Hola a todos. Seguramente no me conocen. Me llamo Light Nazo Yagami, y recién me acabo de mudar de DZ tras la noticia de su futuro cierre. Publiqué en mi estancia en los foros un par de Fics, y aunque sigo trabajando en ellos, me he dado la oportunidad de publicarlos aquí en Fanfiction. Ojalá les guste este, que de hecho fue mi primer trabajo, disfrútenlo.
Prólogo
La Tierra, un planeta hermoso, lleno de vida, de hermosos paisajes, y...también sede de una gran división de mundo, muy distintos entre sí, pero que comparten el mismo origen, el Planeta Origen. Uno de estos muchos mundos es el Mundo Pókemon, un planeta muy similar a la Tierra, cohabitada entre humanos y seres similares a animales y otros artefactos de la vida diaria, llamados Pókemons, todos ellos protegidos por una generación de guardianes que han buscado, de manera consciente o inconsciente el equilibrio del mundo. De igual forma, existe otro mundo, generado por las millones de computadoras de todos los mundos: el Mundo Digital o Digimundo. Esta tierra esta habitada por seres virtuales, creados a partir de modelos de animales, seres mitológicos e incluso artefactos humanos, por lo que fueron llamados Digital Monsters, Digimons, y cuyas vidas dependen de un grupo de personas, en su mayoría jóvenes, conocidos como digi-elegidos.
Todos estos mundos viven sin saber la existencia del otro, sin embargo, la ambición y poder de un hombre pueden poner el peligro el balance de estos mundos, la barreras entre ellos, e incluso podría poner en riesgo la vida en toda la Tierra...
Capítulo 1: Noticias inesperadas
El Digimundo, una tierra antes pacífica, se encontraba ahora en ruinas. Los Digimons que antes corrían libres ahora eran todos esclavos, y los Niños Elegidos, que durante muchos años habían protegido esa tierra, habían desaparecido o caído ante la fuerza del actual amo de aquel ya olvidado mundo, cuya fortaleza se alzaba imponente sobre los restos de la antigua isla File. Ese hombre de misterioso potencial se hacía llamar Alexander Graham, pero nadie sabía nada acerca de su pasado, excepto que era un temible Señor Oscuro.
Aquel misterioso hombre observaba con una sonrisa maligna en su rostro el conjunto de cápsulas de cristal que yacían en los laboratorios de la fortificación, las cuales contenían su más reciente, y exitoso, experimento. De pronto, el silencio que reinaba sobre aquel cuarto fue perturbado con los pasos de un misterioso ser encapuchado, y del cual solo se podía reconocer su inmensa capa.
-Amo Graham, he encontrado la información que solicitó acerca del nuevo mundo. – dijo el encapuchado, con una voz grave y siniestra.
-Vaya, así que has podido hallar a los seres supremos de aquel sitio, ¿no es así? – respondió el maligno amo del Digimundo.
-Sí, mi señor, he aquí todo lo que necesita ver – contestó el también enigmático sujeto, mientras dejaba en la pequeña mesa de trabajo un fólder lleno de información e imágenes sobre el recién hallado mundo. Graham tomó el fólder y empezó a ver las imágenes de unos seres similares a dragones, uno de color azul, otro era de color violeta y otro era amarillo con rojo, todos parecían dioses.
-Así que estos son sus deidades, ¿eh? No parecen un gran reto. – contestó confiadamente.
-Tienes razón, todos ellos son solo subordinados de la verdadera criatura suprema – dijo el extraño mientras sacaba de entre su capa una imagen de una criatura aún más poderosa, de color gris y similar a un centauro. Su apariencia era la de un verdadero dios - esta es la criatura que usted, busca, señor.
Graham tomó la fotografía y río maléficamente.
-¡Ah, así que este es Arceus, el magnífico Dios Pókemon! – decía alegre el misterioso amo, quién soltaba una ligera risotada de maldad. – Estoy seguro que su poder será más que suficiente para mí.
