N/A: esta es una serie de historias cortas de nuestros adultos favoritos, me refiero a Giotto, Isabella, Alaude, Asari, G, Lampo, Knuckle, Primo, Cozart, Elena, Deamon y más de este singular grupo. Estas historias se encuentran dentro del universo de Ojos Ajenos y cuentan algunas anécdotas de estos jóvenes durante sus años de preparatoria y universidad.

Crónicas de unos viejos adolescentes…

¡Por qué los adultos alguna vez fueron jóvenes!

By: Kyomi120500

Historia 1:

Lunares

Corría por los pasillos presurosa en su huída en busca de algún refugio que le salvara de su tutora. Casi podía sentir los pasos detrás de ella y con ello aceleraba el paso mientras buscaba con la mirada algún salón vacio, porque conociendo la reputación de Lal era bastante probable que algún compañero suyo acabara por delatar su escondite. Entró a su salón, un sitio muy obvio pero al serlo quizá sería el último lugar donde su maestra la buscaría.

Había enfrentado retos que podrían provocar la muerte de muchos: peleado con bestias con las manos desnudas, soportado venenos, pasado trampas mortales… situaciones de donde pendía su vida de un delgado hilo ¿Qué era aquello que Isabella no se encontraba dispuesta a hacer?

-¿Is-chan? –llamó una voz de soprano detrás de ella.

La habían sorprendido poniéndole los pelos de punto y rápidamente se lanzó a su amiga rubia para que callara, estaba segura que Lal podría distinguir su nombre a diez kilómetros de distancia.

Llevó su dedo a sus labios en señal que guardara silencio y Elena captó el mensaje de inmediato. Luego la pelirroja le soltó.

-¿No deberías estar con el resto para ensayar la obra? –preguntó con voz muy baja.

-Yuck –fue la simple respuesta que recibió de su amiga, un gesto que demostraba lo poco entusiasta que se encontraba con la idea de ser la protagonista - ¿Cenicienta? ¿Cenicienta? –murmuraba con un tono sombrío como si fuera un cruel hechizo que se cernía sobre ella-¡Somos ya unos adolescentes! ¡No somos unos críos para escoger Cenicienta como obra para el festival cultural! –reprochaba mientras rechinaba los dientes –Ele-chan, a ti te pegaría mejor el papel ¿Por qué no pruebas…?

-Perdón –interrumpió a su amiga - pero soy tesorera del consejo estudiantil, y ahora que no tenemos vicepresidente estamos repletos de trabajo, y no ayuda mucho que Primo se haga el tonto para ir a coquetear con las mujeres –porque no era un secreto que el moreno era el hombre más codiciado por las mujeres de la escuela –además si Deamon fuera el príncipe, ten por seguro que sería yo quien te arrebatara el papel –dijo con una sonrisa que hizo sudar frío a la pelirroja porque conocía lo tan atemorizante que podía ser la rubia con respecto al peli índigo. Isabella aún no entendía mucho por qué su amiga estaba tan enamorada de ese pervertido pero la dejaría estar.

-Además Alaude también le toca el protagónico, muchas matarían por estar en tu lugar –sólo recibió como contestación una cara con gesto nauseabundo. Elena rió para sus adentros, aquellos eran tan parecidos que no congeniaban por la similitud de sus temperamentos, era como ver dos bestias que se enfrentan por el dominio y control de sus territorios.

-Por cierto no llegaste a la primera hora… -recordó un poco preocupada Is –¿pasó algo? El profesor dijo que estarías en el hospital y… -dijo nerviosa. La chica nueva transferida desde Italia era la primera amiga de Isabella pero al ser la primera la pelirroja dudaba acerca de cómo comportarse con alguien tan elegante y amable como ella: era completamente su opuesto.

Elena vio el nerviosismo y la genuina preocupación de su amiga por lo que sonrió y trató de calmar a Isabella.

-Descuida, son simples chequeos médicos. Es… algo así como una costumbre en mi familia… ya sabes –le respondió aliviando a la pelirroja –por cierto ¿está bien que te ocultes aquí? Es muy obvio este sitio –preguntó.

-Descuida yo… -pero detuvo sus palabras al distinguir con su fino oído unos pasos bastantes familiares –¡Diablos es ella! –dijo entrando un poco en pánico –necesito salir de aquí –dijo mirando cualquier salida o escondite pero era inútil.

Rápidamente fijó su vista en la ventana… sí, era una locura estando en el tercer piso pero se quedaba sin opciones.

-Isabe… -dijo pero se calló de inmediato al ver a su amiga desaparecer por el marco de la ventana.

Estaba a punto de soltar un grito de terror al ser testigo de tan shockeante escena pero la pelirroja le llamó desde un sitio cercano.

-Shhh, Elena estoy bien. Asegúrate de que Lal se marche y subiré de nuevo –dijo desde un lugar la pelirroja.

