Disclaimer: Nada me pertenece, pero 'Kashi no es tuyo, right? (?)

Claim: Kakashi/Sakura —ItsLoooove~

Advertencias: ¿Y eso? Spoilers manga 481-484.

Notas: TO MY BELOVED COQUITO, A.K.A. CAROLAIN BELÉN CALVO. FELICES QUINCE, HERMOSA, YA SOS UNA SEÑORITA, QUÉ ORGULLO :'D Mucho más no te digo porque lo gasté todo en la carta y en el foro x3 Queda decirte que hope you like it, my dear.

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Heal My Soul


El verla prácticamente intentar suicidarse en verdad le dolió. Incluso si lo sabía de hacía tiempo y la preocupación crecía a cada rato, nada de eso se comparó a verla a punto de morir. A punto de ser asesinada a mano de Sasuke, aquel que ella amó día y noche desde pequeña, aquel por el cual quiso hacerse más fuerte, por el que lloró demasiado y por el que se superó a sí misma. Por el cual comenzó a perderse, por el cual rompió promesas (e hizo que los demás se desviviesen por cumplir otras) y se hundió hasta comenzar a ahogarse. Por quien se preocupó.

Eso era incluso peor que la traición.

Kakashi simplemente sintió miedo y preocupación cuando vio a Sakura nuevamente intentar asesinarlo. Miedo por perderla, por perder a un ser querido, por notarse cansado debido al Mangekyo y creer que no llegaría. Miedo por pensar que no volvería a verla, porque había visto a muchos seres queridos morir y a otros tantos ya muertos, y no permitiría que ella formase parte de aquel horrible recuerdo que solía aparecer muy a menudo. No la dejaría estar en la roca donde todos sus conocidos estaban.

Se dio cuenta de que había sido un mal sensei. Se había enfocado en el prodigio de un clan muerto pero no olvidado y en el muchacho que encerraba demasiado y había salvado a la villa a poco de nacer. Se había enfocado en los más fuertes y no había visto que Sakura era un diamante en bruto que necesitaba ser pulido.

Y lo lamentó tanto. Porque eso y mucho más había derivado de sus malas acciones, de su mal liderazgo. El equipo siete había sufrido y se había roto por él, porque no supo detener a Sasuke, controlar a Naruto y ver a Sakura.

Era un bastardo, después de todo.

Pero entonces venía ella, le decía todo lo contrario, le sonreía y quizá le daba un casto beso en la mejilla mientras le agradecía por todo. Y se daba cuenta de todo, de que de otra forma no podría haber sido, que gracias a cómo se habían dado las cosas, ella ahora estaba a su lado, para sonreírle y sacarlo de las sombras.

Porque cuando ella le miraba a los ojos y él se sumergía en ese verde, se sentía esperanzado, sonreía de regreso y parecía que ella veía su alma y estaba dispuesta a sanarlo. Porque él también intentaría sanarla.

Sakura era demasiado buena para él, y se merecía lo mejor. Y el, quizá, podría intentarlo. Porque los dos necesitaban al otro para poder sanar por completo.


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