Hola!, es mi primer fanfic después de mas de 2 años sin escribir nada!, estoy algo nerviosa jaja, esta vez lo hago de una de las parejas que mas me han obsesionado ultimamente, espero les guste y prometo terminarla esta vez!.

(No se bien si es necesario hacer esto pero por si las dudas) Hora de aventura y sus personajes no me pertenecen.

La historia esta en una época de antes de la historia que conocemos, y se me ocurrió escuchando la canción de "a thousand Years" de cristina perri, aunque originalmente fue pensada en Crepúsculo (¬¬) a mi me pareció perfecta para Marshall quien si ha vivido mil años!.


Capitulo 1: El comienzo.

-Marshall- Se escuchaban los gritos de Elizabeth quien era una mujer de cabello negro, largo y lacio. Ella vestía un perfecto he impecable traje color gris y una camisa negra, era bastante delgada por lo que sus trajes siempre eran muy ceñidos -Marshall sal ya y haz tu equipaje antes de que a mami le de un ATAQUE!- Gritaba subiendo cada vez mas la voz hasta que sonaba como una completa histérica.

-Marshall, no, no quiero que te vayas- Decía con preocupación una pequeña niña de 5 años con cabello largo y rubio y unos grandes ojos azules.

-No te preocupes Fionna, no nos encontrara y yo no pienso salir de aquí hasta mañana y para entonces será muy tarde para abordar el avión y no podremos irnos- Dijo el pequeño Marshall de cabello negro, piel blanca y ojos verdes, tenia unos 8 años de edad.

-De acuerdo- Dijo la pequeña Fionna, paso un largo rato de silencio el cual fue roto por Fionna que dijo- Ya no escucho los gritos de la bruja debió irse a buscarte fuera- Diciendo esto causo mucho risa en el pequeño Marshall al que siempre le divertía que le dijera "bruja" a su loca madre y contagiando con su risa a su rubia amiga.

La risa de los niños causo que la mujer de cabello negro los escuchara y descubriera que estaban escondidos dentro de la bañera del baño de la planta baja.

-AJA! Te encontré pequeño monstruo- Dijo Elizabeth mientras sacaba a Marshall de su escondite jalándolo de la camisa, lo que causo que Fionna corriera y mordiera la pierna de Elizabeth para que esta soltara a Marshall, la cual ni se inmuto y solo dijo –Marshall lleva a esta niña a su casa, es muy tarde y sus padres deben estar preocupados, después regresa, he inmediatamente HAZ TU MALETA!- Grito eso ultimo en la cara del niño antes de soltarlo, liberarse de la niña y salir del baño con una sonrisa triunfante en su rostro, ella sabia que una vez que le decía de frente las cosas a su hijo este no podía desobedecerla, por la promesa que le hizo a su padre antes de morir hacia ya unas 3 semanas.

-Lo siento Fionna, vamos, te llevare a casa- Dijo el pequeño Marshall ayudando a levantar a la rubia que estaba tirada en un rincón del baño donde Elizabeth la había aventado al liberarse de ella.

-NO! Marshy no quiero que te vayas- Gritaba Fionna mientras abrazaba fuertemente a Marshall.

-No será tanto tiempo, regresare en menos de un mes, por favor no llores, sabes que ya no hay nada que pueda hacer, ahora cálmate y vamos a llevarte a casa, por que Elizabeth tiene razón tus padres deben estar preocupados- Después de decir esto, Marshall tomo de la mano a Fionna y se dirigió hacia la casa de esta, la cual solo era a 2 casas de distancia, por la cercanía de sus casas la rubia pasaba la mayoría de las tardes en casa de Marshall, hasta que su padre falleció en un desafortunado accidente , lo cual causo que Elizabeth, la madre de Marshall, enloqueciera. (Mas de lo que ya estaba pero al menos antes era amable).

-Ya llegamos, vamos te ayudo- musito Marshall mientras ayudaba a subir a la niña por el muro del patio trasero , siempre entraban por ese lugar cuando era un poco tarde, para evitarse problemas con los padres de Fionna que aunque eran muy cariñosos también eran muy estrictos.

-Gracias Marshall- dijo Fionna mientras abría la puerta trasera de su casa y en ese momento ambos niños escuraron:
-Noticia de ultimo minuto, se ha reportado que el país XXXX lanzo una amenaza de bomba a YYYY lo cual hizo que el país contraatacara lanzando misiles en contra de aviones de XXXX , aun no hay informes de que haya sido lanzada una bomba nuclear pero todo esto nos leva a preguntarnos, Que pasara con el mundo?, que decidirán los lideres de ambos países y que harán al respectos los representantes de la ONU?, seguiremos informando.- El sonido provenía de la tele del salón donde los padres de Fionna veían las noticias con notoria preocupación, ya habían rumores de que una guerra nuclear podía dar inicio muy pronto pero nadie se imagino que seria TAN pronto.

