Disclaimer: Naruto no me pertenece, es propiedad de Kishimoto Masashi.

Palabras: 262.

Summary: No importaba cuantas veces la abrumaran esas pesadillas.

Sakura's Lullaby

— Sakura… Gracias — Y todo se volvió oscuro.

Una delgada columna de luz de luna se filtraba en la pequeña y oscura habitación. Arrugó la frente mientras gotas cristalinas rodaban por ella. A pesar de que habían pasado años, sus sueños volvían a hacer de las suyas, torturándola al revivir ese momento una y otra vez.

Se revolvió en las sábanas, otra vez no volvería a dormir. Se levantó con pereza y como todas las noches bajó a la cocina. Infantilmente seguía creyendo que sus pesadillas desaparecerían con un vaso de leche como tantas veces le había contado su padre cuando era pequeña.

Volvió a la cama dispuesta a conciliar el sueño, a la pasada tomó su osito de peluche. Lo abrazó mientras sentía sus ojos humedecerse. Y una vez más lloró, lloró como cuando tenía doce.

Una silueta se asomaba por la ventana mirándole con un deje de tristeza. De un brinco se introdujo en la habitación, la pelirrosa se estremeció con la corriente helada que entró junto con el chico. La abrazó, como todas las noches, y Sakura se sintió protegida en su cálido agarre. Era un abrazo fuerte, pero sin llegar a hacerle daño.

El rubio comenzó a tararear una dulce nana, ella por su parte se aferró con más fuerza al peluche. No se percató cuanto tiempo escuchó la melodiosa canción de cuna que Naruto le había compuesto antes de caer rendida.

No importaba, no importaba cuantas veces la abrumaran esos sueños, sabia que la nana que Naruto le cantaba la alejaría las veces que fuera necesario.

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Chase