Hola, aquí les traigo un nuevo fic de Mortal Kombat, está ambientado en el universo de MK9.

Mortal Kombat no me pertenece, es propiedad de Netherrealm Studios, este fic fue hecho con el solo propósito de entretener.

Entre dos reinos

Ambos venían de una muy mala situación: ella, una bella mujer de Edenia, de piel bronceada y ropa ninja verde, hacía poco había visto a su mejor amiga siendo raptada por descubrir su pasado y a punto de ser ejecutada; él, un hombre de Earthrealm, de piel pálida y ropajes ninja color gris, venía de perder a su amigo, quien fue capturado por su propio clan para convertirlo en un ciborg sin alma. Lo que no sabían era que sus caminos se enlazarían más adelante… aunque no comenzaría de la mejor manera.

La mujer hizo lo posible para liberar a su amiga, la princesa Kitana, pero falló, tuvo que escapar y escabullirse para eludir a los tarkatanos y demás monstruos que iban en su búsqueda, cuando llegó a los páramos y los baldíos creyó estar a salvo, por lo menos eso es lo que Jade creía.

- Parece que pude eludir a mis perseguidores.

De repente una segunda mujer aparece envuelta en un aura rosa, su teletransportación sorprendió a la edeniana y más cuando reconoció que era la mujer de la que tanto habló el emperador Shao Kahn.

- Otros persiguen… yo encuentro. – hablaba la misteriosa mujer de rosa.

- ¡Por los dioses, tú eres Mileena! – contestó Jade conmocionada.

- Ven, habrá una fiesta en celebración por mi "hermana". – Hablaba ella en referencia a Kitana, la mujer de la que había sido clonada. – Nos va a dejar.

Una salvaje pelea se entabló entre ambas féminas, Mileena demostraba una belleza edeniana combinada con la fiereza y dientes dignos de una tarkatana. Jade usó todas sus fuerzas y finalmente consiguió derrotarla con una increíble paliza, el bastón y los razorangs (un bumerang con cuchillas filosas) que ella siempre lleva superó los sais de su enemiga. Cuando la hibrido edeniana-tarkatana cayó al suelo inconsciente ella lo miró con sus ojos verdes en una mueca de asco.

- Yo soy más hermana de Kitana que tú. – concluyó ella.

De pronto un relámpago alumbró el desolado lugar, cinco figuras emergieron de allí: un hombre con ojos blancos y que emanaba electricidad de su cuerpo, un joven con una cinta roja en la cabeza, otro con lentes de sol y cabello castaño, otro con un gran sombrero coronando su cabeza y el quinto era el hombre del que hablé al principio, llevaba una rara fusión entre traje ninja y armadura de metal de color plateado y una máscara del mismo color.

El ser de electricidad estaba a punto de hablar pero nuestro hombre, tras contemplar a Mileena desmayada en el suelo, se acercó agresivamente a Jade

- ¡¿Kitana se revela contra Shao Kahn y tú la atacas?! – la increpó el hombre.

- Pero… ella no es… - trató de defenderse la joven de piel bronceada.

- ¡Smoke, ella no es Kitana! – intentó detenerlo el dios del trueno Raiden pero el Lin Kuei arrojó una gruesa capa de humo sobre sus compañeros, asfixiándolos.

- Estas cometiendo un error. – dijo Jade seriamente.

- Ni un paso más. – concluyó él antes de atacar.

Jade usó su baston para bloquear un golpe a su rostro, Smoke estaba muy molesto, molesto por la pérdida de alguien que era como un hermano para él. Un segundo golpe dio a la edeniana en el estómago, retrocedió dolorido, el Lin Kuei usó su habilidad y se hizo invisible. La amiga de Kitana no veía donde podía estar su indeseado contrincante, se quedó quieta y cerró sus ojos guiándose por el sonido, sin pensarlo sacó un razorang de su cintura y la lanzó con una buena puntería, el instrumento afilado apenas tocó a Smoke, quien se volvió visible.

