Era lo mejor.

Me sentía tan mal, tan estúpido, no podía detener estas lagrimas amargas, que con cada paso del tiempo aumentaban, torturándome con el recuerdo, intente en vano limpiarle las lagrimas que caían con más rapidez por mis mejillas, estaba harto, tenía que irme de esta casa lo más pronto que pudiera, comencé a hacer mis maletas lo mas rápido que pude, era al rededor de la 1 de la mañana y Noruega despertaría pronto como de costumbre, no tenía el valor de despedirme, porque sabía que me preguntaría la razón.

Y esa razón era algo que él no debería saber...

No sabía muy bien cómo reaccionar ante esto y lo único que se me había pasado por la mente era irme, porque era mi culpa, porque a pesar de que yo amaba a Dinamarca... Lo ayude a conquistar a mi hermano. ¿Realmente eso es amor?...

Yo no lo sabía con certeza, Noruega me había enseñado a no amar, a no sentir nada, pero me había enamorado a pesar de ello y el también.

Entonces ¿Realmente nosotros teníamos sentimientos?

Era algo obvio que Noruega sí, no por algo... Ahora era pareja de Dinamarca, a todos nos costó asimilarlo, pero después Suecia y Finlandia los felicitaron, yo tan solo sonreí algo forzado y me retire a mi habitación, oyendo los gritos de Dinamarca y Noruega para que volviera.

Pero ¿Como volver? ¿Cómo volver y fingir que estaba contento?

Yo acepte mi derrota en ese momento, torturándome a mí mismo, viéndolos amarse, y no podía dejar de repetirme; Es mi culpa...

Tome mi maleta y puse a Mr. Puffin en mi cabeza.

-Hora de irnos...-Le sonreí a mi ave y salimos de mi habitación, cerrándola con llave. Como si algún día fuera a volver.

-¿Estás seguro de esto? –Pregunto preocupado Mr. Puffin, a lo cual sonreí forzado.

-Es lo mejor, siempre lo supe.-Guarde la llave en mi bolsillo y salimos de la casa, esa casa donde conocí el amor de mi vida, donde compartí momentos inolvidables y donde mis lagrimas se derramaron.

-Kveðja...-Dije al aire, derramando las últimas lagrimas que me quedaban y comencé a caminar, alejándome cada vez más para no volver.

Era lo mejor... Dejarlos ser felices.