Una profecía llamada "DESTINO"

Descargo de Responsabilidad: Yo no soy propietaria del anime de Inuyasha, ni el manga RG Veda (aunque de hecho me encanten tanto, jamás dejaría a Kagome chan sufrir por alguien como Inuyasha y cometer el pecado de no emparejarla con Sesshoumaru. Tampoco dejaría a Taishaku-ten sufrir de aquella manera y ser considerado de lo peor cuando solo cumplía la promesa a la persona que tanto amaba)

Resumen: "Destino" palabra que tiene mil significados y ninguno concreto… palabra despreciado por algunos que intentan eliminarlo, protegidos por otros hasta la muerte. Lazos eternos que jamás podrán romperse… ¿o si?

¡Ah! Un nuevo fanfic, después de terminar el 1º en mi lista, es una buena recompensa para mis amados lectores. Confieso que personalmente he mejorado muchisimo (aunque eso les dejo para que lo vean ustedes) y soy demasiado feliz de dar a luz el primer crossover de estos dos grandes hitos del manga. ¡Por favor disfrutenlo!

Capitulo I: Renacimiento del clan Ashura

Al inicio de los tiempos, el universo incluida la tierra era gobernado por los dioses, todos los humanos vivían en una era pacifica sin fin bajo el mandato del emperador de los cielos.

Pero esta felicidad llego a su fin cuando un día la cabeza decapitada del emperador fue muestra de trofeo por uno de sus generales… Taishaku-ten, la oscuridad engullo todo.

Hasta los descendientes del dios de la guerra, Ashura… ahora, ya que esta mitología llega a su fin es la hora de que tome su lugar una leyenda profetizada.

La guerra del bien y el mal por el triunfo definitivo… acaba de comenzar.

"… que significa para ti pertenecer al clan Ashura?"

"No te preocupes, he de servir al designado señor Ashura-ou hasta el confín del infierno"

"Me ayudarías a cambiar el curso de las estrellas?"

"¿Obtendré lo que quiero si te brindo mi fuerza?... lo que quiero es…"

"Si es lo que quieres"/"Si es tu deseo"

"Lo prometo"

Una promesa dicha con la devoción del corazón ¿puede cumplirse aun frente a las adversidades crueles del tiempo? ¿Puede incluso desafiar el destino trazado por las estrellas estelares?

Solo el tiempo lo dirá.

Ya han pasado tantos años que desde aquella promesa dicha, de aquellos días pasados al servicio del anterior Tentei que fue decapitado por su propia espada. Ahora como el emperador de los cielos, estas celebraciones… festividades, no podía contar cuantos de estos despreciables eventos había tenido que soportar y seguir haciéndolo, una sonrisa hueca cubrió su piel ligeramente tostada.

Antes no eran así, ¡ah no! Antes realmente podía darse el lujo de poner su verdadero pensamiento, despreciarlos con la libertad que había gozado y hasta… sonreír cuando realmente lo deseaba. Todo quedo atrás, hace tantos años.

Más no le importaban, no cuando pudiera cumplir su promesa y obtener lo que verdaderamente deseaba. Aquello que hasta ahora se escurría entre sus manos como el aire.

Aquello que siempre deseo… hace tantos, tantos años.

En un reino muy lejano Kusumabura, y un castillo subterráneo…

Shura-tou el ultimo señor del destruido reinado de las flores sostenía en estado de shock el cuerpo de la mujer que siempre había amado, aquella que nunca se animo a decir sus verdaderos sentimientos y ahora moriría desangrada en sus manos.

Una piedra preciosa que había estado incrustada en la frente de la antigua sacerdotisa del clan de dioses Ashura se la devolvía a su verdadero maestro, un niño pequeño que lo tomo con una indiferencia total a su agonía.

- Shuratou ¡has estado esperando y ahora te despertare! – con ayuda de la piedra fue capaz de alcanzar a trabes del campo de energía la legendaria espada de destrucción, una sonrisa cruel se extendió en su joven e inocente rostro.

