Aspectos

Lacio. Morocho. Así era el pelo de Pansy Parkinson aquel día. Tan... normal.

Ella detestaba su cabello. Desde los mechones que se deslizaban por su mejilla impidiéndole ver con claridad hasta el negro intenso que la hacía parecerse a él. San Potter. Pansy, a contrario de lo que muchos podían pensar, no era estúpida. Y sabía que Draco no la soportaba cuando llevaba el pelo así. Es por eso que se lo cambiaba continuamente: una semana colorado, otra celeste, otra violeta... rosa nunca. Esa era una de las reglas, pero su novio (como a ella le gustaba llamarlo) nunca le había explicado porqué.

Cada mañana la misma rutina. Se despertaba temprano y caminaba lentamente hacia el baño (contaba con el tiempo justo si quería terminar conforme). Se paraba frente al espejo y se visualizaba distinta. Pero no demasiado; sus rasgos no debían parecer operados. Luego un par de muecas raras y listo. Pansy Parkinson era otra.

Porque Pansy Parkinson era metamorfómaga. Porque ella y Theodore Nott eran la misma persona.