Ahí estaba tirado en el suelo mientras caía la lluvia en su rostro, sentía la sangre en su tabique a punto de ahogarlo, el nudo en la garganta y el ardor en su pecho, respiraba agitadamente conteniendo toda la ira que estaba en su interior.

Finalmente dio un fuerte grito lleno de furia y dolor que retumbo en aquel vacio coliseo, poco después una risa y unos aplausos irónicos llenaron el vacio.

El joven abrió los ojos y de pie frente a él observó los ojos azules y una enorme sonrisa que pertenecían a un joven mayor que él, dejó de aplaudir. Él le miró con esfuerzo

Nunca más vuelvas a dejarme –

No puedo prometer nada – contestó en seco

Lo sé – susurró sonriendo y luego perdió la conciencia.

Tenemos que atenderle rápido y borrar el problema – dijo un segundo hombre que estaba de pie con los brazos cruzados

¿Desde cuando te preocupa lo que pueda pasarle? – volteó un tanto molesto y observó los ojos llenos de tristeza y preocupación – Saga… - susurró cerrando los ojos para contener sus sentimientos, dio un suspiro – no me sirves cuando estás en ese estado

Pero… todo debería de ser así ¿lo entiendes? Esta mal lo que hacemos…. Todo está mal… ese tipo esta muerto y mira a nuestro amigo

YA BASTA! Vuelve a ser el hombre poderoso que eres… TE ODIO EN ESE ESTADO! – le gritó tomando entre sus brazos al herido y caminando a toda prisa rumbo al bosque

El caballero de géminis se arrodilló golpeando con fuerzas el suelo, unas lágrimas se escaparon de sus ojos mientras miraba a sus dos amigos alejarse a toda prisa, preguntándose si la vida de ambos hubiese sido diferente de no haberse topado con él.

Memorias.
Capitulo 1: Lluvia. Inicia una peligrosa amistad.

Tendría tal vez siete años cuando el pueblo entero ardió en llamas, la gente corría de un lado a otro gritando, huyendo, llorando. Sin embargo él se encontraba en medio de todo con una gélida expresión, sin sentido alguno del peligro o el temor; únicamente caminando entre las personas y las llamas.
El aire se estaba llenando de humo y la gente caída asfixiada o quemada; pero él seguía caminando, sin saber si quería vivir, hasta ahora la vida no había sido algo apreciable, daba igual. Era curioso como aun en el desastre nadie notaba su presencia, nadie se acercaba o tenia lastima como pasaba con otros niños que corrían asustados, aun en el desastre él seguía siendo ignorado.

"Maldito pueblo" pensaba para sí, mientras la idea de "lo merecen" abarcaba todo su pensamiento, entonces un hombre mayor se acercó sosteniéndolo por los brazos

Tu maldito Daemonium, tu iniciaste el fuego – le gritó zangoloteándolo con fuerza, clavando sus uñas en los brazos del chico que le miró fríamente

Y si así fuera… ¿qué piensas hacer? - le susurró sin expresión

Maldito - le gritó cargándolo para luego empujarlo contra unos barriles que humeaban, el chico calló quemando sus manos, pero no se animó a gritar, tampoco a levantarse

Si, tal vez si lo eliminamos… los dioses perdonen al pueblo – dijo otra persona que pasaba cerca.

Cuando menos lo espero muchas personas que todo habían perdido estaban cerca de él golpeándolo, lo ataron de manos y pies mientras el fuego seguía arrasando con todo, pensaban lanzarlo contra las llamas

Desde que naciste, llegaron las sequias, los niños de tu generación murieron, y ahora el pueblo se quema… eres un Daemonium

¿Cuántas veces había escuchado eso? ¿Por qué tuvieron que tardar siete años para descubrirlo? ¿Cuántas de todas esas tragedias fueron casualidades? ¿Por qué la vida era así? Ya estaba dispuesto a morir a los siete años, no importaba de verdad, sólo esperaba el momento para que alguien le ayudase a hacer aquello que por falta de fuerza no había hecho.
Escuchaba los gritos de la turba en el fondo, "mátalo" decían y entonces sintió el fuego…

Ahhhhhhhhhhhhhh – despertó sudando y gritando, su corazón agitado por los recuerdos quería explotar – maldición…

¿Mal sueño? Me sorprende, siempre duermes como bebé – susurró divertido el hombre que estaba a su lado en la cama mirándose al espejo mientras peinaba su largo y sedoso cabello azul cielo

Recordaba los felices días de mi infancia – contestó secando el sudor de la frente y sintiendo los vendajes de la cabeza - ¿Qué pasó?