- Shura-tou ven ¡muéstrame tu poder! – tomo la espada entre sus manos, su sonrisa ampliándose peligrosamente con cada segundo - ¡despierta! – ordeno.

Pero no espero las imágenes desgarradoras que aparecieron en su mente de su propia madre, que intento matarlo, aquel odio por la criatura que compartió con el anterior Ashura-ou, la verdad rompió su mismo corazón.

Ashura es un niño no deseado!

La tierra rugió sin control, las llamas del infierno desencadenándose sin nadie que las controle. Ni siquiera era capaz de sentir a Yasha-ou, su protector querer llegar a salvarle. Las lágrimas dolorosas no paraban repitiendo aquellas escenas de su memoria.

Hasta que algo más lo suplanto… amplio sus ojos dorados al visualizar lo que parecía un castillo flotando entre nubes, después rápidamente llegando hasta un enorme árbol viejo en medio del jardín interminable y…

Había en medio de aquella profunda oscuridad una figura clavada allí sujeta por las ramas arraigadas de aquel tronco en un profundo sueño eterno…

- "¿Quién eres?" -

"No eres el único… no estas solo"

- "¿Quién eres?" -

"Prometí jamás abandonarte Ashura-ou…."

- "¡N-no me dejes por favor!" - la imagen comenzaba a difuminarse haciendo al pequeño Ashura ou desesperarse aun más.

"No estas solo… iré a por ti"

Lo próximo que sabía era que era abrazado gentilmente por su Yasha, este sonriendo suavemente mientras le confesaba que jamás lo dejaría aun cuando el mundo lo odiase.

- Yo todavía te necesito Ashura – acariciaba sus cabellos negros.

- No soy el único… - murmuro esas palabras para luego sonreír dulcemente abrazando muy fuerte a su protector - ¡lo siento! He vuelto… Yasha – todos miraban tiernos la escena… bueno, eso hasta que Ryu-ou los interrumpió groseramente haciendo una atmósfera más alegre.

Kujaku sonreía, por dentro aunque pensativo en las palabras del pequeño Ashura sabiendo que nada era pura coincidencia. Justamente en esta ceremonia de herencia sobre Ashura ou…

"No estas solo", no lo era, otra parte de la profecía se cumpliría, rió entre dientes mira el hermoso horizonte de montañas.

"Ya es hora que despiertes y guíes a Ashura-ou"

La celebración de entonces fue interrumpida por una mujer entrando bruscamente en medio del sitió del banquete, la mirada fría del Tentei se poso en su intrusión brusca.

Aquella sacerdotisa, la hermana gemela de Kuyo quien había predicho la profecía de las seis estrellas que destruirían al cielo. Las únicas palabras que dijo fueron capaces de perturbar o confundir a todos los presentes.

Y derrumbar la conciencia de Taishaku-ten.

- "Ashura nuevamente esta a punto de despertar!" – grito la capa que cubría su rostro desfigurado, se derrumbo sintiéndose sin fuerzas y siendo atrapada rápidamente por algunos soldados presentes.

Pero antes que ninguno fuera capaz de pensar en sus palabras desconcertantes el castillo comenzó a temblar por si mismo. Algo imposible y jamás visto en Tenkai.

- "No puede ser… realmente!" - Taishaku-ten no perdió el tiempo en seguir sus divagaciones antes de ponerse de pie bruscamente y dirigirse directamente hacia el gran jardín. De donde provenía aquella catástrofe sin importarle mucho menos las miradas que vieron su acción con shock.

Sus generales fueron tras él, incluso Karura-ou, quien odiaba tanto a este hombre fue a averiguar por si misma la causa de semejante desastre.

Familias nobles, generales, soldados, empleados. Todos en conjunto miraban sin aliento el gigantesco y místico árbol que salía desenterrado desde debajo del jardín tomando un gigantesco espacio maravillosamente comenzando a florecer las hojas en abundante follaje… para luego comenzar a marchitarse.

