Summary: Bella Swan es una joven de 19 años que decide vivir su sueño, empezando en la preciada isla puertorriqueña. Allí la familia Cullen la ayudará a establecerse, pero también le enseñaran valiosas filosofías de vida, y compartirán un amor que solo una verdadera amistad puede ofrecer.

Disclaimer: Por más que deseo mentir y decir que son todos míos, los personajes pertenecen a la grandiosa Stephenie Meyer.

¡Bingo! Te he encontrado

Bella's POV

Aprieto mi bulto en mi espalda con fuerza. Es ahora o nunca. Y aunque tengo miedo como el demonio, no es tiempo de rendirme. Me volteo hacia mis padres.

"Bueno, ya está todo listo. Me aseguraré de escribirles en cuanto llegue. Cuídense." les dije mientras le daba un beso a mi madre.

"Ah, no puedo creer que ya te nos vas." me dijo Renee mientras me abrazaba con fuerza. "Te voy a extrañar, mi cielo."

"Yo también, ma'." susurro mientras me volteo hacia Charlie. "Adiós, papá. Recuerda mantener la dieta, y evita comer lo que sea que Renee tenga preparado." lo abrazo con fuerza.

"No te preocupes por este viejo amargado, sabes que me puedo defender de la comida de tu mamá." se ríe. "Te voy a extrañar, Bells. Cuídate" me abraza más fuerte.

Me despego de Charlie, y tomo la maleta. "Hasta luego. Los amo" me voy alejando mientras los saludo con la mano.

"Nosotros a ti" grita Renee.

Y mientras mis padres siguen a mi espalda esperando a que yo pase las lineas del 'check-in', yo me dedico a dar un paso al futuro.

Mi nombre es Isabella Swan, tengo 19 años de edad y hoy, 27 de julio de 2016, parto hacia la aventura de mi vida. Desde muy joven siempre supe que quería más que estudiar, trabajar y luego ser una madre. No era como las típicas chicas que soñaban con trajes de princesas, ni príncipes con grandes armaduras. Tampoco de las que esperaban tener una familia a los 25 años de edad. Mi futura esperaba más que eso. Mi sueño constantemente se inclinaba hacia una vida nómada. No quería vivir en un solo lugar, quería ser una ciudadana global.

Cuando terminé la preparatoria no sabía que hacer con mi vida. Sabía claramente que no quería perder mi tiempo estudiando, ya que eso no era para mi. Pero también sabía que tenía que buscar la forma de proveerme y no depender completamente de mis padres. Es por eso que decidí tomarme los próximos dos años para trabajar. Encontré un puesto como ayudante de bibliotecaria en la librería de Forks, y trabajé como loca ahí por 19 meses. Realmente disfrute poder trabajar con tantos libros a mi alrededor, especialmente porque la biblioteca de Forks siempre estaba vacía, lo que realmente me ayudó a emplear mi tiempo a leer libros en el tiempo en que no había clientes. Leí sobre la historia de muchos países, sobre el pasado de muchos filósofos. Leí sobre la psicología del viaje, de conocer las culturas y de emprender un nuevo camino. Para cuando cumplí un año trabajando en la biblioteca, ya había leído la mayor parte del estante de libros históricos y filosóficos (con excepción de los que había encontrado completamente innecesarios).

Leer libros no fue lo único que hice, me dedique a ir a gimnasio y mantenerme en forma. Sabía que si iba a estar en una constante aventura tenía que estar preparada tanto mental como fisicamente. Me dedique a ir una o dos horas al gym por lo menos cuatro días a la semana, y a correr los días que no. Mantuve una dieta completamente vegetariana durante esos dos años, y me preparé incluso para comida estrictamente cruda. Para cuando llego la hora de planear el viaje, sabía que mi primer viaje iba a ser para un lugar completamente distinto de Forks, el único lugar en el cual he estado realmente. Es por eso que cuando estaba haciendo mi 'research' y el nombre Puerto Rico salió a mi vista, con unas escandalosas fotografías de hermosos paisajes, no dudé un segundo en buscar un pasaje sin fecha de regreso a ese paraíso. Dedique lo que quedaba de tiempo hasta el día del viaje a leer todo sobre Puerto Rico. Incluso me aseguré de aprender español, su idioma principal.

Me reclino contra el sillón del avión en el cual me encontraba, y volteo mi cabeza hacia la ventana. Suspiro, y cierro los ojos. Ya estaba lista para emprender esta nueva vida.

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"Señores pasajeros, bienvenidos al aeropuerto Luis Muñoz Marín en San Juan, Puerto Rico. Favor de mantenerse sentados, y con el cinturón abrochado…" se escucho la voz parlante del asistente de vuelo.

Por fin había llegado. Saco el iPhone de mi bolsillo y me aseguro de escribirle a mi madre.

