¡Hola, holitas!, verán esta es mi primera historia que me atrevo a realizar. Asi que no sean muy duros conmigo, por favor. Comentarios, criticas, amenazas de muerte, etc, etc, son muy bien recibidas, bueno lo ultimo no tanto jejeje… Espero que le guste mi historia.

Los personajes de Soul Eater no me pertenecen, si me pertenecieran Soul y Maka serian padres, Black Star Seria el mejor Dios del universo y Kid seria totalmente simétrico jejeje

Había una vez una niña, que vivía en la ciudad de Death City, era la niña más feliz que podían imaginar, tenía una familia, un hogar. Todo lo que puede desear una niña. Un día, junto a su familia, decidieron salir de viaje a un pequeño riachuelo al que acostumbraban a ir. Todo estaba a la perfección, estaban jugando, divirtiéndose. Pero la felicidad… no es para siempre. Ya de regreso a su hogar, por cosas del "destino", sufrieron un accidente. Desgraciadamente solo sobrevivió la niña. La niña se quedo estática, viendo como su familia había muerto en ese accidente.

Desde ese momento la niña quedo sola. Ya no tenía familia, ya no tenía hogar. La niña quedo huérfana, ya no tenia nada de lo que antes le daba felicidad.

Al quedar huérfana, tuvo que ir a vivir con su tío, hermano de padre. Este aparentaba cuidarla y darle todo su amor a su sobrina, hasta se ofreció dejar su hogar, para irse a vivir con ella. Se apodero de toda la casa, de todo lo que era de su familia, y a ella la traía como a una muñequita que tenia que seguir sus órdenes, como la sobrina que seguía teniendo una vida perfecta. Ella ya no quería esa vida, ya no lo aguantaba más.

Pero un día, puede que allá sido el destino conoció a un hombre que le cambio la vida, que le creyó el infierno que vivía con su tío, y lograr escapar juntos. Y vivir feliz el resto de su vida.

Esta es más o menos mí historia, con la diferencia de que no fue cosa del destino, todo esto fue para que mi padre, no heredara la herencia que le correspondía, y todo se lo quedo mi tío Giriko, un hombre que no tiene un limite para conseguir lo que quiere, cuando quiere, en donde quiera. Y que no hay ningún hombre que me ha llegado a salvar de nuestro cruel destino.

Pero gracias a Kami, sobrevivimos mi hermano y yo, es lo que mas agradezco es que estemos vivos, pero a la vez no, mi tío nos hace la vida imposible y más que nada a mí. Ya no quiero vivir con el le tengo mucho miedo, pero al ser el único familiar que nos queda, tenemos que estar con el. El me obliga hacer cosas que no quiero pero, si no lo hago, el que la pagaría seria mi hermanito Hero, y no quiero que le pase nada, yo lo protegeré, dando mi felicidad si es necesario.

A se me olvidaba, yo soy Maka Albarn, tengo 16 años, y ya han pasado 4 años desde ese horrible momento. Mi hermanito Hero, tiene apenas 5 años, así que no recuerda mucho a nuestros padres, pero siempre trato de hablarle lo mas posible de ellos, cada ves que estamos solos, ya que a Giriko no le gusta que hablemos de ellos, no se si sea por culpa, o por hacernos mas daño.

En este momento me encuentro en la casa de mi tío, preparándole la comida, aunque espero que llegue un poquito tarde, porque no creo terminar de hacer la comida, todo por que de camino me tropecé y rompí los huevos, así que me tuve que regresar al súper a comprar otros, pero mejor me apuro hacer la comida, no quiero que me "castigue" de esa forma y no quiero que Hero se asuste de nuevo.

-¿! Maka, ya esta la comida?- Maldición, ya llego y no termine de preparar la comida.

va a es..star- doble maldición, volví a tartamudear y a el no le gusta eso.- siento como me jala de los cabellos.

-¡maldita se estúpida!, cuantas veces tengo que repetirte que cuando yo llegue ya debe estar servida la comida en la mesa, ¿es que es mucho pedir que hagas eso? ¿Lo es?- vamos Maka di algo, si no te va a ir peor, pero no tartamudez por favor.

-no, e..es- maldición lo primero que digo, y lo primero que hago

-¿ya empezaste a tartamudear de nuevo?, creí que ya te lo va había quitado con ese castigo, pero ya veo que no, así que será mejor repetirlo ¿no crees?, y por no estar la comida a la hora será otro castigo mas.

- No, oneg..gai, ya..a no lo vue..lvo hacer- pero si lo acabo de hacer de nuevo, ¿porque no puedo dejar de hacerlo?

