Hola soy Kurosawa Ruby… Cada día de mi vida está llena de secretos desde los más simples o los más complejos, bueno daré uno que a mi parecer es el más notable de todos es mi relación con Yazawa Nico-san, o como suelo llamarla de cariño, Nico sensei.

Es una noche como cualquiera cuando salgo de mi casa a altas horas de la noche, siempre llevo usando mi chaqueta roja de Uranohoshi corriendo como pueda hasta la casa Yazawa donde me espera una chica un poco alta que yo de unos 17 años aunque como yo tiene apariencia de una niña aunque es pelinegra de coletas y sus ojos rojos como la sangre.

Que coincidencia, ambas usamos chaqueta roja y aparte entrenamos muy duro para ser idols profesionales aunque nuestro vinculo sea de un sensei a un alumno. Esta noche está sentada en la acera de su casa, suelo llegar tarde y bueno tengo que lidiar con su cara de enojo

-¡Lo siento Nico Sensei!- Me incliné con tal de pedir disculpas aunque me pasé de la raya, soy tan leal a sensei que en una ocasión me golpeé la cabeza con la de ella, en verdad dolió y hasta me sacó un buen chichón

-¡Piggy! ¡Lo siento sensei!

-Ya era hora- Suspiró

-Discúlpame, sensei, me costó trabajo escabullirme de mi casa- Bueno, de hecho mi Oneechan suele darme permiso ya que también tiene una gran admiración a Muse aunque su mayor ídolo es Eli-san aunque también siente gran lealtad hacia Sensei.

-No dejaste que nadie aparte de Dia te viera, ¿Cierto?

-Así es, ¡Todo salió bien!- Hice mi posición de Ganbaruby

Sensei me miró con esa seriedad aunque también conociéndola mejor está muy preocupada por mí sobre todo cuando veo algo de brillo en sus rojos

-Ruby, en primer lugar, ¿Por qué quieres entrenar aquí afuera en el frío?- Bueno no contaba que estábamos en época de invierno. De hecho cada vez que hablo con sensei suelo estar roja y aparte un poco nerviosa… Eso pasa cuando admiras y quieres a alguien y más cuando esa persona es tu inspiración

-¿Eh? Es porque… Porque siempre cuando estoy con Yoshiko y Hanamaru… Yo- De hecho me hace recordar a Hanamaru la cual es mi novia (Era mi novia) que intentaba salir conmigo o cuando estuviésemos en una cita o con Yoshiko de por medio

-Porque… Siempre terminamos en ese tipo de atmosfera- Hasta en mi vida amorosa soy una idiota que le cuesta hablar, Sensei en verdad no es una tonta a lo cual con su sonrisa burlona me señaló canturreando

-¿Ese tipo de cosas?...Dime, ¿Ya lo hiciste con Hanamaru?

-¡¿Piggy?!- Estoy congelada del susto más mi sonrojo me traiciona, Sensei aprovecha para darme un certero dedazo en mi frente como si me exigiera que me concentrara

-Hey, no te imagines cosas raras- Ahora dio sus órdenes antes de entrenar en un parque pequeño de la ciudad- Supongo que podemos dar comienzo con los pasos que hemos aprendido hoy- Se refería a una de sus "Investigaciones" donde ella estudiaba a los demás grupos competidores del Love Live, probablemente para crearse un baile improvisado.

Sensei esbozó una sonrisa mientras pone sus manos sobre las caderas, sólo espero que no explote de ira conmigo

-Anda, vamos a practicar

-¡Ganbaruby!

Sensei pasa por alto algunas de mis incoherencias a lo cual sin más decidimos trotar hacia el parque y entrenamos en un lote baldío ubicado dentro del mismo lugar…

Yazawa Nico, Nico Nii, Nico-san, Nico-Sensei… Aparte de ser mi inspiración como mi mentora es una gran amiga en la que yo pueda confiar, en los escenarios podría ser una buena rival para ella o viceversa pero ese merito se lo queda Yoshiko por mucho… Pero cuando hablo de un vínculo entre más que simples amigas, bueno Hanamaru y Maki-san, sobre esta última pagarían los platos rotos.