"Excelente vuelo. Ya estoy aquí, estoy preparándome para salir del avión. Probablemente no me comunique con ustedes hasta mañana, pero me asegurare de escribirles tan pronto llegue al apartamento. Besos."

"Me alegro, hija. Y por favor, que no se te olvide avisarme cuando llegues. Te amamos. XOXO."

Una vez fuera del avión rápidamente me aseguro de buscar mi otra maleta, para luego esperar a la persona que me llevará hasta el apartamento, que ya está equipado con todo lo que necesito gracias a una amiga de Angela, la dueña de la biblioteca en la que trabaje. Al parecer, mi jefa (y amiga) ya había ido a Puerto Rico y había hecho par de amistades en su estancia allá, por lo cual en cuanto supo que ese sería mi destino no dudó en ponerse en contacto con su amiga para que me ayudara lo más posible. Es así como conseguí mi apartamento, y mi auto de segunda mano. Es así también como conseguí mi 'ride' al apartamento, ya que la amiga de Ang, Esme, junto a su esposo Carlisle son los que me llevarán al apartamento.

Una vez maleta en mano parto hacia la salida del aeropuerto en busca de la atractiva pareja. No tardé mucho en encontrarlos, ya que es imposible no fijarse en la pareja tan hermosa junto a la salida del aeropuerto,

"Bella, querida, un placer conocerte" se acerca rápidamente la mujer de baja estatura, cabello largo, cobrizo y ondulado, y sonrisa cálida. Me abraza ligeramente. "No sabes lo emocionada que estoy de que estés aquí. Este es mi esposo, Carlisle."

Carlisle se acerca y me tiende la mano. "Encantado, Isabella. Angela nos ha hablado mucho de ti. Bienvenida, ¿que tal estuvo el vuelo?" me pregunta.

"Agotador. Pero estoy muy contenta de estar aquí finalmente. Muchas gracias por venir a recogerme, espero no haber sido de mucha molestia"

"Para nada, querida. Nos encanta poder ayudar en todo lo que podamos." dice mientras nos dirigimos al auto de Carlisle. "Estoy ansiosa de que veas tu apartamento, sé que Ang no te dijo esto pero soy diseñadora de interiores y he jugado un poco con tu espacio para que no tengas que preocuparte por eso mientras estés aquí. Angela me dijo que eres bastante simple, por lo que he decorado el ambiente así, aunque un poco más hogareño, espero que no te moleste." exhala rápidamente, se nota lo ansiosa que se encuentra porque vea el hogar.

"Señora Cullen, no tenía que molestarse…" le dije incómodamente.

"Ah, Bella, nada de señora, no soy mi suegra" dice con una mueca cómicamente disgustada. "No fue ninguna molestia, al contrario, me diste una excusa para hacer nuevamente algo que me encanta."

"Bueno, pues muchas gracias, Esme" le sonrío cariñosamente. Los señores Cullen parecen ser una pareja agradable y encantadora.

Mientras iban camino a mi nuevo hogar, se dedicaron a hablar sobre lo encantador que era el lugar donde me iba a quedar, y lo hermoso que era vivir en esa isla. Aparentemente, el lugar se encontraba en un callado pueblito del oeste de la isla llamado Mayagüez, que es justo donde los Cullen viven.

"Aquí es un poco más fácil encontrar apartamentos ya que la universidad de Puerto Rico más prestigiosa se encuentra aquí. El precio, además también es más aceptable por la misma razón." comenta Esme. "Queremos advertirte que la vida aquí es un poco más peligrosa que en los Estados Unidos, y que no todo el mundo es de fiar. No obstante, eso lo aprenderás con el tiempo. Por ahora quiero que te sientas cómoda en el ambiente, y segura. Sobre todo porque el lugar donde vives tiene máxima seguridad, y quedas a solo minutos de nuestro hogar. No dudes en llamarnos si te sientes en peligro, o demasiado sola."

"Llegamos, señoritas." dijo Carlisle estacionandose frente a un complejo de apartamentos bastante grande, y moderno.

Rápidamente nos bajamos del carro, y empezamos a caminar hacia la recepción de los apartamentos. Allí Esme se dirige al recibidor y rápidamente se nos entrego la llave del apartamento. Subimos el elevador hasta el octavo piso, y rápidamente descendimos por un largo pasillo hasta el final donde finalmente se encontraba la puerta de mi nuevo lugar.

Una vez Esme abrió la puerta y me dejó entrar, me quedé casi con la boca abierta ante lo que se encontraba ante mi. Aunque pequeño, el apartamento tenía justo lo necesario para vivir en el. Estaba exquisitamente decorado en tonos grises y blancos, haciendo contraste con los accesorios bronces que se encontraban aquí y allá. Lo primero que veías al entrar era un hermoso mini recibidor en cristal. Más adelante se podía apreciar la sala, hermosamente decorada con sillones blancos, con dos cojines en tonos grises y bronce. Justo frente al sillón se encontraba una puerta en cristal que daba, supongo, al balcón del apartamento. Se podía apreciar como en el había un pequeño sillón tipo hamaca, con cojines y una mesa de café de mármol. Volviendo a la sala, en ella había dos estantes llenos de libros que previamente había enviado y justo entre medio de los estantes y frente a un sillón un poco más minimalista, pero que se veía igualmente cómodo, se encontraba un televisor.

