La oscuridad de la noche estaba al caer, desaparecían los últimos rayos del sol que pronto permitirían su huida de las autoridades. Seguía corriendo lo más rápido que le permitían sus piernas. Los últimos rayos de sol desaparecieron dejando paso a la oscuridad absoluta, sonrió y se escondió tras una formación rocosa esperando a que las cosas se calmaran, pero cuando quiso darse cuenta, solo pudo notar el tacto frío y metálico del cañón de una pistola puesto en su nuca.
- No t muevas, quedas arrestada - Las siguientes palabras fueron pronunciadas por un hombre que parecía agente de policía, era el que sostenía la pistola... La extraña chica debería estar asustada, pero en lugar de eso solo soltó una cínica sonrisa... - De qué te ríes? Si haces un movimiento en falso te volaré la cabeza
- No puedes - El agente la miró asombrado - Ya que... tu pistola no está cargada - Abrió los ojos en señal de que lo había sorprendido, pero no retrocedió y volvió a su expresión seria
- No juegues conmigo, claro que la pistola está cargada - Añadió más serio todavía, en caso de que eso fuera posible...
- No lo está porqué... yo la descargué antes - Lanzó unas balas a lo lejos, lo que finalmente produjo que el agente mirara en el interior de su pistola. Efectivamente: No estaba cargada
- Tú... cómo has..? - La chica sonrió cínicamente una vez más, esta vez mientras sacaba una katana de debajo de su capa negra - NO! Espera qué vas a..? - Pero fue rápidamente interrumpido
- Adiós, pringado... - Con la katana que había cojido ensartó al agente de policía por el estómago, el cual cayó al suelo sin remedio... y sin vida... Desclavó la katana sonriendo nuevamente y lamió los restos de sangre que habían quedado impregnados en el frío acero del filo de su katana - Demasiado fácil - Y dicho esto se fue dejándo el cadáver al descubierto, dónde cualquiera habría podido encontrarlo...
Chapter 01: El principio del fin
En otro lugar completamente distinto, una chica estaba en su cama, durmiendo, y por la expresión de agonía de su cara deducíamos que estaba teniendo una pesadilla. Sudaba e intentaba decir alguna cosa, pero no podía. De repente una presencia irrumpió en la habitación parecía que intentaba despertarla de su sueño...
- ... erta ... despierta... - Oía esa voz, lejana, pero la oía, poco a poco y dentro de su sueño, empezó a correr hacia una luz que apareció en medio de un lugar oscuro, sin nada, mientras era perseguida al parecer por unas sombras que la aterraban; sin pensárselo dos veces saltó a la luz y despertó sana y salva en su habitación. Aunque con la respiración agitada y gotas de sudor frío en su frente, miró a su alrededor y vió la figura de un chico, con el pelo corto desordenado, de color negro y con los ojos de un verde brillante, al verlo suspiró tranquila
- Estás bien? - Preguntó con gesto de preocupación en su rostro
- Sí, sí... - Respondió ella - Solo fue una... pesadilla -
- Pesadilla? Y qué soñaste? - La siguió interrogando interesado, pero ella movió la cabeza en signo de negación
- No importa, no es nada - Le sonrió con su mejor sonrisa falsa. Él finjió no darse cuenta de que algo la preocupaba y se dio la vuelta
- Bueno, lo he intentado, aunque supongo que es normal que me preocupe por mi hermana pequeña - Y dicho eso, abandonó la habitación dejando a la chica cabizbaja
- Solo fue una pesadilla pero... parecía tan real... -
Se levantó de la cama, aún pensativa, no entendía su sueño para nada, aunque no sabía porqué le estaba dando tantas vueltas, al fin y al cabo solo fue una pesadilla, aunque a ella esas cosas le parecía que todas tenían un significado. Hizo la cama, se vistió y se lavó la cara. Mayu era una chica con el pelo marrón claro, un poco largo, y sus ojos eran también marrones, aunque con un tono más oscuro
Finalmente se dirigió al comedor para desayunar con su familia, aunque había dormido tanto que todos ya habían comido. Su padre leía el periodico sentado en la butaca, su hermano se apalancó en el sofá para jugar con su Playstation 2, como hacía siempre, y su madre lavaba los platos mientras le señalaba el desayuno que le había dejado preparado en la mesa. Se sentó y empezó a comer, pensativa y sin decir una palabra, sin embargo sus padres estaban demasiado ocupados como para darse cuenta de lo sería que estaba, pero su hermano si se percató de lo rara que estaba su hermana, ya que normalmente era una chica llena de vitalidad y alegría.
