Junto a un campo de trigo
Ella hizo grave promesa
Aquella mies sería ilesa
Estaría bajo su abrigo

Tenga el cielo por testigo
Cumplió con aquella empresa
Siglo tras siglo, no recesa
Mientras que lleva consigo

La nostalgia en su pecho
De su tierra y su pasado
De su cubil y su lecho

Lejos del campo dorado
Al que tanto bien le ha hecho
La loba no lo ha olvidado