Me giré para ver lo que quedaba del apartamento, viendo de vez en cuando a Esme. La cocina era pequeña, pero lo suficientemente espaciosa como para que dos personas cocinaran tranquilamente en ella. Estaba tapizada completamente en mármol, y tenía una pequeña isla con sillas altas que daban la apariencia de estar hechas de cristal. Me dirigí rápidamente al pasillo y me encontré con mi habitación, que era de un tamaño bastante razonable. En el medio se encontraba una enorme cama envuelta en un colcho blanco, con gigantes almohadas blancas y grises. Al lado tenía una pequeña mesa de noche cubierta en espejos con una lampara que no ocupaba mucho espacio. Había una gigante ventana y frente a ella un pequeño escritorio blanco, con una silla que se veía bastante cómoda.

"Ah, Esme" suspiro, sin realmente saber que decir. "Es… Es una hermosura, realmente no tenias que hacer todo esto. No obstante, muchas gracias, no tengo palabras para expresar lo feliz que me siento." le digo, emocionada.

"Fue un placer, el baño se encuentra al final del pasillo y junto a el, el 'walking closet'." me dice mientras me arrastra hacia ellos.

Una vez me enseño el baño y el closet, rápidamente se despidió.

"Bueno, cariño, creo que ya me voy. Carlisle trabaja mañana temprano, y aún tenemos que ir al hospital para que el busque algo que necesita. En el refrigerador te deje preparada una ensalada que hice esta tarde. Además, como sé que eres vegetariana, te compre todo tipo de verduras y frutas, espero que las disfrutes." me dice mientras deja un beso en mi mejilla.

"Fue un placer conocerte, Bella." me dice Carlisle mientras me sonríe cálidamente.

"Gracias por todo" les digo mientras me despido en la puerta.

Ambos se dirigen rápidamente al ascensor. Una vez que veo que se han ido, cierro la puerta y me reclino contra ella. Suspiro, agotada, pero finalmente saco la fuerza para levantarme y comer algo. Luego me dirijó a mi cuarto y acomodo todo lo que tenia en las maletas. Le escribo un corto mensaje a mis padres y me dirijo al baño. Finalmente, me tiro de pecho a la cama.

Joder, sí. Es todo lo que puedo pensar.

El día de hoy ha sido eterno, pero finalmente me encuentro en lo que será mi casa por los próximos años.


Hola, mis corazones de melón. Soy nueva en el mundo de la escritura de fanfics, más no soy una neófita en el fandom. Después de años, finalmente consigo los cojones para crear mi propia historia. Espero que les guste, les dejo saber que acepto todo tipo de comentario constructivo, más ignoraré cualquiera despectivo. Dejar un review no es compulsorio, pero les agradecería a quien lo deje y decida comentar lo que le parece esta nueva historia, mi primera historia y mi primer hijo. Les dejaré abajo unas pequeñas aclaraciones que van a ayudar a entender el paso de la historia. Cualquier sugerencia no olviden mencionar en los reviews. Besos.

Aclaraciones:

1.Cuando Bella se refiere a una vida nómada, se refiere a piensa vivir en más de un sitio. Todavía no sé si haré que cambie de opinión respecto a eso o no. No obstante, mientras Bella esté en P.R (mi amada isla), ella aprovechará para vacacionar en otros países también.

2.Trataré de ser lo más fiel en cuanto a los lugares de P.R, no obstante les aclaro que definitivamente habrá lugares que no existen.

3.Pueden ver que soy bastante detallada en lo que escribe, pero eso lo hago por el placer de mi imaginación. No siempre seré tan explicita en lo que escribo, ni estaré describiendo cada parte de la vida de los personajes.

4.No sé cuan largo será el fanfic, tampoco sé cada cuanto estaré actualizando porque la escritura no es algo que se agenda, si no algo que viene con la inspiración. Espero ser bastante continua, porque realmente estoy encantada con la crianza de este hermoso bebé.

5.Como pudieron leer, el español es el idioma principal en P.R. Obviamente Bella y los Cullen hablan inglés principalmente, pero todos hablan fluídos en español. Por el bien de la fluidez de este fanfic, no voy a aclarar cuando hablan en español, por lo que tendrán que asumir que entre ellos hablan su idioma nativo (inglés) y con otros personajes del país en español.

6.Cualquier duda o pregunta no duden en contactarse conmigo, ya sea por review, o por email (que dejaré en la bio).