Diarios Digimon del Sur
La historia de los Digi-Destinados de Argentina
Por Persona
Notas del autor: Esta historia es un fn-fic, es ficcion, nunca en Digimon 1 o Digimon 2 alguien menciona que exista un Digi-Destinado en Argentina. Aun asi, de acuerdo con Toei, hay por lo menos UN Digi-Destinado (o ni–o elegido) en cada pais del mundo, asi que esta historia PODRIA haber pasado.
Otra cosa. No tengo muy buena ortografia. Siempre me lleve castellano a marzo, y aprovaba los examenes raspando. Asi que no esperen una ortografia buena. Me como todos los acentos y otras cosas asi.
A todos los que vivan en un pais que hable espa–ol (o castellano) que no sea Argentina: Esta historia esta escrita en castellano de Argentina, NO en espa–ol neutral como suelen hacer cuando traducen un anime.
Una cosa mas. Esta historia esta escrita dentro del 'universo' creado por Lord Archive (con su permiso, por supuesto) conocido como War Diaires Adventures 03 y Red Digivice Diaries, si quieren leerlos se pueden encontrar en Fanfiction.net o en Mediaminer.org (pero el escribe en ingles por supus.) Lord Archive me ayudo a ordenar un poco las cosas en respecto con la linea temporal de su mundo, asi mi historia no tuviera contradicciones con la suya.
Si prefieren leer esta historia en ingles, esta puesta en la seccion de ingles de Fanfiction.net.
Se que no todos saben mucho sobre Argentina excepto que vivan en Suramerica, asi que al final de la historia pondre explicaciones regionales, si es que las considero nesesarias.
Bueno, basta de explicaciones, que comience la historia.
Capitulo uno: La nueva Elegida.
Diciembre del 2002. San Isidro, el Gran Buenos Aires. Replublica Argentina.
Era un caluroso dia de verano, una chica de trece a–os estaba caminando por las calles del Partido de San Isidro, estaba vestida con un uniforme de hockey sobre cesped. Pollera corta color blanca, medias y zapatillas blancas, y una camiseta de manga corta, con los colores del SIC: rayas blancas, celestes y negras en forma horizontal. Tambien llevaba en su mano un palo de hockey. Era uno de esos palos de hockey de tama–o chico, echo para las jugadoras juveniles.
Julia Martinez era la capitana del equipo femenino juvenil de hockey sobre cesped del SIC, y hoy tenia que jugar un partido. Normalmente sus padres la traian en auto, pero hoy estaban muy ocupados los dos asi que solo podian llegar a tiempo para ver el segundo tiempo del partido.
A Julia no le importaba, sus padres siempre iban a verla jugar. El que se pierdan un partido no era el fin del mundo.
Mientras caminaba frente a un negocio de computacion, Julia escucho una voz. "Julia."
Julia dejo de caminar y miro alrededor a ver quien la habia llamado, pero no habia nadie. Se estaba imaginando cosas acaso?
"Julia."
No, estaba segura de que alguien la estaba llamando. La voz misteriosa parecia venir desde adentro del negocio de computacion. Pero era mediodia y el negocio estaba cerrado, y no habia nadie adentro. Entonces quien fue? Estaba segura que habia escuchado la voz venir desde adentro del negocio.
"Hola? Hay alguien?" Julia pregunto mirando a traves de la vidriera del negocio. De pronto, noto que una de las computadoras en la vidiriera estaba prendida. La unica imagen en el monitor era la palabra 'Digiportal'.
"Digiportal?" leyo Julia en voz alta.
De pronto, una extra–a luz salio del lado derecho del cinturon de su pollera. Al mirar abajo, Julia vio que la luz salia de ese videojuego roto que habia encontrado hace varios a–os.
Julia habia encontrado el videojuego roto, que no funcionaba sin importar lo que le hiciera, hacia unos tres a–os atras, cuando ella estaba internada en el hospital por haberse roto el brazo. Despues de que lo encontro, decidio quedarselo sin tener una razon.
