Autora: KawaiiTenshi27

Disclaimer: Todos los personajes son propiedad de J.K. Rowling, Warner Bros., etc. La historia es propiedad de KawaiiTenshi27, yo sólo la traduzco.

Warnings: Slash. Lenguaje, o más bien, palabras para algunos inapropiadas.

Introducción

Calor. Humedad. Oscuridad. Rojo vivo. Sudor. Ágiles cuerpos moviéndose y retorciéndose juntos en una primitiva danza. Tocar. Sentir. Clamar. Gritar. Oler el dulce aroma de alcohol y pasión.

Silencio.

One-Night Stand

Primera Parte

Los brillantes rayos del sol de invierno se esparcían por los campos de Hogwarts como en cada amanecer. La nieve fresca brillaba con la nueva luz. Poco a poco el resplandor subía por el castillo, resplandeciendo en las ventanas, iluminando las habitaciones.

Dentro de la sala común de Gryffindor, los cuerpos que cubrían el suelo y los muebles comenzaron a agitarse cuando los rayos del sol alcanzaron sus ojos, chillando de dolor al sentir las fuertes punzadas dentro de sus cabezas. La mayoría no quería mas que voltearse y volver a dormirse, pero el semestre había terminado el día anterior y el tren de regreso a Londres saldría temprano de la estación de Hogsmeade.

La luz continuó su fácil escala por las paredes de la torre inundando la habitación más alta: el hogar de los chicos estudiantes Gryffindor de séptimo año. La luz se arrastró por el suelo y echó un vistazo a través de cortinas entrecerradas a las tres camas desocupadas hasta que alcanzó la cuarta de ellas que tenía sus cortinas rojas firmemente cerradas. Solo un delgado rayo logró entrar por un pequeño agujero, cayendo, convenientemente, en los ojos cerrados del chico de cabello cobrizo que dormía dentro.

El chico se movió tratando de huir del brillo importuno. Se volteó sobre su almohada sólo para terminar con el rostro cubierto con cabello. Con un gruñido, abrió un ojo y, sin poder descifrar lo que veía, abrió el otro. Incluso con los dos ojos abiertos el cabello en su cara era, sin duda alguna, negro. Eso no podía estar bien. Decidiendo que estaba demasiado crudo como para preocuparse por el momento, cerró sus ojos nuevamente y se volteó para no ver lo que estaba sobre su almohada pero el sol quemó sus párpados de nuevo.

Con un gran esfuerzo, el chico con el cabello cobrizo se dio la vuelta para huir del malvado rayo de fuego. Algo estaba mal. Su cama se estaba moviendo debajo de él y se sentía como si lo estuviera causando una persona.

Luchó de nuevo para abrir sus ojos y a través de la neblina que lo rodeaba, logró reconocer dos piernas, un torso, dos brazos y una cabeza con cabello negro. Bueno, eso explicaba el cabello negro sobre la almohada, y definitivamente era una persona, asi que ya no tenía que preocuparse por que su cama tuviera algo raro. Con el enigma resuelto, los ojos cafés se cerraron de nuevo y la cabeza con cabello cobrizo se recargó sobre uno de los hombros del chico del cabello oscuro preparándose para dormir otra vez.

El chico de cabello oscuro se movió debajo de su compañero de cama, y uno de sus brazos envolvió al chico de cabello cobrizo, acariciando su espalda desnuda. El chico de cabello cobrizo suspiró acurrucándosele cómodamente al otro.

Una milésima de segundo después, los ojos cafés se abrieron repentinamente y su dueño brincó con fuerza para alejarse del abrazo del otro chico, pero la fuerza con la que lo hizo fue tanta que terminó tropezándose con las cortinas y cayéndose de la cama para aterrizar en el piso con un grito de sorpresa. Su cabeza y su estómago le reclamaban gritando por el movimiento tan abrupto y el resto de su cuerpo clamó una protesta por el aterrizaje tan duro. Un pensamiento insignificante, muy adentro, le decía que no era la solamente la caída la que le causaba el dolor que sentía, pero estaba muy ocupado luchando contra su estómago rebelde como para ponerle atención.

La cabeza con el cabello negro, seguida por un cuello y unos hombros ligeramente bronceados, apareció sobre la orilla de la cama. Unos ojos grises, parpadeando para enfocar, se dirigieron al chico en el suelo. "¿Remus?" preguntó con la voz rasgada.

Remus, concluyendo que sería mejor mantener su boca cerrada hasta que estuviera seguro de que tenía algún tipo de control sobre sí mismo, no respondió.

"¿Qué estás haciendo en el piso?" le preguntó el chico de cabello oscuro. El chico parpadeó confuso y cambió su pregunta. "¿Qué estabas haciendo en mi cama?"

Remus, asegurándose de que su estómago no se volvería inmediatamente, dijo "Mi cama, no la tuya". Y cerró firmemente su boca.

El gesto de confusión se profundizó. "¿Qué estoy haciendo en tu cama?". Los ojos grises del joven viajaron sobre el cuerpo desnudo de Remus, se abrieron con sorpresa y subieron de nuevo para encontrarse con los ojos cafés. "No".