- Lo lancé así para no lastimarte… escúchame… - intentaba detenerlo la mujer pero él no la oía, solo se concentraba en derrotarla.

El ninja de plata atacó con todas sus fuerzas, la edeniana eludió el golpe y no tuvo más remedio que contratacarlo con una patada a las costillas y un golpe de bastón a la cabeza, Smoke cayó al suelo secamente.

- Yo no quería hacer esto. – habló Jade agotada por el combate.

Smoke quedó tendido en el suelo, intentaba ver pero su vista quedó nublada por el fuerte golpe y su oído también estaba afectado, un zumbido le impedía oír bien. Vio a Jade y Raiden hablar pacíficamente pero no llegaba a entender de que hablaban, de repente Liu Kang y Kung Lao se sobresaltaron y reaccionaron.

- ¡¿Kitana, ejecutada?! ¿Dónde está? – preguntaba el monje shaolin, Smoke llegaba a oírlo.

- Está en la torre, pero la llevaran al coliseo dentro de poco tiempo. – respondió Jade.

- Debemos ir a buscarla, Kung Lao.

- Pero Liu Kang, ustedes deben pelear en el torneo. – lo interrumpía el dios Raiden.

- Que algunos peleen en nuestro lugar. – recomendó Kung Lao.

Smoke se levantó y se colocó al lado de Johnny Cage, el actor de artes marciales y protector de Earthrealm. Raiden los miró a ambos con una rara sonrisa.

- Ah genial. – refunfuñaba Cage sabiendo lo que esa cara significaba.

- No hay problema, Lord Raiden, tomaremos los lugares de Kang y Lao. – aceptaba Smoke.

Sin perder tiempo los dos monjes se retiraron apresurados hacía la torre donde estaba cautiva la hija de la reina Sindel. Jade se acercó a Smoke, quien seguía adolorido, Cage y Raiden estaban cerca.

- ¿Estas bien? – preguntó ella mientras lo miraba fijamente con sus ojos verdes.

- Sí… solo un poco sacudido. – respondió él.

- No quería pelear, si me hubieras oído nos hubiéramos ahorrado el malentendido, la mujer que está en el suelo no es Kitana, es Mileena, un clon de ella La consideran la verdadera hija de Shao Kahn.

- Wow, wow, wow ¿Un clon? Eso ya es muy raro. – se entrometía Cage.

- Un clon… - repetía Smoke despacio. – ¿Y como se supone que pueda diferenciarla?

Como respuesta, Jade se acercó a Mileena y le quitó la mascara revelando unos horribles dientes puntiagudos dignos de un tarkatano, Cage y Smoke no pudieron evitar una expresión de asco.

- Vaya, parece que va al mismo dentista que Baraka. – agregó Cage.

- Tiene sangre tarkatana en su cuerpo, ahora vámonos antes de que despierte. – dijo Raiden.

Los tres hombres y la dama llegaron al coliseo, el lugar donde se había vertido mucha sangre, donde la gente peleaba a muerte para entretener a un público lleno de euforia, euforia por las masacres y carnicerías. Shao Kahn estaba sentado en su trono, cerca de él estaban los hechiceros Shang Tsung y Quan Chi, Kitana estaba encadenada por lo que Liu Kang y Kung Lao habían hecho mal en ir a la torre.

- ¡Hemos venido aquí a detenerte Shao Kahn! – dijo el dios protector.

- ¿Cómo te atreves a interferir en mis planes Raiden? – contestó el emperador molesto.

- ¡No permitiremos que fusiones Earthrealm y Outworld, esto se acaba aquí!

- ¿Crees que tus miserables humanos pueden contra mí? ¡Ahora veras el poder de mis soldados!

- ¡Smoke, Johnny! – Se dirigía Raiden a sus hombres - ¡Deben vencer!

- De acuerdo, Lord Raiden. – dijo el ninja gris.

- Presiento que esto se va a poner feo. – decía el joven actor desesperanzado.