En cuanto el peque–o artefacto dejo de brillar, Julia noto sorprendida que habia cambiado de forma. Ahora era mas grande y mas ovalado. Eso si, era del mismo color: cleste.
Julia agarro el aparato electronico, se encendio por primera vez en a–os, y parecia reaccionar al monitor de la vidriera.
Entonces todo se puso borroso. Si Julia hubiera podido enfocar la vista, se hubiera dado cuenta que estaba siendo absorvida por la computadora.
Eso fue lo ultimo que Julia vio antes de perder el conocimiento.
"Hola. Hola? Julia, estas bien?"
Cuanto tiempo habia pasado? Minutos? Horas? Dias? Julia no tenia ni idea.
Una peque–a voz femenina fue la que la desperto, Julia abrio lentamente los ojos.
"Que bien! Ya estas despierta." delante de Julia estaba este extra–o pajaro color rosado, que no se parecia EN NADA a ningun pajaro que Julia haya visto en su vida.
"Aaah!" Julia se levanto tan rapido que casi la hizo quedar mareada, se alejo del pajaro rosa sobre manos y pies hasta que quedo de espaldas contra lo que parecia ser un monitor de computadora.
"No tenes por que gritar, sos una Digi-Destinada y yo soy tu Digimon. Soy Piyomon."
Su Digimon? Que estaba pasando aca? Por que era que esa palabra le sonaba tan familiar?
Sus ojos se abrieron de par en par cuando se acordo de una cosa que vio en la television hacia unos a–os atras. "Estamos acoso en el... mundo Digimon?" pregunto Julia, un poco mas calmada.
Piyomon acintio con la cabeza. "En realidad, se llama Digimundo. Como es que conoces este lugar?"
"Un canal de noticias internacionales por cablevision. Hace unos a–os escuche unas noticias de algo que paso en Japon sobre unos Digimon." entonces Julia recordo lo que Piyomon le habia dicho antes. "Soy una que?"
"Una Digi-Destinada, ves esa cosa electronica que tenes en la mano?" contesto Piyomon.
Julia entonces recordo el videojuego raro que habia cambiado de forma justo antes de que se despertara en este lugar. Todavia lo tenia en sus manos.
"Que... que tiene que ver esta cosa con todo esto?" pregunto Julia.
"Esa cosa es un D-3, y si vos tenes un D-3 significa que sos una Digi-Destinada." contesto Piyomon.
"Como... como llege aca? Como puedo volver a mi casa?" pregunto Julia.
"Llegaste porque te nesestian aca. Por que? No se. Puede ser porque el viejo Ni–o elegido de Argentina se murio y sos su remplazo, quien sabe. Sea lo que sea, ahora estas aca."
"Pero yo NO QUIERO estar aca... tengo un partido en unas horas... tengo que volver a mi casa." Julia hablaba mientras sentia como lagrimas se formaban en sus ojos. Era demasiado... estaba en un mundo raro, lejos de su casa o de alguien que la conozca.
De pronto, antes de que Piyomon pueda decir algo, un terrible zumbido rompio el cilencio como un trueno en una tormenta.
Julia miro para arriba y vio a un horrible y enorme bicho volador color rojo que estaba volando hacia ella. Parecia que tenia hambre... y ella era su comida!
"Es un Kuwagamon, y tiene hambre! Escondete!" le grito Piyomon.
"Epa!" Julia era una jugadora de hockey sobre cesped, tenia un par de piernas fuertes para su eda, asi que pudo saltar fuera del alcance del Kuwagamon justo a tiempo. Lo unico que el Kuwagamon consiguio fue el monitor por el que Julia habia entrado al Digimundo.
Cuando se dio cuenta que no tenia a la chica, el Kuwagamon tiro el monitor. El monitor se cayo contra el suelo y se rompio en mil pedazos.