Su interior comenzaba a despelecharse por llamas que parecían resurgir desde su interior, machacando la madera su contenido se abrió ante el mundo.

Una figura descansaba aferrada por las ramas negras por el fuego, su apariencia siendo aun más escalofriante.

- ¡ES ASHURA-OU! – grito Karura-ou junto a su amiga cantarina mirando abiertamente en shock al hombre joven en su interior casi la viva imagen del antiguo dios de la guerra. Gritos y murmuraciones no se hicieron esperar.

Nombrando a Ashura-ou viniendo de la tierra del infierno para matarlos a todos.

Taishaku-ten en cambio no salía de su propio trance, mirando impactado la figura durmiente se sentía hipnotizado, el nombre que por todos estos largos años prohibió a sus labios decirlo en voz alta. Pero que siempre susurraba en su interior salio instantáneamente.

- Kagome ou… - solo sus generales y Kendappa-ou fueron capaz de escucharlo haciendo que ampliara sus ojos incrédulos mirando nuevamente la figura.

Para Taishaku-ten podría importar menos, solo al contemplarlo los muchos recuerdos pasaban como visiones alrededor de su mente.

Tan pronto salio aquel nombre prohibido el árbol pareció emitir un sonido rítmico, latidos de un corazón.

Justo cuando Taishaku-ten dio un paso hacia él las llamas se desembocaron rugiendo a su alrededor haciendo que se detuviera y saliese del transe. Solo sus ojos celestes eran capaces de observar fijamente lo que sucedía.

El joven abrió sus ojos al mundo, brillando el dorado destilando el mismo brillo de un demonio y al mismo tiempo frío como el infierno haciendo a la mayoría temblar, desde el aire descendiendo lentamente hacia abajo como si fuera capaz de controlar la gravedad.

- "Así que es mi tiempo de despertar…" – la voz joven hizo recorrer un escalofrío, su cabello largo tocando sutilmente el suelo, sus ropas épicas blanquecinas desgarradas por el largo sueño, su piel pálida y las orejas puntiagudas resaltando en su cabeza. Aquellos rasgos delicados y tan bellos.

Gritaban por si mismos Ashura a cualquiera. Y desencadeno la tormenta.

- ¡A-ataquen a Ashura-ou! ¡protejan al Tentei! – los guardias rápidamente desenfundaron sus armas yendo en contra de la "amenaza" alterando a muchos otros que irían en ayuda del dios de la guerra.

- ¡Deténganse! – grito el tentei dando bruscamente la vuelta hacia sus soldados sin que fuera escuchado por ninguno, pero ya era inevitable.

A decenas de soldados que venían con espadas a darle muerte, la figura conocida como Kagome-ou dio una sonrisa muy cruel.

- "ahora que desperté el destino seguirá el curso… ¿creen que podrán contra mí? ¡serán los primeros en probar las llamas del infierno!" – en sus palmas surgían llamas rojas y justo cuando llegaban a él los lanzo sin ninguna piedad.

Las llamas se desembocaron tragando a cualquiera sin piedad, los gritos de dolor y miedo eran callados instantáneamente ante su ferocidad cubriendo todo a su paso.

El pelinegro solo reía ante el dolor que provocaba – "¡Todo quien desafía al clan Ashura morirá! ¡sufran, sufran, prueben la agonía sin fin!" – seguía burlándose, las llamas no distinguían a nadie.

Soldados, nobles, sirvientes. Hombres, mujeres, niños, eran engullidos cruelmente.

- ¡Huyan de aquí! ¡sálvense! – el mayor de los generales del tenkai, Zouchouten gritaba tratando de parar las llamas y gruñendo al ir retrocediendo ante semejante poder.

- ¡Kendappa-ou cúbrete por favor! – Karura-ou protegía a su amiga sin entender ni poder creer que Ashura ou fuera capaz de actuar… tan cruelmente.

Taishaku-ten no respondía a lo que sucedía a su alrededor, solo mantenía mirando sus ojos cielo hacia aquel joven que estaba frente suyo.

