Peluquería

Autor del Fanfic:Gale el Remolino.

Autor del anime:Masashi Kishimoto.

Anime/Manga: Naruto.

Aviso: Tal vez un pasado inventado por mí... tal vez.

Disclaimer: Los personajes, espacios y demás elementos de Naruto no me pertenecen. Por ello, no cobro por hacer esta historia, si no que escribo para el disfrute propio y ajeno.

Comentarios del autor:

Resumen: Minato entró en una fase rebelde en la que quiso dejarse cortar el pelo. Y se prometió que nunca, NUNCA, se lo volvería a cortar... Bueno, mantuvo su promesa hasta que...

Y ahora, sin más que añadir…

Minato no quería cortarse el pelo.

Por supuesto, él no siempre tubo este problema. Todo residía en el hecho de que, al entrar en la pubertad, cogió la manía de reflexionar y cuestionar los roles y papeles que la sociedad le había marcado desde muy pequeño. Los hombres no lloraban, eran fuertes, pelear era algo natural en ellos, y sobre todo, llevaban el pelo corto.

¡Pues él no quería llevar el pelo corto! ¡¿Por que diantres tenía que llevar el pelo corto?! ¡No había ninguna ley que le obligara a cortarse el pelo!

Y una vez cuestionado este hecho, Minato empezó a dejarse crecer el pelo poco a poco. Por supuesto, nadie se atrvía a reprocharle nada, tal vez se lo hacían ver de manera indirecta…

–Estabas más guapo con el pelo corto, Minato. –Intentaban insistirle unas ancianas.

–Bueno, cada uno es libre de actuar como crea conveniente siempre y cuando eso no perjudique la felicidad del resto. ¿No opinan ustedes, señoritas? –Comentaba con una sonrisa el rubio mientras, de manera pasiva, cerraba la boca de aquellos comentarios ajenos a su pensar.

Y esta revolución llevó un año, en el cual, el pelo del joven shinobi había crecido en abundancia. Aunque claro, él estaba muy feliz con su ideal de libertad. Nada pensaba hacerlo retroceder antes sus palabras, él sería lo que quisiese, y nadie podría decirle lo contrario. ¡No molestaba a nadie!

–Pareces una niña. –Saltó de repente y de la nada una pelirroja de pelo corto que, tras chocarse con él y disculparse con un merecido "Perdona, niña. ¿Estás bién?" hizo reaccionar el lado sensible de las neuronas de Minato. Ese lado que se había desactivado durante mucho tiempo, y que de nuevo, por no hacer falta en su costumbre, volvió a activar.

Y entonces fue a la peluquería a cortarse el pelo.

Sí, así terminó su racha liberal. Lo cierto es que, al día siguiente, vio a la persona que le hizo recapacitar en sus decisiones y fue a agradecerle como creía que era correcto.

–¡Oye, niño! ¡¿Quieres jugar con nosotros en el descampado?! –Preguntó inocentemente.

Y el "niño" lo abofeteó en la cara.

–¡Soy una chica, idiota!

El caso es que las circunstancias fueron las mismas para la joven pelirroja, pero a la inversa.

El caso es que al final ella decidió dejarse crecer el pelo.


En fin. Solo espero que a aquel que se le haya ocurrido pasarse por aquí, haya también disfrutado mi historia como yo disfruté creándola.

¡Hasta más ver!