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Hace 11 años...
Me llamo Rukia Kuchiki y tengo 15 años, vivo con mi abuela, Unohana, en una pequeña casa cerca del bosque, la casa esta más bien alejada de la ciudad, pocas personas quieren un lugar así pero a nosotras nos viene bien. Mi abuela detesta el constante ruido y ajetreo de la ciudad y por otra parte a mi me encanta rondar por el bosque trepando arboles, abrazando conejos y lo que es aún más importante, escribiendo… amo escribir. Puedo pasar una tarde completa sentada en la gran rama de un árbol escribiendo o leyendo abrazada por esa tranquilidad que solo el bosque puede ofrecer. Es aún mejor porque no hay personas cerca, el bosque es como un pequeño mundo solo para mi.
¿Mis padres? Hablar o preguntar sobre ellos es como un tema tabú en casa, fallecieron en un accidente de auto cuando yo apenas contaba dos años, así que mis recuerdos sobre ellos son más bien nulos. Pero el hecho de no recordar no evita que los ame. Puedo verlos a ellos en mi, mi constitución física es parecida a la de mi madre, ambas de estatura baja, mi pálido tono de piel también se asemeja al de ella, pero mis ojos violeta son de mi padre. Sí, ellos están conmigo. Sé que mi abuela no habla mucho al respecto porque aún a pesar de los años sigue triste, en ocasiones cuando ella no se da cuenta de mi presencia la he visto mirar con añoranza fotos de ellos y también del abuelo que falleció hace aún más años. Por lo que me ha contado, mis padres realmente se amaban mucho, a veces cuando le pido que me cuente más de ellos dice que hablar de momentos felices sobre el pasado es traer tristeza al presente, nunca me he atrevido a decirle que no estoy de acuerdo con ella.
- ¡Kia!- me llama la abuela desde la cocina- es hora de desayunar
Hoy ingreso al primer grado de preparatoria. Estoy emocionada a la vez que nerviosa. La escuela a la que asistire se llama HM, los compañeros de clase que tendré serán en su mayoria los que conozco desde preescolar así que no espero sorpresas en ese aspecto. Mi mejor amiga es Momo, nos llevamos bien porque ambas somos algo así como invisibles. Al acercarme a la cocina me llega el delicioso aroma.
- ¡Mmmm! Huele a hot cakes recien hechos- me acerco a abrazarla por la espalda- y también a que me sobre llenare esta mañana
- Así debe ser querida- me besa la mejilla- anda sirvete, no querrás llegar tarde tu primer día de clases
- Como digas- aunque me doy prisa en acabar el desayuno disfruto de cada bocado
- Con ese vestido te ves preciosa- no es que sea muy femenina pero lo cierto es que prefiero usar faldas o vestido, lo siento más comodo que estar con pantalones, aunque si los uso en ocasiones, a mi abuela no le molesta porque no uso faldas cortas ni nada especialmente llamativo, por el contrario si me pidieran dar una descripción de mi ropa diría que es comoda y recatada- tal vez este año consigas novio- suelta mi abuela de pronto
- ¡Abuela!- sé que me he puesto colorada- ¿a que viene eso?- en realidad nunca me había puesto a pensar en ello y menos después del incidente de hace un año, algo que no me he atrevido a contarle y tampoco habíamos hablado nunca sobre el tema de un novio
- Los jovenes de ahora…- dice moviendo la mano- bueno es que… ya estas en edad- me sonrié burlona
- Abuela, creeme, por ahora no es algo que me importe- y cuando lo digo sé que es cierto
- Esta bien, esta bien. Dejemos el asunto del lado. Termina de desayunar.
