Prólogo
Había algo en la noche que funcionaba como motivador para las largas y extenuantes horas de trabajo frente a la pantalla. Un hombre menos dedicado dejaría que el temblor de sus dedos o los constantes parpadeos lo detuvieran, un hombre sin causa no podría hacerse indispensable. Esa era su estrategia, ser vital, ser quién tuviera todas las cartas para poder dictar al menos una parte de su propia vida. Consciente que él era el hombre de las mil identidades, con el tiempo le fue más fácil alejarse de la gente. Excepto por ellos, el grupo que Rika había fundado, era su escape, algo así como su mundo virtual. Allí podría ser alguien diferente y al mismo tiempo fingir que tenía verdaderos amigos, fingir que era Luciel.
Y sin embargo todo cambió cuando ella apareció.
Desde hace mucho tiempo, él había abandonado la idea de una familia. Fue Rika la primera mujer con quien podía contar, la protectora y su… primer amor. Aunque quizás no fuera ese el sentimiento correcto para describirlo, pero qué podría saber alguien tan pequeño? Cuando te ofrecen el mundo, una luz al final de un mugriento túnel… qué otra cosa podría esperar? Después de un tiempo, casi morir en el entrenamiento brutal impuesto por la agencia, entendí un poco mejor mis sentimientos y mi propósito. Quería disfrutar cada día como si fuera el último, hacer tantas cosas nuevas y conocer estos sentimientos que tenía por ella.¿De qué forma la quería? no estaba seguro aún, sin embargo ella siempre sería de alguien más….
Decidí que los sentimientos eran muy peligrosos. Tenía que continuar con mi principal objetivo, me sentí avergonzado un tiempo al dejar de pensar en la razón por la que trabajaba tanto. Un día cualquiera, cuando no revisaba las cámaras, ella apareció…
Mientras hablaba con nosotros en el chat, corría ver las cámaras. Al principio pensé que el sobresalto de mi corazón era por miedo. Sin embargo ella era diferente, no entendía cómo lo sabía, simplemente fue en ese instante cuando su rostro apareció mirar a la cámara que tuve una corazonada. Y así, decidí observarla….
