DEJAME PROTEGERTE

La cabeza le daba vueltas, no por la resaca marca diablo que cargaba encima despues de la noche anterior, no a Dean Winchester la cabeza le giraba sin control por todo lo que les habia estado pasando a el y a su hermano Sam.

Dios santo como si no fuera suficiente llevar esa vida de cazar criaturas que la mayoria de la gente solo creia que eran cuentos para asustar a los niños antes de ir a la cama, arriesgando su vida a cada momento, no, no era suficiente, pareciera que el destino se habia ensañado con los hermanos cazadores a tal punto de apartar de su vida a todas aquellas personas a las que amaban; su madre, su padre, Jo, Helen, tantas personas que se habian sacrificado por protejerlos.

¿Y todo por que?, realmente ni el lo sabia, lo unico que siempre le habia importado era cuidar de su hermano desde que Azazel habia matado a su madre y marcado a Sam por un buen tiempo, cosa que aparentemente les perseguiria aun mas tiempo, fue por ello en principio que se habia enborrachado de tal forma la noche anterior, necesitaba un punto de escape para todo lo que llevaba a cuestas y el alcohol era su mejor aliado en ese momento, ya que jamas le diria a Sam lo abrumado que se sentia por el maldito apocalipsis que se cernia sobre ellos de forma inminente, sobretodo en Sammy, ya que el no importaba si su hermanito se encontraba bien.

Pero claro como era de esperarse el destino no los podia dejar descansar ni un poco, con la latente amenaza de Lucifer, que deseaba hacerse del cuerpo de Sam, su recipiente unico, como le llamaba, ese era el infierno por un lado, pero por el otro el cielo, aquel lugar que se suponia un paraiso, por el cual perecia que jamas se tendria que preocupar, ese... ese tambien le habia jugado mal, Michael el angel mas poderoso queria ocupar su propio cuerpo, ya que al igual que su hermano, Dean era el verdadero recipiente del angel, el unico capaz de liberar todo su potencial sin salir destruido en el proceso. De no ser por Cas, el unico ser aparte de su hermano y Bobby en el que confiaba , ya se hubiera vuelto loco, dejandose aplastar por todo lo que llevaba a cuestas.

-¿Dean, estas bien?- pregunto Sam, al ver a su hermano en la cama sin moverse, con lo ojos clavados en el techo desde hacia horas.

-Si Sammy, estoy bien.-respondio a su hermano, saliendo de sus pensamientos.

-Levantate son casi las 3 de la tarde, tenemos un probable poltergeist en una pueblecillo cerca de aqui y date un baño apestas.- reclamo ante el aroma a alcohol que habia impregnado la habitacion del motel en turno.

Dean asintio, pero lo ultimo que queria era levantarse y volver a la realidad de la que habia querido escapar unas horas antes, pero a fin de cuentas hizo caso a su hermano, se incorporo tan rapido como su cuerpo se lo permitio, al sentarse en el borde de la cama, se dio cuenta que se habia incorporado demasiado rapido, todo le dio vueltas de forma tan violenta que no pudo contener las ganas de vomitar.

-Aghh!- fue lo que salio de la garaganta de Sam al ver la mancha marron en el suelo y de la cama frente a su hermano mayor.

-No digas nada- amenazo Dean limpiandose las comisuras de los labios. Volvio a intentar moverse esta vez con mas cuidado y mucho mas lento, previniendo otro ataque de vomito tipo "el exorcista" esta vez.

Una hora mas tarde, ya limpio y algo mas repuesto de su resaca, salieron de la habitacion llendo hacia el impala negro frente a la habitacion.

-¿Hacia donde hermanito?- pregunto con desgano el mayor de lo Winchester.

-Sigue la carretera unos 60 km y despues toma la desviacion a cover hill, no debe tomarnos mas de una hora en llegar.- respondio.

Muchas veces habia visto a su hermano abatido pero ahora si que le resultaba extraño, que no intentara cubrir su estado de animo con bromas de mal gusto o haciendole enojar premeditadamente, solo para reir un poco a sus costillas, sabia que tal vez no le contestaria, pero tenia que preguntarle que le sucedia desde hacia dias, tal vez al menos asi trataria de evadir el tema con una broma o algo asi.

-Dean me puedes decir que te sucede, hace dias que casi no mueves la boca mas que para comer.- espero un momento pero no obtuvo respuesta alguna, su hermano seguia con la vista fija en la carretera inmerso en sus pensamientos.- Podrias al menos dirijirme la mirada, para hacerme saber que estas ahi y no en otro plano de existencia.