"No te preocupes Julia, yo te voy a proteger!" Piyomon abrio sus alas y volo hacia arriba, contra el Kuwagamon, el cual estaba dando un giro en el aire para volar hacia Julia otra vez.
Sin miedo del enorme bicho, Piyomon lanzo un ataque. "Fuego Magico!"
Un espiral de fuego color verde salio disparado hacia Kuwagamon, pero no le hizo nada. Entonces el Kuwagamon choco contra la pobre de Piyomon, que cayo al suelo con un ruido sordo.
"Ayyy... es muy fuerte para mi..."
"Piyomon!" Julia vio al Digimon en el piso, sucia y lastimada, y trato de llegar a su lado. Era algo increible, solo conocia al pajarito Digimon por un minuito, y ya sentia como si lo conociera de toda la vida.
Trato de alcanzarla, pero tuvo que agacharse para esquivar al Kuwagamon otra vez.
Sabia que no podia hacer esto por siempre, en algun momento el bicho colorado iba a alcanzarla, y no iba a vivir para contarlo.
"Bola de fuego!"
De pronto, de ninguna parte, una bola de fuego salio volando hacia el Kuwagamon. El bicho gigante se prendio fuego con el impacto, y gritaba de dolor. Como si eso no fuera suficiente, Julia vio como mas y mas bolas de fuego salian volando y chocaban contra el Kuwagamon en llamas.
"Bola de fuego!" "Bola de fuego!" "Bola de fuego!"
Despues de unos segundos de este ataque constate y sadico, el Kuwagamon desaparecio, convirtiendose en datos.
"Que... paso?" Julia miro al lugar donde el Kuwagamon estaba hacia solo un momento, y despues miro hacia un lado por donde habian salido las bolas de fuego.
Julia vio una escena digna de uno de esos dibujos japoneses... Anime, se corrigio al recordar el termino.
Dos figuras estaban paradas sobre una colina con el sol justo atras de ellos, haciendo dificil el verlos.
Julia trato de enfocar sus ojos hasta que por fin pudo verlos bien. Una de las figuras era un chico, parecia un poco mayor que ella. Estaba usando una remera negra, panatalones largos negros y zapatillas Topper tambien negras. Tenia el pelo del mismo color que Julia, marron. Pero el pelo de Julia era un poco mas claro que el de este chico, que era mas negro que marron. En la cintura del chico Julia pudo ver que el tambien tenia un D-3, pero el de el era color negro.
Al lado de el estaba un tipo enorme y alto, cubierto de fuego. Parecia como la Antorcha Humana de la vieja serie de los Cuatro Fantasticos. Pero mas grande.
Otro Digi-Destinado y su Digimon, penso Julia. Pero entonces, la teoria de Piyomon que ella iba a remplazar al Digi-Destinado de Argentina era equivocada.
Entonces fue que Julia vio la cara del chico, realmente la vio por primer vez. No mostraba ningun tipo de emociones, nada, como si nisiquiera estuviera vivo. Su Digimon parecia ser de la misma manaera. Le daba miedo.
"Deberias ver al Piyomon." dijo el chico de negro, apuntando al pajaro rosa tirado en el suelo.
Julia recordo a su Digimon y corrio junto a Piyomon, tomandola con cuidado con los dos brazos. Estaba viva, un poco lastimada, pero nada serio. Con una siesta se le pasaria todo.
Mientras tanto, el chico camino hacia ella, su Digimon siguiendolo. "Meramon, ya podes volver a la normalidad." le dijo a su Digimon.
El Meramon acientio con la cabeza y empezo a reducir de tama–o mientras emitia una extra–a luz color purpura. Pronto un candelabros caminante estaba en su lugar, un Candmon.
"Quien... quien sos?" pregunto Julia. No sabia si este chico era peligroso o no.
