Los rayos del sol caían dulcemente sobre las ventanas, despertando a un chico con cara de ángel que dormía plácidamente en su cama color verde esmeralda, el sol ilumina cada centímetro de la habitación, avisándole al muchacho que era hora de comenzar un nuevo día, los cabellos rubios platinados alumbrados por el sol eran hermosos, así como todo en él, esa figura perfecta, muy bien manejada, se notaba que había trabajado en ella durante el verano, abrió lentamente sus ojos, unos ojos grises propios de él, aquellos ojos que reflejaban al dominante y sensual chico que llevaba, no solo dentro sino también fuera.

Luego de diez minutos de darse vueltas en la cama (N/A que ganas de verlo no??? XDD) se levantó perezosamente, dirigiéndose en pantalón de pijama hacia la ducha y su toalla en el hombro. Tomó su acostumbrada ducha matutina, se colocó el uniforme de Slytherin que tan bien acentuaba sus atributos. Con un poco de gel se peino dejando las mechas de su cabello bien levantadas y algo desordenado, un nuevo look que había optado el verano anterior, que si duda dejo a mas de alguna alumna suspirando en los pasillos. Mirando a los lados se encontró para desagrado suyo con una muchacha que al verlo se le pego al uniforme como una calcomanía barata... por supuesto, Pansy Parkinson, aquella muchacha que se autonombro su novia, a Draco la verdad no le afectaba del todo, ya que no le importaba en lo mas mínimo los que sucediera con ella.

-Draco mi amor como amaneciste?- dijo la chica abrazándolo y besando su mejilla- bien hasta que llegaste tú- pensó Draco inmediatamente, pero no lo dijo solo para no armar una escena de nuevo- este, bien- respondió frío como siempre y salió tranquilamente por la puerta de la sala común, dejando a la muchacha hablando sola.

El Gran Salón al igual que todos los días se llenaba de rostros demacrados por las actividades de la noche anterior, o simplemente porque todos estaban aburridos del colegio (N/A jajaja quien no??? XD), En todas las mesas se podía observar a los alumnos saludarse, darse los buenos días y uno que otro abrazo amistoso. Draco entró al gran Salón, sin duda su presencia no pasó inadvertida, todas las chicas lo miraban aunque fuera de reojo, contemplando a aquel chico de cabello rubio platinado y perfecta sonrisa que se desplazaba como un ángel hasta llegar a su asiento, seguido por dos gorilas y una chica que no lo dejaba en paz. El se sentó ignorando los suspiros y piropos de las muchachas... y de algunos muchachos; a él solo le importaba su imagen de frialdad y superioridad, no en vano llevaba 6 años con esta apariencia.

Se sentó y comenzó a degustar un café bien cargado para despertar completamente, mientras observaba el resto del Salón y a las personas que habían en él. Dirigió su mirada entre las chicas de la escuela, viendo con desagrado que Parvati continuaba a su lado. Cuando dieron las ocho en punto de la mañana, el muchacho se levantó de su asiento y se dirigió rápidamente a su primera clase, caminaba despreocupado y con la mente en blanco cuando de pronto se vio en el suelo con los libros desparramados y una joven que ordenaba las cosas –que sucedió???- preguntó Draco sin mirar a la joven- eso no importa, lo sien.... ah eres tú- dijo una joven de cabello castaño con sus libros en las manos- pensé que sería alguien importante – diciendo esto se apresuró a seguir su camino- ten mas cuidado sangre sucia ... no ves que me despeinas??- dijo Draco con los ojos clavados en sus libros, diciendo esto continuó su camino hacia el aula de pociones.

La clase se encontraba ya en su lugar, cada alumno en su puesto correspondiente, Draco repasaba sus apuntes cuando le llegó en la espalda un pedazo de pergamino, éste volteó y miro amenazante a la persona que el tiró ese papel que se reía sin control – eres un estúpido Weasley, veo que tu padre no tubo dinero ni siquiera para comprarte un cerebro decente- dijo con frialdad e ironía al muchacho de cabellos rojizos que lo miraba con cara de asesino- cierra la boca Malfoy, por lo menos mis padres me entregan cariño y no solo gel para el cabello – repuso el pelirrojo mientras a su lado se escuchaba el fuerte golpe de la puerta cerrándose- todo se callan en este mismo momento, no había presenciado en toda la historia de Hogwarts una clase mas patética como estas- dijo el profesor cerrando cada cortina del aula- sus calificaciones no sobrepasan el promedio de los años anteriores... quieren ser los mejores??? Pues demuéstrenlo- dijo Snape mientras todos lo miraban con mucha atención y miedo.