Digamos que Shura casi te rebana durante el combate – contestó sonriendo

Mala suerte – contestó tosiendo el susodicho – de tener mejor tino estarías muerto

Gracias por los deseos caballero

Para servirte - dijo mientras se recostaba en la cama mirando al techo del barco en el que viajaban – oye… lo siento, fue un accidente

Accidente… mi vida está llena de ellos – susurró más para sí mismo que para los interlocutores – ¿y hacia dónde vamos?

Parece que hay más espíritus malignos en la Isla, iremos a un pueblo en Catania que cuentan esta embrujado – dijo divertido el moreno

En… catania – susurró el hombre y un escalofrío recorrió su cuerpo, no sabía si era felicidad o miedo

Ahí nos estará esperando nuestro superior – agregó Shura sonriendo

¿Aioros de nuevo? ¿por eso estas tan feliz? – preguntó el caballero que finalmente había dejado su espejo de lado

No… al fin vamos a conocer al hombre más sagrado del orden, aquel al que llaman el Santo más pacífico y virtuoso… Saga de Géminis – contestó divertido Shura – Aioros me ha contado muchas cosas de él

Veré a Saga de nuevo, después de tanto tiempo – dijo el chico sonriendo

¿Le conoces? – preguntó Shura sorprendido

Si… el me trajo al santuario cuando era más pequeño …

Al llegar los caballeros descendieron del barco y de inmediato ubicaron al caballero de géminis que los recibió con el rostro inexpresivo mas su cosmos era cálido como un día soleado, los tres se presentaron y Saga de inmediato reconoció a uno de ellos, caminó hasta él sujetando su hombro mascullando una leve sonrisa

No creí que las casualidades de la vida nos reunieran en este lugar Death Mask

Mala suerte – sonrió levemente

Guíanos, conoces el camino – dijo el caballero señalando hacia una colina

Death Mask asintió y comenzó a correr, los otros le siguieron de cerca. Estaba realmente sorprendido de sus sentimientos, el regresar a Sicilia con Saga de nuevo al mando, a su viejo pueblo…pensó que abriría enormes heridas que creyó limpias, que tendría miedo, tristeza o tal vez ira; pero no podía sentir nada, ni siquiera le causo alivio el ver al caballero de géminis, era como si volviera a ser aquel trozo de carne que ocupó un espacio en ese mugroso pueblo.

¿Te encuentras bien? – interrumpió Saga que corría junto a él, DM le miró interrogante notando la mirada sobre su frente

Ah si, la cabeza… no es nada santo de Geminis

Saga… - contestó aquel sonriendo y mirando al frente – dime Saga

¿Vamos hacia el pueblo exactamente?

Si

¿Algo atacó a las personas ¡?– y Saga se detuvo en seco, todos lo hicieron

Death… desde aquel entonces, nada vive ahí… nada

¿Plantas, animales, gente? –preguntó Shura

Nada … slo muerte a quien se acerca – contestó el líder – por eso han venido conmigo, el patriarca los considera los caballeros más letales de la orden

Oh eso explica porque las otras nenas fueron a un lugar más soleado cerca de Grecia – comentó divertido el tercer caballero

Afrodita, decirle nenas a otros santos no te queda y menos cuando pasaste todo el camino mirándote al espejo – contestó DM

Fue mejor que verlos a ustedes- contestó sonriendo – así que enviaron a los caballeros con las habilidades más crueles aquí

Parece que hay espíritus rondando, espíritus que roban almas… necesito que nos proporciones la protección de tus rosas en toda la ciudad. Shura, tú me ayudaras a reunir los espíritus

¿Reunirlos a donde?

Hacia Death - los tres fijaron su mirada en él, este encogió los hombros

Y luego los guio… rutina

Si… rutina … - susurró Saga – contamos contigo

Dicho esto siguieron el camino hasta entrar en ese viejo pueblo de ruinas. Algunas casas aun estaban de pie, aunque viejas y corroídas con hollín, las calles vacías y grises, el aire humedecido aun olía a alquitrán y a donde vieran había escombros y objetos viejos y rotos por el tiempo.

Al caminar los recuerdos de una vida miserable vinieron al caballero de Cáncer, siete años de mala suerte, de hambre, pobreza, indignos de mencionarse y aun con todo no pudo sentir. Saga le miraba a cada paso que daban, aunque también estaba al pendiente del alrededor, mucha gente había sido asesinada aquí, por algo... un algo que nadie de los alrededores pudo explicarle cuando llegó a investigar, ese algo salía de las calles, atravesaba paredes, llamaba con su voz e incitaba al suicidio.

