DISCLAIMER: Naruto no es mio, soy una fan escribiendo para fans.
La pared del hotel vibró cuando un cuerpo cayó contra esta. El chico trató de levantarse pero otro chico lo detuvo tomándole por el cabello.
"Has sido un chico muy malo" – Gruñó acercándose tanto que su aliento acariciaba sus mejillas marcadas por lagrimas,
"N-No se… no se de que hablas" – Dijo dando un respingo cuando sintió un par de dientes clavarse en su cuello.
"¿Qué diablos hacías con ese hombre?" – Preguntó, golpeando su cabeza contra la pared.
"S-Sai solo era un mesero" – Respondió con un sollozo.
"¿Solo un mesero Naru chan? Estabas coqueteando con él" –
"Estas loco, yo no estaba haciendo nada" – Una fuerte bofetada le hizo parar de hablar.
"Cuidado con esa lengua" – el rubio se deslizó por la pared recibiendo una patada en el estomago seguida de mas golpes.
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Sai suspiró tronando sus dedos y hombros antes de cerrar la puerta tras su espalda dejando a Naruto en el piso en un estado de semi inconsciencia. El rubio se tomó un momento para descansar y aclarar su mente antes de tratar de levantarse poco a poco tambaleando al dar los primeros pasos. Con un gruñido de dolor se dirigió a la puerta con pasos lentos e inseguros hasta que sus dedos se encerraron en la perilla que lo llevaría a un mínimo lapso de libertad. Su vista se nublaba y los objetos se duplicaban y parecían danzar antes sus ojos azul oscuro.
Un hombre caminaba en su dirección, su mirada fría lo miro de arriba abajo hasta pasar a su lado, sus hombros chocaron levemente pero eso bastó para arrojar al débil rubio al piso. El pelinegro se dio la vuelta observando con atención al chico que yacía a sus pies y sin mediar palabra lo levantó…
El chico entró a su habitación adentrándose en la suite para depositar al rubio en la cama, lo desnudó lentamente dejando al descubierto los moretones y cicatrices que cubrían su cuerpo.
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Naruto abrió los ojos y trató de sentarse pero todo su cuerpo se quejó ante el esfuerzo.
"No creo que sea una buena idea" – Dijo una voz, Naruto se dio la vuelta con ojos asustados clavando su mirada en el otro ocupante de la habitación.
"¿Q-Quien eres?" – Preguntó el rubio.
"Uchiha Sasuke, presidente de la corporación Sharingan" – Respondió con aire de grandeza.
"¿Qué hago aquí? No recuerdo…" – siguió inquiriendo.
"Te desmayaste en el pasillo, no se en habitación te hospedas así que te traje aquí, a mi suite"
"Lamento la molestia Sasuke" – Se disculpó Naruto, el moreno levantó una ceja, no se conocían y el idiota ya lo estaba llamando por su nombre.
"No fue una molestia… debo irme pero tu puedes quedarte en la habitación el tiempo que necesites, yo pagare todo" – Sasuke dejó el libro que había estado leyendo en la mesa de al lado, tomó las maletas y se dirigió a la salida.
"Uzumaki Naruto" – escuchó la voz del rubio.
"¿Hm?"
"Ese es mi nombre"
"Nos vemos… Naruto" – Se despidió sin darse la vuelta para ver al rubio una ultima vez.
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Cuando el rubio despertó por segunda vez el reloj apuntaba al medio día. Con el cuerpo aun adolorido logró levantarse para tomar un rápido baño, notando por primera vez que estaba usando ropa que no era suya y que por cierto le quedaba un poco grande.
Entró al baño absolutamente asombrado de lo grande que era, comenzó a desnudarse sin apartar la vista del espejo que devolvía la imagen de su cuerpo entero, su estomago estaba manchado por un moretón, acarició la piel bronceada que lo rodeaba antes de sumergirse al bañó caliente que relajó inmediatamente sus músculos. El rubio se volvió a cambiar a su antigua ropa sin importarle lo sucia y arrugada que estaba.
Al terminar cerró la habitación con llave y entregó la tarjeta en recepción donde le aseguraron que el moreno pagaría todo.
"Etto… disculpe… ¿sabe si la habitación 200 esta aun ocupada?" – Preguntó el rubio a la joven sonriente que atendía el mostrador.
"No, el señor se retiro hace alrededor de una hora"
"Muchas gracias"
"A la orden señor" – La joven asintió devolviendo al rubio otra sonrisa.
Naruto suspiró saliendo del lujoso hotel para llamar un taxi que lo llevó al apartamento que compartía con su pareja.
No había absolutamente ningún signo que le indicara que el pálido pelinegro hubiera estado ahí, las luces estaban todas apagadas.
"Vaya fin de semana romántico" – gruñó el rubio sentándose en el sofá.
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Y entrada la noche Sai llegó a casa con una rosa entre sus manos, encontró al rubio en la cocina tarareando una canción y moviendo su cintura a su ritmo, lo rodeo con sus brazos por la espalda dejando la rosa apoyada contra su pecho.
"Lo siento Naru chan, no fue mi intención lastimarte" – Se disculpó, Naruto sonrió con tristeza, no era la primera vez que esto pasaba y estaba seguro que no sería la ultima vez.
"Lo se Sai Koi"
"Te amo, lo siento" – Volvió a disculparse pero sus brazos lo estrecharon con mas fuerza de la necesaria cuando el menor se tardó en contestar.
"Yo también te amo"- Contestó, cerrando los ojos con pesar.
¿Cómo había llegado hasta este punto? Pensó el rubio, dejándose guiar a la cama, hace ya dos años que los dos estaban juntos pero un día todo cambio sin ninguna explicación aparente, hace ya meses que el pelinegro había comenzado a golpearlo amenazándolo con matarlo cada vez que decidía marcharse para nunca volver.
Los besos que revoloteaban por todo su cuerpo no eran suaves caricias, eran mas una tortura, un profundo dolor que viajaba por cada rincón dejando un amargo sabor.
"Buenas noches Koi" – Sai lo besó en los labios a la fuerza tomándolo por el mentón con suficiente fuerza para dejar marcas.
"Buenas noches Sai"
P.D
NOTA: no odio a Sai, es uno de mis personajes favoritos pero alguien tenia que ser el malo hahahaha
La fic es muy OOC
Muy bien chicos y chicas, una nueva fic que espero poder terminar y actualizar seguido.
espero que les guste. :)
