Hola, aquí les dejo este mi primer fanfic de Inuyasha, espero les agrade y me gustaría saber que opinan de esta idea que se me ha ocurrido.
Aclaraciones: Este fic está narrado en el siglo XXI, años después de terminada la historia del manga, sin embargo, los personajes de Inuyasha aparecerán en los próximos capítulos.
Disclaimer: Los personajes de Inuyasha no me pertenecen, todos son propiedad de Rumiko Takahashi.
Disclaimer 2: Los personajes que aquí aparecen y no reconozcan como parte de Inuyasha me pertenecen, así como la trama de este fanfic.
TE ALCANZARÉ
Prefacio.
El sonido del choque de ataques, el silbido de las flechas al ser lanzadas, el choque de las espadas era lo que me rodeaba. Pensé que ese sería el final y mientras duró fue lo mejor que a mi vida pudo pasarle.
En la vida, en el mundo en el que vivimos aunque hay demonios conviviendo con los humanos, el bien y el mal combaten entre sí para obtener más poder y ser el que domine.
No hay demonios malos como tampoco existen los humanos malos, solo aquellos que se equivocaron de camino y sé que puede encontrarse algún modo para terminar con esto, pero, estamos en guerra.
¿Quién se preocupa por eso ahora? Aún puedo recordar que la convivencia con los demonios era lo más normal, llegué a acostumbrarme a observarlos entre nosotros.
De una vida de adolescente normal, me encontré metida dentro de un mundo lleno de demonios, mitad demonio, exterminadores y sacerdotisas. Ha pasado un año. Un año desde que descubrí lo que soy y elegí mi camino.
Un año desde que la guerra se desató. Un año desde que nuestro enemigo despertó y anunció que nos acabaría a todos, a los humanos y a los demonios.
No debo permitirlo. No lo haré. Porque soy parte de ambos mundos aunque tardé en darme cuenta.
Disparo una flecha más, mis oponentes caen derribados por la fuerza espiritual que invoqué en mi ataque. Miro a mi alrededor tratando de encontrarme a mi pequeña Daimonium, ella sigue luchando con entereza y firmeza, tal y como siempre ha sido y sonrío.
Un año desde que la encontré y juntas hemos vivido numerosas experiencias, ella fue mi principal maestra en este mundo de demonios.
Las fuerzas del bien y el mal chocan entre sí con tremenda fuerza. Debemos salir victoriosos, debemos hacerlo.
Mi familia confía en eso…
Y yo también….
