Disclaimer general —porque no pienso escribirlo a cada cosa que suba—: Harry Potter no me pertenece. Todo de Rowling y eso que ya saben.

Nota general —también—: Como veréis, será muy complicado hacer una recopilación de Theomiones —o Nottmiones— utilizando algún tipo de patrón. Nada de cosas como de la A a la Z, porque por mi semi obsesivo compulsividad (?) no me enredaré sólo yo, sino que os terminaré confundiendo a ustedes de paso. Subiré dependiendo de cuánto tarde en salirme un escrito, y, oh, es una recopilación all. Y llamo "all" precisamente a que pueden ser drabbles, de 155w, mini one shots —de setecientos a novecientos, o mil quinientos—, one shots, e hiper mega monumentales one shots —lo que sería de más de diez mil, supongo—.

Sé que soy bastante confusa... pero se agradece que hayan leído la nota general.

Gracias, inteligente persona (?).


Título: Lo improbable probable.

Rated: T.

Summary: Que cuando Harry y Ron sienten unas grandes ganas de matarlo, deberían saber que aunque hasta Pucey cayó, él, Theodore, no lo haría ni en sus mejores sueños.


Maybe someday, princess

[...]

—Me encanta como dices cosas obvias con la sensación de que descubriste algo.


.

.

Soltó un suspiro ansioso al tiempo que se frotaba las manos. Presentía que algo saldría mal, tenía miedo. Siempre intentaba hacerle caso porque tenía razón, con buenos argumentos y siempre siendo objetivos, que sus amigos no eran ni sus padres ni sus hermanos como para que les informara de todo. Sobre todo porque siempre había tenido una vida amorosa algo complicada gracias a ellos, que odiaban a cada uno de los chicos con quien salía.

Lo peor de todo, es que la vez antepasada habían llegado a otro nivel con Adrian —ese Adrian—, actuando como que les agradaba al menos regularmente, seguramente porque sabían que al ser mago no podían hacer lo mismo que con los chicos no magos. Haciéndola pensar que querían para ella un mago, por comodidad de todos principalmente, lo cual sí era en cierta parte egoísta. Sin embargo tarde se dio cuanta, cuando hasta Adrian comenzaba a dudar llegando al punto de preguntarle unas tantas cosas. Como si roncaba, era una maniática con dejar la tapa del inodoro abajo, que no soportaba una llave con el agua corriendo, o que cada plato, cuchara, vaso o taza debía quedar impecable.

—De las que la mayoría de esas cosas eran ciertas. ¡Pero ella no roncaba!—

Eso, dado que era Hermione. Quien no se acostaba con cualquiera, y como con Pucey llevaban sólo dos meses y unos días, no podía saber si ella le iría a mentir o no. Y todo hubiera ido bien de no ser porque Harry y Ron la convencieron de que lo dejara, inventando o sacando excusas de cuando esos tres "salían en buen plan" —por supuesto no fue por ellos quisieran que lo dejó precisamente, fue porque algo le decía que Adrian no iba a aguantarlos mucho más. Mejor cortar por lo sano, dicen—.

Resultó que más de una vez llegaron con el chisme. Que Adrian había estado con treinta mujeres a las cuales dejaba una vez obtenía lo que deseaba —lo cual ella no se creía, porque no era verdad. No iba a estar con él si supiera que lo hacía o seguía haciéndolo—, que era un borracho —a menos que se controlara muy bien esas siete veces que habían salido a algo con un bar, no podía ser cierto—, maleducado —más maleducado era lo que hacían—, irresponsable, que se había subido a una escoba ebrio —podía ser cierto, Ron y Ginny lo habían hecho alguna vez. Incluso Harry—...

Mentiras, exageraciones, medias verdades, verdades con omisiones. Unas las sacaban de él, otras al acompañarlo a algún lado, cuando lo invitaban... y siempre sabía cuál era cuál. Sería idiota si no lo supiera, esos dos no eran los mejores mentirosos. Que Adrian no era un borracho, hasta ella se había embriagado una vez aunque claro no se sentía orgullosa de ello.

También sabía que ellos habían usado ese método con Adrian porque se conocían, mago y Slytherin, siendo auror, era imposible no topárselo por ahí. Ellos realmente tenían de que Adrian no le hubiera tomado demasiada importancia, lo que sí lamentaba y les recriminaba en cierta manera que terminaran provocando aquello. Pero él era bastante maduro, y ella no evitaría que siguiera torturándolos como el superior de esos idiotas que era. Vamos, al menos un par de semanas más, le había dicho hace como un mes. En realidad a ella le molestaba un poco porque eso sería abusar de su puesto, pero tenían que aprender —un poco al menos— de alguna manera.