"Me llamo David. David... Albornoz." dijo su apellido como si no lo hubiera dicho en mucho tiempo. "Pero nadi me llama por mi nombre en este lugar."
Julia lo miro un rato, confundida. "Sos un... un..." le tomo un segundo el recordar el termino que Piyomon habia usado, "un Digi-Destinado?"
"Me temo que si." David le contesto. Desde que empezaron a hablar, David no mostraba ningun tipo de expression, ni tampoco hablaba mas de lo debido. Entonces noto lo que dijo, que quiso decir con 'Me temo que si'?
"Como llegaste?" pregunto David.
Julia apunto al monitor roto que el Kuwagamon habia destrozado cuando trataba de agarrarla a ella. "Por alla. Al menos eso fue lo que me dijo Piyomon."
David vio al monitor roto, luego a Julia. "No vas a poder volver por ahi." le contesto.
"S... significa que voy a tener que quedarme aca para siempre?" pregunto Julia, sus ojos otra vez se llenaba de lagrimas.
"No. Hay otro monitor que podes usar, seguime." le contesto David, y dio media vuelta. El Candmon lo siguio sin hacer ningun ruido.
Julia aseguro su D-3 en su pollera una vez mas, y recogiento a Piyomon, empezo a seguirlos. "Hey! Esperenme!"
Continuara...
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Notas del autor: SIC (San Isidro Club) es un club deportivo de Argentina, sus principales actividades son el Rugby para los hombres y el hockey sobre cesped para las mujeres. No es mi equipo de Rugby preferido (para los Argentinos que les gusta el Rugby y se preguntan cula es, la respuesta es La Plata Rugby Club), pero es uno de los dos principales clubes de Rugby no solo de San Isidro sino tambien del pais. El otro club es el CASI, y cuando juegan un CASI - SIC es como el River-Boca del Rugby Argentino.
Esta fue el primer capitulo, mas que nada como una introduccion. Los proximos capitulos seguramnete van a ser mas largos.
Persona
La historia de los Digi-Destinados de Argentina
Por Persona
Notas del autor: Esta historia es un fn-fic, es ficcion, nunca en Digimon 1 o Digimon 2 alguien menciona que exista un Digi-Destinado en Argentina. Aun asi, de acuerdo con Toei, hay por lo menos UN Digi-Destinado (o ni–o elegido) en cada pais del mundo, asi que esta historia PODRIA haber pasado.
Otra cosa. No tengo muy buena ortografia. Siempre me lleve castellano a marzo, y aprovaba los examenes raspando. Asi que no esperen una ortografia buena. Me como todos los acentos y otras cosas asi.
A todos los que vivan en un pais que hable espa–ol (o castellano) que no sea Argentina: Esta historia esta escrita en castellano de Argentina, NO en espa–ol neutral como suelen hacer cuando traducen un anime.
Una cosa mas. Esta historia esta escrita dentro del 'universo' creado por Lord Archive (con su permiso, por supuesto) conocido como War Diaires Adventures 03 y Red Digivice Diaries, si quieren leerlos se pueden encontrar en Fanfiction.net o en Mediaminer.org (pero el escribe en ingles por supus.) Lord Archive me ayudo a ordenar un poco las cosas en respecto con la linea temporal de su mundo, asi mi historia no tuviera contradicciones con la suya.
Si prefieren leer esta historia en ingles, esta puesta en la seccion de ingles de Fanfiction.net.
Se que no todos saben mucho sobre Argentina excepto que vivan en Suramerica, asi que al final de la historia pondre explicaciones regionales, si es que las considero nesesarias.
Bueno, basta de explicaciones, que comience la historia.
Capitulo uno: La nueva Elegida.
Diciembre del 2002. San Isidro, el Gran Buenos Aires. Replublica Argentina.