Hubo un pequeño silencio. Shang Tsung se colocó al lado de su amo y ambos empezaron a hablar, luego de un minuto el silencio fue quebrado por la voz de serpiente del brujo.

- Bien… ¡primer combate: Smoke contra…! – Decía Shang Tsung mientras miraba a cada uno de los soldados de Outworld hasta que se detuvo y señaló a una mujer de cabellos rojos, vestimenta roja y mirada fría - ¡Skarlet!

Sin decir nada los ninjas gris y rojo se pusieron en medio del coliseo con el público vitoreando, la mujer llamada Skarlet llevaba dos cuchillas largas envainadas en la espalda y una cinta con Kunais en una de sus piernas.

- ¡PELEEN! – gritó el emperador dando inicio al combate.

Rápidamente Skarlet trató de darle una patada a mi rival pero él, para su sorpresa, se convirtió en una gruesa capa de humo que la encegueció, cuando podía ver de nuevo recibió un golpe en el estómago. La mujer de rojo se arrodilló a la vez que veía al Lin Kuei volviendo a hacerse de carne y hueso.

- ¡Asesínalo Skarlet! –ordenó Shao Kahn seguía contemplando la pelea.

- ¡Así se hará mi señor! – gritó mientras volvía a desenvainar mis cuchillas y se dirigió a su oponente.

Uno de los golpes pudo provocarle un corte en la pierna al ninja color plata, pero él la contratacó con otro golpe que la hizo retroceder un poco. Aún furiosa, sacó varios kunais de la cinta que llevó en la pierna y se las arrojó, varias fallaron pero una llego a clavarse en su abdomen.

Jade a lo lejos, miraba preocupada la pelea, conocía a Skarlet y sabía que era una enemiga formidable, la vida de Smoke corría serio peligro.

- Mierda… - decía él con mucho dolor mientras se quitaba el kunai ensangrentado, no le había dado a ninguna parte vital del cuerpo.

- ¡El siguiente irá a tu corazón! – exclamó Skarlet mientras arrojaba un par más que me habían quedado, pero el enenra volvió a hacerse humo.

Reapareció detrás de ella y con una patada consiguió derribarla por unos segundos. Se levantó velozmente y comenzó una lluvia de golpes y patadas, pero muy pocas daban en el blanco. La ninja de sangre reconocía que aquel contrincante era bastante duro, ya que podía hacerle frente aún con las heridas en su cuerpo.

La pelea estaba muy equilibrada, pero la dama de rojo pudo inclinar la balanza a su favor al hacerle un corte en el brazo al Lin Kuei con su cuchilla y de ahí poder darle una feroz paliza. Luego de varios ataques con éxito Smoke nuevamente uso su habilidad de convertirse e humo.

- ¡Ya basta de ese maldito truco tuyo! – dijo Skarlet al mismo tiempo que se convertía ella misma en charco de sangre.

Smoke se materializó de nuevo, una vez que ya era humano por completo y no veía nadie por ningún lado, su oponente también volvió a su forma humana exactamente a sus espaldas.

- ¡Smoke, cuidado! – trató inútilmente Raiden de avisarle a su compañero.

Pero no llegó a tiempo, antes de que Smoke llegara a hacer algo, su enemiga saltó detrás de él y clavó sus cuchillas en su espalda. El hombre gritó de dolor, él no esperaba tamaña sorpresa, para peor suerte de él, la sangre que salía de su cuerpo era absorbida por el de Skarlet, dándole más fuerza.

Ella finalmente soltó sus cuchillas y dejó al hombre en el suelo, gravemente herido pero no muerto, había ganado el combate:

- ¡Skarlet gana! – Confirmaba Shang Tsung – Ahora el siguiente combate es: ¡Johhny Cage contra Ermac!

Jade quería entrar a la arena pero Raiden no la dejó y se quedó observando la pelea. No fue muy larga, en unos pocos minutos Ermac había logrado darle una feroz paliza al Johnny y fue declarado ganador.

- ¡Ermac gana! – exclamó nuevamente el hechicero.

