N/A: Un nuevo fic, esta vez más largo. Ya está terminado, pero lo iré subiendo poco a poco. Subiré uno o dos capítulos a la semana, dependiendo de la acogida que tenga. El fic consta de un prólogo, que pongo a continuación, tres capítulos y dos epílogos, uno de cada pareja protagonista. El caso tratado es original, creado por mí.
Parejas: ReidXOC y HotchXPrentiss
Resumen: La UAC viaja a España, un nuevo caso en un país diferente con muchos sentimientos por surgir.
Declaimer: Todos los personajes de esta historia no son de mi autoría, solo el argumento y Sonia son creación mía.
…
FANTASMAS
Un hombre espera junto a una gran caja de madera, ésta con un pequeño agujero y, tras este, una lámina de estaño pegada con un orificio pequeño hecho, del diámetro de una aguja.
El sujeto espera sin prisa, disfruta de estar allí sentado, esperando la… magia. Incluso en algún momento una sonrisa se escapa, al mirar la caja junto a él y, después, lo que tiene enfrente.
La habitación está muy iluminada, las persianas subidas hasta arriba, la luz de la sala encendida, y también la lámpara de pie.
Esa sonrisa… tan iluminada.
"Lo más importante no es la cámara, sino el ojo." Alfred Eisenstaedt.
Marzo parecía terminar sin casos en la Unidad de análisis de conducta, en Quantico, Virginia. Los agentes Morgan, un atractivo e imponente ex-policía de Chicago, Prentiss, una joven prometedora políglota y el Doctor Reid joven genio capaz de leer 20.000 palabras por minuto, hablaban amigablemente mientras se ponían al día con el papeleo de su último caso.
—Cuéntanos Reid, ¿qué tal con la preciosa Lila Archer? —Morgan ya se reía con ganas mientras Emily no entendía nada.
—No llegué a llamarla Morgan, y lo sabes.- Le contestó Reid, perdiendo la sonrisa que había mantenido durante la conversación previa.
—Yo no me entero de nada.— Dijo Emily resignada mientras cambiaba de postura y se reclinaba en su silla.
—Aquí la mosquita muerta del Doctor tuvo un interesante escarceo con una víctima de acoso, una actriz muy guapa, ¿verdad Spence?
—Muy gracioso.—Reid estaba preparado para volver al trabajo e ignorar a su bromista compañero cuando J.J. entró acelerada en la sala.
—Tenemos un caso.—Marzo no iba a ser tan tranquilo como se habían pensado.
Dejando todo lo que hacían sobre la mesa se levantaron y siguieron a la rubia hasta la sala de reuniones donde acababan de entrar David y Hotch. Emily iba preguntando si le iban a dejar a medias cuando se sentaron en la mesa.
—¿Quién te ha dejado a medias Prentiss? —Preguntó David.— Sea lo que sea puedo solucionarlo. —David bromeó y todos, excepto Hotch, rieron la broma.
—Centrémonos en el caso, por favor. —Intervino el jefe de equipo. Todos como buenos subordinados empezaron a ojear el informe mientras J.J. cargaba las imágenes en la pantalla.
—¿Madrid, España? —Preguntó Hotchner dispuesto a rechazar el caso.
—Dame un momento Hotch, por favor. —El hombre suspiró y dejó hablar a la agente.-Los crímenes han ocurrido en lo que llaman Ciudad Universitaria. El campus de la universidad Complutense de Madrid.-Comenzó a explicar J.J. — En los últimos dos meses se han hallado nueve cadáveres. Todos de alumnos de la universidad.
—Hay tanto chicos como chicas. —Comentó Morgan, extrañado. — ¿Significa que no hay implicación sexual? Las víctimas no fueron agredidas sexualmente. —Observó finalmente el agente repasando las anotaciones del forense.
—O quizá el asesino es bisexual. —Objetó Prentiss.
—Todo es posible. —Comentó David. —¿Cómo han sido asesinadas?
—La causa de la muerte no está muy clara, pero se cree que tiene relación con una punción que tienen todas las víctimas en la zona de la nuca. Pero nada más, ni heridas defensivas ni, como ya habéis observado, signos de violación.
—Son muchos asesinatos en poco tiempo.-Observó Spencer. —Los primeros asesinatos ocurrieron con intervalos de más de una semana, pero luego no pasa más de cinco días sin matar.
—Se descontrola. — Aportó Hotch.
—O se siente a gusto. —Le contradice Rossi. —Mató a los primeros indeciso, con mucho cuidado y pensando cada paso que daba. De repente se da cuenta de que nadie lo sigue y se relaja.
—Hotch. Están muriendo muchos adolescentes —Intervino J.J. —Yo sé que esto no nos incumbe, pero han llamado del rectorado. Están desesperados. Solo necesitan ayuda.
—¿Ni siquiera ha sido la policía? Sabes que…-J.J. interrumpió a Hotch.
—La policía está de acuerdo en que acudamos como asesores. Y el FBI piensa que dará buena imagen que colaboremos con policía Europea.
—Nunca he estado en España. —Spencer parecía querer ayudar a su compañera.
—Está bien. —Aceptó sorprendentemente Hotch. —Después de todo estamos sin caso.
…
Espero que os haya gustado. Leeré vuestros comentarios alegre y aceptaré abiertamente vuestras críticas.
Volveré pronto.
Letraherida.