Era un caluroso dia de verano, una chica de trece a–os estaba caminando por las calles del Partido de San Isidro, estaba vestida con un uniforme de hockey sobre cesped. Pollera corta color blanca, medias y zapatillas blancas, y una camiseta de manga corta, con los colores del SIC: rayas blancas, celestes y negras en forma horizontal. Tambien llevaba en su mano un palo de hockey. Era uno de esos palos de hockey de tama–o chico, echo para las jugadoras juveniles.
Julia Martinez era la capitana del equipo femenino juvenil de hockey sobre cesped del SIC, y hoy tenia que jugar un partido. Normalmente sus padres la traian en auto, pero hoy estaban muy ocupados los dos asi que solo podian llegar a tiempo para ver el segundo tiempo del partido.
A Julia no le importaba, sus padres siempre iban a verla jugar. El que se pierdan un partido no era el fin del mundo.
Mientras caminaba frente a un negocio de computacion, Julia escucho una voz. "Julia."
Julia dejo de caminar y miro alrededor a ver quien la habia llamado, pero no habia nadie. Se estaba imaginando cosas acaso?
"Julia."
No, estaba segura de que alguien la estaba llamando. La voz misteriosa parecia venir desde adentro del negocio de computacion. Pero era mediodia y el negocio estaba cerrado, y no habia nadie adentro. Entonces quien fue? Estaba segura que habia escuchado la voz venir desde adentro del negocio.
"Hola? Hay alguien?" Julia pregunto mirando a traves de la vidriera del negocio. De pronto, noto que una de las computadoras en la vidiriera estaba prendida. La unica imagen en el monitor era la palabra 'Digiportal'.
"Digiportal?" leyo Julia en voz alta.
De pronto, una extra–a luz salio del lado derecho del cinturon de su pollera. Al mirar abajo, Julia vio que la luz salia de ese videojuego roto que habia encontrado hace varios a–os.
Julia habia encontrado el videojuego roto, que no funcionaba sin importar lo que le hiciera, hacia unos tres a–os atras, cuando ella estaba internada en el hospital por haberse roto el brazo. Despues de que lo encontro, decidio quedarselo sin tener una razon.
En cuanto el peque–o artefacto dejo de brillar, Julia noto sorprendida que habia cambiado de forma. Ahora era mas grande y mas ovalado. Eso si, era del mismo color: cleste.
Julia agarro el aparato electronico, se encendio por primera vez en a–os, y parecia reaccionar al monitor de la vidriera.
Entonces todo se puso borroso. Si Julia hubiera podido enfocar la vista, se hubiera dado cuenta que estaba siendo absorvida por la computadora.
Eso fue lo ultimo que Julia vio antes de perder el conocimiento.
"Hola. Hola? Julia, estas bien?"
Cuanto tiempo habia pasado? Minutos? Horas? Dias? Julia no tenia ni idea.
Una peque–a voz femenina fue la que la desperto, Julia abrio lentamente los ojos.
"Que bien! Ya estas despierta." delante de Julia estaba este extra–o pajaro color rosado, que no se parecia EN NADA a ningun pajaro que Julia haya visto en su vida.
"Aaah!" Julia se levanto tan rapido que casi la hizo quedar mareada, se alejo del pajaro rosa sobre manos y pies hasta que quedo de espaldas contra lo que parecia ser un monitor de computadora.
"No tenes por que gritar, sos una Digi-Destinada y yo soy tu Digimon. Soy Piyomon."
Su Digimon? Que estaba pasando aca? Por que era que esa palabra le sonaba tan familiar?
Sus ojos se abrieron de par en par cuando se acordo de una cosa que vio en la television hacia unos a–os atras. "Estamos acoso en el... mundo Digimon?" pregunto Julia, un poco mas calmada.
Piyomon acintio con la cabeza. "En realidad, se llama Digimundo. Como es que conoces este lugar?"
"Un canal de noticias internacionales por cablevision. Hace unos a–os escuche unas noticias de algo que paso en Japon sobre unos Digimon." entonces Julia recordo lo que Piyomon le habia dicho antes. "Soy una que?"
