Card Captor Sakura y sus personajes les pertenecen a las reinas del Shojo, CLAMP.


No me daré por vencido

Nunca aceptaría a ese petulante. Podría ser gentil, atlético, talentosos y todo cuánto pudiesen decir pero él jamás iba a estar de acuerdo. Esas cualidades las podía tener cualquiera, Yukito incluso y él no estaba pavoneando por donde andaba en actitud de soy perfecto, contémplenme.

No, no se rebajaría a besar los pies de Hiragizawa. O al menos no mientras sus pulmones pudieran respirar.

Tampoco aceptaba el que ella cayese en su trampa. Frases como '¡Vaya, eso es genial!' o 'Eriol-kun, eres muy amable' debían parar antes que cualquiera saliese lastimado. Sakura no podía dejarse engatusar por ese sujeto; y él –como su amigo- debía asegurarse de ello.

Aún si sus sentimientos no estuviesen claros. Él seguiría estando al acecho, dispuesto a protegerla con la vida si resultaba necesario. Incluso desconociendo el porqué de su rabia contra en inglés o las oleadas de balbuceos cuando Sakura le sonreía.

¿Estás bien, Syaoran-kun?

Eriol Hiragizawa no ganaría su puesto. Si le creía tan débil para rendirse con esa facilidad estaba ciego. Protegería a Sakura pase lo que pase.

Pase lo que pase, nunca se daría por vencido.