- Sa… sabía que… que esto se… iba a poner… feo… - se lamentaba el humano completamente herido en el suelo.

Shao Kahn se reía ante la victoria, Raiden yacía impactado sin más guerreros que ofrecer… o por lo menos eso creía ya que segundos después aparecieron dos sujetos más.

- ¡Liu Kang y Kung Lao! – expresaba Shang Tsung furioso.

- Parece que Sheeva y Noob no pudieron detenerlos. – agregaba Quan Chi, quien se colocaba al lado del otro brujo.

- Shang Tsung, Quan Chi, encárguense. – ordenó el emperador a ambos hechiceros.

Mientras Liu Kang y Kung Lao ingresaban Jade salía del coliseo con Smoke, ella lo sostenía ya que sus heridas no dejaban de sangrar y se debilitaba cada vez más. Lo recostó en el suelo y arrancándose un trozo de sus ropajes vendaba las heridas del ninja de plata.

- ¿Por… por qué me ayudas? – preguntó con su voz débil.

- Porque estamos del mismo bando. – contestaba ella. – Tus amigos vencerán y liberaran a Kitana, Liu Kang es un hombre muy poderoso.

Smoke se quedó perplejo mirando a su curadora, no solamente era hermosa y dueña de un cuerpo escultural, también era una guerrera muy salvaje y a la vez una mujer dulce, se quedaba hipnotizado mientras sus ojos grises miraban los ojos verdes y brillantes de ella.

- Creo que después de todo esto aún no me he presentado. – hablaba ella. – Mi nombre es Jade y soy la mejor amiga de la princesa Kitana, la princesa de Edenia.

- ¿Edenia? Creí que era la princesa de Outworld…

- Ya no lo es, sé que tu nombre es Smoke, ya lo he oído a Raiden diciéndolo.

- Sí… pero también puedes llamarme por mi nombre real… Tomas.

- Tomas… - repetía ella impactada. – Que lindo nombre.

De pronto un vitoreo y gritos desde la muchedumbre del coliseo distrajeron a ambos ninjas. Al acercarse vieron a Shao Kahn parado, a sus pies estaba Kung Lao, completamente inerte, completamente muerto, con el cuello roto.

- ¡No voy a permitir que un simple humano se burle de mí! – gritó el emperador.

- ¡Te arrancaré la piel de los huesos! - gritó furioso Raiden mientras formaba rayos con sus manos.

Pero antes de que el protector de Earthrealm hiciera algo, el compañero del monje caído se arrojó sobre nuestro líder.

- ¡Humano idiota! ¿No sabes quién soy yo? – exclamaba furioso mi amo.

- ¡El asesino de mi amigo! – contestaba valientemente el monje.

- ¡Soy Shao Kahn, el emperador de Outworld!

- ¡Saborearas tu propia sangre!

Y así como así el monje shaolin de Eathrealm y el emperador de Outworld se trenzaron en una encarnizada pelea, Jade y Smoke miraban a lo lejos todo.

- Vamos Liu Kang… tu puedes… por Kitana. – lo alentaba Jade.

- Él va a poder. – confirmó Smoke como si nada.

El emperador parecía no afectarle para nada los golpes de su rival, ya muchos de los presentes ya daban al infame líder como vencedor. Liu Kang seguía golpeándolo pero no pasaba nada y su enorme enemigo le dio tal patada que lo hizo retroceder mucho.

- Hora de terminar con esto. – sentenció Shao Kahn mientras con sus manos y concentrando su magia creaba una jabalina de energía y la arrojó contra el shaolin.

- ¡Liu Kang! – gritaron al unísono Raiden y Kitana mientras miraban horrorizados como el joven estaba a punto de ser atravesado.

Pero para sorpresa de todos los presentes, el guerrero pudo esquivar la jabalina y corrió hacia el hombre que la lanzó. Por la fuerza usada en el lanzamiento y la postura tomada para eso Shao Kahn no pudo defenderse del golpe que recibió en pleno rostro (el golpe dio justo en la parte no cubierta por el casco).