A Malfoy esto le tenía sin cuidado, siempre obtenía sino las mejores, muy buenas calificaciones, tenía buen trato con el profesor Snape, así que del todo no se preocupaba, mas bien se preocupo de observar al resto del salón, a personas como Longbottom que miraban aterrados al profesor y tomaban apuntes como desquiciados, a personas como Weasley que miraba con la misma expresión vacía que todo Weasley podía poseer. Paso la mirada desde el aterrado Neville hasta la arrogante Parvati con su actitud de pretty woman, que mas que encantar espantaba a todo chico que quisiera acercársele, con la mente en blanco se puso a observar a una alumna que no hacía el menor caso al regaño de Snape, sino que todo lo contrario, dibujaba en su pergamino cosas que no se podían divisar desde el asiento del muchacho, Malfoy la observó por mas de diez minutos, cada movimiento, cada detalle, sin darse cuenta un pequeño y suave rubor rojo se asomaba por sus mejillas al apreciar la belleza sutil de aquella muchacha a la que el había molestado y hecho la vida casi imposible los últimos seis años, aquella... aquella... sangre sucia, como podía parecerle hermosa???. Draco no podía entender lo que le sucedía, su corazón latió sin parar los siguientes segundos, hasta que sintió un fuerte golpe en su puesto que lo hizo saltar del susto- MALFOY!!!! – gritó el profesor Snape sacando a Draco de su trance – me podría decir que le sucede???- dijo quemándolo con la mirada, todo el salón se extraño tanto de la actitud de Malfoy como de la de Snape, ya que nunca le había regañado de tal manera- nada profesor creo que no me he sentido muy bien en este momento- dijo Draco mirando al profesor con cara de borreguito indefenso. Snape lo dejo tranquilo el resto de la clase, de alguna u otra forma, Malfoy se salvaba de todo – no es justo el no ponía atención alguna- se quejaba una chica castaña a la salida de la clase- pero tu tampoco pusiste atención Hermione- le criticaba entre rizas el chico de ojos verdes que llamaba la atención al igual que Malfoy- además... desde cuando te fijas en lo que Malfoy hace o deja de hacer?- la miraba amenazante su amigo con pecas- que estupideces estas pensando Ronald... – contestó la joven sonrojada evitando las miradas de sus amigos y apresurando el paso- los veo en la biblioteca muchachos- dijo llendose a toda velocidad dejando atrás a sus amigos.

A medio día la biblioteca esta casi repleta, con sus literas con alumnos apresurados por encontrar las ultimas tareas que olvidaron hacer la noche anterior o simplemente de muchachas que observan las revistas juveniles inventando que leen la historia de los calderos mágicos; Hermione entró apresurada hacia un rincón de la enorme biblioteca para poder disminuir aquel rubor que sin esperarlo se asomó por sus mejillas- esto no me puede estar sucediendo- decía para sí misma – no puedo estar cayendo ante ese inepto como todas las alumnas del colegio, simplemente no- se cuestionaba casi en voz alta- como me pueden estar cautivando aquellos ojos?? Aquella sonrisa?? Y peor aun!! Aquella manera de ser- dijo esta vez en voz alta sin percatarse que alguien la escuchaba atentamente por la espalda- problemas del corazón Granger?- una voz masculina rompió el silencio- déjame adivinar... con esa descripción... no te estarás enamorando de Potter o sí? – Hermione se estremeció y volteó lentamente a mirar aquellos ojos grises clavados en los suyos- eso no es de tu incumbencia hurón- respondió con severidad- además... si así fuera... que te importa???- Draco se sentó a su lado mirándola a los ojos. Si así fuera... te diría que pierdes tu tiempo, muy amigo tuyo será ese Potter pero nunca se fijaría en una persona como tú... n-u-n-c-a – recalcando la última palabra. Hermione lo miró sin pronunciar una palabra – si supieras de quien hablo en verdad Draco- pensaba para sí misma, mientras Draco la miraba sin mover siquiera su asiento muy cercano a ella. Estuvieron así por lo menos unos cinco minutos, observándose el uno al otro, sin pronunciar media palabra, lentamente se fueron acercando mas al otro, de pronto cada uno se vio muy cerca de los labios de su compañero, se miraban sin pronunciar una palabra, confiando en que nadie los observaba, Draco pudo observar detenidamente los labios de aquella chica que sin quererlo hacía que su corazón latiera mas rápido y su concentración quedara nula – Malfoy... – dijo la muchacha, con un tono de voz tan dulce como la miel, los oídos de Draco la escucharon como música salida de dos pétalos rojos de rosa que formaban su boca- dime Granger... – respondió al notar el rubor de las mejillas de la chica que cada vez estaban mas cercanos a su rostro -... Debo irme- diciendo esto Hermione se puso de pie y salió corriendo de la biblioteca sin mirar atrás.

