada y sin precedentes.
-¿Cómo va el plan?- pregunta Hannah mientras camina hacía mí, observando como Freddie, como una vez más, mira en mi dirección para ver si todavía estoy mirando.
-Lo tengo pensando-le digo
-Lo tienes asustado-me corrige
-Tal vez un poquito-le concedo-. Pero principalmente curioso, creo. Y ya sabes lo que dicen de la curiosidad.
-Él no es un gato, tal vez una gallina, pero no un gato –ríe
-Seguro que sí, todos ellos lo son. Pero hasta una gallina tiene curiosidad.
Ella me dirige una mirada extraña. Estoy apunto de explicar que un animal sin importar su nombre… pero entonces alguien me llama.
-Hola, Sam.
Me doy la vuelta, molesta con quien sea que esté alejando mi atención de mi objetivo, y veo a Seth. Seth es una especie de enigma para mí. Creo que siente algo por mí, pero se niega a actuar. Él es definitivamente mi tipo: Largo y grueso cabello negro, pantalones vaqueros, ojeras, musculoso, creo que hasta salió con una porrista. Usualmente está colocado. Seth es más definitivamente mi tipo.
-¿Qué hay, Shet? – pregunto con desdén, girándose para observar a Freddie otra vez… solo para ver que él estaba mirando en mi dirección, observándome. Le doy una ligera sonrisa; él se sonroja por haber sido atrapado y se vuelve hacía sus amigos. Mentalmente lo comparo con Seth.
Noche y día.
Una canción lenta comienza, e intensifico mi mirada, moviéndome hacia él. Uno de sus seguidores nerd mira significativamente en mi dirección. Obligado, curioso, Freddie se vuelve hacia mi, y trabo mi mirada con la suya, mientras camino hacía él, dejando a Seth y Hannah detrás de mi.
Trevor parece inseguro cuando continuo mi deliberado camino hacía él, pero se pone de pie a medida que me acerco. Inclino mi cabeza hacía la pista de baile en una invitación silenciosa, y él me sigue sin responder. Coloca sus brazos alrededor de mi cintura, con miedo, sosteniéndome a su distancia respetable. Estoy sorprendida por la solidez de sus hombros bajo mis manos.
Me muevo más cerca. Él retrocede un poco.
-Buena canción-digo en voz baja
Sacude la cabeza, indicando que no puede oírme. Me inclino hacia él y, con miedo de estar siendo grosero, se inclina para escuchar lo que estoy diciendo.
-Me gusta está canción.- digo, aunque nunca antes la he oído y no tengo idea de quién está cantando.
-Sí, a mi también- dice él, y me aferro con firmeza, sin permitir que retroceda de nuevo. Una vez más, tenebrosa de estar siendo descortés, no me aleja, aunque está rígido. Es tan nerd.
Huele bien, limpio.
Tan pronto como termina la canción, sus manos caen. Yo me sostengo un poco más, y luego dejo que mis brazos se alejen lentamente, rozando su pecho, lo que provoca ese cambio en sus ojos otra vez.
-Gracias- le digo con voz ronca, inclinándose en su dirección nuevamente, ganándole en cortesía , cosa que le sorprende viniendo de mi, pero mi agradecimiento no es igual al suyo y él lo sabe.
Me doy la vuelta y camino hacía mis amigos, oscilando las caderas un poco.
-¿Todavía está mirando?- pregunto
-Oh, sí- dice Beth.
-¿Qué le hiciste? – Pregunta Hannah- . No se ha movido. Parece…
-… un cachorro enfermo de amor.- Terminan juntas, rompiendo en carcajadas.
Seth no parece feliz. Oh, bueno…si te duermes, pierdes. Ahora tendrá que esperar su turno por que a hora tengo que enfocar toda mi atención en mi nueva meta. Y el premio, agrego mentalmente, colocando un dedo sobre mi labio desnudo. Me vuelvo a girar para ver a Freddie, quien todavía está mirándome, con la apariencia de estar en shock. Todavía estoy tocando mi labio, y sus ojos se enfocan en está acción. Le sonrió dulcemente pero con una pequeña trampa en ello en buena medida.
Esto parece descongelarlo, y se gira alejándose rápidamente. Lo observo mientras va donde están sus amigos y dice algo de forma urgente. Todos ellos están sorprendidos y hablan un poco frenéticamente. Pero él sacude su cabeza con firmeza y se aleja mientras ellos lo miran confundidos. Cuando se acerca a la puerta, me mira. No parece feliz. Antes de que yo pueda sonreír, da la vuelta y se va.
Una lenta sonrisa cruza mi rostro.