Hermione se pasó las manos por el rostro, todavía tensa. Lo único que la relaja un poco era pensar en las bromas que él hacía. Como cuando le pidió que les dijera cuando hubiera nieve, ella había tendido a pensar que era porque quería provocarles un infarto en plena época navideña, sin embargo le había salido que en el caso de quisieran matarlo, él sólo tendría que salir y comenzar una infantil guerra de bolas de nieve —con algo de magia no verbal para que les doliera más, cómo no— con tal de que los muggles no se centraran en un "accidental" expulse de magia.

Cuando ella escuchó la idea no tuvo otra más que reír por las ocurrencias del chico. Pero le gustaba, no lo hacía con mala intención, y es que se inventaba formas de largarse sin ser dañado ni un poco en las cuales a la vez no lastimaba tanto a sus amigos, cosa de la que ella se enojaría si llegaba a suceder. Ni él podía dañarlos a ellos, ni ellos a él.

Ni se dio cuenta de cuando Harry y Ronald se encontraban ya junto a la mesa que había elegido para esperarles. Cuando lo notó, ellos la saludaron, les devolvió el saludo y se sentaron del otro lado, frente a ella.

Entonces fueron unos de los minutos más incómodos de su vida. Cada relación que intentaba fracasaba luego de que ellos lo supieran. Y por eso volvía a ser como la primera vez... de cierta forma. Porque con él había estado mucho más tiempo que con los otros antes de contarles a sus amigos.

Y esperaba, de verdad con todas sus fuerzas, que la "estrategia" que habían ideado funcionara realmente.

No importa, Hermione. Pase lo que pase, intenten lo que intenten, no me separaré de ti... Pero se supone que eso ya lo sabes...

Con la imagen de su coqueta sonrisa ladeada, se armó de valor y suspiró frente a sus amigos, quienes no sabían si mirarla asustados, esperarse lo peor, un regaño, o que ella estuviera abusando inconscientemente, sin razón aparente, del maldito suspenso.

—Bueno chicos, primero, lamento haberlos hecho salir aún cuando está nevando. Pero hay una razón. No tan buena pero... —lo pensó un poco— es lo mejor o más infantil que se le ocurrió...

—¿Qué razón?... ¿A quién se le ocurrió? —preguntó Harry con curiosidad, mientras Ron veía el sutil menú que una camarera le había traído.

—La razón ahora no es muy importante, ni muy lógica —hizo una mueca por lo de la guerra de bolas de nieve.

Segundos más tarde se dispuso a hablar de nuevo, pero se fijó en el pelirrojo y frunció el ceño.

—Ronald.

Al darse cuenta también, Harry le dio un codazo. Sólo entonces él subió la mirada y carraspeó para proseguir a dejar el menú en la mesa y prestarle algo de atención a Hermione.

Ella volvió a suspirar.

—Verán yo... estoy con alguien —al ver la mirada de ellos cambió un poco lo que iba a decir, presa de la ansiedad—. Ya saben, lo de siempre —intentó quitarle importancia—, no es muy importante por supuesto es...

Ante las indescifrables miradas de los dos, su teléfono sonó anunciando un mensaje.

"Espero no sea en serio."

Se mordió el labio y volvió a guardarlo, disponiéndose a esperar sus reacciones y preguntas, sobre todo.

—¿Quién es?

—¿Lo conocemos?

A penas acabaron su celular volvió a sonar.

"Diles que soy Pucey. Quiero saber cómo reaccionan."

Hermione frunció el ceño ante la idea y no pudo evitar responderle.

"No. Y déjame hacerlo a mi manera."

"¿Para que les digas que en realidad soy uno de tus amigos y querías sólo saber cómo reaccionaban? Que poco Hermione, si me permites..."

—Él es... bueno, sí lo conocen, creo.

"Vale... ¡Ya sé, aún mejor! Diles que soy Malfoy."

"¡Por favor! No lo haré, desaparece hasta que sea necesario."

"Pff, como quieras..."

—¿Crees? —inquirió Ron.

—Es que no sé si lo recuerden —contestó.

Ellos dos se miraron por un momento de reojo, como evaluando posibilidades, y volvieron a mirarla.

—¿Quién es?

—Él es... Merlín —se pasó las manos por el rostro—. Es T—.

—Hermione, lamento haber tardado tanto.