Un viento gélido atravesó el lugar, Death Mask se detuvo observando una construcción y sin gesto alguno volteó hacia el líder

Este lugar está bien

Afrodita, por favor

Bien…

Afrodita comenzó a esparcir rosas demoniacas por todo el lugar, lejos del perímetro que los caballeros habían designado, luego de una hora regreso al punto de encuentro donde vio un impresionante agujero interdimensional, al otro lado un olor putrefacto se despedía y a lo lejos podía ver cadenas de montañas de cenizas y un cielo negro.

Nunca lo había visto… es horrible – dijo al llegar y tapó la nariz con su capa

Es la muerte – contestó DM – como tus rosas

Ojala tuviera el aroma de las rosas – agregó Shura cuando todos sintieron cosmos que fueron apareciendo con lentitud rodeándolos

El ambiente se tornó frio y se escucharon gritos por todas las calles, todo se llenó de niebla al tiempo que aparecían personas corriendo desesperadas y de un momento a otro las casas se incendiaban. Los novatos impresionados retrocedieron un poco.
En ese momento un enorme lobo apareció tras de Shura dispuesto a devorarlo más fue atravesado por la luz de hermosos planetas; pero el lobo volvió a materializarse mostrando los feroces dientes, entonces el caballero de capricornio uso su brazo para rebanarlo.
Muchos lobos comenzaron a salir de entre la niebla, de cuando en cuando devoraban a las personas que corrían, entonces a la orden de Saga la batalla contra los lobos inicio.
Cada ataque fue utilizado para empujar a los lobos contra las Ondas Infernales que al tenerlos ligeramente cerca los absorbía y convertía en un humano que caminaba lento hacia lo lejano de las colinas.

Todo iba como de "rutina" cuando repentinamente el portal se cerró, los caballeros voltearon alarmados hacia DM que sujetaba su pecho respirando con fuerza, arrodillado.

Death! – Afrodita corrió hasta él sujetándolo, notó la armadura rota en la sección que el tocaba – pero como

Daemonium – susurró Death con una carcajada- ya sabía que lo recordarían, jamás han podido olvidarlo… - gritó como hablándole a alguien – y han esperado todos estos años para este momento... pero… ahora soy más fuerte, ahora tengo poder – gritó entre risas y se levantó empujando a Afrodita – vengan por mi

Afrodita al suelo – gritó Saga y este obedeció justo cuando una calavera con guadaña casi le cercena la cabeza, la guadaña se detuvo en la mejilla de DM que había cambiado su actitud inexpresiva a una altanera y desafiante

Lo rebanaré – aseveró Shura, más géminis sujetó su brazo negando con la mirada

La parca blandió nuevamente su guadaña contra DM que esquivó y con una expulsión de su cosmos golpeó a la parca, retrocedió y emitió un grito de ultratumba que estremeció a todos, menos a DM… él en respuesta gritó y luego rió corriendo al ataque, intercambió algunos ataques con emisiones de cosmos. Todos los muertos ya habían rodeado a los caballeros.
DM notó a todos los espíritus alrededor y reconoció a muchas personas entre ellos

Espero que se pudran en el hades – susurró – ONDAS INFERNALES

La expulsión del cosmos salió de la rutina y todo comenzó a ser absorbido por las ondas, sin embargo la muerte no se movía incluso los mismos Santos luchaban por no entrar en el Infierno que su compañero había creado.

¿Qué quieres de mí? – preguntó DM cuando la guadaña fue colocada lentamente frente a su rostro

Vendetta - contestó con un chillido inhumano

Sólo los que tienen el poder, pueden reclamarla – aseguró elevando aun más su cosmos

ROSAS PIRAÑA - gritó Afrodita y su ataque atravesó a la parca, entonces Shura uso Escalibur y entre ambos ataques el esqueleto explotó manchando todo de sangre coagulada

Y al centro una luz blanca quedó, de ella un ángel alado sujetó las mejillas de DM y le susurró al oído algo que cambió la expresión del caballero, este retrocedió pálido, su cuerpo tembloroso y en una fracción de segundos una poderosa expulsión de cosmos lo empujó varios metros lejos trozando la armadura y desperdigando la sangre del caballero.

DM – gritó afrodita al tiempo que corría por él

¿Te diviertes? – dijo géminis encarando la luz – hace algunos años no pude derrotarte… pero ahora es diferente… A OTRA DIMENSION!

Ambos entraron en un agujero dejando a los tres novatos solos en medio de la playa.