-Que vamos a hacer Jack? Nuestra hija aun es muy pequeña, porque el mundo debe acabar ahora?- Dijo Charlotte la madre de Fionna llorando mientras abrazaba a Jack su esposo y este la consolaba.

-Marshall, no te vayas, no me dejes, no ahora, tengo miedo- Dijo la pequeña abrazando a su amigo mientras unas cuantas lagrimas salían de sus ojos.- Y si no volvemos a vernos?, y si lanzan las bombas?, no quiero morir Marshy!.-

-No te preocupes, nada pasara- Decía el Marshall intentando consolar a Fionna a pesar de que el también estaba asustado y a punto de derramar algunas lagrimas- Pase lo que pase yo estaré contigo, solo me iré un mes, regresare rápido y todo será como antes, ya lo veraz- Decía mientras veía a su amiga con una gran y falsa sonrisa en su rostro.

- Y si lanzan las bombas y mis padres mueren?, que voy a hacer Marshy?- Dijo la pequeña Fionna sin creerse mucho las palabras de animo de su amigo.

-Si eso pasa yo te protegeré, te juro que te protegeré siempre Fionna- Dijo Marshall abrazando muy fuerte a Fionna.

12 años después

-VAMOS! Corran rápido- Decía un hombre que lideraba a un numeroso grupo de humanos que huían de las bestias mutadas por la radiación causada por la guerra, entre ese grupo de gente corría también una hermosa chica rubia de 17 años, quien de vez en vez mataba a una que otra bestia pequeña que se acercaba a intentar alimentarse con ellos.

-Fionna deja a esos pequeños monstruos y corre con mas cuidado, puedes caer- Dijo una mujer de unos treinta y tantos años que corría con el grupo de humanos.

-No te preocupes jane, sigue corriendo, yo estaré bien- Dijo Fionna antes de atacar con su espada a un monstruo que parecía una araña.

Sin que nadie se diera cuenta Fionna fue goleada por la bestia araña y perdió el conocimiento bajo un árbol, después de algunas horas Fionna despertó con algo de doler de cabeza, pero el dolor le duro poco al ver que casi llegaba el anochecer y todos sabían que no era muy buena idea estar en medio del bosque durante el anochecer, por lo que decidió buscar un refugio ya que le era imposible regresar al suyo antes del anochecer , vago durante unos 20 minutos hasta que finalmente encontró una pequeña cueva escondida tras unos arbustos, decidió entrar con una antorcha en la mano, para asegurarse de que no había nada peligroso dentro de la cueva. Comenzó a caminar dentro de la cueva y todo parecía normal hasta que sintió una ráfaga de viento detrás de ella, volteo algo asustada hacia donde provenía el ruido pero no vio nada por lo que decidió adentrarse un poco más, pero antes de llegar a el final de la cueva una mano extremadamente fría toco su hombro.

-Que haces en mi cueva?, Vienes a servirme de desayuno?- Dijo una voz algo sensual pero siniestra antes de aventar a Fionna contra uno de los muros de la cueva.

La humana toco su cabeza he hizo un gesto de dolor, abrió los ojos para descubrir que aquella voz terrorífica pero a la vez familiar le pertenecía a un chico extremadamente blanco, pálido pero hermoso (a su manera) de cabello negro, lacio, ni corto ni largo, la chica no tardo en reconocerlo.

-Ma… Marshall?- Dijo la rubia algo confusa puesto que no había duda ese extraño chico era un vampiro.

El vampiro pareció sorprenderse un poco pera luego poner cara de confusión y luego de nuevo de asombro, pero no duro mucho ya que rápidamente regreso a su cara de poker de siempre.

-Fionna?, eres tu?, debo estar soñando- Dijo antes de rascarse la nuca- No, no estoy soñando, eres tu, como es que no estas muerta?-

Fionna se sentía muy confundida llevaba mas de 10 año creyendo muerto a Marshall su mejor amigo y primer amor, bueno aunque no era como si estuviera del todo vivo, ahora era un vampiro, y parecía uno muy fuerte, los dos chicos no dejaban de verse con confusión, hasta que Fionna finalmente hablo.