Se despide deseándome mucha suerte en este primer día, camino hasta la parada del autobús que no esta muy lejos de la casa, llego justo a tiempo. Los que ya vienen dentro me ignoran desde el momento en el que subo, mientras tomo un lugar no puedo evitar reír internamente por la ocurrencia de la abuela. ¿Tener novio? Pero si las personas apenas y notan que existo. Miro el horizonte a la vez que veo mi reflejo en la ventana, no soy bonita, admito con tristeza. Hirako Sinji me lo dejo muy claro el año pasado. Ese día acababa de salir del baño y por casualidad escuche su conversación con Kensei, le decía que quería follarse a Bell o Harribel, otra chica de la clase, cuyos pechos se habían desarrollado a temprana edad y se había convertido en objeto de miradas lascivas por parte de prácticamente todos los chicos de la clase, como respuesta a su confesión Kensei río estruendosamente y le dijo que lo único que podría conseguir era follar a alguien tan repelente como yo o tan machorra como Momo, ni siquiera pronunció correctamente mi nombre, Sinji también rió y agrego que no se encontraba tan desesperado como para meterse con sosas como nosotras. Estoy segura de que muchas personas han escuchado o se han enterado de lo que dicen otros a sus espaldas y casi siempre son cosas negativas, burlas o insultos provocados por la envidia o el desprecio, palabras que puedes tomar o no como ofensas si le das valor a las palabras, después de todo a nadie le gusta ser insultado, bien dicen que a veces las palabras pueden ser más letales que los golpes, es por eso que ese día mientras los escuchaba decir que no estaban seguros de si era realmente una mujer o un hombre porque no se distinguían mis pechos, que si no sabían si era un cadáver por lo pálido de mi piel o que no entendían como me atrevía a salir luciendo la ropa de mi abuela, pero era de esperarse si era amiga de una chica que se viste como hombre, intente convencerme de que su opinión no me importaba… pero la verdad es que en ese momento… me sentí tan mal, estúpida y humillada, así me sentí. Quise salir corriendo para esconderme en mi preciado bosque y llorar libremente, pero me trague mis lagrimas, soporte todo ese día sin decirle nada a Momo comportándome como si todo estuviera normal. Pero en cuanto me encontré recostada sobre una gran rama deje salir todo… llore por al menos dos horas. Luego pensé que probablemente lo que ellos pensaban era lo que todos en la clase pensaban sobre mí y sobre Momo. ¿Enserio mi ropa era tan anticuada? ¿Enserio Momo parecía machorra con sus jeans y camisetas holgadas? ¿Tal vez debería intentar mejorar mi aspecto? No. ¿Por qué habría de cambiar mi estilo? Me gusta la ropa que uso, me gusta mi cabello, me gustan mis zapatos, estoy a gusto con mi cuerpo y también me gusta mi tono de piel. Si cambiara solo por lo que sabía que otros opinaban de mí entonces me sentiría realmente estúpida. Además cambiar solo para que los demás no me vieran feo haría que al final solo logrará sentirme mal conmigo misma. Ese día decidí que si alguna vez cambiaba sería por mi propio deseo.
Y a decir verdad, hasta que mi abuela saco el tema de un novio nunca me había importado en lo más mínimo. Sinji es un idiota pero he de reconocer que yo soy de esas personas que simplemente no logran resaltar entre los demás. Sonrió con desgana, que genial forma de pensar para el inicio de año escolar. Sé que en algún momento encontraré a alguien, ni siquiera tengo en mente como sería mi hombre ideal, porque creo que generarse expectativas de como quieres que sea tu pareja es algo estúpido, no puedes establecer reglas o condiciones de como quieres que sea la persona con quien pasaras la vida, y sé que cuando lo encuentre no será el hombre perfecto, pero será perfecto para mí. Suspiro. No es momento de pensar en algo trivial como un novio, el inició de otro ciclo escolar es un paso más para que llegué a cumplir mis sueños, si, sé que algún día se publicara un libro escrito por mi. En esta ocasión la sonrisa que expresa mi rostro es sincera.
Para cuando me doy cuenta al fin hemos llegado al instituto. El lugar me parece enorme, con más de cincuenta años de estar en pie, pintado de rojo y blanco es imponente, aquí pasaré los próximos tres años de estudio antes de ir a la universidad. De repente creo que me he quedado más del tiempo necesario parada frente el edificio porque cuando todos comienzan a hacer alboroto mirando en mi dirección pienso que tengo algo en el rostro, en el cabello o algo malo, comienzo a preocuparme pero cuando un chico me pasa de largo me doy cuenta de que están mirando algo detrás de mi, tal vez un accidente, me doy la vuelta y entonces lo veo a él… alto, atlético y con un llamativo cabello naranja, sin duda él es la descripción de un hombre increíblemente atractivo. Alejándose de ese descapotable negro y caminando con total seguridad no había manera en que él no pudiera resaltar entre cualquier grupo de personas. Todos se acercan a saludarle, hablarle o simplemente verle de cerca como mosquitos atraídos por la luz de un foco.