No todos los días salgo de casa para entrenar con ella, no al contrario ya que suelo ir a casa a cuidar a sus hermanitos o a ayudar en sus investigaciones usando mi vestido incognito. En medio de estas funciones ambas convivimos mientras hacemos todo juntas. Pienso que nuestra relación, de kouhai a senpai, alumna a sensei y Aqours a Muses… Pienso que todo eso está mejorando a pasos agigantados.

Por ello es que tengo que guardar tantos secretos…

Ahora estoy arrodillada sobre el suelo ya que la práctica fue más extenuante como siempre, de pronto mi sensei se quita su chaqueta para abrigarme aunque yo lleve otra puesta… En verdad el invierno en Tokio es de verdad bastante crudo.

Como les decía, sensei humildemente me cubrió con su chaqueta con esa gentil sonrisa que la caracteriza a lo cual le agradecí sonriendo pero como una niña idiota que se ilusiona con una estrella pop.

-¿Tienes frío?

Traté de responder pero hasta me calaba la boca a lo cual hizo ese acto noble. Después de unos minutos sensei miraba su reloj mientras de pronto unas luces se dibujaban en el cielo, probablemente se acercaría el amanecer ante lo cual anunció no sin antes dar un suspiro

-Es suficiente por hoy, regresemos a casa

Me quedé muda ya que por alguna razón siento el calor y aparte del olor que impregnaba esa chaqueta… Para ser una chica algo arrogante como obstinada tenía un lindo aroma por cierto, y eso es uno de los tantos secretos que quiero guardar.

De todos los secretos que tengo aparte de varias fotos o posters que tengo por parte de Oneechan, aparte de unos videos que subieron de ella sea en los PV o en las presentaciones en vivo, también tengo uno muy oscuro… Esa es la parte en la que me tildarán de lo peor o me dirán que soy enferma, no los culpo y entiendo su punto de vista… Puedo aceptar todos los cargos pero deben entender que ese es el precio que pago por seguir y querer a alguien que admiro mucho.

Ese es el algo que quiero decirles, pero antes les aclaro que mantengo eso solo para mí. Un secreto que ni siquiera quiero que Oneechan, Hanamaru o Yoshiko lo sepan… Ni mucho menos Nico sensei…

-¡Ah, ahh!... Sensei… ¡Ah!

Si, así es… Por lo que escucharon o leyeron, ya pueden empezar a juzgarme o criticarme pero como ya les dije ese es el precio que pago al estar con Nico Yazawa. Si, estos momentos les confieso que para mí... Nico es mi mejor amiga, una gran sensei ... Mi inspiración... Ahora resulta que ella es mi mayor fantasía sexual…

Si, lo admito me estoy masturbando pensando en ella en mi cuarto y como testigo pongo a un suéter rosa que inconscientemente tomé en una pijamada. Pero no se preocupen sólo la uso para sentir y aroma… Bueno, ustedes sabrán el resto supongo.

Después de realizar lo que llaman trabajos manuales y bueno tuve un orgasmo en mi cama (Y aparte mojé en ella) Me vine en la cama, pero no me siento nada satisfecha… Tal vez en estos momentos quiero tener sexo con Nico sensei

En estos momentos exclamó con tristeza aparte de un puchero de frustración

-¡Piggy! Pero no hay manera en la que yo pueda tomar la iniciativa, ya que hace poco hablé con ella pero no tuve el valor en decírselo. Aparte lo único que me queda es arreglarlo por mi propia cuenta

Genial Ruby, ¿Qué tan pervertida puedes ser para excitarte tan fácilmente por tu sensei?... Ah, aún no puedo creer que me haya dado su suéter rosa, ¡Rayos Sensei! ¡Como odio amarte!... De seguro ella también tenía frío pero como es una orgullosa entonces se limitó a no ser débil.

Además ayer después de que pasamos tiempo juntas igual hice lo mismo… ¡Piggy soy de lo peor!

De pronto huelo un poco el suéter de sensei y en verdad la esencia de Sakura se siente muy bien… Rayos, esto es tan inmoral o como siempre Umi-san dice, esto es indecente como inmoral viniendo de alguien como yo…

El olor de sensei… Me parece que tengo que hacerlo por atrás… ¡Piggy, ¿Otra vez?!... Pero no puedo evitarlo, no tengo más opción que usar un lubricante o crema para manos, el desodorante también puede servir. Ahora meto dos dedos dentro de mi trasero mientras uso mi otra mano para masturbarme.