-Marshall… no… no se que decir- El vampiro se estaba preparando para la misma reacción de siempre, gritos de horror y ver a todos correr por su vida, seguramente la rubia no seria la diferencia –Es solo que me alegro tanto de verte- Dijo Fionna justo antes e arrojarse a los brazos del vampiro sollozando- No sabes lo horrible que fue creerte muerto… aunque ahora eres un vampiro.

Después de unos segundos Marshall aparto a Fionna de el y se alejo dándole la espalda, bastante confundido por la forma de actuar de la chica humana.

-Que fue lo que paso?, por que … por que no regresaste a buscarme?, yo crei que tu… te espere por años!- Grito Fionna.

-Yo también te creí muerta… y era solo un niño!, que querías que hiciera?, no había nada que yo pudiera hacer Fionna!, uff, no estoy de humor ahora para reencuentros y cursilerías de este tipo, hazme el favor de irte de aquí antes de que vuelva… y no se te ocurra regresar nunca! O en verdad te convertirás en mi almuerzo- Marshall dijo esto y salió de la cueva flotando a una gran velocidad y dejando a su vieja amiga muy sorprendida por su actitud, vaya que había cambiado con los años el viejo Marshy nunca le hubiera gritado y menos corrido de algún sitio, pero Fionna no se daría por vencida, necesitaba saber que había pasado, y ahora que sabia que su viejo amigo no estaba muerto no estaba dispuesta a dejarlo ir así como así, por lo que la humana decidió esperar en la cueva pese a las advertencias del vampiro.

Fionna se dejo caer al piso y estaba apunto de llorar pero rápidamente abrazo sus piernas y se contuvo, ella había prometido hace mucho no llorar mas y sobre todo si era por causa de Marshall, aunque claro cuando hizo esa promesa nunca pensó que lo volvería a encontrar y menos convertido en un vampiro. Fionna sabia que si salía de la cueva seguro seria una muerta mas y que lugar mas seguro que la cueva de un vampiro? Bueno, claro que eso solo aplica si eres un vampiro, pero las bestias sabían que no podían contra ellos por lo que siempre se mantenían alejados , por el momento estaba segura ahí, aunque no lo podía negar, estaba asustada de su amigo que ahora parecía cualquier cosa menos su viejo Marshall, pero ella debía de sobrevivir, además no se iría hasta saber por que Marshall era un vampiro y como es que había sobrevivido hasta ahora.

-Por que sigues aquí?, creí haberte dicho que fueras- Dijo Marshall con un tono tenebroso pero mas calmado que antes de que se fuera pero ahora tenia una mancha de sangre en su camisa a cuadros que evidentemente no era suya, los vampiros no sangran o al menos no demasiado.

Fionna continúo escribiendo en una libreta dando poca importancia al discurso del vampiro, hasta que después de varios minutos de silencio finalmente dijo.

-No pienso irme, al menos no hasta que amanezca, si salgo ahora moriré y créeme viejo no tengo planes de ser comida de monstruo-

-Crees que me importa lo que te pase?, ahora mismo sal de aquí si no quieres que me enfade- Dijo Marshall dándole la espalda nuevamente a Fionna.

-"Te juro que te protegeré siempre Fionna"-

-Que diablos fue eso?-

-Bueno, recuerdas la últimamente noche que jugamos juntos?, digamos que lo grabe y no he olvidado tu promesa , y espero que la cumplas- Dijo Fionna guardando una grabadora portátil para niños y sonriendo al sonrojado vampiro.

-En ese entonces era un niño, esa "promesa" no tiene valor ahora.

-Hay! Vamos Marshy, déjame quedarme solo hasta el amanecer, esta bien?

_... Marshy, olvide que me llamabas así- Dijo un sonriente Marshall pero rápidamente cambio su expresión a su ya acostumbrada cara de poker- Llámame Marshall lee, ese es mi nombre y tu no eres nadie para decirme sobrenombres.

-Bueno, pero puedo quedarme?-

-Haz lo que quieras!- Dijo un alterado pero resignado Marshall.

-Bien!, gracias viejo, digo Marshall… lee- Dijo Fionna en un tono de burla sobre todo la ultima parte.

-Pero debes dejarme en paz o seré yo quien se encargue de matarte, de acuerdo?-

-De acuerdo!, me iré a dormir, buenas noches Marshy, hasta mañana.


Listo!, eso ha sido todo por este capitulo!, no pienso hacer muy larga la historia y de verdad espero que les guste, esta algo extraña pero es linda, no?.
No se olviden de dejar reviews! mientras mas dejan mas rápido escribo!. ;)

emily.