Bueno, si les soy sincera realmente causo algo en mi cuando vi a Blaine ir de visita a Dalton, realmente yo sufria junto a el! ¿diganme si no les paso lo mismo? Bien, rhyan! Haz logrado meternos en la historia!, pueden creerme cuando les digo que estaba punto de llorar! y lo hubiera hecho si no fuera porque estaba a iguales partes enojada por la aparacion de sebastian; de cualquier manera, en lugar de llorar, me parecio mejor idea escribir, asi que de eso va esto! Lean y díganme que tal ¡ si es un fiasco, ya lo saben, pueden decírmelo! Sean sinceros! Gracias por leer!
Extraña sensación, no podía definirla correctamente, era casi como haber perdido a una hermano menor, como si una parte de su corazón estuviera ahí todavía, esperando por él, esperando su regreso. Dolía, oh valla que dolía, y realmente, jamás se pensó que aquello fuera a suceder, que aquello lo fuera a golpear de esa manera tan cruel, tan fría. Porque el ver a los warbles de nuevo tal vez había logrado sobrepasar sus propios límites, sobrepasarlos y abrir una vieja llaga que esperaba sanar, una repentina luz de duda dentro de su cabeza.
Bien, que para ser sincero consigo mismo, no pensó demasiado a la hora de transferirse a mckinley high, demonios que ni siquiera lo analizo, todo por amor, todo por kurt. Pero ahora, parado sobre el marco de la puerta del salón de los warblers, con un estúpido folleto de "wide side story" en las manos, viéndolos interpretar uptown girl, cantando, divirtiéndose, mientras un desconocido ocupada ese que había sido su lugar, no podía evitar dudar, no podía evitar la terrible sensación de haber cometido un gigantesco error.
Porque aquello resultaba tan malditamente familiar, tan malditamente suyo, que dolía, tal vez demasiado.
Le dolió verlos ahí, le dolió no pertenecer ya más, porque cuando fue arrastrado por el desconocido a cantar con ellos de nuevo, a revivir los viejos tiempos, sus mejores tiempos y a unirse a su improvisada presentación, se sintió romper, y dolió aún más, el saber que aun podía volver, que aún lo esperaban, que siempre lo harían, que el nido siempre estaría abierto para él.
Fue entonces que la verdad lo golpeo de frente, por primera vez, como un gran puño que lo llevaba a la realidad, el ya no era un warbler, ya no era ese Blaine warbler y posiblemente ya no lo seria nunca más, y el miedo también golpeo, más fuerte aun que la verdad, porque nunca se sintió tan vulnerable, desprotegido, sin su uniforme, sin las currucas, sin Dalton.
Y con la imagen mental de un revoltoso new directions, mientras cantaba con nostalgia, juntos a sus talentosos ex- compañero, fue que se pregunto por primera vez, si habría hecho lo correcto, si kurt valdría la pena por dejar todo aquello, su verdadero lugar.
¿Qué demonios estaba haciendo en mckinley?