Lo que obtuvo por respuesta, fue que Dean pusiera una cinta de metallica y subiera el volumen a todo lo que daba.

Sam se acomodo en su asiento y cruzo los brazos a modo de indignacion por haber sido ignorado completamente. Durante los siguientes minutos que parecian ser eternos lo unico que hubo entre ellos fue la musica y el viento que golpeaba a Sam en el rostro por la ventana entreabierta. Entonces escucho como el volumen de la musica disminuia, pero no se movio ahora era el quien ignoraria a su hermano.

-Lo siento, no queria hacerte enojar Sammy, solo que no dejo de pensar en que esos malditos angeles y demonios que vigilan todos nuestros movimientos para cojernos por sorpresa y llevarnos a cada uno, a cada lado de la balanza.

Sam quizo ignorar a su hermano, pero por fin habia abirto la boca y le habia dicho lo que le preocupaba, pero en el fondo sabia que no era eso, por que sentia lo mismo y sabia que era algo que no era para tanto, al menos no para ellos.

-Mientras ninguno de los dos acepte, no importa si nos capturan o torturan se quedaran en el mismo sitio, para su pesar nos necesitan tanto, que ninguno se atreve a dar un paso en falso. Asi que ya basta, quiero ami hermano brabucon y todo-lo-puedo de vuelta. Necesito a alguien a quien hacer enfadar.

-No sera que te sientes sola Samantha, jamas has sido bueno lidiando con la soledad de tu conciencia cuando alguien te ignora.- respondio sonriendo levemente.

Sam contesto con otra sonrisa a medias y golpeo la frente de su hermano suavemente con la palma.

-En la cara no!- respondio el otro muchacho dando un golpe en la nuca a su hermano.

Cuando por fin bajaron del coche se encontraban frente a una casa que de no saber que estaba poseida por un fantasma, creerian que era de lo mas acojedora. Permanecieron frente a ella unos instantes percatandose del letrero de se vende clavado en el jardin.

-Veo que no perdio el tiempo nuestro amiguito, los corrio antes de que llegaramos.- dijo dean algo divertido, tal vez eso era lo que necesitaba una caceria normal lejos de todo ese apocalipsis.

-Pues tiene bastante practica, lleva 15 años haciendolo, esta es la familia numero 70 que saca de aqui.

-Wow si que esta encariñado con su pedazo de tierra.- contesto el ojiverde- Pero ya es tiempo de que vaya hacia la luz, no te parece Sammy.

-Asi es, pero no creo que sea luz lo que vea al llegar.

Sin pensarlo dos veces tomaron sus armas cargadas de sal y el libro de hechizos del cual Sam no se despegaba. Dean lo vio y entorno los ojos.

-No creo que lo espantes con un abracadabra hermanito.

-Ya lo se, es mero senttmentalismo.

-Tu siempre tan niña. Bien vamos, ya no puedo esperar para patear su fantasmagorico trasero.

Una vez dentro de la casa se percataron que los dueños no se molestaron en empacar, ni falta que hacia, el interior parecia no menos que zona de desastre, abolutamente todos los muebles estaban hechos astillas, el grifo de la cocina esta roto y un leve chorro de agua habia inundado todo el piso inferior, todo en la casa esta patas arriba, platos aqui, sillas alla, lo que en algun tiempo fue una tv de plasma se encontraba colgada en una lampara en la sala.

-Que lastima de pantalla, apuesto que el americano se veia de maravilla.- dijo Dean con algo de pena en la voz por la tele rota.

-Yo diria que lastima de todo, si que no se anda con juegos, apuesto que los saco el mismo dia que llegaron.- aclaro el menor apuntando varias cajas con cosas sin desempacar..

-Crees que se moleste con nosotros por entrar sin permiso a su "dulce hogar".- dijo con sarcasmo en la voz.

La respuesta no se hizo esperar, el cadaver del televisor salio disparado hacia ellos, junto con la estancia entera. De un momento a otro los hermanos habian quedado bajo un monton de escombros.

Paso un rato hasta que una mano surgio de entre toda la boragine de basura, como si se tratara de una escena de muertos vivientes, Sam salio a la superficie, quejandose del dolor que le causo caer de espaldas tan bruscamente. Empezo a buscar a su hermano entre todo ese desorden.

-Dean!- grito el menor en espera algun rastro de su hermano.