De pronto nuestras miradas se cruzan, veo sus ojos miel brillar bajo ese ceño fruncido, si, definitivamente es alguien que aunque lo intente no podría pasar desapercibido. Y justo por eso decido apartar la mirada y alejarme hacia la entrada del edificio. No soy alguien que pueda llamar su atención. Tal vez sea cruel y tonto pensar eso de mi misma pero quiero ser realista, si hay algún hombre perfecto para mí, definitivamente no es él. Cielos. Desde esa pregunta incomoda de mi abuela más temprano creo que se han desatado en mi mente muchos pensamientos sobre "tener novio". En el pasado eso no me ha importado, no quiero que me comience a importar ahora. En el pasillo donde esta el salón en que tengo mi primera clase veo a Momo mirando por la ventana con mirada soñadora.
- ¡Momo!- le llamo y ella voltea asustada para toparse con mi mirada- ¿Qué estas viendo?- pregunto cuando ya estoy a su lado
- ¡Cielos! Kia, me has asustado… yo estaba- señala hacia la ventana y ahora entiendo que lo miraba tan perdida, al chico de cabello llameante- ¿lo entiendes ahora?
- Si, es un chico llamativo
- ¿Llamativo? ¿Es que no lo alcanzas a ver bien? Él es tan… ardiente
- ¿Ardiente? Creo que el estar en ese campamento de verano te ha hecho perder la cabeza- ambas reímos, tal vez no seamos lo suficiente interesantes o hablemos mucho con otras personas, tal vez seamos "invisibles" para los demás pero entre nosotras existe una gran amistad- Sí, ese campamento te ha afectado- Mientras yo pase el verano siendo voluntaria en un refugio de animales Momo se había ido a un campamento. La verdad es que yo también pude haber ido pero no quería dejar sola a mi abuela- Con todo y tus cambios seguimos siendo amigas- nos damos un abrazo por no habernos visto por un largo tiempo, dejamos el tema del chico de cabello naranja del lado y entramos al salón, estamos en la misma clase, lo cual nos alegra a ambas.
- Te has dejado crecer el cabello, me gusta- me había olvidado de ello, por costumbre siempre solía llevar el cabello corto arriba del hombro pero este verano simplemente decidí dejarlo crecer, ahora lo traigo suelto, me llega hasta la mitad de la espalda- te hace lucir un tanto diferente
- Gracias Momo, tu también luces bien- ella por el contrarío se ha cortado el cabello un poco arriba del hombro- Pensándolo bien es como si nos hubiéramos puesto de acuerdo en hacernos algún cambio- reímos
- Tienes razón, pero solo en el cabello- si, en eso estaba de acuerdo porque aunque me había dejado crecer el cabello seguía gustando de usar vestidos y faldas un tanto largas, ahora traía un vestido gris con zapatos a juego mientras que Momo llevaba unos jeans azules con una playera holgada negra y sus converse negros- creo que aun no estamos listas para cambiar del todo aún cuando ahora estemos en este grado
- Eso ocurrirá a su tiempo
En minutos el salón comienza a llenarse y vemos aparecer a compañeros que conocemos desde hace mucho tiempo y entonces entra Riruka Dukogamine hablando sin parar con su inseparable amiga Jackie y aunque ni a mi ni a Momo o algunos otros ocupantes del salón les interese de lo que esta hablando nos vemos obligados a escuchar y ella como siempre queriendo ser el centro de atención comienza a hablar todo lo alto que puede. No puedo evitar hacer una comparación entre Riruka y el chico de cabello naranja, mientras ella tiene que gritar y exagerar las cosas para lograr que los demás la miren a él le basta simplemente con caminar y sonreír. Le lanzo a Momo una mirada cómplice de burla. Y entonces todos soportamos la tortura de escuchar su irritante voz.
- Incluso yo me sorprendí de que Ichigo se acercara a hablarme siendo que yo soy de nuevo ingreso en el instituto, probablemente haya oído hablar de mi con anterioridad- ¿Ichigo? Creo que tengo una idea de a quien se refiere- No lo culpo, muchas personas me conocen
- Si, alguien debió contarle como eras físicamente- la secunda Jackie, en realidad hasta ahora no logro entender como es que puede estar cerca de ella todo el tiempo sin querer arrancarse los oídos- Y no pudo evitar hablarte
- Sí, debió ser mi cabello, es tan hermoso- era común que Riruka se halagara a si misma, aunque era cierto que tenía un color de cabello difícil de evitar de ver, no porque fuera bonito sino porque era de un color rosa fucsia, y la verdad es que a mí me parece feo con tantos productos que sé que se debe de poner, ese día por ejemplo lo llevaba completamente lacio, largo hasta la cintura con ayuda de unas extensiones y por si no fuera poco llevaba una falda que apenas y le cubría las piernas- O tal vez sea mi figura, este verano he hecho bastante ejercicio- si de algo no me cabe duda es de cuan vanidosa es, alta, delgada, cabello que grita mírame a fuerzas y ropa provocativa ahora se sentía más superior que nunca- ¿No crees, Jackie?
