Disclaimer: Los personajes son de Rowling, claro que no son míos… porque aunque ya me resigné al tedioso "19 años después"… va ya no sigo, que si no les spoileo todo el libro solo con el Disclaimer

Summary: "Draco la besó, y Hermione solo atinó a darle una fuerte cachetada en su mejilla derecha antes de perderse entre los estantes de la biblioteca con toda la dignidad que le fue posible"

Te lo dije

Hermione revisó por décima cuarta ves su ensayo de pociones, quería un "Extraordinario" en esa tarea, y no importaba el costo.

Pensó que tal ves podría agregarle algo de información, así que se dirigió hacia la biblioteca.

Al llegar caminó directo a donde –sabía de antemano- se encontraban todos los libros referentes a pociones.

Buscó entre los estantes, hasta que encontró el que buscaba, desgraciadamente estaba muy alto para su baja estatura. "¡Diablos! ¿Dónde está la maldita escalera cuando se la necesita?"

-Necesitas ayuda Granger? – preguntó detrás de ella una vos que arrastraba las palabras. No necesitó girarse para saber que quien le hablaba era nada más ni nada menos que el grandioso Draco Malfoy.

No estaba de humor para discusiones infantiles, así que decidió ignorarlo. Había leído en algún lado que eso es lo que más le molesta a las personas como Malfoy, ser ignorados.

Al parecer ese tonto libro de psicología muggle estaba en lo cierto, porque cuando el rubio notó que Hermione se iba sin siquiera dirigirle la palabra, la tomó bruscamente del brazo y la acorraló contra uno de los estantes, haciendo que un par de libros cayeran del otro lado.

-Que diablos te pasa Malfoy!? – exclamó Hermione, sin recordar que estaba en una biblioteca, no en un campo de Quidditch.

Sin importarle nada, Draco la besó, y Hermione solo atinó a darle una fuerte bofetada en su mejilla derecha antes de perderse entre los estantes de la biblioteca con toda la dignidad que le fue posible.

Desde las sombras apareció la figura de Theodore Nott, con una maliciosa sonrisa.

-Te dije que a la Sangre Sucia no le agradaría – dijo con toda la indiferencia que pudo aparentar, al tiempo que Draco se quedaba mirando con recelo el lugar por donde la castaña de pelo enmarañado había desaparecido.

-Yo no tengo la culpa de que ella sea la única anormal en Hogwarts, y mucho menos que reaccione así ante un simple beso – siseó enfadado Draco.

-No me importa quien tenga la culpa, gané la apuesta. Me debes 100 galleones – Nott se fue por donde vino cuando Draco le entregó el dinero.

Esa Sangre Sucia se las pagaría, había perdido una apuesta por su culpa!

Nota de Autor: Err… se que muchas querrán matarme por el poco romanticismo, y porque Draco es un completo patán que solo le interesa ganar su bendita apuesta, y porque Hermione sigue siendo la misma empollona de siempre que –al menos yo- detesto, pero es un fic, no una propaganda cursi de San Valentín.. así que confórmense

Miley