- Kagome-ou – volvió a decir llamando su atención hacia él, no podía creerlo. Finalmente había vuelto… despertó.

El muchacho miro desapasionadamente hacia aquel hombre de cabellera blanca curioso, pronto su risa fue muriendo y sus ojos dorados fueron sin sentimientos.

Dando pasos tranquilos hacia delante, Raijin Taishaku-ten amplio sus ojos al verle acercándose a él estirando su mano pero… simplemente paso de largo de él como si no existiese en ese lugar.

- ¡Kagome…! – dispuesto a pararlo fue brutalmente detenido por su voz suave como el terciopelo.

- No me hables, en estos momentos ni siquiera soy capaz de recordar mi nombre ni quien soy… aunque tú parece que me conoces quizás eso evita cumplir mi deseo de matarte… - sus ojos giraron un momento viendo la destrucción a su alrededor y todos mirando horrorizados o armados ante un siguiente ataque y luego observar sus propias manos cubiertas de sangre como su cuerpo.

Sus esferas doradas ya no siendo crueles como antes sino con un nuevo brillo.

- solo se que fui despertado y acudiré a la voz de mi señor, como esta escrito – sus ojos serenos volvieron nuevamente hacia él segundos de más observando su expresión impactado. En ese momento un fuego lo cubrió por completo haciendo que luego… simplemente desapareciera.

Taishaku-ten quedo paralizado, su mente tratando de captar sus palabras y viendo desaparecer aquellos profundos ojos dorados que habían demostrado tristeza al observar lo que ocasiono. Aquella expresión que recordaba de antes.

- Kagome-ou – murmuro para si mismo ignorando las voces de sus subordinados que lo llamaban, recordando esa palabra "escrito" sus ojos fueron fríos como el hielo conteniendo su rabia.

Cambiaría el curso de las estrellas, su reinado Tenkai no caería por las seis estrellas ni mucho menos… el resurgido del clan Ashura-ou.

Apretó sus puños dolorosamente tratando de enterrar esos sentimientos de su alrededor al recordar aquel joven y hermoso que nuevamente había resurgido desde el infierno. Que no vio desde hace muchos años.

Bishamonten solo observaba en profundo silencio al Tentei, por dentro de si perturbado al ver aquella expresión en ese hombre. Fue efímero pero un poco de aquello aun estaba en las profundidades de sus ojos.

Recordando perfectamente quien fue ese joven, no como la ignorancia ajena lo creía Ashura-ou. No, Kagome-ou, era alguien distinto.

Quien se creía desaparecido por tantos años en el infierno, ha vuelto. ¿Por qué razón?

- "Taishaku-ten acaso esa expresión de melancolía y determinación es la respuesta a la pregunta que te había hecho…?" – giro su vista hacia arriba viendo a la hija del antiguo emperador y ahora su esposa resguardada a salvo junto a sus doncellas. Kisshouten, y por primera vez creía entenderle.

Algo inalcanzable, pensaba observando las llamas a su alrededor junto a la sangre y los cuerpos barnizados.

La rueda del destino dio otra vuelta hacia el final predicho, ¿lograra alguien cambiar lo inevitable?...

Y ¿Quién realmente es Kagome-ou?...

A/N: Este es un finc que marca demasiadas cosas, el 2012, el primer crossover Inuyasha/RG Veda y además… ¡estoy demasiado feliz! Realmente me encanto como esta este 1º capitulo, ¡ahora me fascina más este fanfiction de todos los que tengo! Me enamore completamente del trama profundo y decidí que debía hacer algo con este manga fantástico de CLAMP (que a decir verdad aunque me encantan sus historias… es la primera que decido hacer)

Ahora dependerá de ustedes juzgar si tuve éxito en mi intento o no ¡por favor sean amables conmigo! Siempre serán valiosos sus comentarios y criticas constructivas.

Deseo un muy feliz 2012.

Kagome-hime.