15 de septiembre de 2014

Hoy tengo una entrevista con Zeref Dragneel, un abogado que necesita que alguien le cuide a su hijo Natsu de 17 años.

-Takeru, como estas? –preguntó Gray

-Nervioso. Que pasa si…? –respondió Takeru nervioso

Por qué estoy preocupado por esto? Que se supone que debo hacer? Mejor piensa en algo positivo, no en negatividad.

-No tienes nada de que preocuparte, te saldrá bien –le tranquilizó Rogue

-De verdad? Si tu dices que no tengo ninguna preocupación entonces tendré que creerte

Todo será diferente

-Chicos, no encuentro mis botas Dr. Martens –dijo Rogue

-Las encontraremos –dijo Gray

Empezamos a buscarla en nuestro apartamento que se situaba en el centro de Osaka. Es confortable para los tres.

-Las encontré. Estaban cerca de mi puerta, las dejarías anoche –anunció Takeru

-Muchas gracias –agradeció Rogue

Nunca cambiará pensó Gray

Paralelamente en Tokyo

Zeref estaba esperando a la niñera que había contratado para que cuidase a su hijo Natsu porque tenía que irse a una importante reunión de negocios.

No le gustaba que le hicieran esperar porque le molestaba que llegasen tarde porque faltaba a la ética de trabajo.

-Perdona el retraso, había mucho tráfico –se disculpó Nina

-¿Sabes cuantas veces has dicha lo mismo? 4 veces. Recoge tus cosas porque estas despedida –dijo Zeref

No me gustan las personas que no se esfuerzan nada para lograr sus objetivos

-No puedes hacerme esto

-Sí que puedo. Has perdido mi voto de confianza que te di cuando viniste por trabajo, pero me has decepcionado.