Todos vieron el golpe, todos vieron la sangre roja brotar de su boca, el emperador había sido herido.

- ¡Bien hecho Liu Kang! – decía Raiden.

- Excelente, destruye a ese maldito tirano. – agregaba Jade.

- Sigue así. – exclamaba Smoke.

- ¡Muy bien amigo, ese tipo no es indestructible! ¡Si sangra puedes matarlo! – exclamaba Cage también muy lastimado por el combate con Ermac.

Lleno de cólera, el emperador hizo aparecer un martillo entre sus manos, su arma favorita para destruir enemigos

- Ríndete Shao Kahn, no puedes conmigo. – lo desafiaba Liu Kang.

- Maldito… me haré un festin con tu sangre… ¡TE MATARÉ! – exclamó el gigante de Outworld completamente fuera de sí mientras corría e dirección a su enemigo con el martillo listo para golpear.

Pero su contrincante fue más veloz, apenas el golpe del martillo falló Liu Kang comenzó a darle golpes y patadas a Shao Kahn, varias en su rostro quebrando parte de su casco. El emperador ya ni se defendía, pero eso no impedía que lo siguieran castigando con salvajismo.

El último golpe derribó por completo al enorme hombre, mientras su vencedor aún lo miraba con enojo y desprecio.

- ¡De pie! – ordenó Liu Kang a su caído oponente.

Con mucho esfuerzo, Shao Kahn volvió a ponerse de pie, completamente desorientado y con heridas por todo el cuerpo.

- ¡Por Kung Lao, los shaolin y Earthrealm! – gritó el monje mientras envolvía su puño en fuego dispuesto a dar el golpe final.

El emperador no dijo nada, ni siquiera gritó cuando el puño llameante del humano golpeó su pecho tal fuerza tremenda que literalmente lo atravesó, lo único que salió de su boca fue un pequeño sonido, un gemido ahogado por la sangre que salía. Cuando el shaolin se dignó a quitar su mano del cuerpo del emperador lo hizo con severidad, sin seguir mirando a su víctima. Nuestro pobre líder quedó unos segundos más de pie antes de caer al suelo definitivamente… muerto.

- No puede ser… la tierra ha vencido… - decía Shang Tsung incrédulo, Quan Chi mostraba una extraña sonrisa.

Todos quedaron impactados ante la escena ni Smoke y Jade podían creerlo, las gotas de sangre del infame líder seguían cayendo del puño del monje. Kitana se acercó a él pero Liu Kang decidió ver a su amigo fallecido.

- Lo hizo… - decía Jade.

- Te dije que lo haría. – le sonreía Smoke, de repente comenzó a tambalearse.

- ¡Smoke!

- No te preocupes, estoy bien… - decía el pero cuando tosió, sangre comenzó a caer de su máscara.

- Tus heridas están empeorando, vamos con Raiden.

- No… estoy bien… de veras… puedo mantenerme…de pie.

Pero por desgracia no pudo mantener su palabra, el ninja de humo cayó al suelo mientras sus heridas habían empeorado, con esfuerzo ella lo cargó y lo llevó hasta Raiden, sabía que con sus poderes podría curarlo, cuando pudo acercarse a él lo veía preocupado mientras miraba su medallón lleno de grietas.

- Es imposible. - decía Raiden mirando el talisman. - Shao Kahn está muerto. ¿No es suficiente con eso?

Fin de capitulo

Bueno, los que leyeron mi fic "Agua y Sangre" se darán cuenta que parte de la pelea Smoke vs Skarlet y Liu Kang vs Shao Kahn fueron copiadas directamente de allí.

En este fic quise aclarar algunos puntos como quien derrota a Smoke y porque ni él ni Jade aparecen durante el triunfo de Liu Kang.

Bueno, el próximo capitulo estará más centrado en la pareja principal de este fic, así que no se pongan mal porque apenas hablaron entre ellos en este capitulo.

Ale93371.