Elena se acercó a la pared y vio a su amiga colgada desde una saliente… ella era lo bastante desquiciada como para pensar en semejante plan.

Antes de que pudiera replicarle por semejante idea la puerta corrediza se deslizó con violencia revelando a la atemorizante maestra de Isabella: Lal Mirch.

-¿Dónde está Isabella? –preguntó exigiendo a la rubia que le revelara la ubicación de la pelirroja.

-N-no lo sé –respondió pero no logró convencer a la peliazul.

La adulta revisó con la mirada el sitio y abrió algunos armarios en busca de su escurridiza pupila. Haría de su entrenamiento todo un infierno si no se daba aparecer pronto.

-¡SI NO TE MUESTRAS HARÉ TU DE ADIESTRAMIENTO EL DOBLE DE DURO! –amenazó en voz alta.

-¿Lal? ¿Qué haces aquí? –Isabella reconoció la voz de su letal maestro de inglés: Colonello.

Ahora recordaba, las clases empezarían en un par de minutos y ella no se vería forzada a seguir huyendo de la peliazul.

-"Bien Colonello, haz tu trabajo de profesor y ¡corre a Lal!" –pensaba aún colgando de la saliente.

-Vine para llevarme a Isabella –respondió.

-Bien, aquí no está… -dijo lo obvio pero antes de pedirle a la mujer que saliera del salón ya que la mayoría de los alumnos ya habían ingresado, ésta astutamente pensó…

-También me gustaría quedarme a ver tu clase, una vez me invitaste pero no me he dado el tiempo –mintió descaradamente.

-"Por favor, nadie creería semejante…"

-Por supuesto Lal, será un gusto tenerte aquí –respondió Collonello bastante entusiasta al tener a la malhumorada maestra cerca suyo.

Por su parte, una gota caía de la frente de Isabella, aún colgado. Maldecía internamente al blondo por no darse cuenta que Lal sólo pensaba en tenderle una trampa a ella y no quererle oír toda una hora. De sus ojos salían cascaditas tratando de resistir la situación pero era obvio que al sentir sus brazos entumecidos, debía buscar cómo bajar de ahí y pronto.

Miró hacia abajo buscando alguna forma de descender usando resquicios, cómo si se tratara de una pared de rapel y para su sorpresa se encontró con un balcón justo abajo suyo. Sus ojos se toparon con unos fríos ojos dorados… había un moreno quien leía un libro calmadamente, o eso hacía por que ahora su vista se fijaba en Isabella sin ninguna expresión.

-"Perfecto, debe hacerle gracia que esté colgando de aquí desde hace quince minutos" –la tentación por agarrarlo a golpes era fuerte, pero debía guardar una compostura al trabajar para Vongola… eso le había dicho Reborn y Lal, así que reunió toda su fuerza y sonrió al moreno.

-Disculpa ¿Podrías hacerte a un lado por favor? No puedo seguir por mucho tiempo de esta manera –decir "por favor" era todo un suplicio para la pelirroja pero todo por los malditos modales en esa escuela de niños ricos.

El moreno seguía mirándola fijamente con el semblante serio poniendo un poco nerviosa a Isabella.

-Lunares- sentenció tras un largo silencio, obviamente la palabra dejó confunsa a la pelirroja –pensé que estábamos en la era Heisei y no en la Shôwa* –suspiró regresando su vista al libro como si lo que sea que haya visto le haya causado un gran pesar –las mujeres de hoy deberían traer ropa interior más sexy.

-…- ahora la confusión se había ido siendo arrastrada ahora por la gran tormenta que crecía en la pelirroja. ¡Al diablo los modales! Ese imbécil no se irá sin un castigo.

-¡MUERE! –fue su grito de guerra mientras el moreno sólo veía una patada cayendo a toda rapidez contra su rostro…

Lección del día número 1: no insultes la ropa interior de una mujer, más si es una bastante agresiva.

Lección del día número 2: no grites si es que tratas de escabullirte de tu maestra. Las consecuencias podrían ser funestas si te encuentra apaleando al moreno que es el presidente del consejo estudiantil.

Continuará…

N/A: una cortita historia que se me ocurrió pero no había subido por qué no daba con la usb.

Para mis lectoras que me han seguido este tiempo siento no haber actualizado pero tengo razones de peso que en los siguientes cap de mis otros fic´s explicaré. Sólo pido un poco más de paciencia porque entre esos contratiempos está que mi compu se haya llevado un golpe bastante feo y ahora esté en rehabilitación como su dueña (historia que contaré más tarde). Mientras subo esto como un consuelo y que sirva para amenizar la espera.

Sugerencias de cómo tortu… ejemm de cómo quieren ver a estos adolescentes son bien recibidas. En proceso se encuentra un festival cultural, un campamento, vacaciones de verano, la primera borrachera y un día de san Valentin muy peculiar (esta última creo que será la primera en salir). Si tienen otra idea escríbanla en un review.

Me despido chao chao ^^