Me encanta tu sonrisa, ese brillo travieso que aparece en tu mirada cuando haces una broma o una travesura y provocas las risas de todos.

La curiosidad que sientes por lo que te rodea, la auténtica preocupación que brilla en tus preciosos ojos azules cuando ves a alguno de tus seres queridos tristes, preocupados o decaídos.

Me encanta que siempre estás aquí cuando te necesitamos, que nunca nos dejas solos. Que seas tan tierna, dulce y bondadosa a pesar de todo lo que has vivido.

Te doy las gracias, gracias por traer la luz, la risa y la felicidad a mi vida; gracias por ser mi familia y no permitir que me quede solo de nuevo.

Te amo princesa.