-Pero espere, todavía falta algo que tiene que ver. – prosiguió el extraño visitante.
-¿Algo más? – pregunto extrañado ante tal afirmación.
-Si, es sobre "ya sabe quienes". – menciono el encapuchado, y ante tal afirmación Graham palideció.
-No puede ser, se supone que ya habían desaparecido desde hace años. – dijo entre enfurecido y estupefacto. Mientras tanto, su acompañante sacó de su capa otro fólder.
-Eso es lo que creíamos, al parecer existe todavía uno vivo. – dijo muientras le entregaba a su amo el fólder. Él vio el contenido del fólder, en el que se contenían datos y fotos de un joven de pelo negro azabache, vistiendo una gorra roja y que se encontraba acompañado de una especie de ratón color amarillo. Graham no daba crédito de lo que veía.
-¿Pero ya sabe acerca de sus poderes? ¿Sabe ya de lo que es capaz?
El encapuchado solo guardó silencio. Graham supuso entonces la respuesta, por lo que se puso furioso.
-No puede ser...mi reino...¡No puedo permitir que viva! – gritaba entre dientes
En ese momento se escucharon pasos muy rápidos que se dirigían al laboratorio. El encapuchado desapareció de la misma forma en la que llegó, mientras Graham ocultaba la información que el visitante le había otorgado. Segundos después, un soldado entró al laboratorio, parecía muy agitado.
-Señor Graham, un Digimon prisionero ha huido. – dijo muy agitado el soldado, mientras su amo lograba mantener un aspecto tranquilo.
-No me sorprende, ya había presentido eso – mintió el Señor Oscuro, pues él hacía creer a sus subordinados que él era un dios encarnado, a pesar de su destina era en verdad ser un dios.
-Lo imagino señor – dijo el soldado tranquilizándose. – El problema es que él fugitivo huyó a través de...
El soldado cayó antes de terminar la frase, pero Graham se dio cuenta de que aquel Digimon había huido a través del...
-¿El Portal? Como te había dicho, ya lo sabía – dijo mientras se volteaba a sacar una de las fotos del joven azabache, todo mientras sonreía maléficamente.
-Señor, ¿Le ocurre algo? Noto que actúa algo raro. – dijo el soldado mientras su amo se volteaba con una enigmática sonrisa en el rostro.
-Lo que ocurre es que todo está transcurriendo de acuerdo al plan de mis ancestros – le contestó mientras le daba la foto del joven azabache. – Ese Digimon se supone debe guiarte a este sujeto.
-¿Este joven? Pero, ¿es de importancia para usted?
-Lo es – contestó Graham mientras volvía a ponerse serio. – Necesito que tus hombres lo asesinen.
El soldado quedó sorprendido ante la orden. No sabía nada del muchacho y ya recibía órdenes de matarlo.
-¡Pero señor! ¿Por qué debe morir? Es decir, es solo un niño.
Pero ante esta respuesta, Graham se lanzó furioso sobre el soldado y lo agarró con sus manos amenazadoramente.
-¿¡Que no he sido demasiado claro? ¡ASESINALO! Mis ancestros me han
dicho que su vida atenta contra la mía. ¡NO PODEMOS PERMITIRLO! –le grito a la cara para después arrojaba al soldado sin mucha fuerza. – Ahora corre y reune a tus hombre para que viajen a ese extraño mundo. Recuperen al fugitivo y asesinen al chico. ¿Quedó claro?
-¡Señor, si señor!
Entonces el soldado abandonó el cuarto, y Graham se dirigió furioso hacia las cápsulas del laboratorio. Miró el interior de una las cápsulas, dentro de las cuales se encontraba un joven de pelo marrón, y se dijo para sus adentros:
-En cuanto ustedes despierten, mi reino no tendrá fin.
El temible Graham salió del laboratorio momentos después. Su reino de oscuridad parecía que se encontraba en peligro. Por primera vez en mucho tiempo volvía a sentir miedo.