Remus no tuvo la oportunidad de cuestionar al otro chico. "Creo que voy a vomitar" logró decir, y a pesar de las enormes objeciones de su cuerpo y su cabeza, llegó al baño justo a tiempo.

Manos frías aliviaron la piel ardiente de Remus mientras vaciaba su estómago, trazando círculos en su espalda y manteniendo su cabello fuera de su rostro. Cuando terminó, el chico de cabello oscuro le pasó un vaso con agua para que se enjuagara la boca y después le secó la boca cuidadosamente con una toalla húmeda.

"Gracias, Sirius", murmuró Remus con la mirada gacha, sin poder ver los ojos grises en frente suyo. Algo tarde se dio cuenta de que los dos seguían estando completamente desnudos. Tomó un par de toallas de una repisa y le aventó una a su compañero, envolviendo la otra alrededor de su cintura.

Sirius miró la toalla por un momento sin estar seguro qué hacer con ella, pero luego la envolvió sobre su cintura copiando a Remus.

Ninguno de los dos se atrevió a ver al otro por lo que pareció una eternidad. Una eternidad bastante larga.

Finalmente, Sirius rompió el silencio. "Nosotros… no…" mordió su labio inferior y sus ojos se encontraron con los de Remus. "¿O sí?"

Remus pasó su peso de un pie al otro. No quería que su amistad se arruinara. "Sólo porque despertamos desnudos y en la misma cama no prueba necesariamente que el sexo estuvo involucrado".

"Pero al mismo tiempo lo hace una gran posibilidad". contestó Sirius jugando con un mechón de su propio cabello.

Remus asintió y deseó no haberlo hecho. La cabeza todavía le dolía.

"¿Recuerdas algo?" preguntó Sirius.

"Recuerdo que James sugirió que hiciéramos una fiesta después de la cena para celebrar el final del semestre", contestó Remus lentamente. "Y recuerdo ir a las cocinas por comida con Peter y Lily mientras tú y James iban a Hogsmeade por bebidas. Y recuerdo música, y comida, y bebidas" Remus se masajeó la sien con una mano. "Muchas bebidas. Y después todos jugamos ese tonto juego de pasar cartas succionándolas con la boca, y creo que besé a Lily, y luego nosotros nos besamos, y luego todos jugamos a la botella, y nos besamos de nuevo, y luego besaste a Lily, y Lily besó a Frank Longbottom, y James se enojó, pero después besó a Alice después de que ella besara a Frank, y después yo besé a James, y luego nosotros nos besamos de nuevo, y luego…" Remus parpadeó tratando de pensar. "No recuerdo muy bien después de eso. Creo que seguimos jugnado. Estoy seguro que seguimos bebiendo. Recuerdo que en algún punto volvimos a besarnos, pero no recuerdo si seguíamos jugando… Supongo que sí, porque si no ¿por qué nos besaríamos?" Esa pequeña parte del cerebro de Remus que no estaba preocupada con los martillazos sobre su cráneo escuchó ese punto, declarando que ella si podía pensar en varias razones por las cuales se besarían, pero Remus le dijo que se callara, porque el otro chico asentía de acuerdo con su primer punto.

"Si" murmuró Sirius. "De seguro todavía estábamos jugando. ¿Y… recuerdas algo más?"

Remus sacudió la cabeza. "No" confesó, "¿Y tú?"

"No", contestó Sirius demasiado rápido.

"Bueno"

"Bueno"

"Creí que nunca olvidabas nada cuando bebías"

"Bebí más de lo que acostumbro" dijo Sirius examinando el mosaico debajo de sus pies.

"Ah" Remus pensó que Sirius se veía más chapeado de lo normal, pero catalogó el pensamiento como parte de su imaginación (o su adolorida cabeza) e ignoró el asunto. "Entonces¿cómo…?"

"¿Estás bien?" preguntó Sirius de repente, mirando hacia arriba.

Sorprendido, Remus asintió para después hacer una mueca de dolor. "Bueno, me duele la cabeza, pero vomitar me ayudó a…"

"No, me refiero a…" Sirius estaba definitivamente rojo. "Quiero decir, eh, físicamente".

"Mi cabeza…"

"No", Sirius lo interrumpió nuevamente. "Digo, tu nunca… ya sabes, te has acostado con un chico¿verdad?"

"¿Qué¡No! Nunca he…" Remus paró y pasó saliva. "De hecho, nunca me he acostado con nadie".

"Ah… Ok"

'¿Me lo estoy imaginando, o Sirius parece sentirse aliviado?' se preguntó Remus.

"Bueno. Entonces, eh…" Sirius miraba a todos lados excepto a donde Remus se encontraba, y no solamente su rostro estaba sonrojado, sino que parecía extenderse hasta su cuello.

Entonces Remus vio la pequeña marca justo debajo de la mandíbula de su amigo y el recuerdo de haberla hecho él mismo pasó por su cabeza: Sirius ofreciendole su cuello y los sonidos de placer que emitió el chico de los ojos grises mientras él lo marcaba.

"¿Estásadolorido?" la apresurada pregunta de Sirius interrumpió los pensamientos de Remus.