- Si, definitivamente- Jackie de piel oscura y unos cuantos centímetros menos alta que Riruka me parecía una especie robot entrenado para estar siempre de acuerdo con la peli rosa
Su "interesante" conversación se vio interrumpida cuando entro el profesor de ingles, Stark. Y así la clase y el nuevo ciclo escolar dan comienzo.
Más tarde en el receso me encuentro almorzando sentada junto a Momo en una mesa de la cafetería. Estámos hablando de como habían ido nuestros veranos cuando ella menciona a Ichigo
- ¿Quién es Ichigo?
- ¿Enserio no sabes quien es?- Momo parecía realmente sorprendida
- No, no lo sé. Ahora ¿quisieras contarme y dejar de mirarme como si fuera un bicho raro por no saberlo?
- Claro, claro, esta bien. Ya lo has visto, es el chico de cabello naranja que estaba viendo por la ventana cuando me asustaste- no fue una gran sorpresa porque era algo que ya sospechaba viendo el ajetreo que se formo con su llegada al instituto- Enserio en un chico… tan sensual, escuche que algunas chicas en el campamento decían que estaban ansiosas por conocerlo
- Momo concentrare- aplaudo frente a su rostro para que dejara de divagar- Sí, es muy guapo y todo pero no entiendo porque tanto revuelo por él
- ¡¿Por qué tanto revuelo por él?!- apenas he entrado a esta escuela y todas las conversaciones parecen girar en torno a él. Incluso mis traicioneros pensamientos han divagado en Ichigo
- Enserio necesitas dejar de responderme con una pregunta
- Lo siento. Es solo que me sorprende que no lo conozcas y ni siquiera hayas oído hablar de él.
- Sigo esperando que me platiques que otra cosa a parte de su cara le hace ser importante
- Se llama Ichigo Kurosaki, esta en último grado y es el capitán del equipo de la escuela
- Ah. Sí "los espada" Al menos eso si lo he escuchado, pero sigo sin entender el alboroto
- Es el mejor jugador que ha tenido HM, incluso se dice que al final del año vendrán muchos reclutadores a intentar ficharlo para sus universidades, dicen que él…- no dejo terminar a Momo
- La verdad es que yo sé tanto de fútbol como de física nuclear y más allá de la curiosidad de saber porque es tan popular no me interesa su vida realmente. Además seamos sinceras Momo, no somos el tipo de persona que él voltearía a ver- Momo pone cara triste, creo que he hablado de más- Lo siento yo… no era mi intención ser tan grosera
- Lo sé Kia, no tienes que disculparte, sé que tienes razón- me sujeta la mano- es solo que nada se pierde con solo mirarle
- En eso tienes razón, no se paga con ver, puedes verlo igual que todas las chicas del instituto... y también algunos chicos.
De un momento a otro estamos riendo y haciendo bromas sobre el playboy de la escuela. Eso era algo que realmente me agradaba de nuestra amistad, podríamos estar lamentándonos por ser "invisibles" pero que importa, aquí estamos, riéndonos de ello.
El primer día de clases pasa volando y para cuando me doy cuenta ya estoy camino al autobús, se me ha hecho un poco tarde pues Momo y yo queríamos revisar las instalaciones y nos hemos entretenido viendo la gran cancha, la biblioteca, el auditorio y más. En verdad me ha gustado la escuela. Momo no vive muy lejos de aquí así que se puede ir caminando sin problema, yo que vivo lejos tengo que hacer uso del autobús. En cuando llegó a la parada me doy cuenta que se me ha hecho más que "un poco tarde", el lugar esta desierto. Genial. Por suerte traigo una sombrilla en la mochila. Últimamente ha estado haciendo mucho calor y aunque de la parada del autobús a mi casa hay una corta distancia no quería terminar con la piel roja e irritada. Y ahora que me ha dejado el camión resulta conveniente. Seguro la abuela se preocupara por mi. Cuando ya estoy lista para irme me detengo de repente al escuchas risas y voces que se acercan.