Draco se vio solo en la biblioteca con la mirada distraída analizando lo que había sucedido ¿cómo era posible que él hubiera sido capas de acercarcele tanto a esa sangre sucia?, ¿En verdad él deseaba seguirla nombrando así? ¿Por qué ella no lo había rechazado? Podría haberse marchado en cuanto él apareció... Las preguntas eran demasiadas para tan poco tiempo, debía aclarar lo que sentía por esa hija de muggles. Acaso será amor?? – se decía a si mismo- un Malfoy no puede amar, los Malfoy somos dominantes, frívolos e independientes no necesitamos de ese absurdo sentimiento, pero además... que es el amor? Acaso existe? Eso que todos llaman amor no es mas que un sentimiento vació, una palabra que se utiliza para justificar el deseo desmedido hacia otra persona... pero... en verdad siento eso?? Cada vez q miro sus labios que son como pétalos de seda y su piel una cálida manta de agua que cubre su hermoso cuerpo tan suave y delicado a la vista – hablaba sólo camino a su sala común- esto no puede ser!!! ..... draconis – murmuraba la contraseña entrando a la sala común de Slytherin- hola mi amor!! Que bueno que te encuentro- una chica de cabellera oscura se le colgaba del cuello sacándolo de su ensimismamiento- que quieres? Porque me molestas a cada rato? – dijo en chico subiendo el tono de voz cada vez mas- pero Draco... amor, tu sabes que te amo- dijo soltándolo y mirándolo a los ojos que le esquivaban la mirada- pero yo no! Entiéndelo de una vez! Yo-no-te-amo – diciendo esto Parvati salió indignada de la sala común quien sabe donde. Draco se sentó frente a la chimenea en el sofá de tela verde escarlata, como todo en aquel lugar, mirando el techo como si allí fuera a encontrar la solución a su problema. Pasaron varios minutos del trance en el que se encontraba el muchacho cuando fue interrumpido por un par de gorilas que se posaban frente a él- Draco... te sientes bien?- pregunto el gorila Goyle con cara de hambre- claro que si estúpidos, porque lo preguntan? – dijo Draco mirándolos y acomodándose entre los cojines- no, es sólo que has estado extraño desde esta mañana – claro después del desayuno te volviste... distraído- interrumpió el segundo gorila – no seas idiota Crabbe, Draco Malfoy no cambia nunca ni cambiará; entendido?- dijo Draco con tono severo- por supuesto- respondieron los dos al unísono- ahora retírense y déjenme en paz, si los necesito se los haré saber.

Muchas gracias por leer mi historia nn hace demasiado tiempo que no escribía algo, bueno en realidad, esta historia ya la había publicado, pero preferí sacarla y arreglarla... bueno les mando muchos besitos y cariños nn que pasen unas felices fiestas... espero pronto poder subir el próximo capitulo y que les guste mucho. Dejen reviews que se los responderé toditos!!

Muchas gracias, cariños y buenos deseos Gwen Granger