Los tres voltearon para encontrarse con un chico alto, de cabello castaño con algo de nieve, ojos azules y de cuello enfundado en una palestina de dos colores y con un abrigo negro.

—Hola —lo saludó lo más normalmente del mundo.

Como si tener a un ex compañero de Slytherin delante fuera siquiera lógico para personas como Harry y Ronald.

—¿También le dirías a Nott? —preguntó Harry, dando por hecho que estaba ahí por Hermione. También dando por hecho que eran algo como amigos.

—Creo que la pregunta es por qué no nos dijo que era su amigo, o que vendría, al menos —dijo el pelirrojo con expresión desconfiada.

Theodore sonrió aún más por lo que decían. Eran idiotas, realmente.

—No les conté porque Theo—.

—Hermione temía vuestras reacciones, precisamente.

—Theo —le advirtió ella.

Él la miró fijamente por un rato y terminó suspirando.

—Bien —cedió—, son más idiotas de lo que me dijiste.

—¿Qué?

—Yo nunca dije eso.

—Claro que no lo hiciste, pero sabes que no es bueno encubrir la verdad para nuestra conveniencia. Y aunque no me lo hayas dicho... —sonrió satisfecho.

Harry frunció el ceño pensativo, al tiempo que Ron se encargaba de asesinar a Theodore con la mirada, y Hermione se pasaba las manos por el rostro. No hallaba que hacer, a ese paso alguno se terminaría lanzando contra su novio. Lo peor de todo es que se lo merecía, pero no podía negar que guardaba un poco de razón, por muy mínima que fuese. Sus amigos eran algo idiotas.

—No me dejaste de otra, Hermione —se excusó al verla tan complicada— ¿Que no es realmente importante? Me dueles... —negó con la cabeza haciéndose el decepcionado.

—Tú.

El de la discordia miró a los lados al oír a Harry, para terminar apuntándose a sí mismo, actuando inocentemente.

—¿Yo?

—¿Es él con quien estás, Hermione? —preguntó volviéndose para mirar a su amiga.

—Mira Harry—.

Theodore rodó los ojos por la pregunta del de lentes. Al menos a él le tenía un poquito de fe, pero ya nada. ¿Cómo lograron separar a cualquiera de Hermione? Eran unos suertudos. Podían ser muy idiotas pero tenían a la chica de su lado, eso era ya suficiente para ser medianamente protegidos de insultos explícitos, cosas violentas como puñetazos en plena cara y cosas por el estilo.

—¡Por supuesto que soy yo! Pero les contaré que tienen suerte, menos mal que dejó a Malfoy —dijo sin dejar responder a Hermione. Ya lo haría, pero eso le divertía de cierta manera, aunque estuviera desesperando por la ceguedad de esos dos—. ¿Sabían que le va al BDSM?

—¡Hermione!

—¡Theodore Nott!

—Tengo razón, no son sólo idiotas, también crédulos e ingenuos —sentenció. Soltó un bufido y se volteó hacia ellos—. Basta, no les queda el papel de padres preocupados... O más bien ni eso pueden hacer solos. Sin embargo, sepan que nunca hubiera dejado que tuviera algo con Draco.

Claro que aunque dijera eso para tranquilizarlos un poco —fue peor realmente pero al menos les quitó la preocupación sobre Malfoy—. Cómo no estar enojados sinceramente, aunque de verdad habían demostrado ser unos desconfiados con respecto a Hermione. Años y todavía no confiaban en su palabra, ella tenía todo el derecho de tampoco confiar en ellos. ...

O tal vez era Theo el buen mentiroso.

—Entonces... ¿no tendré que correr y provocar una patética guerra de bolas de nieve para salvarme el culo? —preguntó sin darle una real importancia y casi tomándolo a broma.


.

.

Si quieren ver un Theomione en una situación en especial pueden decirme. No prometo nada porque no controlo sobre mi inspiración, pero si la idea me interesa y a inspiración también, lo haré con gusto. Los amo pero tampoco es que tenga muchas ideas cuando se trata de ellos, es algo complicado, antes no me pasaba esto con los Dramiones. Aún así me encanta así, me frustra no poder sacar mucho, pero seguiré hasta lograr dominar esta pareja.

Y por cierto, Theo puede variar a veces dependiendo de lo que trate el escrito. Normalmente para cosas más angst prefiero un Theodore casi retorcido. Lo digo porque como no llevo un patrón, escribiré de lo que se me venga a la cabeza. XD

En fin, ya saben.

Si tienen alguna idea igual me dicen y la ocupo, con el respectivo crédito y dedicatoria, claro.