"Una Digi-Destinada, ves esa cosa electronica que tenes en la mano?" contesto Piyomon.
Julia entonces recordo el videojuego raro que habia cambiado de forma justo antes de que se despertara en este lugar. Todavia lo tenia en sus manos.
"Que... que tiene que ver esta cosa con todo esto?" pregunto Julia.
"Esa cosa es un D-3, y si vos tenes un D-3 significa que sos una Digi-Destinada." contesto Piyomon.
"Como... como llege aca? Como puedo volver a mi casa?" pregunto Julia.
"Llegaste porque te nesestian aca. Por que? No se. Puede ser porque el viejo Ni–o elegido de Argentina se murio y sos su remplazo, quien sabe. Sea lo que sea, ahora estas aca."
"Pero yo NO QUIERO estar aca... tengo un partido en unas horas... tengo que volver a mi casa." Julia hablaba mientras sentia como lagrimas se formaban en sus ojos. Era demasiado... estaba en un mundo raro, lejos de su casa o de alguien que la conozca.
De pronto, antes de que Piyomon pueda decir algo, un terrible zumbido rompio el cilencio como un trueno en una tormenta.
Julia miro para arriba y vio a un horrible y enorme bicho volador color rojo que estaba volando hacia ella. Parecia que tenia hambre... y ella era su comida!
"Es un Kuwagamon, y tiene hambre! Escondete!" le grito Piyomon.
"Epa!" Julia era una jugadora de hockey sobre cesped, tenia un par de piernas fuertes para su eda, asi que pudo saltar fuera del alcance del Kuwagamon justo a tiempo. Lo unico que el Kuwagamon consiguio fue el monitor por el que Julia habia entrado al Digimundo.
Cuando se dio cuenta que no tenia a la chica, el Kuwagamon tiro el monitor. El monitor se cayo contra el suelo y se rompio en mil pedazos.
"No te preocupes Julia, yo te voy a proteger!" Piyomon abrio sus alas y volo hacia arriba, contra el Kuwagamon, el cual estaba dando un giro en el aire para volar hacia Julia otra vez.
Sin miedo del enorme bicho, Piyomon lanzo un ataque. "Fuego Magico!"
Un espiral de fuego color verde salio disparado hacia Kuwagamon, pero no le hizo nada. Entonces el Kuwagamon choco contra la pobre de Piyomon, que cayo al suelo con un ruido sordo.
"Ayyy... es muy fuerte para mi..."
"Piyomon!" Julia vio al Digimon en el piso, sucia y lastimada, y trato de llegar a su lado. Era algo increible, solo conocia al pajarito Digimon por un minuito, y ya sentia como si lo conociera de toda la vida.
Trato de alcanzarla, pero tuvo que agacharse para esquivar al Kuwagamon otra vez.
Sabia que no podia hacer esto por siempre, en algun momento el bicho colorado iba a alcanzarla, y no iba a vivir para contarlo.
"Bola de fuego!"
De pronto, de ninguna parte, una bola de fuego salio volando hacia el Kuwagamon. El bicho gigante se prendio fuego con el impacto, y gritaba de dolor. Como si eso no fuera suficiente, Julia vio como mas y mas bolas de fuego salian volando y chocaban contra el Kuwagamon en llamas.
"Bola de fuego!" "Bola de fuego!" "Bola de fuego!"
Despues de unos segundos de este ataque constate y sadico, el Kuwagamon desaparecio, convirtiendose en datos.
"Que... paso?" Julia miro al lugar donde el Kuwagamon estaba hacia solo un momento, y despues miro hacia un lado por donde habian salido las bolas de fuego.
Julia vio una escena digna de uno de esos dibujos japoneses... Anime, se corrigio al recordar el termino.