Entrando fácilmente y agrandando la entrada… Bien, lo haré sólo una vez y en menos de nada pienso que sensei me lo hace con sus dedos e intento llamarla por su nombre pero siempre repito Sensei… Han pasado 30 minutos pero no me siento llena, pareciera que quisiera ser ruda y no lo logro aunque trate de hacerlo mejor.

Pero, ¿Hay algo más que esto?

Es desbordante el deseo de que Nico sensei esté dentro de mí, desde que conocí a Sensei la consideré más que una idol brillante y radiante, la consideré mi inspiración como mi ideal hasta en los momentos más abruptos pero después de ese corto pero agradable transcurso de tiempo más que confesarle mi admiración y mis respetos, por muy torpe que yo fuera o muy tímida…

Recuerdo aquel día cuando nos conocimos en Tokyo, cada una sea Muses o Aqours comenzábamos a interactuar entre nosotras comenzando por Chika y Honoka que parecieran como hermanas separadas hasta terminar entre mi sensei y yo

Al verla en persona por primera sólo exclamé mi famosa frase, en verdad me embargaba la emoción de estar frente a frente con una de las fuertes y carismáticas del grupo Muses… Me sentía en un mundo de ensueño y cómo siempre elogiándose como la gran idol número uno del universo

-Nico-san… Tú eres una chica brillante y radiante en el escenario

-¿Por qué lo dices?- Era evidente su arrogancia cuando se trataba de halagos

-Porque…- Mi sonrojo y mi corazón me iban a traicionar pero exclamé lo que más pude

-Porque, las idols como tú son maravillosas con todo para hacer felices a las personas

Como siempre su orgullo se hizo notar cuando se sonrojó

-Hmp, en verdad comprendes mi atractivo, ¿No? Te mostraré mi agradecimiento

Comencé a actuar como una idiota después de seguirla como una especie de papparazzi mientras preguntaba de diestra a siniestra la ubicación de su casa hasta encontrarla al lado de unos tres pequeños chicos, dos niñas y un niño

-¿A qué has venido?

-Te he buscado por todas partes

Los niños se quedaron impresionados mientras me veían a mi alrededor

-¿Es Maki-chan?- Preguntó una castaña de cabello corto con una coleta al lado derecho

-No, no es Maki-chan- Aclaró otra pelinegra con un peinado similar al de Honoka

-Aka-chan- Dijo un inocente pequeño de cabello negro que me miraba de manera curiosa, en menos de nada miré con determinación a la pelinegra que tenía en frente

-Yo quiero ser una gran idol, ¡Te lo suplico!- Tomé sus manos con las mías mientras quedó sorprendida con un sonrojo en sus mejillas- Por favor, Nico-san, ¡Haz una idol de mí!

La alta empezó a ver a los pequeños los cuales miraban con curiosidad a la que podía ser su hermana mayor a lo cual la joven con cierta arrogancia respondió

-Bien, Nico te acepta como aprendiz pero con una condición

-¿Cuál?

-No intentes hacer tanto ruido y no te quejes por pequeñeces

-¡No se preocupe Nico-sensei! ¡Ruby nunca se rendirá tan fácilmente! ¡Se lo prometo!- Expresé mi alegría en señal de agradecimiento aunque sus hermanitos me abrazaron cosa que me dejó aturdida y mucho.

Desde ese día la seguí en todo momento sea en los entrenamientos, en su casa, en sus misiones de investigación aunque no del todo ya que ella tiene sus cosas privadas o asuntos personales. Durante todo este tiempo como alumna y sensei terminamos sincerándonos entre ambas sólo como amigas, como una kouhai y una sempai.

Pero aunque yo sea su pupila, no cabe que entre los sentimientos que le tengo hacia ella, toda clase de ansiedad y miedo que había en mí y que trataba de lidiar en Aqours desaparecieron, dándole paso a mi anhelo, mi admiración y mi amor por mi sensei, por esa chica de radiante cabello negro y brillantes ojos rojos, esa niña con la gracia de una diosa.