"¿Qué?"

"¿Estás adolorido?" repitió Sirius más despacio. "Si…ya sabes…entonces tu estarías un poco…"

"Ah". El pensamiento insignificante hizo de nuevo su aparición en la mente de Remus para decirle: Te dije que no era solamente por haberte caído de la cama. "Entonces… nosotros…" Oh, no, se quejó la otra parte del cerebro de Remus. Esto no está bien. Esto no está nada bien. Pero la pequeña parte restante estaba brincando y bailando de alegría, lo que no le era de ayuda a la parte más grande, que seguía martillando como si tratara de construir otra Gran Muralla.

"¿Sí, verdad?" Sirius estaba ahora mirando a Remus, y su rostro aún sonrojado, estaba lleno de preocupación. "¿Te duele mucho? Te lastimé¿cierto?"

Remus sacudió la cabeza y se encogió de hombros. No vuelvas a hacer eso. "No y no" le contestó al rostro preocupado. "Es sólo la cruda". Y entonces su cerebro procesó la información relacionada a la cercanía del cuerpo casi desnudo de Sirius al suyo con la misma elaborada vestimenta.

Pasos y voces sonaron en las escaleras afuera de su habitación.

Remus entró en pánico olvidándose de sus dolores de cabeza. "Ah¡demonos¡James y Peter! Pensé que ya se habían ido a su casa ¡Pero es muy temprano¡Estaban abajo¿Qué hacemos?"

"Respira" le sugirió Sirius, y en un instante unas manos suaves pero algo rasposas estaban sosteniendo a Remus de los hombros. "Tranquilízate".

Remus lo intentó. Era muy difícil concentrarse con las manos de Sirius sobre su piel.

"No tenemos que decírselo a nadie si no quieres".

"Pero…"

"Estábamos borrachos, Rem".

Remus sintió que se derretía por dentro al sonido del apodo que solamente Sirius usaba, y no registró lo que el chico le estaba diciendo.

"No… no significó nada. ¿OK?" continuó Sirius. "No estábamos pensando bien. Sólo fingiremos que no pasó nada. Nos olvidaremos del asunto"

¡Pero yo no quiero olvidarlo! Lloriqueó la mente de Remus. Quiero recordarlo. ¡Y ni siquiera eso puedo hacer!

El sonido de la puerta abriéndose llegó a sus oídos.

"Métete a bañar," ordenó Sirius. "Eso te ayudará con la cruda. Me aseguraré que no encuentren mi ropa en tu cama o algo así, y después me meteré a bañar también. Cuando salgas del baño tendré lista una poción para la cruda".

Sirius no esperó a que Remus respondiera. Salió del baño, cerrando la puerta detrás de él y Remus lo escuchó saludar a sus dos compañeros de cuarto.

Remus prendió una regadera. Colgó su toalla en el gancho sobre la pared y dio un paso dentro del agua. El tibio vapor se mezcló con las tibias lágrimas que Remus no pudo contener en sus ojos y se resbalaban por sus mejillas.

Continuará…

Es una frase de la película Velvet Goldmine, la cual, por desgracia no he visto, si alguien tiene la frase como en la versión en español, la corrección es bienvenida. Según las notas de KawaiiTenshi27, la frase completa la dice una sola persona, (Mandy, para los que la han visto), pero la autora pensó que funcionaría mejor separada en el fic.

El juego al que se refería Remus (Suck-and-blow en inglés) no tiene, a mi conocimiento, un nombre específico en español, aunque lo conozco bien. Para aquellos que no entendieron de lo que se trata, se juega con una carta que tienes en la boca succionando aire para mantenerla ahí sin morderla ni usar las manos. Después tienes que pasarla a otra persona de boca a boca y la otra persona tiene que succionar la carta para asegurarla en su boca, y luego pasarla a otra persona, y así sucesivamente.

Creo que todos sabemos jugar a la botella. En México hay varias versiones, hasta donde yo sé, pero la más popular es a lo que se refiere la autora con Spin-the-bottle. Todos se sientan en un círculo, en medio se coloca la botella. Los jugadores se turnan para girar la botella y las dos personas que apunte la botella tienen que besarse. Si te toca besar a alguien por segunda/tercera/etc vez, el beso tiene que subir de intensidad cada vez que se repita.

Refiriéndose a la Gran Muralla China, construida alrededor del siglo II a.C.

Notas de la traductora: Bien, he regresado a mi faceta de traductora, haha. Que se le hace. No he tenido imaginación suficiente para terminar una historia y definitivamente no quiero que nada termine incompleto como Pepe Cazuela, así que mientras tanto, creo que me dedicaré a la noble tarea de traducir, con la excepción de que esta vez, tal vez traduzca mis propias historias al inglés, a ver que pasa. KawaiiTenshi27 tiene una larga lista de historias y todas, a mi parecer, son geniales. Empecé traduciendo esta simplemente porque es la que está completa, pero si todo va bien y obtenemos una buena respuesta, tal vez termine traduciendo más de sus historias. Si alguien tiene alguna sugerencia, no dude en hacérmela saber. Y por favor… Review!