Dos figuras estaban paradas sobre una colina con el sol justo atras de ellos, haciendo dificil el verlos.
Julia trato de enfocar sus ojos hasta que por fin pudo verlos bien. Una de las figuras era un chico, parecia un poco mayor que ella. Estaba usando una remera negra, panatalones largos negros y zapatillas Topper tambien negras. Tenia el pelo del mismo color que Julia, marron. Pero el pelo de Julia era un poco mas claro que el de este chico, que era mas negro que marron. En la cintura del chico Julia pudo ver que el tambien tenia un D-3, pero el de el era color negro.
Al lado de el estaba un tipo enorme y alto, cubierto de fuego. Parecia como la Antorcha Humana de la vieja serie de los Cuatro Fantasticos. Pero mas grande.
Otro Digi-Destinado y su Digimon, penso Julia. Pero entonces, la teoria de Piyomon que ella iba a remplazar al Digi-Destinado de Argentina era equivocada.
Entonces fue que Julia vio la cara del chico, realmente la vio por primer vez. No mostraba ningun tipo de emociones, nada, como si nisiquiera estuviera vivo. Su Digimon parecia ser de la misma manaera. Le daba miedo.
"Deberias ver al Piyomon." dijo el chico de negro, apuntando al pajaro rosa tirado en el suelo.
Julia recordo a su Digimon y corrio junto a Piyomon, tomandola con cuidado con los dos brazos. Estaba viva, un poco lastimada, pero nada serio. Con una siesta se le pasaria todo.
Mientras tanto, el chico camino hacia ella, su Digimon siguiendolo. "Meramon, ya podes volver a la normalidad." le dijo a su Digimon.
El Meramon acientio con la cabeza y empezo a reducir de tama–o mientras emitia una extra–a luz color purpura. Pronto un candelabros caminante estaba en su lugar, un Candmon.
"Quien... quien sos?" pregunto Julia. No sabia si este chico era peligroso o no.
"Me llamo David. David... Albornoz." dijo su apellido como si no lo hubiera dicho en mucho tiempo. "Pero nadi me llama por mi nombre en este lugar."
Julia lo miro un rato, confundida. "Sos un... un..." le tomo un segundo el recordar el termino que Piyomon habia usado, "un Digi-Destinado?"
"Me temo que si." David le contesto. Desde que empezaron a hablar, David no mostraba ningun tipo de expression, ni tampoco hablaba mas de lo debido. Entonces noto lo que dijo, que quiso decir con 'Me temo que si'?
"Como llegaste?" pregunto David.
Julia apunto al monitor roto que el Kuwagamon habia destrozado cuando trataba de agarrarla a ella. "Por alla. Al menos eso fue lo que me dijo Piyomon."
David vio al monitor roto, luego a Julia. "No vas a poder volver por ahi." le contesto.
"S... significa que voy a tener que quedarme aca para siempre?" pregunto Julia, sus ojos otra vez se llenaba de lagrimas.
"No. Hay otro monitor que podes usar, seguime." le contesto David, y dio media vuelta. El Candmon lo siguio sin hacer ningun ruido.
Julia aseguro su D-3 en su pollera una vez mas, y recogiento a Piyomon, empezo a seguirlos. "Hey! Esperenme!"
Continuara...
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Notas del autor: SIC (San Isidro Club) es un club deportivo de Argentina, sus principales actividades son el Rugby para los hombres y el hockey sobre cesped para las mujeres. No es mi equipo de Rugby preferido (para los Argentinos que les gusta el Rugby y se preguntan cula es, la respuesta es La Plata Rugby Club), pero es uno de los dos principales clubes de Rugby no solo de San Isidro sino tambien del pais. El otro club es el CASI, y cuando juegan un CASI - SIC es como el River-Boca del Rugby Argentino.
Esta fue el primer capitulo, mas que nada como una introduccion. Los proximos capitulos seguramnete van a ser mas largos.
Persona