- Eh Mayu! - Mayu era su nombre - Luego nos echamos una partida al Tekken? - Preguntó intentando animarla, ya que sabía que el Tekken era uno de sus videojuegos de lucha favoritos
- Talvez luego - Volvió a responderle con su mejor sonrisa falsa - Esque antes quiero hacer algo! - Terminó rápido de desayunar y dirigió corriendo a su habitación ante la mirada preocupada de su hermano
Una vez en su habitación, se dirigió a unas estanterías (Hay que decir que la mayoría de lo que había eran comics...) Cojió un libro (No, este no era un comic) Y empezó a buscar algo. Mayu era de las personas que creían que nada ocurría por casualidad así que el libro que había cojido era "El diccionario de los sueños" Y empezó a analizar la extraña pesadilla que tubo esa noche...
- "Oscuridad" - Murmuró mientras buscaba por el libro para encontrar la siguiente definición:
La oscuridad es sinónimo de ignorancia, maldad, muerte y miedo de lo desconocido. Soñar que está perdido en la oscuridad, significa que está deprimido o inseguro.
Pero esa definición no la ayudó demasiado, así que decidió buscar otra palabra que creía que era clave en el sueño: "Sombra". pero no le salió nada interesante. Decepcionada volvió a guardar el libro en la estantería.
Hoy era sábado, por lo que no tenía que preocuparse por las clases, sin embargo miró la agenda y vió que, como casi nunca ocurría, no tenía deberes, así que intentó relajarse y volvió a la sala de estar donde su hermano seguía con la Playstation
- Kai... - Su hermano se giró
- Si? -
- Sigue en pie lo de esa partida de Tekken? - le preguntó ya con una sonrisa sincera en sus labios
- Hum... no sé, debería pensarlo - Rió su hermano satisfecho
- Qué pasa? El "Gran señor del Tekken" tiene miedo de qué su hermana pequeña le de una paliza? - Añadió en tono de burla
- Venga, coje ese mando y demuestrame lo que sabes hacer
Mayu cojió el mando y se puso a jugar con su hermano intentándose olvidar del extraño sueño y pasandóselo bien como solían hacer los fines de semana que ninguno de los dos tenía planes. Su padre cerró al fin el periódico y se fue a una comida de empresa que tenía que ir, y su madre salió a hacer la compra. El ambiente en casa estaba tranquilo... como si absolutamente nada hubiera ocurrido...
- Señor, está muerto, por la rigidez del cadaver deducimos que ya hace unas 8 horas aproximadamente -
- Lo suponía... - Un hombre que parecía jefe de policía miraba el cadaver de un hombre que tenía una herida en el estómago y le atravesó todo el cuerpo - Tubo que ser "ella", no hay duda alguina
- Se refiere a...? - Un agente asustado quiso empezar la pregunta, pero no pudo terminarla
- Exacto, me refiero exactamente a esa chica, esa a la que llaman... La muerte implacable... - El jefe de policía apretó el puño en señal de rabia - Parece que esa cría se rie de nosotros, ni tan solo ha intentado esconder las pruebas ni una sola vez en todos los asesinatos que ha cometido! -
- V-Vamos jefe, no se ponga nervioso - El agente intervino asustado
- En fin... - Suspiró ya más tranquilo - Llevaos su cadaver, almenos haremos que tenga un funeral digno...
- Sí señor... - El agente, cabizbajo, aceptó la orden, y junto con sus compañeros cargaron el cadáver en el coche
- Juro que te encontraré y te detendré tarde o temprano... Muerte implecable... - Subió al coche con sus agentes y tomaron el rumbo a la funeraria más próxima
- Esos agentes de policía no podrían ser más patéticos, no comprenden que nunca me cojerán, son tan ineptos... -
Una chica con capucha negra miraba la escena a lo lejos, sentada en el tejado de una casa abandonada. Al estar segura de que el coche de policía se había ido y de que no había ni un alma cerca se quitó la capucha - Uf... aquí dentro hace un calor asfixiante... -
Se pudo ver a una chica con dos moños recubiertos por una tela amarilla. El pelo lo tenía de color marrón, y los ojos también marrones, pero en un tono más oscuro.
- Bueno, me parece que debería volver, este lugar no es seguro y esos tres creerán que al final me han pillado los polis, aún no entienden que no deben preocuparse por mi - Sonrió divertida diciendo eso último.
Finalmente se puso la capucha otra vez y saltó de la alta casa cayendo perfectamente en el suelo. Finalmente salió corriendo del lugar dejándolo desierto... realmente lo estaba? O solo lo aparentaba...?
CONTINUARÁ...
N/A: Bueno, este es el primer capítulo de mi historia que nació de un modo un poco raro... Anoche cojí el Word y empezé a escribir, y la verdad, me gustó como estaba quedando así que decidí terminarlo de escribir y así ha quedado, aún no tengo muy planteado como continuará la historia, pero espero que sea algo guapo xD dicho esto aquí os dejo con la historia xD hasta pronto n.n (Espero xD)
