Todos los personajes de hetalia pertenecen a Himaruya Hidekaz
Las potencias del eje y los aliados, por cuarta vez en el mes, se encontraban perdidos o al menos eso creían.
China trataba de recordar si en esta "isla" tenía una casa, por su parte, Italia empezaba a ser pasta con la poca agua que quedaba y Alemania se preguntaba por qué le había dado a él las provisiones.
― creo que esta vez nadie vendrá por nosotros―murmuro Inglaterra.
―cher no te desanimes, hemos estado en peores―consolaba Francis a Arthur mientras le daba palmaditas en la espalda.
―bueno creo que deberíamos mandar a alguien a la selva para que se lo coman las serpientes o cualquier cosa que este por ahí ¿da? ―dijo Rusia con una aurora morada alrededor de su cabeza―yo digo que debe ser Francia ¿Quién está conmigo?
Todos alzaron la mano (menos francis) al parecer era mejor que se fuera o si no terminaría violando o besando a cualquiera que se cruzara en su camino.
Al final el pobre pervertido tuvo que abandonar el campamento improvisado, pero cuando puso un pie sobre la maleza alguien lo hizo tropezar
Era una joven de piel morena, hermosos ojos color miel que te enamoraban a primera vista y un deslumbrante y largo cabello oscuro que era adornado por dos dalias*. Los ojos de los países se iluminaron al ver esa bella figura entre la densa selva
―Bonjour mademoiselle, comment allez vous?― pregunto el francés en tono seductor.
― ¿Francis? ―México miro confundida a Francia― ¿Qué haces aquí? ―pero pronto se percató de la presencia de los demás― vaya, vaya los países más importantes están en mi territorio, ¿a qué debo este gran honor?
―bueno, naufragamos…otra vez―comento algo apenado Alemania quien trataba de controlar a Italia para que el chico no fuera a coquetearle.
María suspiro mientras cruzaba sus brazos. Los mexicanos eran reconocidos por la gran hospitalidad que les ofrecían a los visitantes, así que no le quedó más opción que llevar a los países a su casa.
O-o-o-o
La hacienda donde vivía la señorita María era majestuosa. Decorada con pintorescos mosaicos, sus paredes pintadas con colores alegres que hacían parecer que la casa era un lugar cálido, los arcos que estaban en la entrada lograban darle un toque elegante y sin olvidar esas gigantes fuentes que le otorgaban el toque mágico a los extensos patios llenos de flores, provocaban que cualquiera que pasara enfrente de la propiedad quisiera detenerse a observar su belleza.
Nuestros queridos países no eran la excepción pues caminaban de un lado para otro curioseando y apreciando cada detalle.
―mi casa es su casa―sonrió María―pueden quedarse en la habitación que gusten.
― ¿eso significa que por fin no me vas a golpear ni a gritar porque te robe lo lentes?― pregunto Alfred mientras jugaba con uno de los jarrones de barro negro que adornaban la sala.
Esa pregunta basto para que la dulce México cambiara su semblante amable por uno peor que el de Rusia cuando esta enfadado, no dudo ni un minuto en golpear con todas sus fuerzas al estadunidense, ningún país se quiso meter en la pelea pues les asustaba las posibles consecuencias. Al cabo de unas cuantas horas se podía ver a Alfred tirado en el suelo susurrando I'm a hero con la poca energía que le quedaba.
―una cosita más Jones―la joven saco un taco y lo dejo caer en la cara de Estados Unidos―los tacos llevan una tortilla, NO una maldita tostada.
―María yo me hago cargo de él―dijo asustado Arthur, quien empezaba a dudar si Alfred seguía vivo.
―no dejes que ese maldito gringo toque mi colección de corazones―México suspiro y se puso su sarape―me tengo que ir.
―Ve~ ¿Por qué se tiene que ir signorina bella? ―saltaba Italia.
― ¡¿Qué no saben qué día es hoy?! ―pregunto alterada María, los países se respondieron con un no―es noche del quince de septiembre, hoy festejamos mi independencia… ¿mi cumpleaños? ¿Cuándo sean las doce damos el grito?
Pero los países seguían confundidos, jamás habían celebrado el cumpleaños de María en México, por lo general ellos le mandaban cartas felicitándola pero jamás habían estado con ella en ese día tan importante.
―bueno María-sama ¿Qué tal si festejamos tu cumpleaños, juntos? ―pregunto Kiku.
La pequeña trigueña acepto inmediatamente. Le gustaba estar en compañía de sus amigos. Así que todos subieron a un coche y fueron directo al centro histórico de la ciudad de México. Disfrutaron de una magnifica noche llena de fuegos artificiales, miles de canciones y de su magnífica gastronomía.
O-o-o-o
Sin duda María tenía mucho que ofrecer. Su cultura es maravillosa, su historia a un más. Una guerrera conocida por su valentía. Recuerda con cariño y respeto a aquellos que dieron su vida para que hoy pudiera ser lo que es. Aquella que sonríe ante la adversidad, aquella que con su canto puede iluminar la noche más oscura de todas. Aquella que baila con la vida mientras ríe. Camina con orgullo porque sabe que aún hay miles de personas que se esfuerzan para que ella cada día pueda ser mejor. Así es señores y señoras, ella es la representación humana de los Estados Unidos Mexicanos.
Cher= querido
Bonjour mademoiselle, comment allez vous? Hola señorita ¿Cómo está?
signorina bella= señorita bella
*Las dalias son la flor nacional de México
Bueno he terminado el prólogo. Este fic se tratara sobre canciones famosas de México y otras no tan famosas pero también son de aquí.
Es mi primer fic y quería que fuera de mi país así que espero que lo disfruten.
De una vez les aviso, va a ver muchas parejas porque todos los países (o casi todos) tendrán una canción que les recordara a México
Espero que les haya gustado y nos vemos en el próximo capitulo
Próxima canción: la bikina
