El Inicio
Cuenta una leyenda japonesa…. Que en el principio de los tiempos, un hombre bajo del cielo en una nube roja, y acogió a los primeros humanos, en el lecho de su sabiduría. Estableció desde un principio, que nos daría 6 enseñanzas, las 6 enseñanzas, que nos llevarían a la satisfacción, al optimismo, y a la felicidad. Desde ese entonces fue conocido como un dios, conocido también como Rikudō Sennin(El sabio de los 6 caminos). La primera enseñanza fue la comunicación: enseño las primeras lenguas, a leer, y a escribir. La segunda enseñanza fue la alimentación: Enseño al hombre a cazar, la agricultura y la ganadería. La tercera enseñanza fue la ciencia: Enseño al hombre los misterios del universo, algunas de sus aplicaciones, y los inicios de las matemáticas, física y química. La cuarta enseñanza fue el amor: Enseño al hombre amar no solo a su familia, si no a todo lo que le rodeaba. La quinta enseñanza fue el respeto por todo lo demás, enseño al hombre a temer ante el poder que no comprendía, a proteger a los débiles, y a sacrificarse de ser necesario, por amor. Finalmente la sexta enseñanza fue conocida como el poder: Enseño al hombre las habilidades que desde un principio el poseía. Los humanos muy emocionados, aprendieron con gran rapidez el control de estas maravillosas habilidades, que solo habían admirado y visto en un solo individuo….su Dios. Una vez que los humanos habían dominado la sexta enseñanza, el sabio decidió confiarles su gran poder, el poder que lo hacia inmortal, el poder que lo hacia un dios. Lo dividió en nueve seres, llamados Bijū. El humano haciendo uso de las 6 enseñanzas, los cuidaría, alimentaria y protegería, y cuando llegara al momento, el Bijū haría lo mismo por ellos. A causa de esto, el sabio comenzó a envejecer, pero feliz de lo que había logrado con los humanos, no se arrepintió de lo que había hecho…no hasta que el hombre mostro su verdadera naturaleza. Los humanos habían olvidados las 5 enseñanzas, y solo se habían concentrado en las sexta, el poder. Desesperados de poseer la grandeza y el poder de su Dios, los humanos pelearon por poseer a todos los Bijū, para volver a juntarlos, y convertirse en seres más allá de lo comprensible. El sabio intento detenerlos, pero ya no lo escuchaban, ya no lo consideraban un Dios, puesto a que estaba envejeciendo por haber dividido sus poderes y confiárselos a los humanos. El sabio decepcionado, uso todo el poder que le quedaba, y con la ayuda de los Bijū, logro unir sus habilidades con la luna. Antes de desaparecer, dijo que había venido al mundo humano, por que en el suyo, también había fracasado, sin embargo, dijo que a pesar de todo lo que había sucedido, aun tenía confianza en los seres humanos, y sabia que algún día, su sucesor lograría lo que el no pudo. Una vez dicho esto, aplico una gran ilusión que causo que todos los seres humanos olvidaran la sexta enseñanza, y la relación del sabio con las otras 5. El sabio esparció a los Bijū, escondiéndolos en distintas partes del planeta, esperando la llegada del sucesor. Desde ese día, el ser humano vivió de las 5 enseñanzas, pero a pesar de ello, encontró la manera de sustituir la sexta, con la tecnología, y repitió su destino volviendo a olvidar las 5 primeras enseñanzas. La raza humana pareció adaptarse a este modo de vida, sin embargo… el humano se encontraría con un problema que lo obligaría a recordar…. recordar lo que había pasado hace miles de años.
El 21 de octubre del 2019, una seria de objetos voladores con aspecto de nubes rojas, aparecieron en el cielo del planeta tierra. Justo como una película de ciencia ficción, estos invasores vinieron con la intención de conquistarnos. Aunque su tecnología era superior, la diferencia no era tan desmesurada, pero simplemente… estábamos recibiendo una paliza. Lo que hacia la diferencia, eran las características de sus soldados. Más allá del poder de sus armas y vehículos, estos seres poseían unas habilidades fantásticas y extrañas. No sentían dolor, no hablaban, no tenían piedad, y algunos, tenían el poder de revivir a sus compañeros caídos, otros de controlar la gravedad, otros parecían ser una especie de Cyborgs, y también domadores de bestias gigantes. Parecían estar conectados e incluso sin su armamento, eran letales y peligrosos. La raza humana comenzó su proceso de extinción….pero justo cuando todo parecía perdido…. Un hombre llamado Hashirama Senju, voló por todo el planeta tierra con una nave parecida a la de los seres del espacio. Y unas semanas después, algunos seres humanos poseían habilidades que nunca antes habíamos visto, y con las enseñanzas de Senju Hashirama, pudimos dominarlas en poco tiempo, logrando detener la intensidad de la invasión. Ahora estamos en el 2094, y aunque no hemos perdido la guerra, tampoco hemos logrado expulsar a nuestros invasores. La raza humana perdió varios países, y un gran numero de personas, que superan los 3 mil millones. Mi nombre es Uchiha Sasuke, pertenezco a la organización Akatsuki, y al complejo Konoha, con sede en Tokio Japón, llamada así por la leyenda del sabio de los 6 caminos. Soy un soldado tipo Genshi(Soldado genético)encargado de defender la Tsuki gēto(Puerta de la luna) y entrenando para pelear contra los invasores, también conocidos como Pein Rikudō (los 6 caminos del dolor). Soy de los pocos humanos que poseen habilidades especiales. En realidad, soy de los pocos que desde un principio, sabía cual era su destino. Lo que Hashirama Senju esparció en aquella nave roja, fue una especie de agente biológico, que provoco una mutación en algunos seres humanos, logrando que adquirieran poderes especiales. Sin embargo eso no sucedio con todos. Algunos no sufrieron esta extraña mutación en sus genes, y no adquirieron las habilidades. Akatsuki es una organización militar que se encarga de controlar este hecho. No solo porque no tengas poderes especiales, no significa que tus hijos no los tengan. El agente biológico sigue esparcido en el aire, y escondido en el cuerpo de cada humano en este planeta. Hay ocasiones en las que unos padres normales, pueden tener un hijo con el término conocido como Kekkei Genkai. Por esta misma razón, Akatsuki siempre toma constantes muestras de sangre a la población humana. Por lo general, las edades en las que se hace visible el Kekkei Genaki en los exámenes de sangre, varían entre si. Un Genshi, es una persona valiosa, ya que es de los pocos humanos que pueden pelear en igualdad de condiciones, con un Pein Rikudō. Por eso, cuando Akatsuki encuentra a un Genshi, lo captura, desaparece cualquier indicio de que haya existido, y lo entrena para convertirse en un soldado. No hay opción, si eres un Genshi, estas destinado a pelear. Cualquier vida que hayas llevado en el mundo Humano….desaparece.