- pero Makita lo acabas de hacer de nuevo, o… pensándolo bien mejor castigamos a Hero sin comer durante 4 días, ¿te parece?- maldito, sabe que ese es mi punto débil y que con eso acepto todo lo que el quiera

-¡NO!, POR FAVOR NO LE HAGAS NADA A HERO, el no tiene la culpa de nada, yo a..acept.o toda la re..ssponsabilidad.

-Asi se habla makita, la hermana mayor siempre ve por el bien de su hermano menor.- asi como tu lo hiciste con mi padre.- Ya sabes te veo en mi recamara como siempre, ¿de acuerdo?

, c..como uste..d - le respondo en susurro, con tal de que no meta a Hero en esto.

- buena chica, a demás me haz quitado el apetito con el coraje, así que voy a salir, regreso mas tarde para tu castigo- Giriko sale de la cocina y sale por la puerta principal.

-Maldición, ya no aguanto esto, ya no.- No soporto más mi cuerpo y caigo de rodillas y me cubro la cara con mis manos. A veces creo que lo mejor seria huir, pero no puedo, ¿como cuidaría de Hero?, no tengo con que cuidarlo. Solo causaría que Hero tenga una vida peor de la que ya tiene.

-Maka, ¿etas bien?- es Hero no quiero que me vea llorando.

-Si Hero, estoy bien- le doy una de mis mejores sonrisas que tengo- es solo que me queme el dedo- valla mentira, pero no le puedo decir porque lloro en realidad. Hero sale corriendo así mi y me abraza

-Maka mal, ¿poque me mientes?, yo se que tio te hizo algo malo, yo te puedo defende de el- jejeje para que le miento a Hero si el me conoce mejor que nadie.

-jejejeje- le acaricio la cabeza- esta bien Hero, si tienes razón- me limpio las lagrimas que tengo en la cara- pero tu no debes de hacer nada que haga enojar a tio, ¿entendido?, si no te va a castigar a ti y eso no quiero.

-eta bien, Maka, solo po que tu lo dices.- Hero me regala una de sus sonrisas que tanto adoro, y no quiero que deje de sonreír de esa forma por culpa de Giriko- ¿ya ta la comida?, ¡po que ya tengo hamble¡

- jejeje, ya casi esta- le sonrió- solo le falta que se caliente otro poquito

- ¡peo es que ya tengo hambre!

-Si ya lo note, pero no puedo apresurar a que se caliente mas rápido- veo que Hero agarra la silla y se sube a ella y empieza a gritar.

- ¡vamos comida caliéntate lapido que ya tengo hamble!- este niño y sus ocurrencias, pero me alegro de que al menos el pueda estar así de feliz.

Lleve a Hero a su cama, y le leí un cuanto, que por cierto se quedo dormido a la mitad de la historia, como siempre. Me dirijo a mi recamara para terminar los deberes de la escuela, lo mas pronto posible, antes de que llegue Giriko de su "salida a la calle".

No es mucho, ya que en la hora de descanso me puse a adelantar los deberes, así que ni una hora me tardo. Ya terminado, solo me queda esperar a mi tío en su recamara si no me va a ir peor.

Solo pido a Kami-sama que no llegue borracho a la casa. Porque se pone más agresivo.

-ma..makitaaaa… ya llegu..e,- genial, Kami-sama no escucho lo que le pedí.- ¿ya es..estas l..ista para tu cast..tigo?

-si Giriko, ya en t..tu reca..ca..amara- Maldición, tenias que tartamudear.

-Es..tupida- me abofetea- otra ves ya estas tartamudeando, ¿y..ya porque uno te cas..stiga?

Me tapo con la mano en donde me abofeteo. Siento que de mis ojos empiezan a salir las lagrimas y trato de limpiármelas lo mas rápido posible, para que no las vea el.

-Makita, a si..sido una chica mala, asi que se me..merece un ca..castigo

Solo dejo que haga lo que siempre me hace en mis "castigos" quedarme quieta, hacer caso de lo que el diga, y no gritar para que Hero no sepa de esto, bueno por completo por que al otro día, amanezco golpeada porque me pongo a llorar y es que no lo puedo evitar y Hero piensa que me pega, mejor eso a que sepa que en realidad el me viola.

-muy bien makita, flojita y cooperando- trato de no verlo a la cara para que no me vea llorar y no ver su maldita cara que me da asco, siento como me empieza a arrebatar mi pijama y mi ropa interior, y me penetra de golpe el maldito. Y no puedo evitar gemir del dolor.

- Pe..perra, ya te he dicho que no llores- me vuelve a abofetear y me agarra de la barbilla y siento como sus labios los pega a los míos, el me besa de una forma muy salvaje, mientras que yo no lo correspondo. Siento que mis lágrimas empiezan a correr más rápido. El empieza a penetrarme mas rápido y mas duro, mientras me rasguña una de mis piernas. Solo me queda esperar a que termine.