- Enserio debiste follartela tu también- el estacionamiento estaba separado en algunas secciones por grandes arbustos y aunque podía oírlos ellos no podían verme- tiene una buenas tetas y estoy más que seguro que ella hubiera estado encantada de hacerlo contigo- y aquí me encuentro, incomoda escuchando una conversación ajena otra vez, solo que en esta ocasión no están hablando de mí- el sexo es la mejor manera de iniciar el año- leí una vez en algún libro o revista que en la adolescencia los hombres son erecciones andantes y por la conversación entre Sinji y Kensei que escuche sin querer junto a esta creo que es cierto- justo ahora luego de tener una buena dosis de sexo creo que comienzo el último año con el pie derecho- la diferencia entre ambos casos es que mientras Sinji y Kensei hablaban en teoría estos chicos si habían tenido sexo al menos una vez en la vida- ¿O acaso me estas ocultado algo? Tu no eres del tipo célibe
- Por la tarde me veré con Nozomi
- ¿Has vuelto con ella? Ya se han acostado muchas veces. ¿No te has hartado? Ambos sabemos que tienes de donde elegir. Eres un maldito infeliz Ichigo- ¿Ichigo? Así que el playboy de la escuela esta al otro lado de los arbustos hablando con un chico cuya cara no puedo ver bien pero que se diferencia por su cabellera celeste- Te tengo una jodida envidia
- Maldita sea Grimmjow como si tu no jodieras con una chica diferente cada semana
- Algunas se acuestan conmigo porque creen que así llegaran a ti
- ¿Y eso es tan malo?
- No me gusta que me usen de maldito filtro
- Si no te gusta ser usado de filtro ¿entonces porque no simplemente las rechazas?
- Porque no soy idiota. Nadie que se precie de ser hombre rechazaría follar... claro, si la chica vale la pena. ¿Recuerdas a esa gorda que se me vino a ofrecer?
- Si, la recuerdo y más porque si la follaste
- Fue el dinero más fácil que gane en la vida. Aún no sé como pude no soportar no vomitar sobre su cara
- Porque si no mal recuerdo me dijiste que le diste por detrás- siento el color rojo subir por mi cara, no sabía que algunos hombres podían ser tan vulgares al hablar de esos temas- A veces eres todo un experto en contar hasta el más mínimo detalle de tus hazañas sexuales
- Y tú por el contrario te quedas callado sobre eso, pero aún así gozas de gran reputación. Te lo digo Ichigo, te tengo una jodida maldita envidia
- ¡Ya cállate! Creí que decías que habías comenzado con el pie derecho este año y ahora hablas de tenerme envidia. Creo que te agrío el recuerdo de esa chica obesa.
- Un poco tal vez... pero de repente se me ha ocurrido una idea amigo
- Otra de tus brillantes ideas. No me hagas reír. Siempre resulta en algo estúpido
- Veras...- no quería quedarme a escuchar el resto de su conversación, todo ese rato había estado quieta y ahora sí me movía probablemente ellos se darían cuenta de mi presencia, el lugar estaba vacío, no había donde esconderse, lo único que se me ocurrió hacer fue soltar la sombrilla, el aire la arrastro y salí corriendo para atraparla, mi intención era hacer parecer que acababa de llegar cerca persiguiéndola y cuando ellos se asomaron al escuchar ruido supe que afortunadamente había funcionado- pero que ratón tan despistado- dijo el tal Grimmjow a modo de insulto, cuando tuve la sombrilla en mis manos levante la cabeza, solo mire a Grimmjow con toda la indiferencia que pude y me aleje.
Si dijeron algo más sobre mí o me ignoraron no volví la cabeza para averiguarlo. Realmente no me importaba.
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Esta nueva historia la tenía rondando en la cabeza desde hace tiempo. Debo decir que la temática será un tanto cliché. Lo explico porque sé que a algunas personas no les gusta. lol Las personalidades de los personajes pueden ser diferentes a como los conocemos en Bleach. Me he inspirado en algunas películas como "La Propuesta" por el tema de Rukia siendo escritora y en otras que mencionare en próximos capítulos.
En cuando a mis otras historias, a quienes me han hecho el favor de leerlas, les estoy agradecida y solo les pido paciencia. Tengo intención de continuarlas.
Perdonen por cualquier falta de ortografía que pueda llegar a cometer.
Que viva el IchiRuki (/*o*)/
Saludos! (^.^)/
