Hola, he escrito un one-shot de Devil's line, porque me encanta la pareja. Los sucesos de esta historia siguen el orden cronológico del manga, no del anime en emisión. Espero que lo disfruten, pronto publicaré la segunda parte del one-shot. R&R
Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, sino que les pertenecen a Ryo Hanada.
I
En una habitación del bar a eso de las ocho de la tarde, se encontraba una chica que tenía una cicatriz en su rostro y estaba bastante avergonzada mientras abrazaba una almohada recostada sobre su cama. Usaba una polera blanca y unos jeans. Tsukasa Taira no podía parar de rebobinar los eventos producidos en aquella sala. Y es que ¿quién podría olvidarlo? Tsukasa pensaba que nadie en su sano juicio. Todo el amor demostrado en esa habitación no lo olvidaría nunca, y a pesar de que muchos creían que lo que pasa en una sala queda en esa sala, era mentira. Pues, allí estaba ella. Sufriendo por la vergüenza que la invadía sin permiso alguno. Haciendo imposible que pudiera incluso dormir, y para que decir que verlo a los ojos era toda una proeza, pues los nervios acumulados sumado a los recuerdos cubiertos de pasión la convertían en una chica totalmente frágil y vulnerable. Ahora bien, no había que olvidar las medidas de precaución que se tuvieron que utilizar, aunque para ella no fue un gran problema. Ya que, realmente lo que ella quería era estar con Anzai y si eso implicaba tomar precauciones, entonces lo haría sin importarle nada. Porque ella lo amaba, desde lo más profundo de su ser. Es más, desde el primer momento en que se vieron, nunca sintió miedo sino que todo lo contrario, lo encontró atractivo a primera vista, además considerando que él fue su primer beso, Anzai se convirtió rápidamente en alguien inolvidable para ella.
De repente, alguien tocó la puerta de la habitación y Tsukasa se sobresaltó produciendo que se levantara de golpe de la cama, pues tenía la corazonada de que su más grande amor había regresado de su reunión con sus colegas.
―¿Tsukasa?
Tsukasa escuchó la voz de su novio del otro lado de la puerta y un escalofrío le recorrió por toda la médula. No era que no quisiera verlo, es sólo que la vergüenza podía más que ella. Y debía admitir, que últimamente lo estaba evitando un poco. Y precisamente por la misma razón. Sin embargo, era consciente de que no podía seguir esquivándolo, es decir, él estaba enamorado de ella y eso se veía de lejos. Y seguramente él se ha estado preguntando el porqué de su actuar. Era definitivo, lo iba a enfrentar. Claro, sólo si él le preguntaba algo respecto al tema.
―Pasa ―dijo Tsukasa finalmente, tratando de no pensar en nada.
Acto seguido, entró su novio, cerró la puerta y se sentó al lado de Tsukasa. Él usaba una polera negra y unos jeans y se hallaba bastante bien luego de los acontecimientos, porque la amaba tanto que lo único que quería era demostrarle su amor de la manera más genuina que podía existir en este mundo. Se tomaba todo el tema con calma y sin pensar de más en la situación. Pero, no podía negar que algo le estaba molestando a su novia, y no es porque ella se lo dijera, sino que era porque en su actuar algo no estaba del todo bien. Ya sea, porque esquivaba la mirada y se excusaba con el tema de estar ocupada con la universidad. Todo eso, él debía aclararlo, le estaba preocupando mucho. No quería pensar en lo peor, pero Anzai creía que ella ya no lo quería más y que quería terminar con él. Es por eso, que ya no podía seguir con preguntas sin respuestas. Tenía miedo, miedo de perderla para siempre. ¿Y si en la universidad había encontrado a alguien mejor? ¿Y si se había olvidado de él? Esas eran solo unas pocas preguntas que rondaban en su cabeza.
―¿Estás bien? ―preguntó Anzai preocupado.
―Claro que sí, ¿por qué tendría que estar mal? ―contestó nerviosa Tsukasa. Ella ya veía venir hacia donde terminaría toda esa charla.
―No lo sé, es que noto como si te incomodara algo ―respondió Anzai honesto, sin embargo él no quería oír como Tsukasa le rompía el corazón, más la incertidumbre de no saber qué pasaba con su novia, lo estaba matando.
To be continued...