-Ahh, no grites Sam, aun tengo un dolor de cabeza por la resaca y este maldito no ayudo en nada a disminuirlo.

Pero no habia terminado de hablar cuando otro monton de basura era arrojado hacia ellos. Se cubrieron detras de lo que alguna vez fue una mesa enorme.

-Este me esta molestando en verdad, OYE DEJATE VER, NO SEAS UN MALDITO COBARDE.-vocifero Dean al aire

-No soy ningun cobarde- le respondio una cara traslucida frente a el, casi inmediatamente.-Ahora larguense o mue...

Ni siquiera lo dejo terminar cuando el hemano mayor le disparo entre los ojos con su pistola. Acto seguido desaparecio en un grito agudo y horrible que provoco que los hermanos se taparan lo oidos.

-Vamos sus restos estan bajo el sotano.- dijo Sam al ver desaparecer al espectro.

Ambos se apresuraron al sotano cerrando la puerta y las escasas dos ventanas que habia, poniendo una barrera de sal en cada una de ellas.

-Comienza a cavar.- dijo Dean tomando dos palas y un pico de una de las paredes.

-¿En donde Sherlock?- pregunto el menor.

-No lo se, el que investiga aqui eres tu , no yo.- Sam entorno lo ojos en una mueca de exasperacion

-Por lo que "investige", el tipo era un tacaño y ermitaño de lo peor, asi que cuando murio, solo lo botaron a un hueco donde se supone deberia estar el...- pauso el hermano buscando algo.- Esto- dijo por fin señalando una biga de hierro fundido en la esquina mas alejada del sotano.

-Ni hablar, a trabajar hermanito.

Tardaron casi toda la tarde en romper el concreto, hasta que vieron tierra suave, a medias por que estaba tan comprimida, que parecia una extencion del concreto. Cuando por fin llegaron a los huesos una ligera brisa comenzo a soplar llevandose la sal de la puerta, cuando al fin se vio dispersa, la puierta se abrio violentamente, dejando entrar al enfurecido fantasma.

-ALEJENSE, ALEJENSE, ALEJENSE.- gritaba incesantemente, abalanzandose hacia ellos.

-MIERDA, Sam quema los restos de este desgraciado.- ordeno mientras disparaba, pero esta vez las balas no le hicieron nada.- Que demonios... SAM APURATE.- alcanzo a decir antes de ser golpeado por una de las palas.

Sam comenzo a buscar la gasolina por todos lados, mientras Dean volvia a dispararle al fantasma, que otra vez parecia inmune a las balas de sal.

Sam salio volando cuando lo golpeo el cuerpo de su hermano, estrellandose contra la pared.

-Maldito- se quejo Sam

-Sammy- llamo Dean señalando el bote con gasolina a su costado- apurate lo distraere una vez mas.-Hey tu sacame si puedes, hijo de perra.- grito al espectro sobre sus cabezas.

Este le levanto azotandole contra el techo, luego contra las paredes, hasta que el menor de los Winchester le hablo.

-Tu, bastardo.- el fantasma le miro dejando a su hermano.-Hasta nunca.- acto seguido tiro un encendedor a sus restos que empezaron a arder con la gasolina y la sal que recogio de las ventanas.

El fantasma comenzo a arder tambien hasta desaparecer completamente, otras vez en un grito que obligo a los hermanos a taparse los oidos.

Una vez en el impala y lejos de esa maldita casa, Dean parecia estar inmerso en sus pensamientos nuevamente.

-Ahora que pasa Dean?- pregunto el hermano de ojos pardos, temiendo que su hermano se volviera a poner como esa mañana.

-Revisa tu arma y la mia- respondio si despegar los ojos de la carretera oscura apenas iluminada por los faros del auto. Sam obedecio a su hermano y para su sorpresa vio que sus armas no estaban cargadas con balas de sal. Al ver la cara de su hermano Dean hablo.- Yo mismo las cargue antes de entrar a la casa, incluso la primera vez que dispare la sal estaba ahi. Pero despues nada, solo...

-Balas normales- termino de decir el menor- Como demonios paso?- dijo incredulo.

-No lo se, pero tambien esta lo de la puerta del sotano, al salir vi como si la sal hubiera sido barrida por el viento, pero en ningun momento soplo el aire como para llevarse la sal. No se que paso ahi dentro Sammy, pero estoy casi seguro que nuestros amigos estan metidos hasta el cuello.- senterncio Dean.

-Y no te equivocas- dijo una voz en el asiento trasero del impala.

CONTINUARA...