Este fic participa en el reto "Cuatro Navidades" del foro Draco Dormiens Nunquam Titillandus. Ninguno de los personajes mencionados me pertenecen, lamentablemente son de la propiedad de J.K. Rowling. :(

Los personajes que me tocaron fueron: Dorea Black, James Potter, Ernie Mcmillan y Molly Weasley II

Sin Más preámbulo, la historia:

Dorea Black

Dorea Black miró por la ventana de su mansión. Corría el año 1960, y esa Noche Buena prometía ser protagonista de una de las mayores nevadas en décadas. La señora Black, que hacía unos años había cambiado su apellido a Potter y su estado civil a "casada", tocó su vientre con dulzura, con anhelo. Cinco meses atrás había recibido la noticia de que iba a ser madre.

Su esposo, Charlus Potter, había quedado tan impactado que parecía hechizado por un petrificus de lo quieto que estaba. Pero cuando se recuperó, tomó a su esposa en brazos giró y giró hasta que ambos cayeron (mareados) sobre la cama matrimonial, respirando agitadamente. Su primer hijo... Ambos sabían que no iba a ser fácil acostumbrarse a ser padres, pero podrían con ello. Siempre que estuvieran juntos.

Dorea volvió la vista hacia el interior de la sala en la que estaba. Iba a ser el dormitorio del bebé. Del bebé o de la bebé. No sabía cuál de los dos iba a ser todavía, no quería matar la sorpresa. Pero eso no impedía hacer apuestas acerca de que sexo tendría el bebé. Nada de eso. Al contrario, era frecuente ver a Charlus diciendo que iban a tener una hija, una preciosa hija igualita a su mamá, mientras que Dorea mostraba su clara preferencia por un varón, aunque al final fueran a querer a su hijo fuera lo que fuera.

La señora Potter merodeó por la habitación unos minutos más, con paso lento y comedido, antes de que una elfina domestica fuese a avisarle que la cena estaba lista. Cuando estaba a punto de salir, se encontró con un papel prolijamente doblado en el piso frente a sus pies. Con cuidado lo tomó y leyó la frase anotada en el. Una sonrisa pícara adornó su rostro mientras replicaba en un grito que seguro iba a escuchar su destinatario: "¡No va a ser una niña, Charlus!. Deja de insistir"


Ojalá les haya gustado! Las sexies Pottericas dejen review, porfis! Como regalito de Navidad!